¿En dónde estaba? ¿Qué es este lugar?

Mis ojos apenas y podían abrirse, pero sentía ese calor exquisito recorrer mi cuerpo, un peso encima de mí hacía maravillas con su lengua en mis senos. ¿Pero qué estaba pasando?

Yo estaba buscando a Gigi para poder irme a casa, tenía ganas de salir de esta fiesta por el simple hecho que me sentía perdida en este lugar, tanta gente que desconocía, ojos mirándome con desdén, no me hallaba en lo absoluto.

Entonces ¿Cómo llegué a parar aquí?

─ ¿Estás segura? N-no sé cómo te llamas, pero eres hermosa ─ese chico susurró tan cerca de mis labios, no me dio tiempo para hablar, ya que atacó mis labios de una forma salvaje, yo apenas y con la poca conciencia pude seguirle el ritmo, me sentía sofocada, tenía un dolor ahí abajo que deseaba que dejara de doler ya.

─N-no sé...que siento, pero duele ahí abajo.

─Te ayudaré con eso muñeca ─susurró entonces, se separó de mí y gracias a una luz pequeña pude observar su cuerpo desnudo igual al mío, su pecho libre de vello, mostrando sus músculos contraídos.

─Y-yo nunca... ─murmuré sintiendo mi cabeza dar vuelta, eché mi cabeza atrás agarrándola con mis manos.

Era una sensación horrible.

─No te preocupes ─el intruso se hacía paso en mi cavidad, un dolor extraño me hizo soltar un gemido alto, ¿qué es esta sensación? ─ mierda ─se apretó a mi besando mi cuello, sus dedos estimulaban ahí abajo haciendo que mueva mis caderas, pidiendo más─ enserio eres linda ─ ¿Cómo podía saberlo? La luz apenas y nos iluminaba.

Y fuiste tú Jeon Jungkook, fuiste el primero en todo.

[...]

Desperté agitada, y poco sudada por el ¿sueño? No, estoy segura que fue un recuerdo, recuerdo de ese día, entrecerré los ojos debido a los rayos de sol, estos se adentraban por las cortinas, no vi por ningún lado a Jungkook, su teléfono tampoco estaba en la mesita de noche donde lo dejó ayer, hice una mueca sintiendo una humedad en mi parte baja.

─ ¿Eso pasó aquella noche? ─me pregunté, mi cabeza era un lío, todavía sigue habiendo esa incógnita

¿Qué fue lo que realmente pasó?

O sea, obviamente hubo sexo, ¿pero antes de eso? ¿Quién planeo todo esto?

Descontenta por no saber nada, me levanté y fui directo al baño, lo necesitaba urgente, abrí las llaves para que se pueda llenar la bañera, mientras tanto me saqué la ropa y miré mi reflejo en el espejo, me paré de lado observando mi vientre, sintiendo una ola de felicidad dentro de mí.

─Mis bebés ─murmuré con alegría, ahora entiendo a todas las madres, de pronto me agarró unas ganas de llorar, ¿Cómo serán?

Había leído blogs de chicas jóvenes embarazadas, sentía su emoción a través de sus palabras.

"A veces sientes que es un error ya que tus actividades estarán en pausa, pero una vez que lo veas en tus brazos, sentirás una emoción que no se puede explicar por palabras, es normal tener miedo, sin embargo, sabrás que tu hijo/a será tu fortaleza toda tu vida"

Claro que había leído esos blogs uno por uno, quería saber que pensaban las chicas como yo. Madres jóvenes, acaricié otra vez mi barriga hinchada y me observé por completo, todo mi cuerpo era otro, mis pechos se sentían pesados en mi sujetador de una niña de 15 años, reí y luego suspiré, no es que yo haya tenido una cintura de avispa, pero era fina y ahora es ancha y mis caderas ni se digan.

─Haré y daré todo de mí, mis princesas. ─prometí, vi la bañera llena y cerré las llaves, eché esencias en el baño y satisfecha, entré.

Que delicia, ¿A dónde habrá ido Jungkook? Me relajé por completo, ayer luego de pasear sin rumbo alguno por la isla Jeju, regresamos exhaustos, vimos películas y como toda una pareja nos quedamos dormidos abrazados, mis mejillas se sintieron calientes y con una sonrisa tonta me sumergí debajo del agua.

