Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

━━O2

VAIZEL


• • •

Scartlett P.O.V.

No hay nada interesante que contar, estuve más de dos o tres años en el calabozo ya que unos humanos tomaron mi reino. La verdad no me intereso y deje que hiciera lo que quisieran con ello no es algo que me interese de todos modos.

Al ver a esa chica entrar y contarme de que esta en busca de los pecados aun cuando son los criminales más buscados. Y eso es una parta del porque me decidí a volver a mi trono, una vez que llegue a la puerta la abrí de una patada llamando a atención de todos.

Detrás mio venia el capitán junto a quien me imagino que es la princesa, también sentí el poder mágico de otros tres pecados.

Los hombres me miraron levantando sus armas contra mi sorprendidos al verme libre o al verme viva.

──¡¿Como escapaste de tu celda?! ¡Mejor dicho! ¿Como es que sigues con vida? Debiste de haber muerto desnutrida y deshidratada hace tiempo.

Ignore a el hombre y camine directamente al trono, los hombres no tardaron en abalanzarse contra mi antes de que sus espadas llegaran a tocarme fueron detenidos por guardias creados por agua protegiendome.

Yo solo seguía caminando hasta llegar a el trono donde Eliot me miraba con coraje.

──¡Como te atreves a ponerte enfrente de mi sin hacer una reverencia insignificante plebeya! ─grito.

──Quitate. Estas en mi lugar. ─dije inexpresiva.

──¿Disculpa? ─se llevo su mano al pecho indignado en la forma de que le hable. ──¡¿Es que acaso tu no sabes quien soy yo?!

──... ─me quede callada mirándolo desinteresada.

──¡Suficiente! Me arte de ti. ¡Llevensenla de aquí! ─nadie vino a su llamado. ──¡¿No escucharon?! ¡Que se la lleven! ─miro detrás de mi a sus hombres en el suelo vencidos. ──¡¡Imposible!!

──¡Guardias! ─al solo llamarlos aparecieron a mis lados llevándose a el hombre tirando lo al frente de Meliodas quien estaba junto a los demás que acababan de llegar. Me senté en mi trono cruzandome de piernas mirando a Eliot temblando al mirar a los pecados.

──Odio pelear así que... ─recargue mi mejilla en mi puño mirando a el hombre. ──Capitán, usted se encarga del hombre que ordeno llevar a su acompañante al calabozo, ¿cierto?

──Sate sate sate, ¿así que fuiste tu? ─la sonrisa del rubio cambio al verlo.

──¡No te tengo miedo niño! ─se levanto desempuñando su espada. ──¡Lamentanran esto! ¡¡Llamarada del dolor!!

De su espada salió una gran cantidad de fuego dirigida así el capitán quien sonrió para tomar su espada la cual solo era el mango.

──¡Contraataque!

Creo que no es necesario decir lo que acaba de pasar con Eliot.

──¡¡Scarlett!! ─mire a Diane correr hacia a mi. ──¡¿Cuanto tiempo sin verte?! ─como el trono estaba alto ella acerco su cabeza a mi.

──Lo mismo digo Diane, te miras igual de linda que siempre. ─le acaricie la cabeza.

──¡Oye Scar! ─mire a Ban quien sonreía sosteniendo a un pequeño con su brazo. ──¿A que no sabes quien es el? ─moví mi cabeza a un lado sin idea. ──¡Es King!

──¡Al que le quitaba su comida porque estaba gordo y no debía de comer más! ─dije impresionada. ──No te creo. ─dije entrecerrando los ojos.

──¡Es verdad! Es el gordito de King.

──¡Déjame en paz zorro apestoso! ─se alejo de el. ──Y también es un gusto volver a verte Scarlett.

──Vaya, pero si todos siguen igual. ─mire a el puerco. ──Oye Ban. ─me miro. ──Te llevas lo que quieres del castillo si a cambio me cocinas a ese cerdito.

──¡Que grosera! ¡Elizabeth dile algo!

──Pero si es un puerco que habla. Debería de tener un mejor sabor.

──¡Puerco tu castillo! ¿Acaso no sabes quien soy yo?

──...─lo mire esperando a que lo diga.

──¡Me llamo Hawk y soy el capitán de las sobras! ─dio unos pasos al frente orgullosamente.

──¿Que? Eso jamás lo he escuchado. ─recapacite unos minutos. ──¿Entonces eres un cerdo importante?

──Así es.

──Vaya, que interesante. ─trone mis dedos y guardia apareció haciendo una reverencia.

──A sus ordenes lady Scarlett.

──Quiero que limpie este lugar, saben que hacer con los que invaden el castillo. Y hoy haremos un banquete en honor a el capitán de las sobras, Hawk.

──Sus deseos son ordenes. ─desapareció en un charco junto a los cuerpos de esos humanos.

──¿Escucharon eso? Harán un banquete en mi honor.

