⁷ Take Care
Yoongi estaba cansado, muchas emociones en una tarde le dejan abrumado y sin ganas de nada; pero su instinto es más fuerte de lo que parece. Taehyung tiene a su Omega muy presente después de colapsar en el parqué, lo trajo a su casa sin avisar y ahora está dándole un baño.
Apenas y asimilando lo que sucede, pero sin ser realmente sorpresivo de él. Usa el shampoo con olor a gardenias de su hermano mayor, frotando cuidadosamente su cabello, no sabe de dónde salió la confianza pero solo le queda disfrutar de cuidarlo. Luego de dejar bien enjabonado su cabello empieza a limpiar su torso, con especial cuidado en su cuello y espalda.
Unos veinte minutos más tarde ya ha terminado con el delicado proceso, sin mucho más que monosílabos satisfechos por parte del Omega. Está limpio, con un dulce olor a gardenias y siendo cuidado por el alfa que lo escucho y relaja con su olor, simplemente un paraíso. La habitación de Yoongi le parece perfecta por el orden también, no parece que alguien paso haciendo una guerra o algo así.
— Oye, alfa, ¿Qué haces? — El Omega le mira con un puchero al verlo saliendo de la habitación.
— Iré a cambiarme y tomar una ducha.. Estoy algo cansado — El Omega solo asiente, volviendo a lo suyo.
Claro que sí, está agotado mentalmente, su cuerpo no está acostumbrado a una carga tan pesada como lo fue la energía emocional gastada en la tarde. Sale sin más y va a la habitación de su madre, suspira al verla allí sentada leyendo un libro como siempre y se acerca con cuidado. No sé dicen nada, solo es un cachorro herido gateando a los brazos de su madre.
Una vez recostado en el pecho de su madre solloza con suavidad, después de todo solo es un adolescente; sin importar que tan rudo sea necesita apoyo de alguien. Su madre dulcemente acaricia su cabello, masajes dulces y caricias con todo el amor que se le puede transmitir.
— Mi dulce cachorro, ¿Qué tan mal lo has pasado, hm? — Acomoda su cabello, mirando a sus ojos irritados.
— Ma, seguro ya te enteraste.. koo murió.
Tiembla con fuerza nuevamente, comenzando a hipar después del suspiro de su madre. Después de todo, el dolor aún es demasiado reciente como para ignorarlo o dejarlo guardado, y el estar en brazos de su madre le hace sentirse libre de soltar aquel dolor. Minutos pasan cuando finalmente se calma, sintiendo como su madre también ha pensando en que decirle.
— Sabes, hace muchísimo que no te oía hablar de el. Me entristece que sea en esta circunstancia, contigo y aquel chico que trajiste que se veía mal. ¿Quién lo diría que le tenían deparado aquel destino? Nuestro Jungkookie era simplemente un niño muy alegre, no me imagino cuánto lo debes extrañar.
Asiente con dificultad — Solo tenía 16 años, ¿Qué hizo mamá? Era demasiado inocente y yo.. el.. — No puede continuar, está tan sensible que las palabras se le agotan antes de salir.
— Shh.. no digas más cariño, solo déjalo salir. Jinnie me había contado lo que paso hace una hora cuando le llamé por qué no llegaban, así que ya se que aún falta sacar mucho de tu corazón. Mi pequeño cachorro, entiendo ese dolor de perder a una parte de lo que consideras manada..
« Mamá sufrió con tu padre también, y cuando su mejor amiga murió. Pero es distinto, aún así, has traído a ese indefenso Omega que resulta que quieres proteger. Lo mejor es que vayas a bañarte, relaja un poco ese cuerpo mientras yo me encargo de darle algo de comer al chico, ¿Que te parece? Tu también necesitas un buen cuidado, mamá está aquí para eso, para tí.
Solloza nuevamente porque se siente acogido, es justamente como su madre lo plantea. Es separado con cuidado y acomodado en una mejor posición, mientras delicadamente su madre limpia sus lágrimas con sus pulgares.
— Iré... A bañarme — Suspira mientras aún tiembla, pensado en todo y en nada. — Deje a Taehyung en mi habitación, cuida de el mientras.. por favor.
Recibe esa sonrisa dulce de su madre y simplemente le da un beso en la frente antes de bajar de la cama y salir de la habitación. Toma valor y se baja de la cama para ir arrastrando sus pies en dirección del baño de su madre, pone a correr el agua caliente mientras se desviste y una vez listo cierra la llave y se mete con cuidado. El agua caliente es casi un respiro para sus músculos, automáticamente sirve como relajante.
Está apunto de tomar el jabón para empezar a limpiarse pero a cambio recibe de golpe el olor de su hermano. Abre los ojos con confusión.
— Hola Yoon, te ves realmente mal — Sonríe de medio lado.
Ríe un poco confundido — ¿A qué se debe la opinión obvia de esta noche?
Entonces la cara de su hermano pasa de la burlona a una más empática, o por su puesto que conoce ese rostro. Su hermano ya lo sabe, evidentemente. ¿Cuándo en su sano juicio vendría un sábado a quedarse en casa justo después de haberse ido en la tarde de fiesta?
— No me hagas esos ojos, Gigi — Le acaricia el cabello. — Que no te avergüence lo que sucede, no siempre serás mi hermano fuerte, deja que alguna vez sea yo también el que te cuide, idiota.
Ríe bajo, por qué lo sabe. Su hermano a su manera está cuidándolo, aún que trate de ocultarlo.
— Menudo complejo de padre te compraste, estoy mejor igualmente; llegas medio día tarde.
Su risa socarrona le anima, aún que se pone sentimental cuando siente esa caricia suave nuevamente, la misma actitud de su madre hace unos minutos.
— El chico de abajo tiene el mismo rostro que tú después de que mamá te hace cariños, eres bueno cuidando los demás. Ahora sólo cierra el hocico ese que tienes y deja que nosotros cuidemos un poco de ti antes de que te vayas por ahí atrás del Omega — Lo último le hace reír, suspirando en nostalgia.
El silencio se instaura y su hermano le ayuda a limpiar su cabello, dejándolo bien lavado para después salir de la habitación esperando que el terminará lo demás. Suspira por qué se ha puesto sentimental, y ha recordado que en un pasado, les costó mucho llegar a lo que hoy día eran.
Aprovecharía el recuerdo para llamar a su padre, de vez en cuando, le apetecía saber de él.
🦋🦋🦋
La mañana de domingo apareció con una humedad que avecina calor, recordando así que la primavera comenzaría en algunos días. Taehyung estaba ahora en sus cinco sentidos, no variando entre su omega y el mismo, suspiro al dirigirse al baño y notar que tenía un pijama extremadamente pegado al cuerpo, lo cual había causado problemas. Con quejas se quitó la camisa manga larga y miro sus muñecas, sangre seca y heridas maltratadas.
Revisa con cuidado viendo una cajita con un obvio logo de cruz verde, se agacha para tomarla y sacar lo necesario para poder curarse las heridas. Con cuidado de no hacer mucho ruido saco algodones, unas curitas, unas tijeras y desinfectante para poder limpiar la herida. Tardo unos minutos dejando ver con suavidad la tinta negra en trazos poco visibles, la forma de una pequeña mariposa. Suspiro con tristeza, incluso ahora que habia soltado todo el dolor seguía presente, saliendo por la sangre de sus heridas; como si no fuera una película donde contar todo mágicamente resolvería los problemas.
— ¿Taehyung-ssi, estas en el baño? — La suave voz de la madre de yoongi le asusta, provocando que presione muy fuerte la herida.
— ¡Ah! — Chilla con dolor, automáticamente retractándose cuando la puerta es abierta de inmediato.
Se quedan mirando sin mucho que decir, y lejos de lo que se puede esperar el rostro de la madre de Yoongi solo se torna en una sonrisa amable y cierra la puerta detrás de ella.
— Estas curándolas mal, déjame hacerlo por ti — Toma sus manos con cuidado y empieza a limpiarlo, dejando un mejor resultado que lo que el habia hecho.
— Gracias..
— No digas palabras innecesarias, no tienes nada que agradecerme, solo hago lo que debo — Y aun que suena tosco, esa mirada tranquila y cariñosa, le hace sentirse tan cálido como nunca. — Tienes 17 años, no te preocupes por las cosas demasiado, estarás bien si pides ayuda.
La mira con confusión — Hyorin-ssi, ¿Cómo usted..
— Yoongi no siempre fue un cachorro fuerte, una madre aprende después de eso — Sonrió sin más y salió del baño.
Aún confundido sobre la situación, tomo la camisa y se la colocó, saliendo al rato después de lavarse la cara y tirar lo que usó. Yoongi estaba recién despierto para cuando terminó de cambiarse, lo cual le causó un poco de vergüenza al estar usando su ropa.
— ¿Ya te vas? — Frunce el seño con suavidad, — espera a desayunar, yo te llevaré.
Niega con suavidad, le da vergüenza quedarse más cuando apenas y ha hecho algo para retribuir la ayuda que le han brindado.
— Insisto, no estas en condiciones para irte solo.. espera un poco en lo que me preparo — Se paro rápidamente y se dirigió al baño, dejándole incapaz de negarse.
Sin mas que hacer, bajo al primer piso aun con vergüenza. Seguramente ya habían avisado a sus padres, pero aun así, se sentía desprotegido fuera de su nido, sin YoonGi estable del todo, su olor no lo relajaba. Tratando de huir se cruzo con Hyorin una vez mas, quien sin decirle nada simplemente sonrio y le dio un beso en la frente de buenos días, tomándolo de los dedos, evitando así tensionar sus heridas.
— Ven a desayunar, YoungSoo ya esta en el comedor y estoy seguro que Yoon no demora en bajar.
— Pero, yo realmente debo irme y-
— No te apures Taehyung-ssi — Ríe dulce, acariciando sus dedos. — No te preocupes por nada y ven a comer con nosotros, ya hable con tus padres, no tienes que correr sin necesidad, te sostenemos.
Se quedo sin habla de inmediato, ¿Cómo podía desarmar su caparazón sin necesidad de forzarlo?, podía ver de donde YoonGi habia sacado personalidad. Después de devolverse todo el camino hasta el comedor, tímidamente saludo al hermano de YoonGi, quien tenia un aspecto rudo pero parecía ser simple fachada.
— Veo que aceptaste quedarte a desayunar — La voz de YoonGi lo sorprendió, pero sonrio avergonzado como respuesta,— espero que puedas disfrutar la comida tranquilo.
— Si.. gracias YoonGi..
— No te preocupes — Simplemente sonríe y nada.
Simplemente comieron sin prisas, aun si todo lo que sus lobos sentían los descolocaba un poco, terminaron la comida rápidamente antes de seguir cada uno por su lado, con YoonGi y Taehyung saliendo juntos en silencio. No habia mucho que decir en realidad, simplemente ambos caminando de regreso a casa de Tae con miles de sentimientos retenidos en sus corazones.
— Yo.. lamento que hasta ahora nos conociéramos, Taehyung. Incluso si las cosas se dieron así, de ahora en adelante, cuidare de ti.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro