CHAPTER NINETEEN
❝feliz navidad a todos❞
cobra kai season 3 | act. two

QUE MEJOR MANERA DE pasar navidad que con tus amigos. Técnicamente aún faltaba una semana para navidad pero quien lleva la cuenta. Luca estaba asquerosamente aburrido, jugando en su teléfono mientras escuchaba a Demetri comer palomitas a su lado.
—Esta celebración de Navidad no haría reír ni a Papá Noel.

Demetri recibió una papa frita en la cara por parte de Ethan.

—Sí, chicos —dijo Chris antes de recibir una papa el también—. ¡Hey! Dijeron que sus padres iban a salir. Y que haríamos una fiesta,

—Encargué un barril de cerveza, llegará pronto —dijo Sam.

—¿¡Hiciste qué?! —susurró Ethan alarmado.

—Es mentira, tonto —dijo Cassie dándole un codazo.

Luca sonrió antes de apretar repetidas veces el botón de disparar y matar a otro jugador.

—¿Podemos poner un especial de Navidad? —preguntó Demetri—. Incluso vería ese espeluznante con el dentista elfo —todos pusieron muecas de asco—. Sí, estoy así de aburrido.

—¡Veamos mi pobre angelito! —dijo Luca levantando la mano entusiasmado.

El timbre sonó y Ethan salió corriendo hacia la puerta. Luca apagó el celular y sonrió sabiendo el drama que se venía.

—¡Claro que no! —dijo Chris enojado, viendo a los chicos de Colmillo de Aguila entrar—. Deben estar bromeando.

—¿Qué hacen aquí? —preguntó Mitch—. Esto no es una fiesta con cerveza. ¿Compré el gorro por nada?

—Esperen —dijo Demetri—. ¿Por qué nos tendieron una trampa?

—Chicos —Ethan estiró los brazos hacia los lados—, hay que calmarnos. Todos sabemos que entre los dojos no nos llevamos muy bien, pero Cobra Kai es el verdadero problema.

—Nos iría mejor si uniéramos fuerzas —siguió Miguel—. Dos dojos son más fuertes que uno. Todos hicimos estupideces.

—Sí, como romperle el brazo a Demetri —dijo Chris.

—Ustedes empezaron.

—¡Casi me despiden!

—Dios, odio tu estúpida cara —le dijo Bert a Nate.

—No iría a tu funeral —le respondió.

Luca soltó una carcajada, mirando todo desde el sillón pues todos se habían levantado. El no iba a meterse en peleas tontas.

—¡Hey! ¡Dejen de pelear! —todo el mundo volteo a ver a Ethan que se removió incómodo—. Sam habla tú.

—Es la última oportunidad de arreglar las cosas —dijo la melliza—. Solos, no somos nada. Pero si trabajamos juntos, tenemos una chance. Si no superamos el pasado, las peleas nunca terminarán. Debemos enfrentar a nuestros enemigos. Esta rivalidad tiene que terminar. De una forma u otra.

—¡Eso! —gritó Luca logrando que todos voltearan a mirarlo—. ¡Yuju...! ¿No? Bueno. No me miren así.

Luca estaba demasiado divertido, apoyado en el respaldo del sofá y comiendo papas fritas. Era muy divertido verlos pelearse y ver a Ethan molesto también era más divertido de lo que esperaba. Parecia un perro regañado.

—No sé que más decirles. Colmillo de Águila y Miyagi-Do —Ethan juntó sus manos—, trabajar juntos. ¿Así entienden o necesitan un dibujito?

—Aunque quisiéramos unirnos —dijo Chris—, no funcionaria. El estilo de Cobra Kai y el nuestro son...

—¿Como aceite y vinagre? —preguntó Nate.

—No es una ensalada —replicó Chris a lo que Cassie dejo caer su cabeza hacia atrás con estres—. Como los British Bulldogs y los Hart Foundation.

—Eran amigos, idiota —dijo Mitch.

—No es WrestleMania tres, Aliento de Gorila.

—Oye, solo ellos pueden llamarme Aliento de Gorila.

—¿Por qué dejas que te llamen así?

—¿Saben qué? Al diablo con esto —Mitch se levantó—. Vámonos.

Bert también se puso de pie pero Cassie se interpuso y los apunto con su dedo.
—Siéntense.

—¡Oigan, nenitas! —gritó Demetri, levantándose—. Esto quieren los imbéciles de Cobra Kai. Tú fuiste parte —apuntó a Mitch—, así que eres un imbécil. Y tú —apuntó a Chris—. Incluso ustedes —su dedo paso de Ethan a Luca—. Y yo también. Bueno, no fui parte, pero quise serlo. Pero ahora Cobra Kai es la peor colección de imbéciles del Valle, a cargo del rey de los imbéciles. Si unirnos a Colmillo de Águila... Su nombre es raro, evitará que sigan tirándonos mierda, seríamos imbéciles si no lo hacemos. Les pido disculpas por las groserías. Suele enorgullecerme mi grandilocuencia, pero es un momento emotivo.

Mitch y Bert se miraron antes de volver a sentarse. Ethan suspiro aliviado.

—Entonces —siguió Demetri—, ¿con qué comenzamos?

Ethan y Sam los llevaron hasta el comedor y todos se sentaron al rededor de la mesa mientras Ethan conseguía una libreta y un lápiz para Demetri. Luego de un rato de discusión tranquila leyó:
—Acordamos que un nuevo dojo combinado debería entrenar en Miyagi-Do. Pero diferimos sobre el nuevo nombre, el diseño del gi, qué comer y qué hacer cuando los senséis peleen. No es bueno, pero, aún así, es un comienzo.

