─Cariño, despierta, Jungkook llegará en unos minutos y tú me dijiste que a ese muchacho no le gusta esperar. ─escuché decir a mi padre.

Abrí los ojos de golpe.

¡Jungkook!

¡Casa!

¡Esperar!

─ ¡Es cierto! ─me levanté corriendo al baño para asearme

─ ¡Apúrate, que tu madre dejó preparado el desayuno!

Sonreí feliz, mi madre casi nunca cocinaba en la mañana, pero desde ayer en la noche, se portó más dulce de lo normal, me recibieron tan lindos y el llanto me ganó.

Salí envuelta en una toalla, no puede ser, vi el reloj en mi celular y era 7:23, Jungkook pasaría en 7 minutos, busqué algo cómodo y cálido en mi armario, no podría ponerme un vestido, el día era todavía frío, vi un Jean negro y saqué un buzo blanco, me vestí rápido, me paré frente al espejo y me tensé un poco, levanté mi buzo y por instinto acaricié mi vientre, lo sentía, claro que, si lo sentía, mi vientre ya no tan plano estaba duro.

─En unos meses se te notará ─pegué un brinco golpeando mi codo contra la esquina de mi cómoda

─ ¡Mierda! ─sentí esa corriente horrible que te recorría cuando te golpeas el maldito codo.

─ ¡Oh dios! ¿Te duele? ─alcé mi cabeza sintiendo una pequeña lagrima caer de mi ojo izquierdo, él tenía una sonrisa burlona en sus labios.

Me senté en mi cama buscando mis zapatillas, ¡es un tonto! Sentía mis mejillas arder, me vio cuando contemplaba mi vientre.

─ ¿Estás enojada? ─preguntó tendiéndome mi otra zapatilla que no encontraba, le quite de un tiro─ Te enojaste...

─ ¿Qué haces en mi habitación?

¿Qué hacía aquí?

¡¿QUÉ?!

─Dije que deberías estar en mi auto apenas llegue...

─Me quedé dormida ─murmuré bajo, me levanté sin hacer contacto visual con él, peiné mi cabello, lo sentía muy largo ¿debería cortarlo?

─Bueno ¿estás lista? No quiero que el tráfico nos sorprenda.

─Sí, vamos ─me puse un poco de brillo labial y me eché también un poco de perfume. Jungkook ya había bajado.

Desayuné rápidamente, al terminar subí a lavarme los dientes, veía a Jungkook impaciente.

─Nos vemos tarde papá ─dejé un beso en su mejilla con un abrazo.

─Cuídate mi Dulce. ─con un beso en mi frente salí corriendo al auto de Jungkook.

─En la otra tendré que hacer algo para que te apures.

─Lo siento, me quedé dormida, ya te lo dije ─fruncí mis labios. El me vio de reojo.

─Hoy al salir iremos al hospital, mi padre apartó una cita con la obstetra.

─ ¿Enserio? ─estaba nerviosa, el parecía que quería estar en todo lo que haga.

Es normal, ¿no?

No, no creo, la gente empezará a especular cosas, sabrán del embarazo...mi vida tranquila comenzará a ser comidilla para toda la universidad y eso es lo que menos quería.

─Sí, no has ido ¿no es así? ─negué─ Mi hermana me dijo que cada mes tienes que hacerte un control, hoy será el primero y obviamente estaré ahí ─me daba algo de diversión ver su semblante serio cuando me explicaba algo, me hacía ver lo autoritario que es.

─Está bien ─no quería contradecirle, por una parte, sentía algo lindo que alguien se preocupe por mi aparte de mis padres y hermana, Jungkook llevaba un Jersey de cuero negro, su Jean era rasgado en los muslos haciéndolo ver. ¿Sexy?

Joder podía sentir mis mejillas arder ¿acabo de tener un pensamiento impuro?

─ ¿En qué estás pensando? Acabas de incendiar tu rostro ─soltó una risita y yo me moría de la vergüenza.

─En nada que te importe... ─de repente unas náuseas horribles me hicieron poner las manos en boca, mi cabeza empezó a dar vueltas y temía que acabe estropeando el auto lujoso de Jungkook.

─ ¿Pasa algo? Estás pálida ─negué con la cabeza y paró el auto, me ayudó a bajar y con las justas pude devolver todo el desayuno cerca de un árbol sin que nadie me vea más que Jungkook quién sostenía mi cabello y daba caricias a mi espalda.

Me sentía sin fuerzas.

─ ¿Mejor? ─preguntó mientras me daba la vuelta, el dejó que apoye mi frente en su pecho, que rico olía.

─Me duele la garganta ─mi voz salió rasposa. Suspiré ¿me pasaría todos los días, por siete meses más?

─Vamos, te compraré una botella de agua. ─me llevó de la mano al auto, mi cuerpo se sentía frío a pesar de que el día quería ser algo cálido.

Cerré los ojos sintiéndome débil, sentí algo encima de mí, Jungkook me había dejado una de su chaqueta en los brazos, no me veía, pero podía sentir su preocupación.

Me dio un cosquilleo en mi estómago.

─ ¿No deberías pedir permiso? Estás muy pálida Dulce, ¿crees que estaré tranquilo dejándote así?

Yo tampoco me sentía bien, pero no quería seguir faltando a clases....

Entonces mi cabeza dio vueltas nuevamente con esa idea que tenía desde hace días cuando me enteré del embarazo.

¿Sería lo mejor?

Me di la vuelta quedando de lado para poder verle a los ojos. El me veía expectante.

─ ¿Crees que debería posponer el semestre hasta que nazca? ─murmuré bajito, el me vio sorprendido.

─ ¿Estás segura?

─No lo sé todavía. Seré madre primeriza, los vómitos me dejan en la luna y no sé qué pueda pasar si...en el caso no estuvieras ahí ─susurré algo tímida. Suli también tiene su vida no puede estarme cuidando a cada momento.

─Iremos hoy al chequeo, le diré a mi padre que adelante, te recogeré a la hora del almuerzo ¿está bien? ─asentí con una pequeña sonrisa ¡él me sonrió también!

Llegamos faltando 10 minutos para que inicie las clases, caminamos a la cafetería y me compró el agua que me dijo.

─Si te sientes mal me llamas o le dices a Suli que me llame ─Suli estaba a mi lado.

─Puedes estar tranquilo, yo la veré hasta que se vayan a la cita ─mi amiga se había enterado todo apenas entramos.

Jungkook tenía sus manos en mis hombros y me veía muy serio.

─Bien, nos vemos más tarde, le diré a mi padre que nos iremos temprano. ─yo asentí abrazando mi botella de agua en mi pecho, me sentía pequeña apresada en sus brazos.

Me sorprendió y al parecer a mi amiga también el beso que dejó Jungkook en mi frente.

¡Debo estar roja!

─Debes estar relajada, nos vemos luego ─dicho esto se marchó

─Joder ─susurró Suli─ vamos, ya debe de llegar el profesor.

No podía articular ninguna palabra, mis mejillas no dejaban de quemar.

A último momento se organizó una junta con todos los docentes y agradezco, mi cabeza sería incapaz de albergar tanta información. Estábamos Momo, Vernon, Suli y yo. A estos dos primeros los veía algo extraños conmigo, recuerdo no haberlos informado del embarazo y ellos parecían sospechar.

─Estoy embarazada ─les solté de golpe, Suli tosió y los otros dos se tensaban.

─Todo es muy precipitado ─dijo Momo con un semblante que nunca había visto─ hace unas semanas Jungkook y Leila eran la hermosa pareja y ahora tú....

Tanto Suli como yo nos regresamos a ver sin saber qué diablos decía

─ ¿Y ahora yo que? ─dije enojada─ ¿acaso dices que yo llegué para robarle el novio a Leila? ─pregunté con ironía

─Eso no lo decimos nosotros Bae ─murmuró Vernon incómodo, no pasé de alto que me llamó por mi apellido.

─ ¡Por supuesto! Lo dicen todos ¿no es así? Y ustedes piensan igual ─solté una risita llena decepción y enojo, me sentía muy enojada.

─Hay que ser realistas Dulce, eso es lo que es ─Momo tenía algo que no me empezó a gustar

─Basta ustedes dos ─gruñó Suli. Yo me levanté sin pensarlo dos veces y viendo mi botella de agua lo destapé y regué todo en la cara de esos dos buenos para nada ¿amigos?

¡Qué buenos amigos!

─ ¡¿Pero...?! ─escuché las maldiciones de Vernon y Momo y con mi frente bien alta salí del salón.

Jungkook

Lo pensé en todo el camino a su salón, sentí mi celular vibrar.

─Linda, tranquila, no te alteres, será mejor...

─Voy a dejar la universidad Suli ─susurré parando al ver la puerta de su salón─ creo que eso será lo mejor. ─no quiero lidiar con cosas como las que acaba de suceder, no era una cobarde, lo hacía por mi propia estabilidad emocional.

─Haz lo que creas conveniente para ti y para el bebé, sabes que siempre te apoyaré en lo que decidas ─murmuré un gracias a Suli y acabé la llamada.

Suspiré tragando el nudo en mi garganta y di dos golpes en la puerta. Enseguida se abrió y me recibió un Taehyung sorprendido, parecía que estaban en una exposición o algo.

─ ¿Necesita algo señorita...?

─Bae, Bae Dulce ─susurré incomoda, todos los ojos estaban en mí, Gigi me preguntaba con la mirada que pasaba y Jungkook apenas supo quién era se puso de pie y pidió disculpas para salir.

─ ¿Pasa algo? ¿Te sientes mal? ¿Te dijeron algo? ─la puerta se cerró y yo no sabía que decir.

─Quiero que me acompañes a darme de baja de la universidad ─susurré cansada, no quería que todos me sigan viendo como la chica roba novios. Por mi lado vi pasar a una amiga de Leila.

─Debes hablar con tus padres primero Dulce, no puedes tomar esto a la ligera.

─No quiero que me sigan viendo como la roba novios, y aparte no quiero sentirme mal en un lugar que llamaba mi segundo hogar Jungkook, será hasta que nazca el bebé ─quería sonar tranquila, pero estaba lejos de eso, me sentía enojada.

─ ¿Te dijeron algo? ─preguntó ahora enojado.

─Se suponía que eran mis amigos ─susurré rabiosa─ ¡son unos estúpidos! ─grité─ me dijeron que todos decían que yo le robé el novio a Leila ¡es algo ridículo!

─Cálmate ─tenía una sonrisa en sus labios.

─ ¿Te causa gracia? ─pregunté atónita.

─Basta, debes relajarte ─acarició algo titubeante mi cabeza, pero parecía que estaba diciendo buen chico a un perro cuándo acababa de hacer un truco.

─No soy un perro ─me crucé de brazos.

─Jeri me advirtió de los cambios de humor ─se dijo para sí mismo. Le miré indignada, pero me di cuenta que me sentía más tranquila. ─vámonos ahora, espérame aquí

─Está bien ─sonreí.

Vi un mensaje en mi celular. Gigi.

Dime que va todo bien por favor

10:21

Si, tranquila, hoy tendré mi primer chequeo, Jungkook me llevará

10:22

Me alegra que las cosas vayan bien entre ustedes, cuídate, nos vemos en casa, te quiero.

10:23

Le mandé un sticker de corazón y justo salió Jungkook.

─ ¿Quieres comer algo mientras tanto?

─La verdad no, no tengo hambre

─Perfecto, iremos primero a mi casa, debo sacar unos papeles de mi padre y luego iremos al chequeo ¿está bien?

─Sí, sí, vamos ─él sonrió con los labios apretados y salimos de la universidad.

ᴇᴅɪᴛᴀᴅᴏ | ₁₅₋₀₃₋₂₀₂₂|

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