Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 14

Jisoo seguía a Yugyeom para llegar al casillero de Jungkook, donde habían quedado verse, estaban algo ansiosos en saber que es lo que ha escrito para ese chico misterioso, ya que se enteraron de la carta del día anterior, gracias a Lisa quien contó lo sucedido de inmediato. Aunque fue extraño, Lisa contó las cosas como si algo inesperable va suceder.

—¿Crees que es algo bueno lo que esté pensando Lisa al respecto? — Cuestiona Jisoo. — ¿Al menos Jungkook te dijo que escribió en esa carta?

Niega Yugyeom. — Jamás lo ha hecho. Jimin también tiene la misma duda, sabes que Lisa es capaz de ser cupido si logra que sus sospechas son ciertas.

La pelinegra ríe. Justo al llegar al casillero, encontraron a su amigo ahí, leyendo otra carta. Ambos con cautela se apresuraron para ver, se colocaron por detrás de Jungkook y se asomaron.

Me encantaría llegar al día en que podamos vernos sin tener miedo a salir lastimados. Voy enserio y estoy tratando de mostrarte con mis escritos, pero quiero hacer más: déjame hacerte feliz, quiero tomar tu mano y besarla, decirte cosas lindas, consentirte...
Me siento muy contento desde que sé que te están gustando las cartas, es la segunda vez que me contestas y no sabes que mi mayor deseo es cuidar de tu corazón. Mi mayor problema es que sueño contigo y me despierto sin ti, permíteme por favor conquistarte más con éstas palabras.

-Anónimo.

Jisoo se alejó pero sin querer se pegó con la puerta del casillero, logrando espantarlo, Jungkook guardó la carta de rápido, la pelinegra tocaba la parte donde ha recibido el golpe mientras hacía una mueca.

—¿Ustedes cuánto llevaban ahí parados? — De nuevo, Jungkook sentía sus mejillas arder.

—No mucho. — Respondió Yugyeom. — Estabas tan concentrado que leímos lo que decía esa carta.

—¿Qué tanto le escribes para que te responda así? — Jisoo hacía una mueca de dolor, había sido tan fuerte el golpe. Jungkook sintió nervios, negó lentamente con la cabeza dándoles saber que no es nada importante. — Pero ni siquiera pienses que vamos a olvidar lo que leímos.

—No te preocupes. — Yugyeom palmea el hombro del castaño. — Nosotros no nos vamos a burlar de las decisiones que tomes, te apoyamos. — Jungkook soltó una pequeña sonrisa.

—Muchas gracias, pero ¿saben algo? — Ambos miraron atentos a su amigo.

Jungkook no estaba seguro, aún no llegaba la conclusión, sus sentimientos y pensamientos lo ponían mal, llevaba pocos días que se siente así, aún quiere pensar bien todo antes de actuar. Darle fin a todo y continuar con su vida, o seguir contestándole las cartas al desconocido hasta llegar a un límite.

Teme ser dañado, no quiere ilusionarse con alguien, él no soportaría si saliera lastimado. ¿Cómo puede creerle al chico de las cartas que va en serio? Se siente muy inseguro, tanto como en su físico y su estado emocional. Sintió las ganas de llorar, no quiere preocupar a Yugyeom y Jisoo, no puede en que lo vean llorar por el pasillo, sería repugnante para quienes lo vieran.

No está listo para esta clase de cosas, no quiere que su corazón y él mismo salgan heridos, no lo soportaría más. Por más que intenta recuperar la felicidad, en un descuido podrá derrumbarse.

Hizo lo posible en que esos pensamientos no lo apoderaran, agitó su cabeza y elevó la cabeza, viendo aquel par esperando aún la respuesta. Su labio inferior tembló un poco, quiere justo ahora en que alguien lo abrazara y desahogarse.

—Tengo miedo. — El semblante de la pelinegra cambió a una confundida. — Tengo miedo en salir lastimado.

