-Buenos días, Jakey.-Saludó la rubia sonrientemente, sentándose al lado del pelinegro que estaba descansando tranquilamente en las gradas.

Jake solo hizo una mueca de disgusto por aquel apodo que le había dado la chica. No le agradaba para nada.

Lizzy esperó recibir algún saludo de Jake, pero eso nunca pasó. El pelinegro solo se quedó en silencio y siguió observando el libro que traía entre sus manos.

Pero, ¿Por qué ambos estaban allí esa mañana fría de invierno? Pues era simple. Jake quería estar solo y la pequeña Lizzy no era capaz de captar las indirectas que le enviaba el mayor, estaba tan ciega en su amor de niña de secundaria que no era capas de ver la realidad y darse cuenta de que lo único que quería Jake para tener paz es mantenerla a diez metros de distancia de él. No es como que él la odiara, pero, a veces, la rubia llegaba a ser tan agobiante que pensaba que podía enloquecer. Le agrada Lizzy, pero solo cuando no parecía una loca acosadora detrás de su persona.

Lizzy recién había empezado la universidad y no conocía a nadie más que a su querido crush, su hermano mayor y su mejor amiga. Así que solo podía estar con Jake, quien era el que le quedaba más cerca en aquel frío día. Su mejor amiga prefería llegar tarde los lunes y su hermano, pues él, a pesar de ser un buen hermano, tenía sus propios asuntos y no podía estar al pendiente de la menor todo el tiempo. Además, a la pequeña Lizzy, le encantaba la compañía de Jake. Así podía admirarlo de cerca. Aunque en su pequeño mundo lleno de inocencia, aún no cabía el pensamiento de que quizá a Jake no le gustaba tenerla cerca.

Por otro lado, el grupo de chicas que estaba un poco más abajo en las gradas veía todo con burla y algunas con algo de pena. Pero a una en particular, una pelirroja con una personalidad egocéntrica e irritante, le parecía tan divertido ver como la chica loca de amor de su clase estaba detrás del famoso Jake Sim de tercer año. Pero eso era tan común en la vida de Lizzy, algunos le tenían lástima y otros se burlaban de su enamoramiento. Ya no le importaban esas cosas, aunque de vez en cuando le dolía un poco lo que la gente pensaba por simplemente gustarle alguien. Solo le gustaba Jake, no estaba obsesionada con él como todo decían. ¿Verdad?

La rubia se sintió algo incómoda por el silencio que había entre los dos, así que decidió sacar algo de plática.

-Sabes, ayer, Sakura y yo...

-Lizzy, por favor.-Jake cerro su libro de golpe y la miro seriamente haciendo que la rubia frunciera su ceño, sintiéndose algo intimidada por la dura mirada del mayor.

¿Había dicho algo malo? ¿Acaso fue demasiado insistente? Pensaba la rubia mientras jugueteaba impaciente con los lazos de su abrigo color azul marino.

-Deja de acosarme, quieres.-Le pidió el chico algo incómodo.

-¿Acosarte?-Pregunto la rubia un poco triste por sus palabras.-Pero yo n...

-Solo, mantén distancia. Soy amigo de tu hermano, no tuyo, entendido.-Aquellas palabras le habían dolido un poco a Lizzy quien solo asintió bajando la mirada a sus manos mientras el pelinegro solo la veía con un poco de lástima.

No quiso decir aquello, pero era lo mejor, debía abrirle los ojos a Lizzy antes de que la lastimara más. Tomando su libro se levantó del lado de la rubia y finalmente se fue de allí bajando las gradas sin ni siquiera girarse a ver como los ojos de Lizzy se cristalizaban por su culpa.

Lizzy escuchó algunas risas de fondo y levantó la vista viendo a Yuqi y su grupo de amigas, si es así como podía llamarlas Lizzy, ya que parecían más los perros falderos de la pelirroja que amigas de verdad. Las chicas rieron descaradamente, haciendo que Lizzy apretara sus puños con impotencia. ¿Qué era tan divertido? ¿Acaso no podían dejarla en paz?

