Capítulo 28
Yoongi esperaba una respuesta, le causaba tristeza en que su amigo intentaba evitar sus preguntas, le causaba intriga en lo que le está sucediendo, tal vez ha sido el primero en notar que Hoseok haya cambiado y dejado ser el mismo, extraña el Hoseok escandaloso que ve todos los días.
Mientras tanto, Hoseok quería alejarse de él lo antes posible, esconderse porque Yoongi es capaz de seguirlo por todo el instituto. Cerró el casillero de golpe, apretó las cuerdas de su mochila y giró sobre talones para empezar a caminar, intentaba tranquilizarse, en no llorar por haber hecho eso a su amigo.
¿Creen que Yoongi va dejar eso así?
El pelimorado no comprendía porqué ese acto, empezó hablar alto para que este le escuchara, de alguna otra forma tiene que saber lo que le sucede.
—¿Hoseok por qué me estás evitando? — Habló. — ¿A caso dije algo malo? Si es así, lo siento no quería molestarte.
—No dijiste nada malo, Yoongi. — Alzó igualmente la voz.
—¿Por qué? ¡Dime Hoseok! — El mencionado sentía su respiración pesada. — ¡Dime, para ayudarte en algo! ¡Me duele verte así, nos preocupas demasiado, quiero volver a ver tu alegría!
—¡Yoongi, ya basta!
—¡Hoseok, no me detendré! — Siguió hablando, mientras empezaba a caminar detrás de él. — ¿¡Por qué actúas así!? ¡Dime!
—¡Me gusta Jungkook, por eso no quiero contarles lo que me sucede, me gusta Jungkook! — Gritó, dejando a Yoongi sorprendido, sin palabras en aquel entonces, los ojos de Hoseok se aguaron hasta el punto de empezar a llorar, tenía miedo de que el pelimorado lo odiara.
Ha sido algo inesperado para él, no sabía qué decir en un momento como este, ahora entendía porqué. Vio a su amigo llorar, sintió su pecho doler en aquel entonces, se acercó con cautela con la intención de querer abrazarlo.
—Hoseok. — Murmuró, el pelinegro negó con la cabeza.
—S-Soy un mal amigo para u-ustedes. — Soltó adolorido, evitando que el blanquecino vea su rostro. — T-Taehyung me va odiar porque me gusta el chico que ama.
—No te odio. — Contestó, abrazándolo cuando vio la oportunidad de hacerlo.
–P-Pero ¿Qué dirías si yo dijera que me gusta Jimin? Me siento el peor amigo. — Correspondió el abrazo del pelimorado, recargando su cabeza sobre su hombro.
—No eres un mal amigo. — Intentó tranquilizarlo. — Sé que no ha sido tu intención en enamorarte, y contestando con tu pregunta, no eres rival de nadie, no pediría nuestra amistad por alguien. — Hoseok lloriqueó más. — Puede que Taehyung piense lo mismo, nosotros tres llevamos ocho años de amistad ¿Por qué tendré que odiarte?
—T-Tal vez Taehyung sea pacífico, pero si se entera de esto estaré muerto. — Dijo separándose de él, Yoongi negó.
—Tienen que hablarlo, guardaré este secreto porque no quiero que Jungkook crea que tú eres el chico de las cartas, sería un caos.
—¿Por qué tiene que pasar esto a mi? ¿Por qué yo me enamoré de la persona equivocada? Adoro a Jungkook como amigo, no quiero ser su novio aunque duela decirlo.
—Dime ¿Desde cuándo empezaste a sentir por Jungkook?
—La vez que te dejé plantado con Jimin en el restaurante japonés. — Yoongi hizo una mueca.
—Mira, prometo no decirle nada a nadie de esto, pero no puedo solucionarte el problema ya que la única solución es hablar con Taehyung. — Niega el pelinegro. — Hoseok. — Lo tomó por los hombros. — Puede pasar que te enamores de la persona que jamás deseaste, pero recuerda que siempre va haber un momento que la indicada llegue, no ahora, ni mañana o la próxima semana, solo tu destino te guiará a esa persona que pueda amarte como quieres amar. Haz que este enamoramiento hacia Jungkook sea pasajero.
No dijo nada, solo se limitó en ahogarse con su tristeza, Yoongi igualmente quería llorar junto con su amigo, está pasando por un momento terrible, comprendió que se alejó de todos por miedo de lo que ellos podrían decir de él, lo que pensará Jungkook después, si sería totalmente un caos.
Taehyung caminó directo al casillero del chico que le gusta, con la seguridad que este no aparezca y en que Yugyeom haya logrado en distraerlo, es extraño que Yoongi no le acompañara, además no sabe nada de él y de Hoseok, Taehyung tiene la idea de hablar con el pelinegro, con la esperanza de que no le ignorara. Sacó las llaves y lo abrió, dejó la carta en un área que sea visible para Jungkook, no le importa si le contesta o no, entiende que el castaño anda enfocado con la búsqueda de su progenitora, al cerrar el casillero por sorpresa se había encontrado a Lisa, ella hizo un ademán de saludo, Taehyung se sintió tranquilo en no ser descubierto.
—Es increíble que tengas demasiada imaginación para escribirle todos los días. — Habló la rubia.
—Mi padre ha conquistado de esta forma a mi madre. — Respondió. — Siempre me cuentan de como ha sido su romance en la universidad.
—Todo como un cuento de hadas. — El peliazul asintió. — Es muy lindo de tu parte en conquistar un corazón a la antigua.
—Sé que ahora en la actualidad cualquiera diría que eso es basura. — Ambos empezaron a caminar. — Y ¿Qué querías contarme?
—Oh cierto, tengo un plan para su primera cita. — Taehyung no dijo nada, eso ha sido una señal en que Lisa empezará a contar. — Llevemos a Jungkook a la playa Haeundae, hagamos un picnic ahí.
—¿No crees que es temprano para ir a un sitio así?
—Para nada, créeme. Le diré a los chicos que no te interrumpan, para que Jungkook crea que es una salida de amigos. — Sonríe. — El punto es que esta cita sea discreta. Confía en mi, Taehyung, sé qué hacer. — Le guiña un ojo. — Un lindo paseo a la atardecer no suena mala idea.
—Eres una genio. — Soltó emocionado. — Faltan dos semanas para que sean vacaciones, podemos ir después del último día de clases.
—Me suena genial, hablaré con mamá para que nos lleve. Le diré a Jisoo qué comida vamos a llevar para compartir entre nosotros, todo muy casual.
—En verdad, no sé como agradecerte por tu ayuda. — Ambos se detuvieron. — Creí que se lo iban a tomar mal cuando confesé, sé que estuvo mal en ocultarles.
—Cualquiera es capaz de cometer una locura por la persona que ama, es entendible tú caso, nosotros nos comprometimos en proteger a Jungkook. — Volteó a verlo. — No olvides que somos tus amigos también, puedes contarnos con confianza, yo te ayudaré en que logres en enamorarlo.
—Gracias, Lisa.
—No hay de qué, y no te preocupes en dar algo como agradecimiento, este es un lindo favor que hago como amigos.
Taehyung sonrió con labios cerrados, ilusionado en que ese día llegara, por lo tanto, tiene tantos planes para después, le gustaría invitarlo al cine o ir al arcade de la aquella vez, queriéndolo tratar como en sus sueños, estando en un mundo solo ellos dos.
Jungkook se adentró a su hogar, dejó sus zapatos a un lado después de quitárselos, luego empezó a caminar directo a la cocina, encontrando a Seokjin terminando de preparar la comida, el rubio le sonrió cuando se dio cuenta de su presencia, el castaño dejó su mochila en una de las sillas mientras se sentaba en la barda de la cocina, olía delicioso, moría de hambre.
—Ya pronto estará la comida. — Anunció. — Namjoon vendrá hasta la cena, tendrá que cubrir unas horas, así que más al rato lo vemos.
—De acuerdo. — Vio que el rubio devolvió la mirada en el sartén para mover la carne con verdura.
Mientras esperaba, sacó su celular pero al momento, una carta había caído, de inmediato lo recogió y recordó que aún no lo ha leído, no le importó en que el mayor de diera cuenta al momento de abrirlo, sacó el papel para desdoblarlo, para empezar a leer esas lindas palabras de nuevo.
"Me robaste sonrisas, me robaste mi corazón. Me gustaría salir contigo un lugar lindo donde las luciérnagas decoran la noche, para ver la galaxia que se asoma por tus ojos, donde los dos podemos pasar un lindo momento mientras compartimos algunas historias, mientras mi corazón se derrite ante tú presencia, porque tu sonrisa es la luz de cada amanecer. Amarte es mi sentir, lo que mi corazón necesita para latir. Sentir tu tacto cálido al tomar mi mano, sentir la chispa cuando nuestros labios se junten, te recuerdo que te deseo con amor, porque favor sigue sosteniendo mi amor, por favor no sueltes mis manos, quiero que ese brillo que hay en ti jamás se apague.
-Anónimo."
Soltó un profundo suspiro, su corazón palpitaba demasiado y las mariposas de su estómago empezaron a volar. Seokjin al notar lo cuán concentrado se encontraba el castaño, cuando terminó finalmente de preparar la comida, apagó la estufa para después acercarse, logró leer lo que decía ese pedazo de papel y recordó la aquella vez que habló con Namjoon, su pequeño primo está enamorado.
—¿Taehyung te lo dio? — Jungkook sobresaltó al oír eso, para después negar con la cabeza.
—No... o no lo sé. — Dejó la carta dentro del sobre. — Me gustan dos personas, este desconocido y Tae. — Confesó, Seokjin asintió al entender.
—Así que no sabes a quién escoger. — Asintió el menor. — ¿Sabes? es muy complicado amar a dos personas, una de ellas es la correcta para ti.
—Hyung me he dado cuenta que tengo más sentimientos hacia Taehyung que el chico de las cartas, no me gusta arruinar nuestra amistad.
—¿Y haz pensado si le gustas igualmente a Taehyung? Digo, es difícil notarlo, pero con el tiempo lo vas a saberlo.
—¿Tal como entre Namjoon hyung y tú? — Seokjin alzó una ceja.
—Mira Jungkook, es difícil buscar una señal que le gustes a alguien, cuando Namjoon y yo éramos amigos, simplemente hacía las cosas de una forma discreta, pero el miedo es lo que nos hace inseguros, que desconfiemos nosotros mismos ante nuestros actos si dejamos que el corazón haga lo que quiera. — Se sentó a su lado. — No todo va resultar bien, pero no es el fin del mundo, siempre habrá más oportunidades de estar con la persona correcta.
Jungkook quedó pensativo, ¿Y si le gusta a Taehyung y ni lo ha notado? Es totalmente extraño que alguien se te acercara así de la nada, aunque él mismo le ha salvado antes de ser atropellado en la calle ¿Qué clase de persona no iría a ver si está bien? Es difícil recordar aquellos momentos, no puede haber una señal, no le gusta hacerse ilusiones por obvias razones, el amor es muy extraño.
Quedó un silencio entre los dos, Seokjin había servido la comida y ahora ambos se encontraban en el comedor, Jungkook supo que era hora de hablar, a pesar que ya no hay nada que pueda impedirlo, nervioso elevó la mirada hacia al rubio quien se encontraba mirando su celular, mordió su labio inferior y se preparaba por lo que viene.
—Hyung. — El mayor hizo un sonido, debido que no puede hablar con la boca llena. — ¿Qué le pasó a mamá?
Seokjin desvió la mirada en él, poniéndolo aún más nervioso, después de masticar y tragar el bocado, dejó su celular en la mesa.
—Creo que es momento de hablarlo. — Afirmó tranquilo, Jungkook se encontraba ansioso, creyó que lo iba negar.
No dijo nada, esperaba en que Seokjin empezara a contar lo que sucedió con su progenitora, tiene demasiadas preguntas por ahora, pero es mejor dejarle hablar.
—Después de que tu madre se ha separado de tu padre, ella viajó a Ulsan semanas después, ya que no tenía a donde ir. — Jungkook entre abrió la boca. — Mi madre con gusto le permitió quedarse con nosotros, aunque su plan ha sido volver aquí por ti.
—¿P-Por qué...
—Ella ha luchado por tu custodia. — Interrumpió, como si hubiese leído la mente de Jungkook. — Pero ella ha perdido, la consideraron como un peligro para ti y por ley no tenía que acercarse, así que le prometí en obtener tu custodia en mis manos, ella moría por querer volver a verte, lloraba en las noches porque todo lo que hacía era inútil, creyó que haga lo que haga, tu padre se saldrá con la suya.
—Hyung, quiero volver a verla. ¿Sigue con la tía Yongsun o alguna parte de aquí? — Seokjin negó.
—Realmente se encuentra en Seúl. — Jungkook abrió más los ojos sorprendido, ¿Tan lejos está?
—¿E-Ella sabe que estoy contigo?
—Dejó de mantener contacto conmigo desde hace dos años. — Jungkook hizo un puchero. — Lo lamento, sé que.
—No, no te preocupes. — Soportó las ganas de llorar. — Sé que en algún día podré verla.
Seokjin sintió un dolor en su pecho, Jungkook estaba ilusionado en ver a su madre, pero notó que es imposible.
—Buscaremos una solución. Solo, por el empleo no nos permite faltar unos cuantos días. — Soltó un suspiro. — Tal vez en unos meses.
O que tal en estas vacaciones de verano.
Jungkook tuvo una idea.
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