Jisoo se limitó en tomarle de las manos, sabía que él puede derrumbarse en el llanto.

—Si algo pasa, estamos contigo, Kookie.— Sonrió con dulzura para demostrarle confianza. — Debes arriesgarte, si todo no es un juego como crees, tu mismo puedes empezar un lindo comienzo. — Limpió una lágrima que había salido, Jungkook soltó una pequeña sonrisa agradeciendo a su amiga en que le dijera eso, se siente un poco bien.












































Hoseok corría por el pasillo, él había hecho lo posible en llegar temprano, aunque tuvo una gran dificultad en levantarse de la cama al haber oído la alarma, se dirigía directo al casillero de su amigo, estaba ansioso en lo que tiene pensado, había planeado un perfecto plan por la noche.

Había visto la silueta de su amigo a distancia, apresuró los pasos mientras gritó su nombre.

Taehyung dio un sobresalto al sentir un cuerpo chocar con el suyo, con suerte pudo evitar caerse, soltó un pequeño bufido al sentir lo cuán pesado es el pelinegro.

—Hoseok, ¿Qué ocurre? — El mencionado se alejó, sin borrar la sonrisa. — Es extraño que vengas temprano.

—¿A caso no me vas a felicitar por ello? — Soltó un cansado suspiro, limpió el poco sudor que corría por su frente con el dorso de su mano. — Hice lo posible en luchar contra el sueño, pero sabes que mi cama es bastante cómoda. — Taehyung asintió.

Taehyung no le prestaba tanta atención a su amigo, estaba concentrado en leer la carta que su amado le ha contestado, Hoseok notó esa sonrisa, una sonrisa tonta, sabía que el peliazul está en su propio mundo. Soltó un suspiro y se recargó en el casillero, esperando en que terminara de leer.

No tenía curiosidad, respeta la privacidad de su amigo, pero no será necesario saberlo ya que no quiere ver esas palabras que puedan provocarle una diabetes.

Estaba impaciente, así que volteó a otro lado para ver si Yoongi estaba por llegar, aunque no ha aparecido.

—A Jungkook le encanta bailar. — Taehyung elevó la mirada. Hoseok continuó. — Pero había dejado de hacerlo.

Taehyung estaba confundido, dejó de prestar atención en la carta y la guardó en el bolsillo de su chaqueta.

—¿Estás bromeando? — El contrario negó.

—¿Por qué lo haría?

—¿Entonces como sabes eso?

—Soy tu hada madrina, Taehyung. Confía en mi, estoy ayudándote. — Hoseok se acercó para abrazarle los hombros. — Con esto, tal vez puedas llevarlo a una fiesta o no sé, el punto es que esa fase esté en pie.

Hoseok estaba orgulloso de sí mismo, su plan es acercarse a Jungkook para conocerlo y aprovechar en ayudarle a su mejor amigo en darle buenas ideas, el otro paso los espera, es ahora o nunca. En verdad que es un genio.

Taehyung no estaba seguro de nada, le encantaría descubrir las cosas por él mismo, pero hay ocasiones que necesita ayuda en temas de lugares, ahora que es amigo de Jungkook debe pensar donde serán las salidas, no quiere demostrarle que es aburrido.

—Hoseok, confío en ti. Pero no estoy seguro que esto funcione.

—Va funcionar, siempre me ayudas en que entienda a las clases de cálculo, déjame ayudarte.

El peliazul hizo una mueca, no dijo nada ya que Yoongi había llegado, estaba agitado por haber corrido demasiado, faltaba dos minutos para que comenzara las clases.

—Al parecer alguien corrió con la suerte de llegar a tiempo. — El blanquecino intentaba controlar su respiración, había corrido desde que ha bajado del autobús.

—En verdad Hoseok, mejor salgo contigo a ejercitar. — Ríe el mencionado.

—Pero al fin estás aquí, la señora Kang no te va regañar por retraso.