Se escucharon maullidos de un gato y Luca frunció el ceño con confusión. Los LaRusso no tenían mascotas.

—Su gato quiere entrar —Bert se levantó y salió por la puerta trasera—. Ven, gatito.

—¡Bert no tenemos gat...!

Bert atravesó la ventana y cayó al suelo con un quejido, alertando a todos en la sala. Ethan corrió y lo ayudó a levantarse.

—Bert, ¿qué pasó? —preguntó Miguel.

—Quería volar por la ventana —murmuró Luca para si mismo con sarcasmo.

—No tienen gato —se quejó.

Halcón, Kyler y más chicos de Cobra Kai entraron por la puerta con sonrisas. Luca puso los ojos en blanco, todo iba tan bien.

—Tanto tiempo, Réa —saludó Kyler—, marica.

Ethan se tensó.

Cobra Kai avanzó, el resto retrocedió hasta que la puerta principal se abrió de golpe dejando ver a Tory junto a dos chicos más.

Luca volvió a rodar los ojos.

—Oí que tenían una fiesta —dijo la rubia—. No les molesta que viniéramos, ¿o sí?

—No tienes que hacer eso —negó Miguel.

—Demasiado tarde —dijo molesta—. ¡Esto termina hoy! ¡Sin piedad!

Y en menos de cinco segundos todos empezaron a pelear unos contra otros. Luca terminó peleando contra Halcón.

El de cresta le hizo señas para que se acercara.
—Dame lo mejor que tienes.

Luca bufó y le lanzó dos puñetazos que bloqueó y luego le dio una patada en el estómago a lo que Halcón se dobló con un quejido.

Iba a darle otro golpe pero Halcón corrió hacia el y lo tacleo logrando que los dos cayeran al suelo.
—Robby nos contó que están juntos de nuevo.

Luca le dio un codazo y se lo sacó de encima.
—Y a ti que te importa.

Halcón lanzó dos patadas, dandole una en la boca a lo que Luca sintió un sabor metálico luego de un par de segundos. Paso su mano por los labios viendo el líquido carmesí de su sangre y subió la mirada hacia Halcón.
—Hijo de puta.

Kyler tomó el brazo de Miguel y le dio una vuelta en el aire logrando que el latino cayera de espaldas contra el suelo. El asiático abrazó a Halcón celebrando y el de cresta empezó a mirar las distintas peleas que se estaban realizando en distintos lugares de la casa y luego volvió su mirada a Luca.

Dos chicos de Cobra Kai le doblaron el brazo de Demetri y llamaron a Halcón.
—¡Golpe gratis!

Halcón observó a Luca y le hizo una seña con la cabeza hacia los dos chicos. Luca al principio pensó que quería golpear a Demetri pero luego se dio cuenta.

El neoyorquino asintió y los dos corrieron hacia ellos.

Demetri observó aterrado a los dos chicos, pensando que Luca los había traicionado de alguna manera antes de cerrar los ojos con fuerza. Luca golpeó en la cara al chico que tenía el brazo de Demetri y Halcón le dio una patada al otro.

El chico Alexopoulos los observó con confusión y cuando Halcón trató de acercarse, el retrocedió.
—Amigo, lo siento. Por todo. ¿Quieres ayudarme a ganar esto?

Demetri se tomó unos segundos para pensar y sonrió.
—Sí.

—¿New York? —le preguntó Halcón—. ¿Te unes?

Luca asintió sonriendo y los tres se pusieron espalda contra espalda peleando contra los chicos que venían a atacarlos. Entre los tres le ganaron a la mayoría, que termino escapando o simplemente inconscientes en el suelo. 

El neoyorquino hizo una mueca al ver todo lo que había quedado destruido en la casa LaRusso. Daniel no iba a estar nada feliz.

Los chicos de Cobra Kai se habían largado y la mayoría de Miyagi y Colmillo de Águila también. Halcón, Demetri, Luca y Miguel se miraron con confusión antes de que el latino preguntara:
—¿Donde están Ethan y Tory?

Luca salió corriendo siendo seguido por los tres chicos hasta llegar al dojo que tenían los LaRusso en la casa. Ethan apuntaba a Tory con un enorme palo mientras la rubia estaba en posición de pelea.

—¡Ya basta! —gritó Miguel.

—Tory, la pelea terminó —dijo Halcón.

—No se terminó —la rubia observó a Ethan con nada más que odio—. Esto nunca terminará. ¿Me oyes?

—Lo que tu digas —dijo el chico rodando los ojos.

—Mi amiga la menos rencorosa —murmuró Luca.

Ethan soltó el palo y se abrazo las costillas con una mueca. Tory camino hacia el y lo observó al igual que a Halcón y a Miguel.
—Traidores —se giro hacia el de cresta—. Cuídate la espalda.

—No necesita hacerlo —dijo Demetri—. Tiene amigos que lo cuidan.

Tory se fue casi que sacando humo por las orejas y Ethan se acercó a Miguel, que sangraba por la nariz.
—Miguel tu cara.

—Estoy bien —negó.

—Volvemos en un segundo —dijo Ethan y tomó la mano del latino antes de desaparecer.

Luca se limpió la sangre de los labios y se quejó. Halcón lo miro con una mueca de culpabilidad.
—Lo siento mucho.

—No importa —Luca sonrió un poco—. No me duele. 

Halcón alzó una ceja y Luca puso una mueca antes de agregar un:

—Tanto.

El plan había funcionado.

Colmillo de Águila y Miyagi-Do Karate se juntaron para vencer a un enemigo en común.

Johnny Lawrence y Daniel LaRusso iban a trabajar juntos para vencer a John Kreese.

—¿Listos? —preguntó Daniel.

—¡Comencemos!