harry styles x oc fem

—aike, cariño... sabes que no puedo hacer nada al respecto, lo hablamos, ambos sabiamos que podía pasar. —el castaño la tomo de la mano, ella bajo la mirada, asintiendo levemente. 

un tremendo sentimiento de tristeza e impotencia se apodero de ella de inmediato, harry y ella habian sido amigos durante años, luego novios, ella sabia los riesgos que esto tenía, puestp que lo habían hablado, sabía que la carrera de harry siempre sería lo primero, y ella lo respetaba.

era esa misma razón por la que sabía que no poía hacer nada más que aceptar que el estaba terminando con ella. 

—solo quiero que me digas una cosa... ¿quién es la chica? —pregunto, sintiendo como su corazón se rompia.

—es olivia. —susurro, mirandola con tristeza. 

olivia wilde, era una directora y actriz muy famosa, la misma que le había ofrecido hace unos meses un papel a su novio en su película, era esa misma que la había halagado el día que se conocieron, la que ahora fingiria una relación con su novio por publicidad. 

—bueno... yo.. me voy, supongo. —comenzo a tomar sus cosas, conteniendo las lagrimas.

—aike, espera.—se giro, observandolo con impaciencia, necesitaba salir de ahi, no queria llorar delante de el.

—¿qué? —pregunto, habia sonado más seca y dura de lo que había esperado. 

—te amo.

aquello fue el colmo, se giro y rapidamente salio del lugar, las lagrimas le corrian sin parar por las mejillas. para cuando llego a su casa, solo pudo lanzarse sobre la cama, y llorar, o al menos lo intento, pues unos segundos después se encontraba vomitando en su baño. 

se sentía mareada, confundida y triste. 

—¿hola? anne, ¿puedes venir? —susurro, apoyandose más en el suelo del baño.

unos minutos después la madre de harry se encontraba junto a ella en el baño, sujetandole el cabello mientras dejaba el resto del desayuno en el inodoro. 

—oh, cariño. lo siento tanto.—le acaricio la espalda, a la vez que le pasaba una botella de agua. 

♡

—¿bien? —pregunto anne con emoción, aike miro de nuevo la prueba entre sus manos. 

—estoy embrazada.—susurro, sin poder creerlo, la mayor sonrio y la abrazo casi de inmediato, segundos después ambas estaban llorando. 

—no tienes nada de que preocuparte, cielo. estaré aqui en todo momento para ti. —dijo sonriente, ella asintio y la abrazo de nuevo. 

ser madre sin duda era todo un reto para aike, por suerte contaba con anne, que siempre estaba a su lado para ayudarle. estuvo tomandole la mano el día del nacimiento de la pequeña harriet, en los cumpleaños, sus primeros pasos e incluso el día que dijo sus primeras palabras. 

—no puedo creer que hayan pasado cinco años. —dijo aike, mirando sonriente a harriet, que saltaba de un lado a otro en la sala, jugando con sus muñecas, anne sonrio, entregandole una taza de té. 

—pareciera que hubiese sido ayer. —suspiro, y ambas sonrieron de nuevo. 

como todos los fines de semana, aike y harriet se encontraban de visita en la casa de la abuela anne, la niña se encontraba jugando, mientras que ellas en la cocina se ponían al día y preparaban galletas, por eso mismo cuando el timbre sono, fue la pequeña quien abrio la puerta, encontrandose a un hombre delante de ella. 

—oh. —dijo harry, mirandola con sorpresa.—pero, ¿a quien tenemos por aquí?—pregunto sonriente, harriet sonrio, y harry penso que le recordaba a alguien, solo que no podía identificar quien era. 

—soy harriet, ¿y tu?

—mucho gusto harriet, yo soy...

—¿harry? —pregunto anne, llegando a la puerta, detrás de ella se encontraba una sorprendida aike. 

—¡abuela!—grito la niña, abrazandola de la pierna.

—¿abuela? —pregunto harry sorprendido, mirandolas a ambas. 

♡

—¡harry, harriet! es hora de irnos, llegaremos tarde a la casa de la abuela.—grito aike, subiendo las escaleras. 

al no obtener respuesta, no dudo en entrar a la habitación de harriet, sonrio, observando como ambos se encontraban sentados en el suelo, alrededor de la mesita de harriet, donde también estaban sentados peluches. todos llevaban coronas brillos en la cara. 

—¿qué estan haciendo? —pregunto riendo al ver las tiaras de ambos. 

—una fiesta de té, duh.—respondieron ambos a la vez, lo que la hizo reir mas. 

—me encanta el concepto, pero la abuela anne nos espera en casa, chicos, es hora de irnos.

—¡si, la abuela! —grito la pequeña saliendo de su habitación para buscar sus botas de lluvia. 

—me gusta la tiara. —susurro aike, cuando harry paso sus brazos alrededor de su cintura, acercandose a ella. 

—a mi me gustas tu. —dijo del mismo modo, tomandola de las mejillas para unir sus labios en un tierno beso.