—Estoy cansado, vamos al salón.


















































Las clases habían sido como todos los días, para algunos era pan comido pero para la mayoría de estudiantes es una eternidad en oír las voces de sus profesores, gran estrés. Dentro de dos semanas son los exámenes, para después tener sus vacaciones de verano.

El grupo de amigos charlaban tranquilos mientras devoraban su almuerzo, se encuentran en una de las mesas de la cafetería, donde suelen pasar la mayoría de sus recesos ahí.

Jungkook había contado lo del día anterior en la tarde, Lisa lo había molestado todo el tiempo respecto con la carta, aunque Jisoo se unió. Por más que quería despejar su mente, no podía, tenía tanta curiosidad sobre anónimo.

Después de hace unas horas, no podía dejar de imaginarse al chico besarle la mano para después entrelazarla, decirle un millón de cosas lindas, cosas típicas entre las parejas. Cada vez que veía a Seokjin y Namjoon, pensaba en él. Está muy confundido, podría terminar volviéndose loco.

Lo único que ha recuperado en poco tiempo son sus amigos, es más, ya tiene tres nuevos amigos.

Hablando de ellos, aparecieron, casi se ahogaba con su jugo al ver al peliazul acercarse. Lisa se había dado cuenta de ello, golpeó el brazo del castaño con su codo, sonriendole picarona, Jungkook soltó un bufido.

Lo único que sus ojos brillaran, es ver las galletas que ama. Soltó una sonrisa, hizo un ademán de saludo.

—Jungkook, para ti. — Las extendió, correspondiendole la sonrisa.

—¿Preparadas por ti? — El mayor asintió, Jungkook tomó la bolsita de galletas, la última vez, aunque no se lo dijo, las galletas preparadas por Taehyung serán las mejores. Se sentía un pequeño niño.

—M-Muchas gracias. — Jisoo soltó una pequeña risa, disimulada. Eso le molestó un poco.

—Oh, ¿Nos podemos unir a ustedes? — Hoseok miró a cada uno de los menores.

—Claro. — Aceptó Jimin.

Todos hicieron espacio para que aquellas tres personas se sentaran y se unieran a su charla, cada quien se presentó, terminaron conociendo un poco de todos hasta intercambiaron números, vaya que su pequeño grupo de amigos haya crecido un poco.

Jungkook se sintió bien, dolía sus mejillas por tanto sonreír, todos en su mundo conviviendo alegremente, le alegra que todo haya sido como pensó. Tal vez no será mala idea en que todos salgan a divertirse.

—Taehyung, si eres bueno en matemáticas, ayúdame. — Pidió Yugyeom, casi suplicando.

—Yugyeom es muy tonto en matemáticas. — Se burló Jimin, recibiendo una mirada oscura del mencionado. — Necesitas tener tanta paciencia.

—No ayudas nada, Park. — Cruzó de brazos. — Quiero dejar de sentirme como un idiota.

—Claro que no eres un idiota. — Jisoo intentó animarlo.

—Ella tiene razón. — Se incluyó en la pequeña discusión. — Puedo ayudarte, solo di todas tus dudas, verás que no es tan difícil como crees.

—¿En serio? ¡Muchas gracias!

Bueno, esto es algo bueno para Taehyung, en verdad no venía en sus planes, ni él mismo sabe como puede concentrarse en clases si siempre piensa en ese castañito hermoso que tiene enfrente, Jungkook es un chico tierno, amaba ver ese enfado que ve tentador tomarlo y besarle esos labios, amaba verle sonreír, su sonrisa como de un conejito. Eso lo ponía estas en su imaginación, inspirándose en escribir, liberando todos esos sentimientos que siente por él.

Cueste lo que cueste, quiere enamorarlo todos los días, haciéndolo sonreír, cuidar de su corazón.

Su Jungkook.

¿Les está gustando?

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro