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"𝑾𝒉𝒆𝒏 𝒘𝒆'𝒓𝒆 𝒖𝒏𝒅𝒆𝒓𝒏𝒆𝒂𝒕𝒉 𝒕𝒉𝒆 𝒍𝒊𝒈𝒉𝒕𝒔,
𝑴𝒚 𝒉𝒆𝒂𝒓𝒕'𝒔 𝒏𝒐 𝒍𝒐𝒏𝒈𝒆𝒓 𝒃𝒓𝒐𝒌𝒆𝒏.
𝑭𝒐𝒓 𝒂 𝒎𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕,
𝑱𝒖𝒔𝒕 𝒇𝒐𝒓 𝒂 𝒎𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕.
𝑾𝒉𝒆𝒏 𝒘𝒆'𝒓𝒆 𝒔𝒊𝒏𝒈𝒊𝒏𝒈 𝒔𝒊𝒅𝒆 𝒃𝒚 𝒔𝒊𝒅𝒆,
𝑻𝒉𝒆𝒓𝒆'𝒔 𝒔𝒐 𝒎𝒖𝒄𝒉 𝒍𝒆𝒇𝒕 𝒖𝒏𝒔𝒑𝒐𝒌𝒆𝒏.
𝑭𝒐𝒓 𝒂 𝒎𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕,
𝑱𝒖𝒔𝒕 𝒇𝒐𝒓 𝒂 𝒎𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕."

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Narrador Omnisciente:
Mal, hija de Maléfica y Hades, se encontraba dando vueltas dentro de la habitación de su novio, el Rey de Auradon.

Habían quedado para tener una cita cuando el saliera de su reunión con el Consejo de Segundones.

Desde hacía varios días que rondaba por su cabeza esta idea. Una idea que le rompía el corazón cada vez que la recordaba.

Pero no tenía otra opción, ¿o sí?

Los treinta minutos que tenía en esa habitación de las instalaciones de Auradon Prep la estaban aniquilando.

Evie, su mejor amiga, notó que ella estaba rara, al igual que Jay y Carlos.

Pero no pudieron preguntarle nada porque apenas el reloj de su teléfono marcó las seis, ella salió corriendo de la habitación de los chicos. Dejando confundidos a sus tres mejores amigos y hasta a Chico, la mascota del pecoso.

Inhaló y exhaló aire varias veces para calmarse. Lo que menos necesitaba en ese momento era tener un ataque de ansiedad. Mucho menos si ni Ben ni los chicos estaban con ella.

Y como si hubiera leído sus pensamientos, sintió los brazos del castaño alrededor de su cintura.

-Pude salir unos minutos antes y quise sorprenderte. Supuse que estarías aquí - le dijo seguido por un beso en la mejilla.

Mal se dio la vuelta, con las manos temblando un poco, cosa que no pasó desapercibida por el Rey.

-¿Sucedió algo? - le preguntó tomando su barbilla con delicadeza.

Acarició sus mejillas. Ella cerró los ojos.

No puede hacerse eso, mucho menos puede hacérselo a él.

-Debo hablar contigo, Ben. Es algo muy importante.

Su mirada estaba sobre sus zapatos. Él se preocupó al verla así.

-Está bien.

Cerró la puerta de la habitación y guió a su novia al sillón frente a la cama.

Después de sentarse, ella no abría la boca. No era capaz de articular ninguna palabra.

Ben tomó sus manos, lo que hizo que Mal levantara la mirada. Provocando que el corazón de él se debilitara al ver los ojos llorosos de ella.

-Princesa, ¿qué pasa? Me estás preocupando, y mucho.

-Ben, yo...-sintió como un nudo se formaba en su garganta- yo... Creo que debemos terminar-susurró.

Los ojos de él se abrieron mucho al oír esas palabras.

-¿Qu...Qué? ¿Por qué?

Sus ojos comenzaron a cristalizarse también, pero sabía que debía ser fuerte por ella.

Tenía que hacerla entrar en razón sí o sí.

-Por que, no sé si soy la indicada para ti.

Las lágrimas ya habían comenzado a caer silenciosamente por las mejillas de la pelimorada.

-Mal, tú eres y siempre serás la indicada para mí. No dudes de eso.

Besó su frente y la hija de Maléfica sintió como las lágrimas caían con más intensidad.

-¿Acaso ya no sientes nada por mí luego de cinco meses juntos? - le preguntó él, dolido.

-No es eso.

Ben sintió como el aire volvía a circular por su sistema respiratorio.

-Te quiero muchísimo, y lo sabes-le dijo, mirándolo a los ojos- Estoy perdidamente enamorada de ti, aunque no esté lista para decir lo que le sigue a que te quiero.

Sus cachetes se tornaron ligeramente rosados al decir eso.

-¿Entonces por qué quieres terminar conmigo?

-Por qué todos odian el hecho de que seamos pareja. La mayoría de las chicas en los pasillos casi siempre susurran al verme pasar. Los chicos también lo hacen.

-Pero a ti jamás te ha importado lo que dicen los demás sobre ti.

-Lo sé, es solo que... Esta vez es diferente. No sólo hablan de mí, hablan de nuestra relación. Y aunque intente ignorarlo, si me duelen algunos de sus comentarios.

-No les prestaremos atención. Saldremos adelante, juntos-le dijo juntando su frente con la de ella.

-Pero no son solo ellos, Ben. También tus padres, a pesar de que ya les caigo mejor, aún siguen influenciados por el Consejo. Ellos no aprueban que una villana pueda llegar a ser la Reina. Y yo...

<<Yo en serio espero que eso algún día suceda, Ben. Poder pasar el resto de mi vida contigo, sin que nos juzguen tanto. ¿Es eso tanto pedir?

Ese fue el punto en el que ella no aguantó más. Comenzó a sollozar sin control.

Ben la apretó con fuerza contra él, protegiéndola. La sentó entre sus piernas y dejó que ella escondiera su rostro en su pecho.

No le importaba que su camisa estuviera llena de lágrimas si encontraba el modo de frenarlas.

-Cariño, yo te he dicho muchas veces que te amo. Y aunque aún no estés lista para decirlo, sé que tú también me amas. Me lo demuestras a diario, y eso es suficiente para mí. Y por eso, estoy dispuesto a luchar por nosotros. A hacer lo que sea con tal de que no nos alejemos.

Ella levantó la cabeza y lo miró a los ojos. Él apartó las lágrimas que estaban sobre las mejillas de Mal y rozó sus narices.

Logró que ella sonriera. Esa sonrisa que tanto ama.

-¿Y cómo haremos eso? No podemos estar juntos sin que nos juzguen. Sin que yo me sienta mal por lo que dicen.

-Tengo una idea, pero no sé si te gustará.

-Si es para que pueda seguir estando contigo, estoy dispuesta a cualquier cosa-le dijo Mal.

Él sonrió y besó la punta de su nariz.

-Debemos terminar...

-¿No se supone que eso es lo que estamos evitando?

-Así es. Así que por favor dejame terminar de hablar, princesa.

Ella arrugó la nariz, sonriendo.

-Lo siento. Continúa.

-Debemos terminar, pero no en serio.

-¿A qué te refieres?

-Al frente del resto del reino, ya no somos novios. Sólo seremos amigos. Pero cuando estemos solos, podremos dejar de fingir.

-No sé si aguante mucho soportando a las chicas que van a intentar acercarse a ti.

-No seas celosa, cariño. Tú eres la única que está en mi corazón.

Llevó las manos de ella y las puso sobre su pecho. Específicamente, donde se encuentra su corazón.

Ella se rió. Besó su mejilla y lo miró tiernamente.

-¿Cuánto tiempo tendríamos que fingir? - preguntó ella.

-Hasta qué te sientas lista para que volvamos a salir en público.

-Está bien.

-Entonces, ¿aceptas mi propuesta?

-Acepto, Bennyboo.

Ellos se rieron al oír el apodo que usó. Cuando Audrey se lo decía, solía molestarle. Pero cuando se lo dice Mal, no le importa en lo absoluto. Es más, hasta le parece adorable.

Ella se levantó y extendió su mano para que él hiciera lo mismo. Se abrazaron en el momento en que estuvieron frente al otro. Con los brazos de Ben alrededor de su cintura y los de Mal alrededor de su cuello.

-Te amo, Mal.

La sonrisa que se posó en el rostro de ella fue indescriptible.

Se quedaron mirando durante varios segundos. Los latidos de sus corazones comenzaron a latir al mismo ritmo.

Sus rostros estaban a milímetros de el del otro, con sus respiraciones mezcladas.

-Mal.

-¿Sí?

-Sabes que si no estás lista aún, puedo esperarte. Esperaré todo lo que necesit...

No pudo terminar la oración ya que los labios de ella se pegaron a los suyos. Se movían en perfecta sintonía, como si estuvieran hechos para los del otro.

Este era su primer beso, tanto como pareja como de cada uno.

Los labios de Mal, según Ben, son extremadamente suaves y con sabor a fresas. Mientras que los labios de Ben, según Mal, son lo mejor que ella haya probado en su vida.

Sabían que no llegarían más allá, ya que saben que quieren esperar más para dar ese paso en su relación.

Pero para ellos, fue lo más mágico que les había sucedido. Luego de haberse conocido, claro está.

Juntaron sus frentes al separarse, sonriendo.

-Wow.

Ella soltó una risita.

Se abrazaron unos minutos más. Sintiéndose cómodos en los brazos del otro.

Cuando ya había pasado la hora de la cena, fue cuando Mal decidió que era el momento de irse.

Evie sabía que llegaría a esa hora, y se preocuparía de más si no lo hacía.

-Te veré luego, amiga.

Ella soltó una carcajada al oír eso.

-Lo mismo digo, amigo.

Ahora él fue quien se rió.

Besó rápidamente los labios de Mal antes de abrir la puerta.

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Debo admitirlo, me dolió escribir la parte en donde ella piensa terminar con él 💔😭

Pero me gustó mucho escribir lo demás.

El próximo es el primer capítulo de la historia.

¡Nos leemos pronto!

~Con amor, su escritora💕.

Publicado el 11/01/2020.

Editado el 18/07/2021.