-Pobre, Liz. Otro rechazo más en el mes.-Yuqi hizo un gesto de falsa pena abultando sus labios en un fingido puchero. La chica le dio un sorbo a su batido y se acercó a la rubia hasta quedar frente a ella.-Si fuera tú, abriría los ojos. Porque además de tonta, eres demasiado...-La pelirroja hizo una pausa y la miró de arriba a abajo haciendo un gesto de desagrado que puso incomoda a Lizzy.-Ya sabes, eres tú.-Yuqi la apunto soltando una sonora carcajada.-Creo que eso es lo que no le gusta a Jake, a él no le gustan las niñas estúpidas.-La pelirroja susurro aquello último en el oído de Lizzy.

La rubia no dijo nada y solo se quedó en silencio bajando su mirada. Quizá Yuqi tenía razón, era muy estúpida.

Yuqi vio con una sonrisa de oreja a oreja la escena que se desencadenaba a unos pocos pasos de donde estaba. Haría sufrir a Lizzy con eso, lo sabía. Elevando el mentón de la rubia con algo de brusquedad. La pelirroja le hizo ver como Jake charlaba animadamente con una pelinegra demasiado bonita para su gusto. Piel blanca, cabello negro hasta la cintura, ojos bonitos, labios carnosos, era perfecta, tan hermosa que hacía sentir envidia y celos a Lizzy quien deseaba tanto estar en su lugar. Aquella chica era todo lo que ella no era.

-Das lástima.-Se burló la pelirroja nuevamente soltando el mentón de Lizzy. -Deja a Jake en paz, una pequeña tonta como tú, nunca estará a su nivel.-La pelirroja vacío el contenido de su bebida sobre la cabeza de Lizzy manchando su ropa y su cabello.

Pero la rubia no hacía nada, solo se sentía, impotente, avergonzada y con unas intensas ganas de llorar mientras veía a Yuqi irse con sus amigas mientras se reían de ella sin parar.

Lizzy intentó limpiar el batido derramado sobre ella, con brusquedad tomó un pañuelo que llevaba en su mochila y limpió su cabello sintiendo como las lágrimas caían por sus suaves y regordetas mejillas haciéndola ver tan estúpida. Era tan patética, ¿Por qué no podía gustarle a Jake por quién era?

Jake estaba a punto de irse de aquella cancha con la chica que estaba acompañándolo cuando diviso por el rabillo del ojo a Lizzy sollozando, mientras intentaba limpiar su cabello y ropa. ¿Acaso alguien le había lanzado su batido encima? ¿Cómo no se fijó en eso? A pesar de todo el chico la veía como su pequeña hermanita, eso era lo único que sentía hacia ella y verla de ese modo no le agradaba, Jay lo mataría, si no la protegía.

Disculpándose con la bonita pelinegra, Jake subió las gradas a pasos rápidos y encaro a la rubia que ni siquiera lo miraba. Todas sus esperanzas se habían ido en aquel momento y un sentimiento de leve rencor hacia el pelinegro se apoderaba del pequeño y frágil corazón de la chica.

-Liz, ven, deja que te ayude. No puedes ir así a clases.-Lizzy solo observó como Jake le colocaba su chaqueta sobre su sus hombros y le sonreía cálidamente, limpiando sus lágrimas.

Entonces la chica sintió esas esperanzas renacer. Jake era su droga y cada vez que intentaba liberarse él volvía a curar sus heridas. No había dudas de que Lizzy Park estaba completamente enamorada de Jake.

━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━꯭͓━
Espero que les haya gustado esta breve introducción, que cuenta un pequeño fragmento de como serán las interacciones entre estos dos personajes a partir de ahora.

Recuerden agregar esta historia a sus bibliotecas si les gustaría leerla. Así no se pierden ni una sola actualización. Por ahora las actualizaciones serán lentas porque quiero terminar primero "Ella es mía", pero luego de que la haya terminado las actualizaciones de este fanfic serán diarias.

I Love u sweettie <3
▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬

@SweetlyHwang on YouTube

Sigue mi canal de WhatsApp para que no te pierdas ninguna noticia sobre este fanfic. ˃ᴗ˂