Noviembre 4 2019

Los futbolistas del Chelsea acababan de terminar su entrenamiento, algunos se fueron a duchar mientras otros se quedaban a platicar. César esperaba a que Olivier viniera a los vestidores pues había sentido unas leves molestias en su pierna y tuvo que ir a la sala del fisioterapeuta para que le checaran.

-Es un buen gesto lo que haces por Rebeca- decía Mason llegando.

-Ella se merece estar feliz y yo no era esa persona que le otorgaba aquello. Siempre fue Olivier- explica César.

-Si el Giroud escapa acá estamos el Pulisic y yo para que no se escape- bromea Mason y en eso entra Olivier algo frustrado ya que venia con hielo pegado a su muslo.

-Aún quieres hacer esto? Se ve que viene de malas y tu sola presencia lo empeorará- advierte Pulisic.

-Tengo qué. Es por el bien de ambos- César se acerca al francés y este solo bufa al ver que el español se acercaba a él.

-Qué quieres? No tendrás que verme por las próximas semanas. Tengo un desgarre en el muslo. Espero y estés contento- bufa y César se aguanta las ganas de pegarle por su actitud.

-Mereces estar con Rebeca- suelta de inmediato haciendo que Olivier se tambalee y caiga sentado en su área.

-Acaso me estas tomando por el pelo? Esto es una estrategia para que me aleje de ella?- cuestiona Olivier desconfiado.

-No. Todo este tiempo me puse a pensar y llegué a la conclusión de que Rebeca estaba conmigo solamente para olvidarte pues jamas te dejó de amar. Olivier, los dos se necesitan para ser felices de nuevo- confiesa César y Olivier se pone a pensar.

Quizá Rebeca y César hayan hablando para arreglarse. Aclararon sentimientos y César no podía pelear en una batalla que claramente ya era un perdedor. Aaron tenia razón. Para Rebeca siempre fue Olivier y no César.

-Siento que las cosas contigo y Reb jamas hayan funcionado- confiesa Olivier. -Me siento culpable.

-No no! No pienses así. Yo fui quién se involucró con una persona equivocada. Ahora veo mi error. Pero si te pido que arregles las cosas con ella en orden para que ella sea feliz- pide el seleccionado español y Olivier sonríe tristemente por César.

-Esto debe ser difícil de hacer para ti.

-Lo es. Pero yo quiero ver a Becky feliz y sé que tu te encargaras de eso- entiende César.

-Amigo... yo... no sé qué decir...

-No digas nada. Solo prométeme que la cuidarás como yo no pude.

-Te lo prometo, César- ambos se estrechan manos.

Agosto 21 2012

-No puedo creer que estemos en Londres!!!- decía emocionada Mar.

-Nueva ciudad, Mar. Nos tendremos que acostumbrar a este clima frío- decía Rebeca mientras desempacaban sus cosas y cuando terminan deciden ir a cenar a un restaurante que quedaba cerca.

-Estoy muyyyy hambrienta!!!- cabe recalcar que ambas chicas aun eran jóvenes y eran personas completamente diferentes.

-Ya mero viene la comida, tienes que aguantar- replica Rebeca.

-Joder! Qué ya venga!- en eso la menor de las Reynoso desvía la mirada a la mesa que estaba frente de ellas del otro lado del restaurante y le llamó la atención que uno de los chicos se le quedara viendo a su hermana. Después se fijó en el otro chico rubio el cuál captó su interés. -Al parecer tienes un admirador- Mar señala para que Rebe pueda ver y Rebeca se puso nerviosa al ver al chico guapo.

-Es guapo- se le escapa decir y en eso el rubio le dice a su amigo que Reb lo estaba viendo haciendo que la española se gire para que no se de cuenta -Mierda! Su amigo se dio cuenta que le vi- se avergüenza.

-Aww que tierno que los dos nos hayamos dado cuenta. Ya está! Él es mi futuro novio- decía Mar.

-Relájate, Mar. De seguro es mayor que tu por 10 años- las hermanas se ponen a comer y cuando salen del restaurante aquellos dos chicos seguían a las Reynoso.

-Ehh se les ofrece algo?- decía Mar.

-Vamos, Olivier- susurra el rubio al chico que captó el ojo a Reb.

-Hola, soy Olivier- se presenta hacia Rebeca.

-Hola! Mucho gusto soy Rebeca!!- sus mejillas se tornaban rojas.

-Soy Mar, un placer!- decía Mar para cortar el incómodo silencio que se había originado.

-Haha, soy Aaron- reia el rubio por la actitud de Mar.

-Oh vamos! Que a kilómetros se nota que ambos se gustaron! Ya den el siguiente paso, quieren?- desvela Mar haciendo que Olivier se sonroje y Rebeca asesine con su mirada a su hermana. -Esta es mi salida. Aaron, me acompañas?- decía Mar tomando del brazo al galés para ambos alejarse.

-Bueno, supongo que tu hermana no se equivoca...-decía Olivier.

-La mataré cuando lleguemos a casa- ambos ríen.

-Te gustaría salir alguna vez? Solo los dos para evitar interrupciones?- invita Olivier.

-Acaso el señor Olivier me esta invitando a una cita?- pregunta Rebe.

-Pues claro que si. Puedo notar que una chica como tu se merece que absolutamente todo salga perfecto. Déjame llevarte a donde tu quieras- toma su mano con delicadeza para depositar un beso.

Aquello se le llama amor a primera vista.