Un nuevo mes comenzaba ¿Qué cosas espectaculares nos traerá? O horrorosas...

El sol empezó a iluminar y pronto ya todos habían despertado, los autos pasar, los pájaros cantar, que acogedor.

El rubio y el castaño iban de la mano camino al colegio. El rubio charlaba y charlaba sobre las cosas que le gustaría hacer en el futuro junto a Minghao.

Ir a pescar, ir al museo, ir al zoológico, ir al otro lado del país, ir a estados unidos.

- ¡Jeonghan!- rio- tus planes son muy grandes- Comentó el chino.

Suspiró- Bueno, está bien, entonces, iremos a Japón.

- ¿Qué?

- Sí, para la primavera ¿te imaginas los cerezos?

- Ay Han- Volteó los ojos.

- ¿Qué? ¿No me amas entonces?

- No, no, no hay nada de malo con tus planes. ¡Claro! Iremos a Japón para ver los cerezos.

- ¿Por qué iremos?- Preguntó juguetón.

- Porque tú quieres ir, haría hasta lo imposible para que seas feliz- Acarició el cabello del rubio.

- ¿Harías cualquier cosa?

- Sí.

- ¿Me lo juras..?

- Juro que haría cualquier cosa para que tú seas feliz...

Idiota.
Nunca debiste jurar algo como eso.

Era agosto, la primera semana de agosto y toda la familia de Minghao estaba emocionada, todos los 4 de agosto hacían una parrillada en familia, en celebración del día en que la señora y el señor Xú se conocieron.
A Minghao no le emocionaba lo suficiente, la comida era lo que lo hacía sentirse ansioso por ese día.

El 4...

[...]

Jeonghan se encontraba en su habitación mirándo su reflejo en el gran espejo. Bajó un poco su pantaloneta y posteriormente su ropa interior dejando al descubierto un poco de su cadera, y... una cicatriz, se extendía 7 centímetros sobre la piel del coreano.

Con sus dedos recorrió la cicatriz- Maldito viejo de porquería- se golpeó la cicatriz con el puño- al menos ya estás muerto, te gané, desgraciado.- La puerta fue abierta, lo cual obligó a Jeonghan a subirse la ropa. Era la sirvienta- ¡¿PERO QUE DEMONIOS?! DEBES TOCAR LA PUERTA, T.O.C.A.R. ¡¿Eres tonta?!

- Disculpe joven, su madre me dijo que usted se encontraba en el jardín y me pidió que le subiera algo de comer- Dijo con la cabeza baja.

- ¡Pero yo no quiero las porquerías que tú cocinas!

- Joven, tardé en prepararlo, por favor coma, al menos pruebelo.

Jeonghan lo probó y pronto lo escupió- ¡¿PERO QUÉ ES ESTA MIERDA?! ESTO PARECE LO QUE COMEN LOS CERDOS, QUE ASCO, ¡Llévate eso de aquí! Maldita extranjera, negra de mierda- La empujó y la sirvienta no tardó en retirarse.

El celular de Jeonghan vibró, un mensaje de Minghao:

Min♡

Holaa Han, mis padres te invitan a cenar este viernes, porque van a celebrar el día que se conocieron :/

Hola cariño >3<
¡Claro! Iré^^
¿Es solo tu familia o también irán tus amigos?

Nop, Wonjin, Mingyu, Seungkwan y Taehyun vendrán :)

Oh, ¿Y eso te emociona?

Obvio lol

Ya veo
Que curioso que se hayan conocido un 4, en el número de la muerte, tal vez porque su destino es morir juntos

Eso suena extraño jsjsjs

¿Por qué?
Yo creo que es romántico ;)

Está bien, cariño
Me tengo que ir
Tqm<3

Adiós

[...]

Por fin 4, el día tan esperado por la familia Xú y Jeonghan, especialmente para Jeonghan...

Al llegar al colegio, Jeonghan irradiaba alegría, parecía feliz, emocionado, realmente sonreía todo el tiempo, más de lo normal y trataba a todos de la manera más amable posible, incluso prestó mucha atención en clase. Pero eso no era lo único que se podia destacar, Jeonghan ya no era rubio, su cabello ahora era negro, negro, demasiado negro, parecía como estar mirando al vacío, al cielo sin estrellas, al río sin peces. Cualquiera que lo viera quedaría con la boca abierta, tal como Minghao, este se emocionó mucho y a cada minuto le decía lo guapo que se veía, pero Hoshi tuvo una reacción muy diferente a la de los demás.

- Es hoy...- Pronunció sintiendo un nudo en su garganta.- la última vez hizo lo mismo, se tiñó el cabello de negro para su día especial. Maldito psicópata- Se retiró a su aula. Camino a esta se topó con Seungkwan, al cual detuvo- Hola, ¿sabes si Minghao tiene planes para esta noche?

- Hola. Sí, yo y sus amigos iremos a cenar ¿Por qué? ¿Eres amigo de Minghao?

- ¿Irá Jeonghan?

- Sí, ¿Lo conoces?

- Oh sí, fuimos amigos en la primaria.

- Ya veo, entonces ¿eres amigo de Minghao?

- No, preguntaba porque siempre Jeonghan se queda con él, y yo necesitaba reunirme con Jeonghan. Nada importante, adiós- sonrió y se fue rápido.

[...]

Llegó la noche, por fin, la tan esperada noche del 4 de agosto...
Jeonghan estaba tan emocionado que juraría que en cualquier momento explotaría de la emoción.

Pero Hoshi... él no estaba ni un poco emocionado, más bien sentía que en cualquier momento vomitaría sus entrañas, tenía un dolor de cabeza terrible, su cabeza daba vueltas, estaba ansioso y preocupado, se le estaba haciendo difícil seguir de pie debido a que su nivel de azúcar estaba bajando. Hubiera deseado seguir tumbado en su cama mientras descansaba del agotador día escolar, pero era hoy o nunca, además no quería que ese infierno se repitiera una vez más, debía impedirlo a toda costa, debía encarar al monstruo...

Hoshi iba en un autobús, para su desgracia ya no habían asientos vacíos así que debía ir de pie, se dirigía al vecindario donde vivía Minghao, iba tras Jeonghan. Él no sabía exactamente en qué casa vivía el chino, pero debía llegar sí o sí.

Después de una hora de viaje, se bajó en la entrada al vecindario (cerca de donde Minghao se había intentado suicidar la última vez) y se adentró a este sintiendo como la adrenalina recorría sus venas.

Se detuvo en una casa de aspecto moderno, ahí vivía gente rica. De la cochera salió un rubio con pecas, este estaba distraído con los audífonos puestos mientras tarareaba alguna canción, de pronto se dio cuenta de la presencia del de ojos pequeños, lo miró confundido y se quitó los audífonos.

- ¿S-se le ofrece algo?- Inclinó un poco su cabeza hacía la derecha.

- ¿Sabes dónde vive Xú Minghao?

- Oh, estás buscando en el lugar equivocado. Vive al otro lado del vecindario, te tomará cerca de 40 minutos llegar caminando- hizo una mueca debido al tiempo que podía tardar el peliblanco.

- Bien, gracias- Suspiró y siguió caminando.

No llegaría tarde.

¿Cierto..?