La familia daba un paseo por el pueblo, habían recibido muchas quejas de que la calle estaba llena de baches entonces habían aprovechado la salida para dar un paseo.

—Si está muy fea... Mira esos hoyos — hablo Sana haciendo una mueca.

— Ya van tres calles que tienen muchos hoyos, hablaré esto con Jihyo y otros — dijo Tzuyu mientras cargaba a Minju en sus brazos.

Yunjin y Yoonah observaban a todos los que pasaban a su alrededor, gruñendo a todo aquel que miraba a su mamá omega.

Sana al escuchar muchos gruñidos por parte de sus cachorras, volteo a verlas con curiosidad.

— Cachorras, ¿Por qué gruñen? — cuestionó

Tzuyu por otro lado sonreía triunfante, había educado muy bien a sus cachorras ya que nunca dejaban que un alfa o beta se acercaba a su mamá omega ellas no dudaban a gruñir.

—Te protegemos, Mami — respondió Yoonah con una sonrisa orgullosa.

— ¿De quién?

— Cómo ese alfa sucio — señaló Yunjin a un alfa que iba pasando por ahí y no dejaba de ver a su Mami.

Sana sujeto la mano de su hija — No señales a las personas.

— Déjalo, cariño. Mejor vamos a comer roles de canela — opinó con una sonrisa — ¿Quieres roles de canela, Minju?— asintió con su cabeza mientras jugaba con un juguete.

Los ojos de Sana y las gemelas brillaron al escuchar eso, inmediatamente la castaña sujeto la mano de sus cachorras y corrieron a la panadería más cercana, dejando atrás a su esposa e hija.

—Tu Mami y hermanas son unas golosas — comento con una sonrisa antes de ir detrás de su esposa e hijas.

Después de un largo rato en la panadería. la familia ahora estaba sentada cerca de un río, disfrutando de la vista y aquellos postres que compraron.

Tzuyu y Sana veía jugar a sus cachorras con el agua y unas piedras que están en la orilla del río.

— Gracias, alfa — hablo la omega sonriendo

La alfa la miro confundida— ¿Por qué...? No entiendo

— Por darme esto... — respondió mirando a sus cachorras, giro levemente su cabeza para ver a la alfa — Gracias por darme amor y una familia

Tzuyu soltó una risa nasal — No. Gracias a ti por llegar a mi vida, Sha

— Ojalá te hubieras conocido antes de mi primer matrimonio... Pero no importa, al fin y al cabo, soy muy feliz contigo — sonrió tiernamente.

— Soy muy afortunada por tener una omega tan linda como tú, gracias a ti las cachorras son hermosas — opinó.

Sana le dio un leve golpe en las costillas con su codo a la pelinegra — Aunque no fuera linda, mis cachorras seguirían siendo hermosas.

La alfa rió — Eres la persona más hermosa ante mis ojos y los ojos de cualquier persona — tomó con delicadeza la mano de la castaña y retiro el guante de encaje que traía puesto, besó el dedo anular que era adornado por un anillo de oro — Pero solo yo tengo la dicha de decir que eres mi esposa, mi omega...

Sana miro a la pelinegra unos segundos antes de hablar — Somos muy afortunadas de tenernos la una a la otra.

—Yo soy la más afortunada— se acercó un poco más al cuerpo de la castaña — ¿Me amas?

— Te amo como no tienes idea, eres la alfa que siempre quise a mi lado desde pequeña— entrelazó sus dedos con los de la pelinegra— Cada día me enamoro más de ti y te amare hasta el día de mi muerte.

El emperador Chou estaba conmovida por lo que escuchó — Yo, Chou Tzuyu, estoy perdidamente enamorada de ti desde el primer día que te vi y lo seguiré estando el resto de mi vida — se acercó al rostro de la castaña para depositar un leve y casto beso en la comisura de los labios de la omega— Y si hay una vida después de esta, me aseguraré de volverte a buscar, porque una vida no me es suficiente para amarte, te quiero amar por una eternidad.

Sana se abalanzó al cuerpo de la alfa para llenar de pequeños besos todo el rostro del emperador.

Yunjin volteo a ver a sus mamás al escuchar pequeñas risas — ¡Mami Sana se está comiendo a Mamá! — exclamó

Inmediatamente sus dos hermanas voltearon a ver la escena; Sana al escuchar eso se levantó del cuerpo de la alfa y miro con un pequeño sonrojo a sus cachorras

— ¡Tenía un mosquito! — trato de justificarse.

Tzuyu tomo asiento mientras sonreía como una tonta, más bien, era una tonta enamorada

(...)

— Emperador Chou, la fiesta de su hija es muy linda — opino la hija del duque Han.

Tzuyu bebió de su copa de vino antes de sonreír con orgullo— No solo la fiesta es linda, ¿Has visto a mi esposa e hija? — cuestionó con emoción— Son las personas más hermosas, Minju heredó la belleza de su madre.

— ¿Y sus cachorras gemelas? — pregunto sin dejar de sonreír.

—Ellas también soy muy hermosas, todos los cachorros que tenga la emperatriz serán hermosos — respondió con una sonrisa.

La beta iba a seguir hablando muy animadamente con la alfa pero vió por el hombro de la alfa a la emperatriz mirándola fijamente, inmediatamente se sintió nerviosa y sentía un leve escalofrío.

— Yo... Me tengo que ir — hizo una leve reverencia antes de darse media vuelta e irse.

Tzuyu confundida por la repentina actitud volteó hacia donde la beta había mirado, pero solo vio a su esposa hablar muy feliz con Mina mientras degustaban algunos roles de canela, sin darle mucha importancia fue hablar con otros invitados sobre la belleza de sus cachorras y esposa.

— ¿Viste, Mina? — cuestionó metiendo un pedazo de rol de canela a su boca.

— Claro su majestad, esa beta huyó de ahí inmediatamente cuando la vió — soltó una leve risita.

Sana sonrió — Gracias por avisarme de las sucias intenciones de esa — soltó un leve gruñido — ¿Por qué es tan difícil entender que mi alfa no quiere concubinas?

— Es que... — trago lo que tenía en su boca antes de seguir hablando — Todos quieren los lujos, joyas y poder que usted tiene. ¿Y cómo se logra eso? Siendo una concubina.

— De solo escuchar esa palabra me da coraje — se quejó.

Mina le dio otro rol de canela a la omega — Pero descuide su majestad, nadie es capaz de acercarse a su esposa si usted está cerca.

— Ni siquiera se atreven a mirarme a la cara...

— Y eso se debe a que usted es... — dio leves empujones a la castaña para que completará la frase.

Sana sonrió — La omega del emperador Chou.

— Exactamente, y bien lo dijo su esposa el emperador — dejo los roles de canela que traía en sus manos en la mesa.

— "Quien se atreva a tocar, dañar, insultar o mirar mal a mi omega será castigo, todo aquel que intente hacerle daño a mi omega considérese muerto" — dijo recordando lo que hace años atrás Tzuyu había dicho un día antes de la boda.

— ¿Todavía recuerdas eso?

Mina levantó sus hombros — Soy buena memorizado — agarro un rol de canela para degustarlo.

Sana miro a los invitados y al ver a cierta alfa inmediatamente le quitó el rol de canela a su dama y le dio un pañuelo.

— Majestad no sea egoísta, recuerde que prometimos compartirnos roles de canela siempre — se quejó intentando recuperar su postre.

— Mina, tu alfa te está buscando. Limpia tu sucia boca y ve con ella— ordenó.

La omega al escuchar eso inmediatamente limpió su boca con el pañuelo que le había dado la emperatriz.

Sana sonrió con felicidad al ver como Mina se acercaba a la alfa y esta le sonreía antes de sujetarla de la mano, Mina giro su cabeza para ver a la emperatriz y sonreírle.

— Bueno... Toca sacrificarme — dijo mientras miraba la charola llena de roles de canela.

(...)

La familia descansaba en la grande y cómoda cama, la celebración había dado fin hace una hora.

Tzuyu estaba aferrada al cuerpo de su esposa al igual que sus cachorras, Love descansaba tranquilamente en la parte inferior del colchón.

— Sana... Eres el amor de mi vida — Murmuró la alfa un tanto borracha.

Sana soltó una risa — Eres una cachorrita cuando bebés licor.

Tzuyu negó levemente con su cabeza — Soy tu cachorra.

— No, mis cachorras son Yunjin, Yoonah y Minju — dijo, le gustaba molestar a su alfa cuando estaba en ese estado.

— Esas envidiosas, siempre me quieren quitar todo... — soltó un gruñido a las cachorras que dormían muy gustosamente en la cama.

Sana le dio un leve golpe en la cabeza a su esposa — Déjalas dormir.

La alfa hizo un mohín — ¿Me puedes decir cuánto me amas?

La omega fingió pensar — Te amo muchísimo, te amo y siempre te amare toda mi vida, mi linda alfita.

Tzuyu sonrió satisfecha con la respuesta — Yo también te amo mucho.

Sana observo como su esposa se quedó dormida en su pecho, giro hacia su derecha y vio a sus cachorras descansar muy tranquilamente.

Sus ojos se llenaron de lágrimas, giro su cabeza hacia el gran ventanal, no quería llorar, pero le fue inevitable al ver la escena frente suyo.

— Esto es lo que siempre pedí... — miro la luna, hoy se veía más hermosa de lo habitual — Supongo que los deseos a veces se hacen realidad — limpió las pequeñas lágrimas que escurrían por sus mejillas — Gracias, gracias por tener está linda familia.

Sana después de unos minutos se calmó y miro nuevamente a su familia, sonriendo en grande al ver la imagen.

— Los amo mucho, son lo mejor que me pudo pasar — acarició el cabello de su esposa, retirando algunos mechones de la frente — Gracias por salvarme, fuiste mi luz en los momentos más oscuros de mi vida... No me va alcanzar la vida para agradecerte todo y mucho menos para decirte cuánto te amo — habló en voz baja.

— A mí tampoco me va alcanzar la vida... Por eso en cada momento te digo te amo — susurró Tzuyu un tanto somnolienta

Sana sonrió — Si hay vida después de esta prometo amarte igual o más que en esta.

Tzuyu abrió levemente sus ojos para ver aquellos lindos ojos azules — Te buscaré y te seguiré amando mucho... te lo prometo.

Fin