Jungkook...

─Dulce, ¡Dulce! ─sentí unas manos agarrar con fuerza mis brazos y sacarme de golpe, quedé de rodillas y tambaleé un poco por la fuerza ─ ¡por dios! ¡¿Qué hacías?!

─P-pero... Yo no hacía nada ─le miré sorprendida─ estaba dándome una ducha ─su camisa se mojaba y mis ojos se abrieron de golpe, mis pechos chocaban con su pecho─ estoy desnuda ─susurré en shock.

─Si, por supuesto ─carraspeó y con su mirada en mis ojos me soltó despacio, sé qué hacía un esfuerzo por mantener sus ojos en los míos. Me senté de golpe en la bañera regando el agua por el impacto. ─t-te traje el desayuno.

─Gracias ─murmuré tímida.

Escuché la puerta cerrarse y pude soltar un suspiro

─Bebés, su padre está loco ─reí nerviosa y me terminé de bañar rápido.

[...]

Que puedo decir, pasamos dos semanas muy extraordinarias, recorrimos muchos lugares de la isla Jeju, hubo risas y risas, la conexión existente con Jeon Jungkook no era solo de mi imaginación, y si caso estaba equivocada que me parta un rayo, pude tener un acercamiento más íntimo con él, tanto que recordar me daba cosquillas en la panza.

Movía la cabeza de un lado a otro con la música del auto en un volumen moderado, hoy había amanecido con algo de malestar, la noche anterior tanto Jungkook como yo comimos hasta reventar, y hoy mis bebés me reclamaban por haber ingerido comida desconocida. Mi boca estaba agria, algo que estaba detestando, sentía un sudor frío y efectivamente estaba mal.

─Para... ─murmuré en un susurro.

─ ¿Pasa algo? ¿Estás bien? ─estacionó el auto alado de un árbol, Jungkook me ayudó a bajar viendo mis intenciones, me llevó a atrás de un árbol y vomité todo lo que comimos ayer en la noche─ creo que nos excedimos con la comida ayer ─murmuró bajito, no podía respirar tranquilamente, una vez expulsé todo me llevó de regreso al auto.

─Quiero dormir ─susurré regresando a verlo

─Espero llegar rápido ─acarició mi mejilla─ duerme mientras tanto ─limpió mis mejillas de las diminutas lágrimas que me salieron.

El auto se puso en marcha y agradecí que el sueño me venció, sentir ese acidez en la garganta, no era nada agradable.

«»

Veía a Jungkook desde la cama, estaba arreglando su cabello con su rostro serio desde ayer en la tarde, pregunté claro, pero evadió mi pregunta.

─Hoy regresaré tarde, si necesitas algo llámame enseguida ─declaró acercándose a mí y besó mis labios, no terminaba de acostumbrarme a eso, no me pedía ser pareja, novios, amigos con derecho o algo.

Nada y eso me incomodaba un poco.

─Está bien, no iré a ningún lado de todos modos ─susurré con él cerca todavía, sus ojos me veían expectantes junto a su ceño fruncido, su dedo índice tocando mi labio inferior.

─Perfecto, nos vemos ─dicho esto agarró su mochila y salió de la habitación.

Aplané mis labios insegura, las semanas pasaron muy rápido y Jungkook reanudó sus clases unos días después de llegar de Jeju, no faltaba mucho para que se gradúe al igual que Gigi y sus amigos. Llevaba días sin saber de mis padres y mi hermana, también de Suli, habíamos cancelado la cita a la obstetra en este mes, veía mi vientre más grande, los movimientos de las bebés eran más frecuentes y yo evitaba estar de pie mucho tiempo, solo faltaban tres meses para dar a luz y sentía nervios.

Me levanté sin ánimos y fui directo a la cocina, estoy muy segura que la llamada de ayer en la tarde que le hicieron a Jungkook fue el detonante de su mal humor, no se desquito conmigo, pero si con un jarrón que había en la sala, con el saco de boxeo que hay en una habitación solo para él, y también la pobre pared de la sala. Quise hacer algo por Jungkook, pero él prefirió estar solo.

¿Qué le dijeron?

Quería curar los raspones de sus nudillos...

"Quiero estar solo Dulce, vete ya"

Un dolorcito en el pecho ─uno que hace tiempo lo había sentido─ se hizo presente en ese instante y no me gustó nada, su voz gélida y fría no la había escuchado desde el día que está conmigo hacia mi persona.

─ ¿Entonces qué hago? ─me pregunté a mi mismo, toda la tarde pasé cocinando, miré el almuerzo que quería llevar a Jungkook para así acompañarlo a comer en su descanso, en cuanto a su actitud, tenía miedo que reaccione mal al verme parada ahí esperándolo.

Las gemelas se movieron, suspiré, me había puesto un vestido suelto color rojo junto a unas bailarinas negras, estaba lista para salir, guardé el almuerzo en el bolso y salí, mi cabello se movió violentamente por el viento y maldije por no haberme hecho una coleta, me peiné con la dedos y esperé un taxi.

«»

¿Qué dije cuando salí de casa? Temía por la actitud de Jungkook, cosa que ahora eso quedó en segundo plano, ya que lo que temo ahorita es las miradas curiosas y despectivas de los chicos de la universidad.

Mordía mi labio, nerviosa buscando con la mirada a Jungkook, pero no aparecía por ningún lado.

─ ¿Dulce? ─una voz desconocida se escuchó a mi lado, giré a ver y quise salir corriendo de ahí. ─Pero si eres tú, todos se preguntaban porque desapareciste así de la nada ─se río sin humor. Su mirada me recorrió de pies a cabeza.

─ ¿Qué quieres? ─una amiga de Leila, esto no tenía que pasarme a mí, fue una mala decisión venir.

─Pero que altanera te has vuelto Bae... ─miró con desprecio mi vientre, retrocedí unos pasos─ ¿buscas a Jungkook? Déjame decirte que se fue con Leila hace un buen rato ─soltó una carcajada─ que sinvergüenza que eres para venir a la universidad en este estado ─escupió con tanto desprecio y se fue.

Se formó un nudo en mi garganta y con la respiración agitada salí de la universidad, ¿se fue con Leila? No, estoy segura que no.

Caminé en busca de un taxi para de una vez largarme a casa, no debí salir, los pies me dolían bastante. Estoy segura, muy segura que la mala suerte me persigue, había parado de caminar cuando los vi, ellos estaban en plena calle, los dos, Jungkook miraba a Leila muy concentrado, y ella le decía algo, estaban muy cerca. Di media vuelta y gracias a Dios, un taxi paró.

No debía sentirme así ¿o sí? Jungkook es el padre de las gemelas, se acostumbró a besarme sin ser una pareja, se ha portado muy bien conmigo, nos divertimos, reímos, pero... No somos nada, no somos una pareja, creo que los dos confundimos la situación, especialmente yo, solo es el padre, nada más, como yo dije una vez, no pretendía amarrar a Jungkook y no lo haré ahora.

¿Estoy exagerando? O sea, Jungkook no estaba besando a Leila, tampoco escuché lo que se decían, sin embargo, me estaba portando como si me hubieran engañado, cosa que no pasó, ni pasará, porque las personas que se besan sin ser nada, no serán engañas por el simple hecho de ¡que no son nada!

¿Qué es lo peor que mal interpretar nuestros sentimientos?

Cerré la puerta tras de mí, me saqué los zapatos y descalza caminé lentamente a la cocina, de repente el ánimo se quedó en el suelo de la universidad y lo pisoteaba todo aquel que caminaba por esa calle, suspirando saqué el almuerzo dejándolo en el refrigerador y tanto que me esmeré en hacerla, subí a mi habitación, no a la de Jungkook, a la mía y me puse a ver una película para así dormirme y no pensar en nada.

Creo que vivir con Jungkook fue una de las tantas malas ideas que he tenido y yo pensando que era una buena decisión.

Bendita suerte la mía.

ᴇᴅɪᴛᴀᴅᴏ | ₂₄₋₀₃₋₂₀₂₂|

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