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J

ungkook quería enterrarse en el suelo ahora mismo. Esta no era su expectativa. Ni siquiera ha tenido novia, ¿qué más sobre embarazar a alguien? Y necesita el dinero ahora o, de lo contrario, sus hermanos podrían obtenerlo primero.

Especialmente Kim Taehyung, que se follaría a cualquier chica en cualquier momento y lugar. Pero Jungkook es un hombre digno. No quiere embarazar a una extraña. Al menos quiere tener a sus hijos con la chica que ama. Y esa es la mujer que está mirando ahora mismo.

—Lalisa...— Murmuró en voz baja mientras miraba a su secretaria a través de la ventana de vidrio, ocupada escribiendo algo en su computadora portátil

Como si lo hubiera escuchado, Lisa miró hacia arriba y se encontró con los ojos de su jefe. Jungkook se sobresaltó cuando lo sorprendió mirándola, por lo que inmediatamente miró hacia otro lado.

—Joder, ¿soy demasiado obvio? — Jungkook se maldijo a sí mismo. Estaba ocupado maldiciendo y palmeándose internamente cuando la puerta de su oficina se abrió. Revelando a su secretaria junto a la puerta, sonriéndole dulcemente como siempre.

— ¿Sr. Jeon? —Lisa llamó. Jungkook se aclaró la garganta y trató de recomponerse

— ¿Qué? — Preguntó con frialdad.

— Ya tengo su horario fijo.—Ella le entregó una carpeta. Lo tomó con la mano izquierda ya que su mano derecha temblaba de nerviosismo.

Abrió la carpeta y sus cejas se fruncieron de inmediato.

— ¿Por qué tengo una reunión mañana? Es sábado. ¿Con quién me reuniré? — Le preguntó a la rubia.

—Oh, su mamá se había puesto en contacto con la empresa y había concertado una reunión con usted, señor Jeon.— Lisa respondió.

Jungkook puso los ojos en blanco ante la mención de su madre. Cerró la carpeta de golpe, haciendo que Lisa se sobresaltara.

— Mañana arregla mi agenda— El demando.

— Pero Sr. Jeon, su mamá...

— Dije, arregla mi horario, Lisa.— Él la miró, lo que la hizo asentir en respuesta junto con su sonrisa desvaneciéndose.

— Sí señor.— Lisa respondió, su voz mostraba un tono de decepción.

Jungkook notó su repentino cambio de energía y se sintió culpable. Se mordió los labios y se maldijo a sí mismo por actuar como un idiota con ella.

Lisa estaba a punto de irse cuando Jungkook se levantó de su asiento.

— Espera.— Lisa se dio la vuelta inmediatamente para mirar a su jefe.

— ¿E-estás ...?— Lisa enarcó una ceja a su jefe mientras él luchaba por completar su oración. Jungkook exhaló un profundo suspiro

— ¿Estás libre mañana?— Los ojos de Lisa se abrieron como si hubiera escuchado mal a su jefe.

—Disculpe, ¿qué? — Lisa frunció el ceño con incredulidad.

Jungkook se sintió peor. Quería ser tragado por el suelo entero y vivo. Quería simplemente desaparecer y reencarnarse como una piedra.

— Y-Yo quiero decir...— Jungkook comenzó a rascarse la nuca.—Está bien si no quieres. Solo estaba...—

— Soy libre, Sr. Jeon. Y nunca rechazaría una oferta de mi jefe.— Dijo de manera formal. Jungkook casi esbozó una amplia sonrisa, pero frunció los labios y asintió con la cabeza hacia Lisa.

— Está bien, entonces. Te recogeré mañana a las cinco.— Jungkook hizo todo lo posible por sonar tranquilo. Lisa le sonrió a su jefe.

— Fue un placer— Y finalmente se fue. Jungkook miró a Lisa mientras caminaba hacia el baño.

Y fue entonces cuando Jungkook saltó de su silla, casi rompiéndola, debido a su descarado baile de la victoria.

— Serás mía — Dijo, mirando la puerta cerrada del cuarto de confort de mujeres.

Taehyung había estado esperando pacientemente a que su mayordomo, Namjoon, llegara a su oficina. Mató el tiempo jugando a los juegos de su hermano menor. Simplemente encuentra increíbles los juegos de Jungkook, pero nunca felicitó ni mostró cuán pegado y obsesionado estaba en los juegos de Jungkook. Odia la hermandad. Especialmente cuando todos tienen padres diferentes y su madre es un gran dolor de cabeza.

— Joven maestro.— Namjoon entró a la oficina de Taehyung justo a tiempo.

— ¿Lo obtuviste? — Se sentó correctamente y esperó aque Namjoon se parara frente a él.

— Aquí, joven maestro.—Namjoon le entregó a Taehyung una carpeta negra. Taehyung lo abrió y fue recibido por cinco fotos de mujeres hermosas con las que seguro está familiarizado.

Taehyung sonrió satisfecho.

— Esa primera foto es Bae Joo-hyun más conocida como Irene. La que te follaste en la sala de confort del CB Club. 28 años, modelo independiente.—Namjoon comenzó.

Taehyung extendió la foto y tomó otra.

— Esa es Bang Yerin la que follaste en su unidad. 24 años, Hitman Bang de la hija de BigHit Ent.— Namjoon respondió. Los ojos de Taehyung se abrieron.

— ¡¿Me follé a la hija de un competidor ?!—Namjoon asintió

— Decepcionante, pero sí, joven maestro.— El rostro de Taehyung se palmeó y miró las fotos. Hasta que algo llamó su atención. Un par de ojos de gato negro azabache lo miran en una imagen. Se lo tendió a Namjoon.

— ¿Quién es ella?—

— Esa es Jennie Kim. El mejor sexo en el coche sin protección que me mencionaste, esa es ella. 24 años, estudiante trabajadora. El sostén de su familia. Los padres están enfermos. No hay hermanos. Pero ella es una fiestera.— Namjoon explicó. Taehyung no pudo evitar sonreír mientras miraba a esta chica tan  particular, Jennie Kim.

— Y una cosa más...— Namjoon escupió de nuevo. Taehyung lo miró.

— Ella era una de tus compañeras de secundaria— Namjoon continuó. Taehyung se puso de pie y tiró la carpeta negra a la basura. Sostuvo la foto de Jennie y se la entregó a Namjoon.

— Encuéntrala y tráemela.— Ordenó y salió de su oficina con una amplia sonrisa en su rostro.

«Sexo sin protección, ¿Eh?»

Taehyung pensó.

Jimin está mirando su teléfono mientras Hoseok los lleva a su destino. Pasaron los minutos y finalmente llegaron. Hoseok abrió la puerta del auto para su jefe. Jimin salió del auto y se paró frente al edificio al que llegaron.

Era un café.

Contempló la estructura del edificio. Parecía tan acogedor y reconfortable. Sin mencionar que muchas parejas están entrando en los alrededores. Jimin exhaló un profundo suspiro antes de finalmente entrar al café.

Inmediatamente fue recibido por el aire acondicionado con aroma a vainilla fresca y la sonriente vendedora en el mostrador. Su sonrisa era de saludo, como hacia con todos los clientes, el chico trato de convencerse de ese gesto. Estaba más acostumbrado a que fueran de coqueteó.

Jimin tomó el asiento más cercano a la ventana con Hoseok de pie a su lado, haciendo su trabajo.

— Siéntate conmigo.— Jimin ordenó y Hoseok obedeció de inmediato. Jimin vio el menú de  aspecto estético sobre la mesa. Lo tomó y comprobó algunos buenos bocadillos y bebidas.

Estaba tan ocupado que no se dio cuenta de que una camarera ya estaba esperando su pedido.

— ¿En que puedo servirle, señor?— Le preguntó la mujer con delantal. Jimin miró hacia arriba y vio a la misma chica que antes estaba en el mostrador, todavía sonriéndole tan cálidamente.

— ¿Me puede traer dos Iced Americano y dos bollos de pan con dos pastas, por favor?— Ordenó Jimin. La camarera asintió y tomó nota de sus pedidos.

—¿Algo más, Señor?—Preguntó la chica. Jimin sonrió.

— En realidad, me gustaría hablar con la dueña de este café.— La niña se rió entre dientes

— Mis disculpas, señor. Pero la dueña no está aquí— La sonrisa de Jimin se desvaneció

— ¿Dónde está ella?— Preguntó. La niña simplemente se encogió de hombros.

— No lo sé. — Y finalmente se fue. Jimin pensó que iba a adelantarse a sus hermanos, pero resulta que le queda un largo camino por recorrer. Quiere los 175 mil millones de wons. Pero nunca pensó en hacerlo por el bien de su empresa.

Ha sido el soltero más reservado entre sus hermanos y siempre rechazó a todas las mujeres, las mejores y las nobles.

Y eso es por su ex novia.

La chica propietaria del café en el que están. La chica que se destacaría como una estrella brillante en el día. Más brillante el sol. Ella podría eclipsar a todos de la manera más extraordinaria.

Así de especial es Park Chaeyoung para Jimin. La única chica a la que juró amar por el resto de su vida. Pero aún está lejos. Aún evitándolo, Aun duele. No fuebfácil para Jimin vivir su vida después de su ruptura. Seguro, fue su culpa.

El cual fue el mayor arrepentimiento de su vida hasta ahora.

Jimin y Hoseok finalmente terminaron de comer, o debería decir, Hoseok finalmente terminó de comer. Simplemente pagó la cuenta sin siquiera tomar un bocado o un sorbo en alguno de sus pedidos. Hoseok tuvo que terminar todo por él.

Jimin se puso de pie, casi sin energía para sonreír o simplemente quitar el ceño fruncido de su rostro. Caminó hacia la puerta principal y la abrió. Solo para encontrarse a los ojos con los más hermosos que había visto en su vida.

— Jimin.— Murmuró su nombre mientras se cruzaban en el camino del otro, frente al café. El ceño fruncido de Jimin se convirtió lentamente en una sonrisa.

— Park Chaeyoung.

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¡Holis! Aquí estoy de nuevo UwU.

Espero que el capítulo aya Sido de su agrado. Recuerden que si hay algo que no entienden, pueden preguntarme.

Prepárense para el siguiente cap 7w7.

- Lady J.