Eva comió de la manzana...sin ser consciente que eso afectaría a lo que ella más amaba en su vida...

Los humanos pueden morir de varias formas, al envejecer, al ser asesinados, al caer de un edificio e incluso ahogándose con su comida, y al morir, ellos pueden ir al cielo o al infierno, pero ¿Por qué? Porque Eva, esposa de Adam, la segunda mujer en ser creada y conocida también como la madre de la humanidad, fue la que trajo el mal al mundo al cometer el pecado de comer de la manzana.

Ella fue la segunda mujer en ser creada pues Lilith, ex esposa de Adam, madre de los demonios y esposa de Lucifer fue la primera esposa de Adam y la primera mujer, pero al no someterse ante la voluntad de Adam y enamorarse de Lucifer dejó de ser la esposa del primer humano, fue ahí cuando se creo a Eva, siendo más sumisa, amable, gentil y llena de amor.

Lilith y Eva no se parecían en nada, ni si quiera en el cabello ya que el de Eva era de un tono rubio más brillante y sobre todo el cabello de la segunda mujer era ondulado.

Lilith era alta, cabello rubio claro lacio y muy largo, ojos negros, piel clara y de una actitud dependiente, sociable, algo soñadora, astuta y seri. Eva era un poco más baja que ella, digamos que era más alta que Lucifer por solo 5 centímetros, cabello rubio que parecía de oro ondulado y que lle llegaba un poco más arriba de los tobillos, ojos azules claros, piel clara y suave y de actitud independencia, no muy sociable, tímida, gentil, compasiva, amorosa y muy cariñosa.

Sin duda no se parecían en nada pero aún así el cielo ve a Eva como una copia de Lilith que la única diferencia que tienen es que es sumisa.

Para muchos, era muy fácil encariñarse con la segunda esposa de Adam, Eva, pues era muy amigable, tímida y sobre todo tierna ante los ojos de todos, parecía una hermosa flor blanca delicada que necesitaba ser protegida por todos y fue por solo eso que ella no fue castigada por comer de la manzana...o eso era lo que se creía...pues...

No hay mayor sufrimiento del de una madre que ver a sus hijos sufrir.....

Y eso era lo que Eva estaba sufriendo, pues ver a sus hijos cometer tantas atrocidades y pensar que eso ellos nunca lo hubiera cometido sino hubiera sido por su culpa le causaba tanto dolor y sufrimiento hasta al punto de tener tantas horribles pesadillas que llegó al punto de tener miedo a dormir por causa de estás mismas.

En una gran oscuridad que apenas era visible ante la vista de un humano o Incluso la de un demonio o un ángel, estaba Eva quien podía ver casi perfectamente.

'¿Hola?'. La rubia se estaba abrazándo así misma del miedo mientras miraba a todos lados. Una mano tomó su tobillo izquierdo causando que está diera un pequeño brinco del susto. '¡Ah!'. Se alejó del lugar y se dió la vuelta para ver qué le había agarrado el tobillo.

Una mano de piel gris estaba en el suelo pero parecía estar suelta pues la oscuridad estaba tapando lo demás a partir de un poco más de la muñeca. Eva dio una mirada de curiosidad pero a la vez de nervios y miedo mientras se acercaba poco a poco a dónde estaba la mano. Se arrodilló al momento que estaba lo suficientemente cerca pero a la vez un poco lejos de la mano para tratar de agarrarla pero al momento de hacerlo la mano se movió directo a ella.

'¡AH!'. Gritó del miedo mientras se levantaba pero cayó por culpa del largo de su vestido blanco de tirantes. 'Ahg!'. Jadeó de dolor mientras se sobaba el trasero.

'Mami?'. Uno chico joven salió de la oscuridad; Eva se sorprendió al ver aquel chico.

'Hijitos?'. Se arrodilló mientras se tomaba de las manos como si fuera a orar mientras veía con cariño y lágrimas al chico.

'¿Por qué lo hiciste?'. Eva el brillo en sus ojos al oir eso mientras sus ojos se abrían con horror y miedo.

'Eh..?'.

'¿¡COMO TE ATREVISTE A HACERNOS ESTO!?'. El fuego apareció ante el grito del chico quien se convirtió en una sombra negra.

Entre el fuego que estaba alejado pero rodeaba a Eva se podían ver más sombras de demonios representado a las demás almas de los humanos pescadores.

'¡¡NO LO SABÍA!!. ¡¡LES JURO QUE NO LO SABÍA!!'. Grita Eva con desesperación mientras las lágrimas manchaban su hermosa cara, sus manos en el suelo enfrente de ella. '¡DE HABER SABIDO NUNCA HUBIERA COMIDO DE ELLA!'. Puso su mano en la parte de arriba de su pecho mientras las lágrimas caían de sus mejillas directo al suelo.

Las sombras rodeaban mientras murmuraban cosas que lastimaban demasiado a Eva que comenzó a repetir de forma desesperada y temblando; "Lo siento, Lo siento".

'¡Eva!'. Una de las sombras de acercó a Eva pero era diferente a las demás, está sombras en vez de lucir enojado lucia preocupado. '¡Eva, Eva-'.

—¡EVA!—. Adam había logrado despertar a su esposa de aquel terrible sueño. Las manos de Adam sujetaban las muñecas de su esposa con delicadeza. —¡Eva, despierta!. ¡Tranquila...!, solo..fue una pesadilla, ya no llores florecita, aquí estoy, todo estará bien, ya, ya, no te preocupes solo fue un mal sueño...—.

Era de noche, lo único que ilunaba la habitación donde se encontraba Adam y Eva en la cama era la luz de la luna.

Eva tenía puesto un camisón blanco con tela rosada de peluche en el pecho, tirantes delgados pero comodos, el cuerpo de ella estaba temblando como nunca antes mientras las lágrimas seguían saliendo de sus bellos ojos y sudaba del miedo, Adam veía con horror aquella mirada que su esposa tenía pues en aquella mirada se refleja no solo el miedo y horror que Eva sentía sino también el trauma que se le fue dado. A la rubia le están costando respirar.

—Respira Eva!, ¡Respira!—. El peli-cafe sentó a Eva mientras trataba de ayudarla a mantener la calma. —Por favor!, ¡Tranquilizante, aqui estoy!—. Adam estaba realmente preocupado por Eva, aún que no la amaba como pareja, la amaba como una hermana menor.

La mirada azulada de la mujer miró a su esposo mientras trataba de tranquilizarse no solo a ella misma sino también su respiración y corazón que estaban agitados, entrecerró los ojos causando que mas lágrimas salieran de ellos mientras moridia su labios inferior.

Eva no aguanto más y se lanzó a abrazar Adam aferrándose a la parte de atrás de los hombros de su esposo con todas sus fuerzas mientras gritaba de forma desgarradora y llena de miedo que dejo a su marido horrorizado. Adam todavía podía sentir el cuerpo de su esposa temblando del miedo, su mirada estaba horrizada por ver a Eva así.

Adam y Eva...un matrimonio que fue forzado por los angeles y a su vez fueron forzados a tener hijos.

—Eva...—. Susurró Adam mientras acariciaba la cabeza de ella. —Nunca olvides que yo estoy aquí para protegerte, te quiero, Eva—. Trataba de tranquilizarla mientras la rubia trataba de calmarse pero era inútil.

—¡¡*Sniff* To-Todo esto *Sniff* e-es mi *Sniff* cul-culpa *Sniff* e-ellos están *Sniff* por mi-!!—. Hablaba con una voz quebrada llena de dolor y sufrimiento mientras seguía derramando lágrimas.

Adam alejo a Eva de él sujetando la de los brazos. —¡¡No digas que fue tu culpa!!, ¡¡Tu no tienes la culpa de nada!!—.

—¡¡Y-Yo comí *Sniff* de la manzana *Sniff* es mi culpa que mis hijos sean asi!!—. Se separó del agarre de su esposo para levantarse de la cama. —¡¡Es mi culpa que se lastimen, que se maltraten, insulten y maten entre ellos!!—. Eva en ese preciso momento se mareo causando que casi se cayera.

—Eva...!—. Adam se levantó de la cama para atrapar en sus brazos a su esposa. —¡Necesitas dormir o vas a enfermar más!-. Cargo a Eva para acostarla en la cama.

—¡No quiero!—. Dijo Eva tratando de pararse pero Adam no la dejó. —¡Por favor Adam, no quiero verlos así, no puedo *Sniff*!—. Adam sentía como su corazón dolía al ver a Eva así. —Tengo miedo...—.

Adam dio un largo suspiró para después besar la frente de su esposa para acostarse a un lado de Eva y abrazarla con todas sus fuerzas

—Tengo miedo-, *Sniff* Tengo miedo de que me odien...—. abrazó con todas sus fuerzas a Adam mientras seguía dejando a caer lágrimas.

—...¿Y tu no crees que yo no tengo miedo de lo que te estan causando?...—. Adam miró varias heridas en las venas de Eva y a la vez en varias partes del cuerpo de ella.