──Sate sate sate, eso si que no lo esperaba. ─mire a el capitán y mi rostro inexpresivo cambio a uno serio.

──Bien. ─prestaron todo su atención en mi. ──¿Para que invadieron mi reino? Los escucho. ─me cruce de piernas con mis manos en los costados del trono.

La chica que si no me equivoco su nombre era Elizabeth dio un paso al frente haciendo una reverencia.

──Es un placer conocerla reina Scarlett. Mi nombre es Elizabeth, la tercer princesa de Liones. ─me sonrió. ──Disculpe. Me otorgaría su apoyo para derrotar a los caballeros sacros.

──...no.

──¡¿No?! ─gritaron todos.

──No tengo nada más que hacer así que... si ire con ustedes. ─todos suspiraron aliviados. 

──Muchas gracias, Lady Scarlett. ─volvió a ser una reverencia.

──No hay nada que agradecer, mañana a primera hora podemos irnos.

──Claro, no hay problema alguno. ─hablo Meliodas.

──Quitate rojita, siempre he querido saber que se siente sentarse en un trono~. ─mire a Ban subir los escalones llegando al frente mío.

──Te sientes superior zorro. ─me levante sentandome encima de una de sus lados. El se sentó mirando a los demás su sonrisa no tardo en aparecer. ──Ahora eres el Rey... ─me sonrió arrogante. ──Del reino de los idiotas. ─me miro mal y antes de que hablará se escucho las risas de los demás.

──Mi lady. ─mire a el guardia de agua aparecer. ──El banquete ya esta servido en el comedor real.

──Enseguida vamos y una cosa más prepara cinco habitaciones para una noche.

──Entendido. ─se desvaneció.

──Bien, quien tenga hambre que me siga. ─baje los escalones con el zorro detrás mio.

──¡Mi banquete este servido! Andando puercos o sino me lo termino todo yo solo. ─dijo Hawk.

[🐬] .-días después-.

──Esa cuidad al borde de la montaña es Vaizel. ─dijo el capitán señalando a lo lejos. ──Es una ciudad mercante.

──¿Enserio es aquí? ─pregunto Hawk.

──Un hombre de la taberna dijo que ahí hay un arma tan grande que nadie es capas de empuñarla, ¿recuerdas Hawk? ─pregunto el capitán a el cerdito.

Solo lo mire comiendo de un pastel de chocolate que Ban me hizo, di un salto terminado sentandome en el cojín de King quien se hizo a un lado para que ambos podas estar.

──¿Que nadie puede empuñarla? ─pregunto Eli.

──Podía ser la de Diane. ─dijo King mirando a el capitán. ──Por cierto, y tu tesoro sagrado. ¿Donde esta, Lett?

──. . .─lo mire llevando otro bocado de pastel. ──Me lo robaron.

──Matenmen. ─dijo en su forma gorda.

──Olviden eso. ─vi a Ban llegar sin camisa, lo cual ha estado así desde que fueron a el castillo por mi. ──Ya me canse de estar desnudo.

──Cubrete con el delantal, ridículo. ─le dijo el capitán con cara chibi.

──¡Eso no es importante! ─Diane dio un fuerte golpe a la tierra haciendo que todos nos elevemos por suerte King se encargo de no dejarme caer mientras que yo seguía comiendo mi delicioso pastel. ──¡¿Porque debo quedarme a cuidar la taberna?! ─la mire, quería llorar.

──No te enojes. ─le dijo el capitán. ──Un gigante entro a un festival y le prohibieron la entrada a la aldea. Volveremos en cuanto veamos que hay, grandulona.

──¡No! ¡Me voy a aburrir! ─movió su cabeza a los lados.

──Señor, me quedare con ella. ─el rubio miro a Elizabeth. 

──¡Oh! ¿Es enserio? ─pregunto la castaña.

──Es que me gustaría tener una charla de chicas. ─los presentes me miraron.

──. . .ni crean que les daré pastel. ─seguí comiendo. ──Y no soy buena con eso de "charlas de chicas". ¿Que es eso? ¿Se come o que?

──Nunca cambias. ─susurro el capitán.

──Charlas de chicas. Con Scarlett nunca lo pude conseguir. ─la gigante se sonrojo.

──Bien. Vámonos ya.

Los chicos y yo comenzamos a caminar hasta llegar a la cuidad, aunque diga caminar más me refiero a flotar ya que sigo sentada en el cojín de Harlequín mientras que el flotaba por su cuenta mirando a los lados.

──¿Esperas encontrar algo aquí, capitán? ─pregunto Ban con su delantal puesto.

──Que delantal tan ridículo. ─le dijo King.

──Pero es Ban, y todo lo que Ban usa se le mira jodidamente sexy. ─dije mientras seguía con mi pastel. ──Además con delantal o sin delantal tu hermana lo ama como nunca.  

──Hablando de eso. ─Ban me miro serio. ──Scar luego hablamos a solas. ─en su mirada sabia que era un tema delicado.

──Claro, zorrito. ─al pasar por un lado puede ver a un chico de cabello verde, su rostro se me hacia familiar aunque no se de que lugar.

──Preguntemos algún vendedor. ─dijo el capitán hasta que escuchamos una voz.

──¿Buscan algo en singular? Oh han venido solo por el festival. ─miramos a un señor mayor quien estaba ebrio.

──No. Estamos buscando un arma, dicen que es gigante.

──Escuchamos que esta aquí. ─interrumpi a el capitán al ver que el anciano no se veía dispuesto hablar, el al verme se quedo embobado para después responder.

──Eso es fácil señorita. ─se veia un sonrojo no se si era por la cerveza o por quedarse viendo mis pechos. ──Esta allá. ─señalo una enorme roca donde recargada se encontraba un enorme martillo.

──¡Es Gideon, el martillo de Diane! ─el primero en hablar fue Harlerquín.

──¡Entonces si era cierto! ─comí otro pedazo de pastel, llevaba la mitad ya que comia lento para que no se termine pronto.  

──¡Sin más que agregar, que el festival del torneo de Vaizel! ¡¡Comience!! ─dijo un enano más enano que mi capitán con un trapo rojo tapandolo junto a un casco. No se tardo en escuchar los aplausos y gritos del publico. ──¡El uso de armas esta prohibido! ¡Quienes usen sus puños antes de hablar deben inscribirse!

──Ya escuchaste Kinkin, tu no te puedes inscribir. ─el solo me miro mal por como lo llame a lo que le di un poco de pastel. ──Di... ¡ah!

──No lo haré.

──Aquí viene el avioncito... ─moví el tenedor a los lados llegando a sus labios, el termino por abrir la boca.

──¡El ganador se llevara diez monedas de oro! ¡Y como premio especial un arma de gigante! ─dijo el enano de casto.

──Es un festival barbanico, ¿verdad capi...? ─miramos a el capitán y a Ban.

──¡Nos inscribiremos, ¿verdad que si capitán~?!

──Veamos quien es el mejor.

──Yo paso. ─dije comiendo. ──Pero estaré dándole porras.

El capitán tomo del gorro arrastrando a King mientras que el cojín lo seguía y yo arriba comiendo.  

──¡Oigan nos inscribiremos! ─grito el capitán.

──¡¿Pero yo porque?! ─se quejo King.

Un tipo grande musculoso tomo a Meliodas de su ropa subiendolo.

──¡No es un festival para niños! ¡Lárgate!

──Lo siento. ¿Pero no veo cual es el problema? ─le dijo el rubio.

──¡Oye tu idiota! ─le grite. ──Quieres bajarlo antes de que te golpee. ─lo apunte con mi tenedor.

El solo me miro de pies a cabeza y en un momento soltó a el capitán para acercarse a mi.

──Hola hermosa. ─me dio una sonrisa.

──Si fuera tu seria mejor que te fueras lejos de ella. ─le dijo King no muy amigable acercándose a un lado mío.

──¡Tu cállate enano y no te metas en esto!

──Oye, no arruines la diversión. ─un tipo que se me hacia conocido llego. ──Es un festival. ─este gruño.

──¡Metiche! ¡Recuerda que soy Taizoo tres veces ganador de este festival! ─se fue.

──No es como si preguntaramos. ─musite comiendo un poco.

──¿Se encuentra bien señorita? ─mire a el chico quien me miraba sonrojado.

──¿Por qué? No debería de encontrarme bien acaso. ─comí un pedazo de pastel.

──Creí que ese sujeto la estaba acosando.

──Descuida no es nada interesante. ─el sonrió un poco para después mirar a un lado.

──¡Mi trabajo no me había permitido entrar! ¡Mi sueño de pelear aquí por fin se hizo realidad! ─exclamo feliz yo solo lo mire mientras comía. ──¡Oigan, hay que pasarla bien! Nos vemos señorita. ─al decir eso se fue.

──¿De donde lo he visto antes? ─pregunto King.

──No lo se pero es lindo. ─sentí sus miradas clavadas en mi no muy felices. ──No más que ustedes. ─miraron a otro lado, a decir verdad ellos son protectores conmigo no me molesta pues son unos grandes amigos con los cuales cuento siempre. ──Será mejor que se apuren.

Dicho eso los tres fueron a el centro donde había muchos participantes, yo me quede sentada en el cojin de King disfrutando de mi delisioso pastel.

──¡La ronda del festival comenzara ahora! ¡Participantes, al cuadrilátero!

──Suerte chicos, yo le echaré porras mientras como.

──Ojalá me hubiera quedado con Diane. ─dijo King mientras subía a el cuadrilátero.  

──¡Bien ya estamos aquí, recuperemos el tesoro de Diane! ─escuche decir al capitán mientras que Ban sonreía y King tenia cara de "porque a mí".

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro