
[ ✦NUEVE✦ ]
―¿Qué hacen... ustedes aquí?― JiMin miró a los tres jovenes que se hallaban sentados cómodamente en el sofá más grande de su sala.
―No nos hemos visto en meses y, ¿así es como nos saludas?― El mayor de los tres se puso de pie lo miró sintiéndose indignado. ―Y nosotros que te echábamos tanto de menos.― Comentó con voz juguetona.
―No está feliz de vernos, mejor vámonos― Añadió el otro joven Alfa. ―Te dije que venir sin avisar no era buena idea. Por eso yo siempre hago los planes, los tuyos apestan.― Dijo burlándose de su amigo pero fingiendo seriedad.
―Lo sé, por eso te traje conmigo.― Respondió. Sí, la verdad es que sus planes no eran muy buenos, a diferencia de los planes de Yugyeom, los cuales siempre salían a la perfección.
JiMin no pudo evitar reír ante el comportamiento de sus amigos. No habían cambiado en nada. Los dos seguían siendo igual de sarcásticos, alegres y juguetones que antes.
―Por supuesto que los extrañe― Sonrió abrazándolos. ―Ey, chica seria, ¿No me darás un abrazo?― Miró a quién aún se hallaba sentada en el sofá.
―Cuando esos dos te suelten― Respondió.
―Como diga, señorita― Dijeron los dos Alfas alejándose del Alfa rubio.
―Es bueno verte de nuevo― Comentó la Alfa con una diminuta sonrisa abrazando a JiMin.
―Lo mismo digo― JiMin la abrazó con fuerza. La había extrañado demasiado. A los tres. Pues a pesar de parecer seria, JiMin sabía que Jisoo era quién más se preocupaba por los demás, y también sabía que mataría y daría su vida por proteger a su gente. Pues fue de esa forma como ambos se conocieron, gracias a una pelea.
―Me parece que nuestro líder se ha hecho más alto― Comentó Yugyeom. ―Lo recuerdo más pequeño.
―No te burles― Jackson le golpeó la cabeza. ―Respetalo.
―Lo hago― Respondió, llevándose una mano a la cabeza. ―Y no me estaba burlando.― Se defendió.
―Ustedes, definitivamente, son mi dúo favorito― Comentó JiMin con una hermosa sonrisa en el rostro luego de separarse de la Alfa. ―Y ya no soy su líder, Yeom― Aclaró. ―Dejé ese puesto y ahora le pertenece a Jaebeom.
―Para nosotros, tú siempre serás nuestro líder― Comentó Jackson. ―Jaebeom es bueno, pero jamás será como tú.
―Jackson tiene toda la razón― Yugyeom apoyó a su amigo.
―Como digan― Negó divertido. ―Bueno, me dirán por qué vinieron, ¿o no?
―Qué lo diga él― Señaló a Jackson. ―Sus planes serán malos pero sus formas de informar son buenas.
―Ugh, no puedo negar eso.
―Ustedes dos, par de idiotas, ya dejen de jugar― Los regañó la única chica Alfa del grupo rodando los ojos. ―Vinimos porque queremos hablar contigo.― Comentó con bastante seriedad en su rostro preocupando a Park.
―Me estás asustando Jisoo, ¿De qué quieren hablar conmigo?― JiMin miró a sus amigos esperando una respuesta.
―¿Es que no podías esperar un poco más?― Preguntó Jackson mirando con el ceño fruncido a la Alfa. ―Se supone que primero ibamos a pasar un día agradable y divertido, como en los viejos tiempos.
―Y luego le diríamos la verdadera razón de nuestra visita.― Agregó Yugyeom suspirando frustrado. ―Eres una aguafiestas. Ya lo preocupaste.
―Chicos, entiendo que estén felices de verlo de nuevo, yo también lo estoy, pero no podemos olvidar la razón por la que vinimos aquí.― Comentó, para luego suspirar. ―Si tan solo no estuviéramos en está situación desde luego que estaría de acuerdo con ustedes, pero no puedo, no ahora. Si no tardamos más tiempo, nuestros amigos estarán en peligro. No sabemos cuando volverán a atacar.
―La muñeca tiene razón― Aceptó Yugyeom. ―Yo... Quiero decir nosotros... nos dejamos llevar por el momento.
―Por un momento, olvidamos todo...― Jackson habló melancólico. ―Recordamos el pasado y... la felicidad de vernos nuevamente nos... nos hizo olvidar lo demás.
―Haber, stop ahí― Habló JiMin. ―¿Me pueden explicar que está pasando? ¿Por qué Jisoo dice que los demás están en peligro?
Los dos Alfas se miraron entre sí, antes de que Jisoo se les adelantara y comenzara a explicar.
―¿Recuerdas a Han Seok?― Preguntó la Alfa mirando al rubio.
―¿El chico que acogimos en King Wolf?
―Sí, el chico que salvaste de morir aquel día y al que dejaste quedarse en King Wolf mientrás se recuperaba, nos está atacando.
―¿Qué?― Eso no podía ser cierto. ―¿Están seguros de que es él?
Los tres asintieron.
Ellos tampoco podía creerlo.
Le dieron un techo, comida, respaldo y ahora les hacía esto, ¿por que? Esa era la pregunta que circulaba sus mentes pero ninguna tenía una respuesta acertada.
―Han Seok formó su propio equipo luego de abandonar King Wolf, Vengeful Wolf, así se llama su equipo.― Informó Yugyeom apretando inconscientemente los puños. ―Escuchamos que se ha apoderado de Teen Wolf luego de derrotar al antiguo Líder y Alfa, y ahora está atacándonos a nosotros.
―Creemos que Han Seok quiere apoderarse de los cuatro grandes equipos para tener más poder e influencia en Tokio y poder enfrentarse a los líderes de la primera generación, pero no podemos asegurar si esa es la verdadera razón o no― Comentó Jackson. ―Lo que sí sabemos, es que Han Seok no va a detenerse hasta vencer a Jaebeom y apoderarse de King Wolf.
―Él mismo lo dijo, no va a detenerse hasta lograr su objetivo― Volvió a hablar Yugyeom. ―Y si algo podemos asegurar es que Han Seok usará cualquier método con tal de apoderarse de King Wolf.
―Por eso hemos venido a buscarte― Jisoo volvió a tomar la palabra. ―Te necesitamos, necesitamos a nuestro líder y Alfa de vuelta.
―Deberían confiar más en Jaebeom, estoy seguro de que él podrá lidiar con esto.
Jisoo negó. ―Él quedo bastante herido después de su última batalla con Han Seok y aún está recuperándose. No podrá resistir mucho más, y los demás chicos, aquellos que confían en nosotros, están perdiendo las esperanzas. Tienen miedo de que Han Seok pueda vencer a Jaebeom.― La Alfa miró a JiMin con desesperación en los ojos. ―Ellos son nuestros amigos y han protegido y defendido King Wolf con su vida, pero si esto continúa así, los perderemos a todos.
―¿A qué te refieres con todos? ¿A quienes han perdido?― Su voz salió de forma dominante y llena de preocupación por su manada. ―¡RESPONDE!― JiMin sujetó por los hombros a la pelinegra.
Entonces la Alfa no soportó más y las lágrimas comenzaron a caer de sus ojos sin su consentimiento.
―Perdimos a tres, JiMin― Dijo entre lágrimas. ―Perdimos a Jaehyung, a Jung-woo y.... y a Sana― Su voz se rompió al decir lo último. ―Yo... Yo perdí a mi Omega... y jamás me voy poder perdonar por eso... No pude salvarla, no pude protegerla...― Sus piernas perdieron fuerza y hubiera caído al suelo de no ser porque JiMin la estaba sujetando. ―N-No quiero... perder a nadie más... ellos son mis amigos, mi familia, mi manada.
―No puede ser cierto― El rubio se negaba a aceptar la muerte de sus amigos. Los conocía a todos y cada uno de ellos, y no podía aceptar que ellos... No, eso no podía ser cierto.
Sana siempre fue una Omega muy amable y amigable, ella era quién siempre les preparaba las comidas cada vez que sus padres no estaban.
Jaehyun, o por supuesto que lo conocía y lo recordaba muy bien. Jaehyun era un Alfa bastante alegre, amigable y extrovertido, muy parecido a Yugyeom en personalidad, por eso se llevaban muy bien pero al mismo tiempo competían para ver quién era el mejor. Lo recordaba con una sonrisa en el rostro, coqueteando a cada rato con Taeyong.
Y Jung-woo, aquel niño que encontró en la calle siendo golpeado por otros más grandes, aquel niño que siempre le fue leal y lo respeto demasiado, aquel que lo consideraba su héroe. No podía ser cierto. ¡Maldita sea! Jung-woo era solo un adolescente lleno de sueños y con toda una vida por delante.
―Ellos murieron en batalla― Habló Jackson recordando como sus amigos murieron, uno a uno, dando todo de sí mismos hasta el final.
Los dos Alfas no pudieron evitar bajar la mirada con tristeza mientrás a sus mentes llegaban los recuerdos de sus amigos caídos en batalla.
―Ellos dieron su vida por proteger a King Wolf― Comentó esta vez Yugyeom. ―Aún estando gravemente heridos...― Pasó el nudo que se había formado en su garganta. ―Ellos siguieron peleando y defendiendo a nuestra manada.
―Por eso, te necesitamos de vuelta― Jackson miró decidido a JiMin. ―Necesitamos a Jim de regreso.
―Solo tú puedes detener a Han Seok― Jisoo miró suplicante al rubio. ―Por favor, regresa a King Wolf.
―No puedo, yo... yo dejé eso, no puedo volver― JiMin negaba con la cabeza. ―No puedo volver a Tokyo, no puedo.
―JiMin...
―No puedo Jackson, no puedo volver ahí.
―¿Acaso no te importa nuestra manada?
―Por supuesto que me importa― Respondió de inmediato. ―Ellos son mi familia también, y quiero ayudarlos pero... Tengo miedo― Confesó. ―¿Y si pierdo el control como aquella vez? ¿Y si los lastimo de nuevo?― Ese era su mayor miedo. Perder el control de sus emociones y de su animal interno, atacando sin piedad alguna a todo aquel que se cruzara en su camino, razón por la cual no había vuelto a transformarse desde que dejó King Wolf. ―No podría perdonarme jamás si llego a lastimarlos otra vez.
―No lo harás― Jackson negó con la cabeza. ―Nuestro Alfa no nos lastimaría jamás. Aquella vez solo atacaste a JongIn porque se acercó demasiado a Alexa, y al estar herida, tu subconsciente te hizo estar alerta y atacar a JongIn, pero lo hiciste porque querías protegerla.
―Confiamos en ti, JiMin― Jisoo lo miró mostrándole su confianza ciega en él.
―Bueno, yo... talvez no tanto― Habló Yugyeom ganándose las miradas fulminantes de sus amigos.
―No es momento para bromas, Yeom― Regañó Jackson.
―Lo sé, solo... solo intentaba levantarles el ánimo― Confesó suspirando. ―Por favor, vuelve con nosotros, JiMin.
―Yo...― JiMin miró a sus amigos, quería ayudarlos pero... la sola idea de lastimar a sus amigos... le aterraba demasiado.
―¿Sabes? Incluso estando agonizando, ellos todavía pensaban en ti― Comentó Jackson, sus ojos se cristalizaron.
―¿Lo hice bien, hyung?― Preguntó Jung-woo antes de escupir sangre. ―¿C-Cree que... JiMin hyung... estaría... o-orgulloso de mí?
―Sí, lo hiciste bien― Jackson sonrió con lágrimas en los ojos viendo como Jung-woo iba cerrando lentamente los ojos hasta dejar de respirar. ―Él estaría muy orgulloso de ti.
―Esas fueron las últimas palabras de Jung-woo antes de morir― Comentó Jackson, sin darse cuenta que algunas lágrimas habían comenzado a caer de sus ojos. ―Él pensó en ti hasta el último segundo de su vida.
JiMin sintió un fuerte dolor en su pecho. Era horrible. Aquel chiquillo era como un hermano menor para él, por lo que, oír aquello fue como un cuchillo siendo clavado en su corazón.
“¿Qué hago? ¿Qué se supone que debo hacer?” Le preguntó a su lobo esperando escuchar su respuesta. Necesitaba escucharlo. Lo necesitaba más que nunca.
“Solo sigue tu corazón” Fue lo único que dijo su lobo en respuesta.
―Nosotros tenemos que volver. No podemos quedarnos más tiempo― Comentó Jackson observando un mensaje que le había llegado. ―Es probable que ataquen King Wolf el día de mañana y nos necesitan de regreso para preparar la defensa y elaborar un plan de contraataque.
―JiMin, por favor, vuelve con nosotros― La Alfa sujetó la mano de JiMin esperando escuchar su respuesta.
―Sabes donde encontrarnos― Jackson no le dejó responder. El Alfa azabache sujetó a la pelinegra apartándola de JiMin. ―Vamonos, Jisoo.
―¿Jackson?― Yugyeom lo miró sin creer lo que Jackson estaba haciendo.
―No podemos obligarlo a volver― Comentó.
―P-Pero...
―Es hora de irnos, Yugyeom― Dijo, caminando hasta la puerta junto a la Alfa. ―Fue bueno verte de nuevo.
Los dos mayores salieron de la casa de Park, dejando solo a Yugyeom que aún no lograba salir de ahí.
―Solo tú puedes detener esto― Yugyeom lo miró pasando por su lado. ―Solo tú puedes vencer a Han Seok.
―Yugyeom...
―Te estaremos esperando. Vuelve a King Wolf― Y dicho eso, salió de la casa. ―Es lo que él hubiero querido.
JiMin quedó solo, sintiéndose confundido sobre que hacer, quería ayudarlos pero no se sentía listo para volver a Tokyo.
―Diosa Luna, por favor ilumíname, dime que debo hacer― Pidió, sabiendo que no obtendría una respuesta.
Necesitaba descansar, toda esta situación lo sobrepasaba. Era demasiado para un solo día. Sin pensarlo demasiado, ya estaba dirigiéndose a su habitación.
―Jaehyun, Jung-woo, Sana...― Murmuró, acostándose en su cama. ―¿Por qué tuvieron que irse primero?― Cerró los ojos, dejando que las lágrimas cayeran de ellos, mojando su rostro. ―Prometieron que nos volveríamos a ver otra vez.
―Oppa.
―¿Qué sucede muñequita?― Preguntó mirándola con una sonrisa sabiendo que no le gustaba que la llamaran de esa forma.
―¡Oppa!― Se quejó con un puchero.
JiMin no pudo evitar reír ante ello, más aún, al ver como su amiga, una Alfa indomable, se había quedado completamente embobada viendo a la Omega de cabellos rubios.
―Perdón, perdón― Se disculpó entre risas.
La Omega negó, sabiendo que su líder jamás iba a cambiar esa forma de ser que tenía.
―Cuando nos veamos de nuevo...
―¿Qué harás?
―Voy a prepararte esas galletas de vainilla que tanto te gustan.
―¿Es una promesa?
―Lo es― Aceptó la Omega con una sonrisa. ―Es una promesa de que nos volveremos a ver.
―Entonces esperare esas galletas con ansías.
Sin darse cuenta, había caído en los brazos de morfeo, soñando con aquellos recuerdos que en su momento fueron muy agradables.
―Hyung, cuando crezca quiero ser como usted.
―¿Cómo yo?
―Sí, quiero ser fuerte e inteligente como usted, y quiero ayudar a los demás, así como hyung lo hizo conmigo― Respondió Jung-woo.
JiMin revolvió los cabellos del chico. ―Estoy seguro de que lo lograrás― Dijo con una sonrisa, haciendo sonreír también al menor.
Luego, la persona en su recuerdo cambió, ya no era Jung-woo, ahora era Jaehyun.
―Ey, hyung, ¿a donde vas?― Preguntó Jaehyun dándole el alcance.
―A buscar un poco de diversión.
―¿Parejas sexuales?
Un golpe fue depositado en la cabeza del Alfa menor.
―Esa no es la única forma de divertirse.
Jaehyun rió. ―Lo sé, solo estaba molestándolo.
―No te pases mocoso― Lo regañó, pero una diminuta sonrisa estaba presente en su rostro.
―¿Cuándo conseguirá una Luna para la manada?
―No tengo planes de emparejarme con nadie aún, así que ve olvidándote de esas ideas.
―Sería lindo verlo con alguién más― Sonrió encantadoramente ignorando sus anteriores palabras. ―¿Qué tal Jisoo noona? Ustedes se llevan muy bien y el hecho de que sea una Alfa no es un problema.
―Tú, pequeño demonio, quieres morir, ¿verdad?
―Oh, oh― El Alfa menor se alejó unos cuántos pasos lentamente antes de que JiMin caminara de la misma forma hasta él provocando que Jaehyun corriera como si su vida dependiera de ello.
―¿Cómo puedes decir tremenda barbaridad como si nada?― JiMin empezó a correr detrás de él tratando de alcanzarlo. ―¡Ella es como mi hermana!
―¡Pero no lo es!― Respondió sin dejar de correr. Obvio solo estaba bromeando. Él tampoco veía a JiMin y Jisoo como una pareja. Le daba escalofríos de solo pensarlo pero era divertido molestar a su hyung con ello.
―Tú realmente quieres morir, ¿verdad?
―Nop, ¡quiero vivir, quiero vivir mucho tiempo y pelear junto a hyung para proteger King Wolf!― Respondió, justo antes de que JiMin pudiera alcanzarlo. ―Qué velocidad― Habló entre carcajadas.
―¿Qué esperabas? Soy el Alfa de esta manada― Dijo algo presumido, provocando que las carcajadas del contrario aumentaran. ―Y tú, no vuelvas a decir eso ni en broma.
―Vale, no lo haré― Prometió. ―Pero cuando hyung tenga pareja, me gustaría conocerla o conocerlo, ¿sí?
―Ten por seguro que lo harás.
¿Quién diría que eso ya no se podría cumplir?
Quién sabe por cuánto tiempo estuvo dormido, pero cuando despertó no podía dejar de llorar, su respiración era irregular y su corazón latía con fuerza mientrás en su mente se reproducían las voces de sus amigos.
―Perdón... Perdón por no haberlos protegido...
―Hijo, ¿qué sucede?― Hyung Sik entró a su habitación mirándolo con preocupación al verlo llorando.
―Papá― JiMin lo abrazó, dejándose envolver por los cálidos brazos de su padre Omega. ―¿Qué hago papá? ¿Qué debo hacer?
―No puedo darte un respuesta si no me explicas que sucede― Respondió.
―King Wolf
―¿Qué sucede con ellos?
―Necesitan ayuda, están siendo atacados por otro equipo, y hoy vinieron Jackson, Yugyeom y Jisoo pidiéndome que volviera, pero tengo miedo papá. Tengo miedo de volver ahí.
―¿Es por lo sucedido hace tiempo?― JiMin asintió. ―Esa vez perdiste el control por que viste a tu mejor amiga muy mal herida, casi sin vida, pero ahora tienes un mejor control de tus emociones, así que no sucedera lo mismo.
―¿Cómo puedes estar tan seguro de eso?
―Por qué conozco a mi hijo.
―Ellos son tu familia también, han estado a tu lado incluso en tus peores momentos, apoyándote siempre. Y no lo han hecho con la intención de que tu también hagas algo por ellos, no cariño, ellos lo han hecho porque te quieren, te aprecian y te respetan. Tú fuiste, eres y siempre serás su Alfa y Líder, y el que ellos hayab venido hasta aquí para pedir tu ayuda significa que realmente te necesitan.― Hizo una pequeña pausa. ―¿Recuerdas la regla principal de King Wolf?
―La manada antes que el lobo― Respondió JiMin. Aquella era una regla fundamental en King Wolf. ―Soy patético, ¿verdad papá?
―No lo eres. Simplemente tienes un pasado que te ha dejado muchas marcas, y es normal que tengas miedo. Pero no deberías dejarte atormentar por ello, y ten por seguro que eso no pasara de nuevo.
―Gracias, papá― JiMin soltó a su padre y quitó las lágrimas de sus ojos. ―Necesitaba escuchar eso.
―De nada, mi cachorro.
―¿Podrías justificar mi falta en la Universidad por una semana?― Pidió.
―Eso es fácil.
―Gracias.
―¿Irás ahora mismo?
―Primero necesito hacer algo― Respondió, sacando su celular enviándole un mensaje a Yoongi. Necesitaba verlo, abrazarlo y... besarlo una última vez antes de ir a Tokyo.
━━━━━━━━ • ✿ • ━━━━━━━━
Yoongi se encontraba completamente cansado después de la tarde junto a sus amigos.
Habían ido a correr moto, luego fueron a jugar baloncesto, jugaron vídeojuegos, también fueron al cine a ver una película que a Yoongi terminó por darle sueño.
Por eso, ni bien llegó a su habitación, dejó sus cosas a un lado y se dejó caer sobre su cama.
Un rato después, un mensaje apareció en su pantalla. Era JiMin.
JiMin♡ Duermes?
Yoongi
Aún no
Respondió Yoongi ingresando al chat, entonces otro mensaje le llegó.
JiMin♡
Podemos vernos un rato?
Yoongi
Donde?
JiMin♡
Mira por tu ventana
Yoongi hizo caso, miró por la ventana de su habitación y vió a JiMin fuera de su casa, recostado sobre su auto.
Esta vez era uno de color rojo.
JiMin al verlo lo saludó con una sonrisa desde abajo, y él se apresuró en bajar las escaleras y abrir la puerta para salir a su encuentro.
¿Qué hacía JiMin ahí?
¿Por qué había ido tan tarde a su casa?
―¿Por que estás aquí?― Preguntó Yoongi al abrir la puerta y estar frente al Alfa rubio.
―Solo quería verte un rato― Respondió JiMin. ―Y...― Lo abrazó por la cintura. ―Necesitaba abrazarte.
―A ti te pasa algo― Dijo Yoongi mientrás sentía la respiración del rubio chocar contra su cuello. Había algo raro en el rubio. ―¿Qué tienes?
Ya no puedo ocultarte nada, ¿verdad? Pensó el Alfa rubio para sí mismo antes de responder. ―Mañana me voy de viaje, probablemente me tarde una semana o más en volver, y aún no armé la maleta.
―¿Te vas? ¿A donde?― Preguntó Yoongi con curiosidad. ―¿Por qué?
―Tengo unos asuntos que resolver en Tokyo, pero quería despedirme de ti antes de irme― Lo apegó más a él. ―Te voy a extrañar demasiado.
―Te vas una semana, ¿no?― Preguntó a lo que JiMin asintió. ―Más te vale volver en una sola pieza.
JiMin sonrió. ―Por supuesto.
―Entonces, ¿nos vemos dentro de una semana?
―Sí― Respondió JiMin mirándolo encantado. ―Te amo, mi principito― Dijo, haciendo sonrojar al Alfa pelinegro.
―No soy un príncipe.
―Para mí si lo eres― JiMin lo miró directamente a los ojos. ―Eres mí príncipe.
―No tiene caso discutir contigo― Yoongi negó con la cabeza.
―Eso es porque tengo razón. Tú eres mí príncipe, el único dueño de mi corazón― y el que me ha jodido completamente. Jodiste mis planes, pero no me disgusta eso, no me disgusta porque... ―conocerte fue lo mejor que me he pasado.
―¿No te gustaría ser poeta?
―Ya lo soy― Respondió, Yoongi lo miró desconcertado. ―Pero solo contigo.
―Ahh.
Se veía tan adorable en ese momento que le fue inevitable no preguntar. ―¿Puedo besarte?― Necesitaba hacerlo. Necesitaba probar sus labios una vez más.
―¿Es necesaria la pregunta?
JiMin sonrió y lo atrajo aún más hacia él para besarlo.
Yoongi le correspondió el beso sin dudarlo, ya no tenía por qué hacerlo, y cuando se separaron, fue Yoongi quién comenzó a besarlo nuevamente.
Después de unos minutos, JiMin se detuvo y lo abrazó, ocultando su rostro en el cuello del Alfa pelinegro.
―¿Qué pasa?
―Si sigo abrazándote y besándote, no creo que pueda volver a casa― Habló con la respiración agitada.
Yoongi sonrió divertido. ―¿Cómo vas a aguantar una semana sin verme?
―Lo mismo me pregunto, ¿qué voy a hacer sin ti?― Si me conocieras realmente, si supieras quién soy... ¿me dejarías estar cerca de ti? ―Cuando vuelva, la primera persona a la que iré a ver... serás tú― Prometió.
―Al menos traeme algo de allá― Pidió el Alfa pelinegro.
―Por supuesto, ¿qué quieres que te traiga?
―Cualquier cosa, no me importa realmente de que se trate.
―Bien.
Esa misma noche, después de regresar a su casa, JiMin les envió un mensaje a Namjoon y Taehyung informándoles que probablemente no iría a clases por algunos día.
Ellos preguntaron el motivo, pero él no podía decírselos. Aún no.
Era mejor si ellos no se enterasen de nada.
A la mañana siguiente, JiMin se encontraba bajando sus maletas al primer piso con ayuda de su padre Alfa y su hermano menor.
―¿Enserio tienes que ír?― Preguntó JiHyun una vez que sus maletas ya estuvieron abajo.
―Tengo que hacerlo― Respondió, está vez no había duda en su voz sino completa seguridad. ―Ellos necesitan mi ayuda y mi deber como el antiguo Alfa y Líder de King Wolf es ayudarlos. No solo por ser mi deber sino porque ellos son mis amigos y aunque haya dejado ni puesto, ellos siempre serán mi manada.
JiHyun asintió entendiendo las palabras de su hermano mayor. ―Cuídate mucho, ¿sí?
JiMin le sonrió a su hermano menor, revolviéndole el cabello. ―Por supuesto.
―Avísanos cuando llegues a Tokyo― Pidió el único Omega de la casa.
JiMin asintió en respuesta.
―Asegurate de ponerle fin a esa situación― No era solo el pedido de un padre hacia su hijo sino de un Alfa a otro. ―Solo así, tus amigos podrán descansar en paz.
―Lo haré. Voy a detener a Han Seok― Dijo con seguridad.
Lo haría.
Vengaría la muerte de sus amigos.
Detener a Han Seok era el único pensamiento que circulaba su mente.
―Me voy― Dijo.
Su padre Alfa ya había calentado el auto por lo que ya estaba listo, sí, Seojoon sería quién lo llevaría al aeropuerto.
―Vamonos― Seojoon ayudó a su hijo a meter las maletas en el auto.
―Los veo en una semana― Dijo, antes de subir al auto de su padre, mirando con una sonrisa a su padre Omega y a su hermano menor.
Unos veinte minutos después, JiMin ya se hallaba en el aeropuerto, esperando por su vuelo.
Su padre estaba a su lado, acompañándolo hasta que lo llamaran para subirse al avión.
LLAMANDO A TODOS LOS PASAJEROS CON EL VUELO
A TOKYO DE LAS 07:00.
―Ese es mi vuelo― Comentó JiMin poniéndose de pie.
―Regresa a salvo, por favor― Pidió Seojoon.
―Lo intentaré― Respondió.
―Dame un abrazo― El Alfa mayor se acercó a su hijo para abrazarlo.
Un abrazo que fue correspondido por el menor.
LLAMANDO A TODOS LOS PASAJEROS CON EL VUELO
A TOKYO DE LAS 07:00.
―Anda― Dijo su padre.
JiMin asintió separándose de su padre Alfa para ir rumbo a su avión.
―Volveré― Murmuró mientrás caminaba. ―Tengo una promesa que cumplir.
Era hora de volver.
―Tokyo, allá voy.
ULTIMO LLAMADO A TODOS LOS
PASAJEROS CON EL VUELO HACÍA TOKYO DE LAS 07:00.
Se escuchó por todo el aeropuerto, mientrás JiMin caminaba por el pasillo que lo llevaría al interior del avión. Obvio, antes le habían pedido su boleto, al que tardo unos segundos en encontrar, pero finalmente estaba apunto de subirse en aquella nave.
Tokyo lo esperaba y con ello gran parte de su pasado.

Y aquí estamos otra vez, con un nuevo capitulo de “LBA”.
Aquí conocemos un poco más del pasado de JiMin, ¿qué más creen que habrá?
¿Qué sucederá en Tokyo?
Dejen sus teorías aquí☞
Los estare leyendo.
Lxs quierx muchx❤❤
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro