𝐄𝐧 𝐥𝐚 𝐪𝐮𝐢𝐧𝐭𝐚 𝐜𝐚𝐬𝐚 𝐝𝐞𝐥 𝐙𝐨𝐝𝐢𝐚𝐜𝐨: 𝐋𝐞𝐨

Shun, Seiya y Tn entraron a la casa de Leo donde sabían que su guardián era Aioria, enfrente suyo se encontraba una gran escalera que dirigía hacia la salida de la casa.

Seiya: Llegamos, busquemos a Aioria— Comentó mientras avanzaba, pero es detenida por la pelinegra —¿Tn?

Tn: Alto Seiya, hay algo aquí que no me convence, debemos estar alerta y no precipitarnos— Informa seria observando con desconfianza él lugar —Podrían atacar en cualquier momento.

Seiya: No hay tiempo que perder la vida de Athena corre peligro— Quita su mano y pasa por un lado de ella corriendo seguido por Shun, la amazona se quedó atrás observando al caballero de bronce preocupada.

Tn: ESPERA SEIYA— Gritó preocupada pero el caballero la ignoró y siguió corriendo —Esto no es bueno tengo un mal presentimiento.

Nike: "Tn hay algo aquí que no me cuadra... está muy silencioso considerando que el caballero de Leo aún no aparece" — La voz de Nike se escuchó en la cabeza de la amazona.

Tn: "Así estaba al inicio en la casa de Aries ¿Lo olvidas?, además siento un cosmos que no puedo reconocer... de ser el de Aioria ya lo habríamos reconocido" — Habló pensativa, pero a la vez con frustración.

Nike: "Me pregunto cómo estará Athena, siento su cosmos más fuerte que el de nosotras, pero no me convence" — Comentó un poco desconcertada.

Tn: "La flecha la rozó, su cosmos se va drenando de manera lenta... al no ocupar su cosmos la herida no absorberá su cosmos rápidamente" — Informó seria — "Desafortunadamente no es el caso con el de nosotras que recibimos la flecha completamente"

Nike: "Por cierto, ¿Cómo te encuentras? ¿Crees tener la suficiente fuerza para llegar hasta la sala del Patriarca?" — Preguntó preocupada por su reencarnación.

Tn: "Me siento aún con fuerzas, pero sé que en algún momento no podré resistir más, ahora que pelearemos con otros caballeros es necesario tener toda la energía posible"

Shun: Me pregunto si los chicos están bien— La voz de Shun se escuchaba un poco pensativa sacando a la amazona de sus pensamientos.

Seiya: No queda más que confiar en que nos alcanzarán, hay que avanzar rápido— Comentó con decisión.

Tn: — Observa las escaleras y se da cuenta de que un ataque va hacia ellos —Maldición— Dice para sí misma y corre a gran velocidad hacia donde ellos estaban —SEIYA, SHUN CUIDADO— Los mencionados se detuvieron y ella justo a tiempo se colocó enfrente de ellos, recibiendo el ataque lanzándola y estrellándose contra las paredes en la entrada de la casa.

Shun y Seiya: TN— Gritaron preocupados, unos pasos se hicieron presentes y dirigieron su mirada hacia enfrente donde el caballero de Leo bajaba las escaleras.

Aioria: ¿Qué se han creído? Nadie cruza Leo sin permiso— Informó a medida que bajaba las escaleras, su voz sonaba fría y seria.

Seiya: — Dejó su posición de ataque y lo miró con enojo —Tu... ¿Por qué haces esto? — En ese momento Aioria quien tenía los ojos cerrados los abre dejando ver ahora sus ojos color rojo intenso.

Tn: — Se levanta con dificultad y se dirige hacia ambos —Aioria— Observa detenidamente sus ojos —Ay no— Dice preocupada captando la atención de los jóvenes.

Nike: "Lo que me suponía" — Su voz sonaba seria —"Tn no te confíes, ahora Aioria no piensa con claridad y los ve como el enemigo"

Tn: "Maldición... de todos los caballeros dorados...— Sintió una punzada en su pecho —"¿Por qué tú?"

