¿Han escuchado el dicho "la curiosidad mató al gato"?

Pues, la curiosidad mató a esta hermosa gatita de veintidós años. La curiosidad de Dulce no quería parar, el ponche estaba delicioso, nunca antes había probado alcohol en su vida, pero supo que eso no sabía a ese soju que una vez probó por curiosidad.

Llevaba ya siete vasos de esos mientras esperaba a Yoongi y a Jimin, por el rabillo del ojo vio a un chico acercarse a ella, sus pasos eran torpes, sin embargo, ella culpó al ponche, debía parar o perdería la conciencia.

─Hola linda ─murmuró cerca de ella, Dulce llena de incomodidad, le dio una media sonrisa tensa ─vi que ya te acabaste, te traje el último vaso de ponche.

Dulce abrió la boca sorprendida, ¿ya se acabó el ponche?, eso era una señal que debía parar.

─Gracias ─murmuró algo arrastrado, que pasaba, su lengua parecía amortiguada. Tomó un sorbo de lo que contenía el vaso, hizo una leve mueca sintiendo un sabor extraño, no sabía a los mismos que bebió durante la media hora que parecía que se fueron sus amigos. Tomó un poco más y dejó el vaso en la mesa. Se puso de pie queriendo irse de ahí.

─ ¿Te vas? ─preguntó el chico frente a ella, Dulce frunció su ceño, el chico se le hacía familiar, pero en el baúl de sus recuerdos, no encontró nada, mordió su labio inconscientemente.

─T-tengo que ir al baño ─dijo rápido─ ¿sabes dónde están?

─Subiendo esas escaleras al fondo hay una habitación, nadie usará ese baño ─le dio una sonrisa perversa, Dulce sin pensarlo fue lo más rápido que pudo, su vejiga no aguantaría más si no se daba prisa.

Sus nervios aumentaron dándose cuenta que el piso parecía flotar bajo sus pies, su esperanza creció cuando entró a la última habitación, estaba tan obscuro que a tropezones encontró otra puerta que le dio acceso al baño.

─Por fin ─susurró.

Debía buscar a su hermana y a sus amigos, la valentía de estar sola entre tanta gente se esfumaría en unos minutos. Tenía la fe que todo el ponche que bebió se iría de su organismo al momento de orinar.

Sin embargo, eso no pasó, su cuerpo comenzó a sentir calor de la nada, su mano sirvió para abanicar su cara acalorada, su cabeza se sentía pesada. ¿Qué le pasaba? Un hormigueo en su vientre bajo le pareció extraño, cerró sus piernas haciendo presión entre ellas sintiendo algo extraño en la parte baja.

Una vez que salió del baño vio una cama frente a ella, le pareció buena idea dormir un rato mientras ese malestar se iba, algo que no sucedió durante los próximos minutos, la cama parecía dar vueltas, sus manos se hacían puño justo en su centro, gemía sintiendo algo de dolor justo ahí, en ese punto que nunca antes había explorado.

─Gigi ─gimió con sus ojos cristalizados, quería salir de ahí e ir a casa, a su cómoda cama.

Sabía que se arrepentiría de haber ido a esa fiesta.

[...]

─Mierda, parece que Leila nos vio ─dijo Jimin enojado.

─ ¿Qué carajos le pasó? Parece como si hubiera tomado un día entero ─replicó Yoongi viendo a un Jungkook sudado y medio ido.

─Debe ser por los efectos secundarios de la pastilla, Jungkook dejó de tomarlos por un buen tiempo, creo que desde que dejó las terapias. ─informó Taehyung, su hombro comenzaba a doler, los fuertes brazos de Jungkook pesaban tanto.

─Mierda, Jungkook debe volver a las terapias, sabía que sería mala idea que lo abandonara sabiendo que desde que está con Leila es un manojo de nervios e ira.

─Yoongi, sabes que le dijimos cuando nos contó que iba a dejar las sesiones, pero se hizo oídos sordos y finalmente hizo lo que él quería ─Jimin asintió estando de acuerdo con los dos.

─Alguien viene ─dijo Jimin nervioso─ Joder bótenlo en la cama y listo, nadie debe ver a Jungkook ─Yoongi y Taehyung abrieron la puerta dejando a su amigo en la cama de un empujón.

─Mierda, no veo nada ─susurró Taehyung.

─Ya está en la cama, vámonos ─Yoongi jaló a Taehyung, una escasa luz entraba por la ventana de la habitación, pudo ver como Jungkook se movía buscando una posición cómoda en la cama, o eso pensó.

─ ¡Vamos! ─les gritó Jimin.

Los otros dos salieron echando seguro desde dentro para que así nadie pueda entrar.

─Hey... ─ los tres regresaron a ver─ ¿v-vieron a una linda chica ahí?

─No hay nadie en la habitación, ya vimos, estamos buscando a Jungkook ¿lo viste? ─habló Yoongi con su voz seca y sería que puso nervioso a Lois. Yoongi era intimidante después de todo.

─Joder, ¿a dónde se fue? ─susurró, los tres fruncieron su ceño, definitivamente Lois no era del agrado de los chicos ─no lo he visto, adiós

Vieron como Lois se iba tambaleando murmurando cosas.

─ ¿De cuál es esta casa? ─preguntó Jimin.

─De Megan, la amiga de Gigi ─respondió Taehyung.

─Mañana hablaremos con Jungkook, Leila definitivamente es la que le lleva al tope a Jungkook, su estabilidad está en una puta cuerda por esa mujer ─gruñó Yoongi─ tiene que retomar las terapias, sus crisis comienzan a ser más seguidas antes por lo menos se daba una vez cada dos o tres meses, pero ahora son semanales.

Jimin y Taehyung vieron como Yoongi se frotaba la cara exasperado, los dos sabían que Jungkook y Yoongi eran muy cercanos hasta que el primero comenzó su relación con Leila.

─Hablaremos con el mañana Yoongi, ahora hay que ir a disfrutar la fiesta, Jungkook estará bien en la habitación dormido. ─dijo Taehyung, y así los tres bajaron a la fiesta.

«»

─ ¿Le dijiste que espere? ─Taehyung, Jimin y Yoongi se vieron nerviosos.

─S-si, eso le dije antes de ir por Jungkook ─Jimin balbuceo, buscando con su mirada a una castaña bajita.

─ ¿¡Perdieron a mi hermana!? ─Gigi parecía volverse loca.

─ ¡Ella se quedó aquí, Gigi, le dije que regresábamos enseguida, que no se vaya! ─Yoongi vio a su novio nervioso y eso no le gustó.

Yoongi sacó su celular con esperanza de que habría un mensaje, tal vez uno de Dulce, y en efecto, un mensaje de la pequeña Dulce estaba ahí.

─Parece que se fue ─dijo Yoongi después de leer el mensaje.

─ ¿Qué?

─Quiero dormir, bay ─leyó el mensaje ─los otros tres soltaron un suspiro, Gigi suspiró temblorosa.

─Carajo, ¿Por qué Dulce no me escribió o me llamó a mí? ─Gigi se sentó de golpe en el sillón.

─Por el ruido tal vez no escuchamos, el mensaje fue enviado cerca de la una de la madrugada, y ya son una y cincuenta. ─Yoongi guardo su celular.

─Bueno, sé que me cubrirá las espaldas, le llamaré más luego ─Gigi dijo algo nerviosa, rogando para que su pequeña hermana llegue bien, aunque sabía que Dulce era bien precavida en el caso de los taxis.

─Envíale un mensaje amor, ella te responderá luego ─dijo Taehyung besando la cabeza de Gigi.

Entonces el alcohol los consumió, las horas transcurrían llevando consigo la consciencia de todos.

[...]

Dulce se retorcía cada vez más, soltó un gemido cuando cerró otra vez sus piernas, sus tacones habían quedado por algún lugar cuando se quitó su vestido, para ella el calor era horrible, tanto que su sangre parecía lava dentro de ella.

─ ¿Quién está ahí? ─preguntó una voz ronca, Dulce parecía que iba a llorar, se sentía tan feo todo lo que le sucedía a su cuerpo.

─Duele ─gimió Dulce con pequeñas lágrimas en sus ojos.

La oscuridad no le ayudaba en nada a Jungkook cuando intentó ver quién habló, tocó a su lado sintiendo un bulto, así que se reincorporó con su cuerpo sudado.

─ ¿Qué...? ─cerró sus ojos sintiendo dar vueltas todo, una pequeña franja de luz daba en la mitad de la cama, sus ojos apenas y podían abrirse, se puso de rodillas quitándose su camisa, el calor era sofocante, escuchó un sollozo parecido a un gemido llamándolo la atención.

─Duele ─Jungkook regresó a ver nuevamente a su lado, algo se retorcía soltando jadeos junto a sollozos.

─ ¿Quién eres? ─preguntó queriendo ponerse de pie cayendo en el proceso encima de lo que supo era una mujer, un olor dulzón se impregnó en sus fosas nasales.

─Duele, duele mucho ─la espalda de Dulce se arqueo cuando su mano se escurrió dentro de sus bragas, nunca se tocó, pero ahora tenía la necesidad ya que dolía tanto que pensó que se moriría.

Jungkook tocó lo que tenía bajo suyo, la luz resplandecía contra el cuerpo femenino, sus ojos recorrieron la silueta femenina dándose cuenta que estaba semidesnuda, su vista algo borrosa no le ayudaba tanto, su miembro comenzó a doler y su frente se sentía húmeda del sudor, Jungkook movía su cabeza de un lado a otro queriendo aclarar su mente.

─T-tócame por favor ─Jungkook tambaleando posó sus rodillas en medio de las de Dulce abriéndola por completo, Jungkook sintió esa piel desconocida tan suave.

─Tan suave ─murmuró Jungkook cegándose por completo al calor de su cuerpo, echó su torso hacia adelante olfateando ese aroma dulzón, esos pequeños gemidos lo encendieron al cien por ciento, por instinto acercó su boca a la piel del cuello de Dulce, soltó un gemido alto volviéndolo loco.

─Oh dios ─susurró Dulce sintiendo los labios del chico en la piel de su cuello.

Entonces todo sucedió, en esas sábanas, bajo esa pequeña franja de luz, los besos anónimos se sentían demasiado bien en la piel del otro, los gemidos y jadeos sintonizados entre ellos, eran melodías para la excitación que Dulce y Jeon Jungkook sentían.

[...]

La luz era más clara para ese momento, Lois abrió los ojos de golpe al recordar el malévolo plan que hizo la noche anterior, se puso de pie algo mareado por la resaca, en el piso vio caras conocidas y sin darle importancia fue escaleras arriba, caminó hasta la última habitación dándose cuenta que estaba echado llaves.

─Maldición ─murmuró, se puso nervioso cuando vio una sombra caminar directo hacia él.

─ ¿Qué haces Lois? ─Megan preguntó con una mano en su cabeza.

─L-la noche anterior entré a descansar en esta habitación y me olvidé mi celular ahí dentro ─se las ingenió para mentir, estaba seguro que Dulce estaba ahí inconsciente por la Viagra que puso en su ponche.

─Solo alza un poco al girar la chapa ─dijo Megan y se dio la vuelta para irse, hizo tal y como ella lo dijo abriendo la puerta, sus ojos se abrieron de golpe al ver a la chica que por tres años la vio desde la sombra, recordó cuando llegó a su vecindario, sus ojos brillaron de la emoción al saber que tenía una vecina tan hermosa e inocente, verla hacer cosas nada importante le llenaba el corazón, sin embargo, ella no lo miraba ni por refilón, varias veces tentó a su suerte cruzándose frente a ella con la esperanza de que por lo menos conecten miradas, cosa que nunca pasó.

Pero ahora.... La veía ahí, desnuda abrazada a Jeon Jungkook, ese hijo de puta que se creía la sensación de la universidad solo por ser el hijo del Decano, Jeon tenía entre sus brazos a la mujer que él amaba desde hace tiempo, así que ver como Jungkook abrazaba con posesividad a Dulce lo enojó tanto que su mandíbula era apretada con tanta fuerza, odiaba a Jeon por meterse en su maldito camino ¿Qué hacía él ahí, en esa cama donde Lois debía estar con Dulce?

─Mierda ─sus ojos no se despegaban de la escena, Jungkook se removió abrazando con más fuerza a Dulce entre sus brazos, cosa que irritó tanto a Lois, así que sin pensarlo con sus dedos temblorosos sacó su celular y soltando un suspiro fotografió a los dos amantes, un nudo se formó en su garganta al ver a la chica que era dueña de su corazón, tan hermosa y tranquila en brazos que no eran de él, tal vez odiaba todo y a todos en ese instante pero nunca se perdonaría que Dulce sea víctima de humillaciones por Jeon Jungkook.

Así que las fotografías solo reconocerían al novio infiel. Sin embargo, nunca supo que Dulce sí sería el punto de humillación a causa de su malévolo plan.

ᴇᴅɪᴛᴀᴅᴏ | ₂₄₋₀₃₋₂₀₂₂|

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¡Hola!

Bueno, con esto creo que termino Lo que en verdad pasó, los sucesos que ocurrió en el día de la fiesta.

Espero que les haya sacado algunas dudas y lo hayan disfrutado.

Bay 🙋‍♀️

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