Shun: Tn— Se dirige rápidamente hacia ella —¿Cómo te sientes? ¿Te duele algo? ¿Estás herida? — Preguntó observando a la amazona detenidamente verificando que no tuviera heridas —Lo siento debimos haberte escuchado, de no haber sido así no te habría dado el ataque— Habló con arrepentimiento en su voz.

Tn: Haberme escuchado o no eso no importa ahora— Habló seria —De todas formas estoy bien— Menciona serena tratando de tranquilizarlo sin dejar de mirar a Aioria —Ahora tenemos que apresurarnos y derrotarlo antes de que el acabe con nosotros— Se colocó en posición de ataque dispuesta a pelear.

𝐌𝐢𝐞𝐧𝐭𝐫𝐚𝐬 𝐭𝐚𝐧𝐭𝐨 𝐜𝐨𝐧 𝐒𝐡𝐢𝐫𝐲𝐮

En un lugar lleno de lava y fuego junto a rostros a su alrededor en forma de piedra, Shiryu se levanta aturdido, pero se sorprende al ver que no se encontraba en la casa de Cáncer donde el recordaba, sino en otro destino

Shiryu: ¿Dónde estoy? — Pregunta observando a sus alrededores, pero en ese momento recibe una patada por la espalda impactándolo de cara contra el suelo.

xx: No te hagas el niño bueno eh, porque yo no lo soy— La voz del caballero de Cáncer resonó —Te gustan las almas en pena ¿no es así? — Pregunta observando al caballero —¿Te gusta? — Repitió varias veces pisando la cabeza del caballero contra el suelo.

Shiryu: Máscara de la muerte— Habló enojado aun en el suelo.

Death Mask: BIENVENIDO A LA ENTRADA AL INFRAMUNDO— Gritó provocando que detrás de él fuego surgiera y algunas llamas moradas salieran a los lados.

𝐄𝐧 𝐥𝐚 𝐨𝐧𝐜𝐞𝐚𝐯𝐚 𝐜𝐚𝐬𝐚 𝐝𝐞𝐥 𝐙𝐨𝐝𝐢𝐚𝐜𝐨: 𝐀𝐜𝐮𝐚𝐫𝐢𝐨

El caballero del Cisne se encontraba despertando, cuando abrió los ojos se dio cuenta de que no se encontraba en la casa de Cáncer, posó su mirada enfrente encontrándose con lo que parecía ser una urna, pero esta era la que proyectaba lo que parecía ser el techo como si de agua se tratase.

Hyoga: ¿Dónde estoy? — Pregunta ante la gran calma que había, observando todo a su alrededor —¿Qué pasó? — Se levantó con un poco de dificultad.

xx: Máscara de la muerte casi logra convertirte en cadáver— Mencionó a medida que avanzaba, Hyoga se levantó por completo y miró al sujeto delante suyo —Pero pude salvarte.

Hyoga: — Se sorprende al reconocerlo —Eres tú... ¡Camus! — Exclamó con sorpresa.

Camus: Hyoga... ha pasado tanto tiempo — Lo observó aun avanzando —Tu y tus amigos no debieron venir al santuario... tienen que irse cuanto antes— Habló seriamente deteniéndose.

Hyoga: Aunque sea una orden tuya maestro... NO LO VAMOS A HACER— Habló con decisión y firmeza.

Camus: ¿POR QUÉ NO? — Alzó la voz y exigió una respuesta.

Hyoga: — Se queda en silenció unos minutos desviando la mirada.

Camus: — Cierra los ojos — Contestas usando el silencio... entonces te considero un traidor— Informó seriamente colocándose el casco y lo señaló —Y ACABARÉ CONTIGO— Se puso en posición de ataque congelando todo a su alrededor y con el cañón que tiene en su hombro, dirige un ataque potente hacia Hyoga.