
[ ✦ESPECIAL II +18✦ ]
TAEHYUNG/JUNGKOOK
La noche era joven y el bar estaba lleno de gente dispuesta a divertirse. Taehyung había llegado al bar donde Jungkook lo esperaba y después de deambular un poco lo encontró sentado en una de las mesas, hablando con sus amigos y se veía precioso vistiendo de esa manera.
Sin embargo, otra cosa llamó su atención. Kim Mingyu, un Alfa y amigo de Jungkook, estaba detrás de él con un brazo en el respaldar de la silla, prácticamente abrazándolo. Eso a Taehyung no le agrado para nada ya que, ese chico parecía estar interesado en Jungkook, y que estuviera así de cerca de su novio lo ponía un poco demasiado celoso.
Okay, era territorial, pero con justa razón.
Jungkook era un Omega precioso, atractivo en todo el sentido de la palabra. Todo era perfecto en él. Por eso, aunque quisiera, le era imposible no ser posesivo con semejante chico sabiendo que era una tentación andante.
―Kookie― Lo llamó parándose frente a Jungkook y sus amigos.
―¡TaeTae!― Casi gritó el Omega al levantarse y saltar hacia él. ―Llegaste― Murmuró con una sonrisita rodeando el cuello de Taehyung con sus brazos.
―No podía dejar que te divirtieras sin mí, ¿esperaste mucho?― Preguntó, Jungkook negó.
Taehyung le sonrió y miró por encima de Jungkook a Mingyu que desvío la mirada hacia otro lado. Taehyung sonrió malicioso, y bajó su rostro besando los labios de su novio que le correspondió de inmediato. Y Mingyu no tardó en desaparecer del lugar.
―Estás precioso, amor― Le dijo Taehyung. ―¿Por qué eres tan guapo? ¿Y si otros se enamoran de ti?
―Que lo hagan, de todas formas, a mí solo me importas tú― Respondió Jungkook, sonriendo, y volvió a besar a su novio. ―Mi Alfa.
Taehyung sonrió. ―Solo tuyo, mi amor― Murmuró en medio del beso.
―Bueno, basta de besos― Dijo Jungkook, rompiendo el beso. ―¡Vamos a bailar!
―Lo que tú digas― Aceptó Taehyung.
Jungkook sonrió y volteó a ver a sus amigos, notando la ausencia de Mingyu.
―Eh, ¿a dónde fue Gyu?
―Creo que fue al baño― Respondió uno de los amigos de Jungkook.
―Ah, como sea, ya regreso, voy a bailar―. Les avisó a sus amigos.
―Qué suerte tienes Jungkook, tienes un novio bastante atractivo con el cual bailar, en cambio nosotros estamos más solos que un desierto― Dijo el otro chico que, si Taehyung recordaba bien, su nombre era JiHoon. Y era un Omega.
―Soy bien afortunado, ¿no?― Sonrió un tanto presumido haciendo sonreír a sus amigos con diversión.
―Ve a bailar ya― Dijeron.
Jungkook asintió y tomó la mano de Taehyung, para pasar entre todos los chicos que los rodeaban hasta llegar a la pista de baile entre canciones movidas.
―¿Podemos tomar algo primero?
Jungkook asintió. ―Vamos.
Ambos fueron hasta la barra donde pidieron algunos tragos.
―¿Qué quieres tomar TaeTae?― Preguntó Jungkook.
―Una cerveza está bien, ¿tú vas a tomar?
Jungkook asintió. ―Esta es la segunda vez que tomaré alcohol, pero lo haré solo porque tú estás conmigo y me cuidarás.
Taehyung tomó un trago de la cerveza y arqueó una ceja, sonriendo ante la confianza que Jungkook le tenía.
―Hay que brindar― Dijo Jungkook.
―¿Brindar?― Preguntó Taehyung, confundido.
―Sí, me gustaría brindar por lo nuestro, por el tiempo que hemos pasado juntos, y por todo el tiempo que vamos a compartir de ahora en adelante― Explicó el menor, levantando su cerveza.
Taehyung miró la sonrisa de Jungkook y también sonrió chocando sus cervezas.
―Por un futuro juntos.
Luego, Jungkook lo arrastró nuevamente a la pista de baile y Taehyung no sabía dónde poner sus manos en el cuerpo de Jungkook. Añadiéndole que el menor era un buen bailarín de todo tipo de música al parecer y por lo sexy que Jungkook le estaba bailando en esos momentos, trató de tocarlo lo menos posible al moverse al ritmo de la música porque tener una erección a mitad de una sala repleta de gente no era lo que quería.
Sin embargo, el momento les arruinado cuando un Alfa desconocido empezó a acercarse más de lo que debería a Jungkook. Taehyung, por supuesto, trató de tener a Jungkook cerca suyo y dejarle en claro al otro sujeto que Jungkook no estaba solo, pero al otro Alfa no pareció importarle eso y permaneció cerca de Jungkook, observándolo de manera lasciva.
Taehyung enserio quería arrancarle los ojos a ese chico. ¿Cómo se atrevía ese imbécil a mirar de esa forma a SU Omega?
De repente, el Alfa desconocido chocó "accidentalmente" con Jungkook, lo que hizo que el Omega se sintiera incómodo.
―¡Ey! ¡Ten cuidado!― Dijo Jungkook cuando sintió que alguien chocó con él.
―Vete más allá, ¿quieres?― Le sugirió Taehyung en un tono de advertencia. ―Estás incomodando a MI Omega.
―Está bien― Aceptó, pero no parecía sincero en lo absoluto.
Estuvieron unos minutos tranquilos hasta que el tipo volvió a aparecer y está vez le tocó el trasero a Jungkook. Taehyung, sin poder contenerse, le lanzó un puñete al tipo, haciéndolo caer de bruces al suelo y provocando que el resto de personas se alejaran dejándolos en el centro.
―¡Maldito infeliz!― Gritó Taehyung, furioso. ―¿¡Quién mierda te crees para tocar a mi Omega!?― Su voz de Alfa salió a flote sin siquiera intentarlo, demostrando lo enojado que estaba.
Jungkook aprovechó que el tipo estaba en el suelo para darle una patada en la entrepierna. ―¡Maldito pervertido!― Exclamó, enojado al igual que Taehyung.
Los amigos de Jungkook, que vieron a Taehyung golpeando a alguien, se acercaron y Mingyu también le dio unos buenos golpes al Alfa desconocido cuando Jungkook les dijo lo que había sucedido.
―¡Este tipo necesita aprender a respetar a los demás!― Gruñó Mingyu.
¡Pelea! ¡Pelea! Se escuchaba que decían el resto de los presentes, haciendo un círculo alrededor.
JiHoon y Mingi trataron de detener a Mingyu y Taehyung, pero estos no les hicieron caso. Jungkook, por su lado, los alentó a seguir golpeando al tipo.
―¡Déjenlos, chicos!― Dijo Jungkook. ―¡Este tipo se lo merece!― Pero sus palabras se cortaron cuando vio que Taehyung fue golpeado por el Alfa desconocido. ―¡Tae!― Exclamó, preocupado, acercándose al castaño.
Los guardias de seguridad llegaron en ese momento y los separaron. Y los tres terminaron siendo llevados a la comisaría debido a que alguien de los presentes los había llamado.
En la comisaría, el Alfa desconocido sonreía de manera arrogante y burlona mientras miraba a Taehyung, y de manera lasciva mientras miraba a Jungkook.
―No te preocupes, cariño― Le dijo Taehyung a Jungkook. ―Saldré de aquí pronto.
Mingyu, quién era hijo de un detective policial, le dijo a su padre cuando llegó lo que sucedió en el bar.
―Ese tipo es el único que debería ser encerrado― Dijo, enojado.
―Pero con golpes no se resuelven las cosas― Le recordó su padre.
―Lo sé, papá, pero es que...― El solo recordar que ese imbécil había tocado a su amigo le llenaba de ira. ―Debes conseguir las grabaciones del bar.
―No es fácil hacerlo, Mingyu― Dijo su padre con una mueca. ―Es un bar prestigioso.
―¿Puedo hacer una llamada?― Preguntó Taehyung, llamando la atención de todos, a uno de los policías.
El policía asintió.
Taehyung buscó rápidamente el número de su mejor amigo, marcándolo cuando lo encontró. Y, al tercer tono, la llamada fue atendida.
―¿Aló?― Habló JiMin desde el otro lado de la línea con la voz ronca.
―¿JiMin?
―¿Tae?
―Si, soy yo. ¿Estás durmiendo?― Preguntó, aunque era obvio que sí.
―Por supuesto, ¿qué más haría a esta hora?― Respondió JiMin, sarcástico. ―Como sea, ¿qué sucede? Más te vale que sea importante.
―Eh, bueno...― Le era un poco vergonzoso decirlo.
―Kim Taehyung, ¿qué sucede?― Preguntó JiMin en un tono serio y demandante.
―.....
―Kim Taehyung, ¡habla de una vez que me estás preocupando!― Exigió.
Bien, aquí vamos.
―¡Estoy en la comisaria!― Respondió casi sin pausas.
―Ah, era es...― JiMin se quedó un momento en silencio, probablemente, procesando sus palabras. ―¿¡Ah!? ¿¡Qué acabas de decir!?
―Necesito tu ayuda.― Dijo Taehyung y enseguida le envió su ubicación. ―Tengo que colgar. Ven rápido.― Y, dicho eso, el Alfa castaño finalizó la llamada.
Un rato después, JiMin llegó en compañía de su padre y mientras JiMin fue junto a ellos, Seojoon fue a hablar con los oficiales.
―¿Cómo diablos terminaste aquí?― Preguntó JiMin, sorprendido.
―Ese idiota no dejaba de molestar a Kook.― Respondió Taehyung, señalando al tipo que anteriormente había golpeado y que se hallaba unos bancos más allá. ―Le advertí que lo dejara tranquilo, pero no pude quedarme de brazos cruzados cuando ese imbécil le tocó el trasero.― Explicó, enojado.
―Es cierto, ese bastardo imbécil hijo de puta no solo se acercaba bastante a mí mientras estaba con Tae también me tocó y eso es, obviamente, acoso sexual.― Habló Jungkook, apoyándolo y sorprendiéndole por las groserías salidas de su boca.
Taehyung no había escuchado a Jungkook hablar de esa forma antes. Y siendo sincero, ver ese lado de su novio lo puso algo caliente.
―Al que deberían arrestar es a ese maldito infeliz no a mi TaeTae, él solo me defendió.― Su voz, al igual que la de Taehyung, también denotaba molestia. Y le dio al tipo una mirada que podría matar a cualquiera.
―¡Maldito hijo de puta!, ¿¡cómo te atreves a acosar a mi amigo!? ¿¡Quieres morir!? ¿¡Ah!?― Preguntó JiMin exaltado, tomando por el cuello de la camisa al sujeto que había molestado a Jungkook. Y sus ojos mostraban desprecio y enojo al igual que su voz. ―Me aseguraré de que pases mucho tiempo encerrado y cuando salgas, te lo digo desde ya, nunca tendrás un solo día se paz.
El sujeto solo sonrió con sorna.
Taehyung en serio quería volver a golpearlo.
―Si un Omega va a un bar es porque busca llamar la atención de los Alfas. No hice nada malo. Él tiene la culpa por vestirse así, su ropa es provocativa y es normal que un Alfa no pueda controlarse.― Se defendió el tipo ese que, si mal no había escuchado de los policías, su nombre era Hong JaeHo, sonriendo de forma engreída.
―¡Eres un maldito infeliz!― Taehyung quiso golpearlo, otra vez en lo que iba del día, pero Jungkook lo detuvo.
―No te gastes, no vale la pena tratar con una persona así.― Dijo el Omega intentando tranquilizarlo. ―Eso es lo que quiere, que lo golpees para que te metas en problemas.
―Es que me molesta que diga eso de ti.― Jungkook sonrió y lo abrazó para calmarlo.
Taehyung, por supuesto, correspondió el abrazo.
―No le prestes atención, no es más que un enfermo mental.
―Si una persona va a un bar es para divertirse bailando, ¡no para ser acosado! ¡Además, él estaba acompañado! ¡Maldita sea!― Dijo JiMin y lo soltó con fuerza.
―¿En qué bar estaban?― Preguntó Park Seojoon, regresando hasta ellos luego de hablar con los policías.
―Eh...
―Woobar, Bar Woobar― Respondió Jungkook al ver que Taehyung no recordaba el nombre del local. ―Perteneciente al Hotel W.
―Woobar... Hotel W... ¡Oh, ya lo recuerdo!― Exclamó el Alfa mayor luego de murmurar el nombre del bar. ―Es el Hotel de SungRok, el esposo de tu tía Sohyun― Le dijo a JiMin.
―¿Enserio?― Preguntó JiMin.
―Sí.― El Alfa mayor asintió. ―Ahora mismo pediré que me envíen las grabaciones del bar.
―De acuerdo.― JiMin asintió y luego miró a Taehyung. ―No te preocupes, Tae. Saldrás libre de esto, lo prometo― Aseguró.
―Lo sé, te tengo a ti aquí así que no tengo miedo.― Respondió Taehyung, aun abrazando a Jungkook.
Según lo que sabía, JiMin era de una familia influyente y, si él decía que haría algo, lo hacía. Siempre cumplía su palabra. Y Taehyung, por supuesto, confiaba en su amigo.
―Tengo las grabaciones― Informó el Park mayor, luego de haber realizado un par de llamadas, mirando su celular. ―Por favor, revíselas.― Le dijo al policía a cargo del asunto de Taehyung, entregándole su celular.
―Por supuesto.― El policía, quién era un Alfa, tomó el móvil para ver las grabaciones del bar. ―Efectivamente, esto es acoso sexual, un delito que se paga con dos años de cárcel.― Habló el oficial y miró severamente al acosador luego de regresarle el celular al padre de JiMin. ―El único culpable aquí es usted.
―Escorias como él merecen estar encerrados más tiempo.― Murmuró otro de los oficiales. ―Es una vergüenza para los Alfas.
―¡Eso es injusto! ¡Él se lo buscó, él me provocó!― Decía histérico.
―Cierre la boca.― Ordenó el oficial. ―Ustedes pueden irse a casa― Le dijo a Taehyung y Jungkook.
―No quedará registro de ellos aquí, ¿verdad?― Preguntó el Park mayor.
―No, no se preocupe. Ellos no tendrán ningún historial.
―Gracias.― Agradeció.
―Gracias.― Agradecieron los tres menores al unísono y se retiraron de la comisaría junto al Alfa mayor.
―Gracias por ayudarnos, señor.― Dijo Taehyung cuando estuvieron fuera de la comisaría.
―No es nada, no agradezcan.― Respondió el Park mayor, sonriendo. ―Son amigos de mi hijo así que pueden contar conmigo cuando tengan problemas.
―Gracias, señor.― Dijeron Taehyung y Jungkook con una reverencia.
―Dejen de agradecer y suban al auto que es tarde, los llevaré a sus casas.
―Sí, señor.― Respondieron Taehyung y Jungkook al mismo tiempo antes de subir al vehículo que estaba estacionado frente a la comisaría.
―¿Te he mencionado... que eres el mejor padre del mundo?― Le dijo JiMin a su padre cuando estuvieron dentro del auto.
―Lo sé, soy el mejor en todo.― Respondió Seojoon con una sonrisa divertida. ―Ponte el cinturón.― Agregó, poniéndose serio.
―Okay― Contestó JiMin.
―Y ustedes cierren las lunas que hace frío.― Dijo Seojoon mirando a Taehyung y Jungkook por el espejo.
―Si, señor.― Respondió el Alfa castaño cerrando las ventanas.
Más tarde, en el departamento de Taehyung, Jungkook fue a darse un baño ya que podía sentir el aroma del Alfa que lo tocó sobre él y quería quitárselo porque no le agradaba.
―Iré a darme un baño― Avisó el menor.
Taehyung asintió, pero antes de que el menor desaparezca de la sala de estar, habló.
―¿Quieres que vaya contigo?
―¡Tae!― Exclamó Jungkook, avergonzado.
El Alfa castaño rió, divertido. ―Es broma― Dijo. ―Pero si quieres, no es broma― Agregó.
―Si quieres bañarte conmigo, solo dilo.
―Si lo digo, ¿me dejarás hacerlo?
―Talvez― Jungkook se encogió de hombros. ―Inténtalo primero.
Taehyung sonrió, encantado por la actitud de su Omega. ―Vamos a tomar ese baño juntos― Más que una pregunta, fue una afirmación. ―Quiero asegurarme que no quede rastro del aroma de ese maldito infeliz sobre ti.
―Entonces te espero en la ducha― Respondió Jungkook, dirigiéndose al baño.
―Voy ahora mismo― Murmuró el castaño más para sí mismo, pero antes de poder hacerlo su celular sonó. No quiso atender, pero al ver que no dejaban de insistir respondió. ―Seungmin, ¿qué sucede?
―Taehyung, necesito que me hagas un favor.
―¿Ahora?
―Escúchame primero, idiota.
―Entonces deja de andar con rodeos que no es común en ti y habla de una vez.
―Necesito que vengas a mi casa mañana antes del mediodía, ahí te explicaré todo.
―Bien, ahí estaré― Y sin esperar que el otro dijera algo más, colgó y fue inmediatamente hacia el baño encontrándose con la maravillosa vista de su Omega completamente desnudo en la bañera, jugando con las burbujas que la bomba de jabón había creado.
―¿Qué te tomó tanto tiempo?― Preguntó Jungkook, llevando su mirada hasta él.
―¿Eh?― Repitió Taehyung como un idiota, embelesado por la vista que tenía de su novio.
Jungkook sonrió, consciente de la mirada que Taehyung le estaba dando.
―¿Por qué tardaste tanto en venir?
Por fin, después de unos segundos perdido en la escena frente a él, Taehyung respondió la pregunta de su novio.
―Seungmin llamó, necesita que le haga un favor el día de mañana― Explicó, sin poder apartar sus ojos del precioso cuerpo de su Omega.
Jungkook asintió, entendiendo. ―¿No entrarás?― Preguntó.
―¿Eh? Sí, sí― Asintió Taehyung y empezó a quitarse la ropa para luego entrar en la bañera. ―¿Sabes, amor? Tengo que confesarte algo...― Murmuró Taehyung, posicionándose detrás de Jungkook antes de abrazarlo por la cintura.
―¿Qué cosa?― Preguntó Jungkook, confundido e intrigado, dejándose abrazar y recostando su cabeza en el pecho de su Alfa.
―Que me he puesto un poco cachondo cuando le has empezado a insultar al tipo ese de esa forma.
El rostro de Jungkook se sonrojo al instante y Taehyung le dedicó una sonrisa pervertida.
―¿Qué...?
―Nunca te había visto así antes. Ya podrías enfadarte más veces.
―Estás loco...― Murmuró Jungkook, algo avergonzado. Aunque, no iba a negar que le gustaba el lado descarado y pervertido de su Alfa.
―Tienes razón― Asintió Taehyung. ―Pero estoy loco por ti― Dijo, empezando dejar besos por el blanquecino cuello del menor, inhalando el delicioso aroma que lo caracterizaba. ―Eres tan lindo, amor― Murmuró, dejando una suave mordida en el cuello de Jungkook, haciéndolo jadear.
―Más te vale no dejar marcas― Le advirtió el Omega. ―No quiero tener que dar explicaciones sobre como las obtuve.
Taehyung sonrió. ―No prometo nada.
―Tae...
―Vale, intentaré no dejar marcas visibles. Ahora, ¿quieres que hyung te haga sentir bien?― Preguntó, con un tono que prometía muchas cosas para el menor.
Jungkook asintió antes de gemir al sentir su miembro ser rodeado por una de las grandes y suaves manos de su novio, recibiendo gustoso los besos del mayor.
Los labios de Taehyung dejaron un reguero de besos en la extensión del cuello de Jungkook antes de dirigirse a los labios de su novio para besarlo apasionadamente mientras que con su mano libre rodeó uno de los muslos del menor.
―¡Ah!― Gimió Jungkook en medio del beso al sentir la traviesa mano de su novio apretar uno de sus musculosos y trabajados glúteos, al mismo tiempo que su miembro es estimulado por la otra mano de Taehyung.
En reprensión, el pelinegro mordisqueó el labio inferior de Taehyung, sacándole un jadeo al Alfa.
—Diablos, Jungkookie, no hagas eso― Pidió el Alfa.
—¿Por qué no habría de hacer lo que quiera a mi novio?— Pregunta el menor, con la respiración entrecortada.
—Porque a tu novio le dan ganas de arruinarte aquí mismo, tomando tu cuerpo duro y rápido.— Admite, con sus afilados ojos oscurecidos por la creciente lujuria en su interior. ―Y porque me duele el labio por culpa del golpe que me dio el maldito imbécil que se atrevió a tocarte.
―¿Te duele mucho?― Preguntó el menor, preocupado.
―Es soportable― Lo tranquilizó Taehyung. ―Pero duele si me muerdes de esa forma. Sabes que, si no fuera por eso, no me quejaría por nada de lo que me hagas.
―Lo sé. Y siento haber olvidado que te golpearon.
―Está bien, amor. No es nada.― Taehyung le sonrió. ―Ahora, ¿podemos continuar, por favor?
Jungkook sonrió y asintió, siendo él quién besó esta vez al mayor y evitando volver a morderle los labios.
Taehyung le correspondió gustoso y retomó sus movimientos alrededor del miembro de su novio, sacándole gemidos que eran música para sus oídos.
Después de unos minutos el Omega sintió un nudo en su estómago haciéndole saber que estaba cerca de venirse.
―¡Ah! ¡Hyung! Q-Quiero...
―¿Qué quieres, bebé?― Preguntó el Alfa, excitado por la imagen que tengo de su novio y por el dulce aroma a lavanda y jazmín del menor que se hacía más fuerte con cada segundo.
―C-Correr-me.
―Hazlo, cielo.
Y, con esas palabras de parte de su Alfa, Jungkook se corrió en la mano de Taehyung.
Kim sintió su entrepierna endurecer y palpitar ante esto. Necesitaba estar dentro de su novio ya.
―Ahora es mi turno― Dijo Taehyung. ―De rodillas y apoyado en el borde de la bañera― Ordenó con voz ronca.
Jungkook hizo lo pedido y tuvo un repentino sobresalto cuando sintió las manos de Taehyung posarse en su trasero con posesividad.
―Enserio eres hermoso, amor― Mencionó Taehyung, posicionándose sobre el menor y empezando a rozar su endurecido miembro con la entrada del menor, pero sin meterlo.
―Tae, ¡deja de jugar!― Pidió Jungkook, soltando aún más su aroma para provocar a su novio, deseando sentirlo dentro suyo.
―Mira lo húmedo que estás― Mencionó Taehyung, metiendo dos de sus dedos en el interior de su Omega, moviéndolos en forma de tijeras.
―Tae, te necesito dentro ya― Dijo el menor, desesperado.
―No te desesperes, bebé― Respondió el Alfa, metiendo otro dedo más en el interior de Jungkook quién comenzó gemir con más fuerza.
Unos segundos más y Taehyung metió un cuarto dedo en el interior de su novio quién sintió su cuerpo temblar y sus piernas debilitarse por lo que, el castaño, al darse cuenta, lo sostuvo de la cintura y cuando sintió que Jungkook estaba listo para recibirlo, sacó sus dedos de su interior y se los llevó a la boca para degustar el dulce sabor del lubricante natural del menor.
―Dulce― Dijo, extasiado.
―Tae, por favor...
―Ahora, bebé. No te desesperes.
Taehyung jaló uno de los condones que tenía en el cuarto de baño, se lo puso y entró en el menor de una sola estocada sacándole un sonoro gemido al Omega. También comenzó a dejar besos y suaves mordidas en el cuello de Jungkook, asegurándose de no hacerlas muy fuerte para no dejar marcas, mientras comenzaba a embestirlo con fuerza por atrás, sacándole gemidos y jadeos a ambos. Jungkook sentía que se quedaba sin aire debido a la fuerza con la que se estrellaban las caderas del mayor contra las de él, golpeando una y otra vez su punto dulce. Taehyung estaba tan perdido en la lujuria que incluso comenzó a darle fuertes palmadas a la suave y blanquecina piel del menor aumentando los gemidos del Omega.
Después de unos momentos, entre movimientos fuertes y rápidos, ambos tuvieron un intenso orgasmo que los dejó viendo estrellas y a Jungkook tan exhausto que tuvo que dejar que Taehyung lo cargara, luego de salir de su interior y haberse quitado el condón, hasta la cama donde, acostados frente a frente, Taehyung con sus grandes manos buscó viajar por la espalda del menor hasta delinear la curvatura de su trasero, ese espacio prohibido entre sus redondas nalgas al que solo él tenía acceso, a la par que lo besaba profundamente.
―Parece que... estás listo para un segundo round— Miró hacia abajo y vio la erección de Jungkook despertar de nuevo, caliente como él mismo, tomó uno de los preservativos que estaban en la mesa, abriéndolo sin dejar de mirarlo a los ojos, irguiéndose solo para ponérselo, masturbándose frente al menor.
―No soy el único...— Respondió Jungkook, cansado, pero deseando más, abriendo ligeramente las piernas y levantándolas hasta enredarlas en la cadera del mayor.
Y eso fue para Taehyung, todo lo que necesito escuchar, como una pequeña autorización de poder hacerse de su cuerpo en su totalidad, acarició las piernas de su novio con sus manos, trazando un camino de besos desde su pecho hasta su cuello.
Kim sonrió cuando escuchó al menor gemir quedito cuando comenzó a entrar en él nuevamente, prestando atención en cuando ir más lento, cuando seguir. Ahí estaba, su novio que deseaba más de él, que le abrazaba cuando Taehyung poseía su cuerpo en su totalidad y que rasguñaba su espalda ante la invasión en su interior.
―¿Más despacio?― Preguntó el Alfa, moviéndose, rozando su nariz contra la mejilla de Jungkook cariñosamente.
Jungkook negó con la cabeza. ―No, más despacio no...― Susurró apretando los brazos del mayor que se apoyaban en la cama.
Al escuchar esa respuesta, Taehyung no dudó en que, sus embestidas fueran, -aunque en el mismo ritmo- más fuertes al entrar y salir de él.
Era hechizante, sentirlo temblar bajo su cuerpo en éxtasis, del modo en como Jungkook se aferraba a su espalda alzando más sus caderas en busca de más profundidad, murmullos ahogados pidiendo por que esa danza erótica aumentará. Taehyung por su parte, apoyó su antebrazo derecho en la cama para no perder el equilibrio mientras que su mano izquierda acariciaba la mejilla del menor a la par que lo cubría de besos golpeando con calidez su aliento en su piel, después esos mismos labios se apoderaron de su cuello, mordiendo suavemente, envolviéndose en más gemidos.
—Sigue apretando así, cariño, me vuelves loco...— Murmuró Taehyung contra la piel de su cuello. Y una sonrisa se dibujó en su rostro al sentir como Jungkook apretaba más fuerte contra su sexo.
Taehyung tomó las manos de su novio, sujetándolas por encima de su cabeza con la suya libre, dominando por completo, dejándolo totalmente a su merced, arremetiendo con vehemencia, tan fuerte y salvaje.
—Eres mío, bebé. Solo mío.— Afirmó el castaño, recargando su frente en la de su novio cuando sintió que el clímax estaba por llegar.
―...Siempre he sido tuyo, Tae...― Esa respuesta pareció ser el puente que rompía todas sus defensas, haciendo que Taehyung no pudiera soportarlo más.
Kim soltó las manos de Jungkook para enderezarse tan solo un poco, sus penetraciones las ejecutó con tanta fuerza, tomando la erección de Jungkook al mismo tiempo, al punto perfecto que un par de sacudidas más y ese tan añorado orgasmo le llenó toda su cabeza, y alcanzando, con esa calidez del clímax de Jungkook escurriendo en su mano le hizo saber que ambos estaban en igualdad de condiciones.
Taehyung no dijo mucho, por un momento se mantuvo sobre el menor, dándole pequeños besos en el cuello, subiendo por su rostro hasta probar sus labios, recordando cómo respirar, cómo moverse de ahí. Y solo entonces, se levantó despacio buscando un par de pañuelos y quitándose también el condón usado antes de dejarse caer al lado del más joven. Respiró profundamente antes de girarse ante Jungkook quien también parecía regresar a la realidad abriendo los ojos hacia él.
El castaño no dudó en atraer a su Omega contra sus brazos, apretándolo en su pecho y besándole la coronilla.
En esos momentos de tranquilidad post orgasmo, cuando solo estaban ellos dos, Taehyung sintió una sensación de plenitud que nunca antes había experimentado. La intimidad que compartían iba más allá de lo físico: era emocional, espiritual y absolutamente profunda.
―¿Estás bien?― Preguntó el mayor.
Jungkook alzó la mirada y asintió, las yemas de sus dedos acariciaron el rostro de su Alfa con cierta ternura que le sacó una sonrisa al castaño.
―Lo estoy. Ha sido increíble. Solo déjame respirar un poco que me estás asfixiando con este abrazo.― Bromeó haciendo sonreír a su compañero quien aflojó el agarre entre suaves risas. ―Pero si quieres hacerlo una vez más, no creo que pueda complacerte. Estoy exhausto, esta vez de verdad.
―Oh, diablos, bebé. Lo siento.― Dijo el Alfa, apenado.
Jungkook sonrió. ―Está bien, amor. Lo he disfrutado también así que no digas que lo sientes.
Taehyung le miró, sintiéndose cada vez más enamorado de él. ―Jungkook...
―Hum?
―Te amo.
El Omega, quien acariciaba su cara se detuvo un segundo antes de volver a reanudar sus caricias, se hizo un poco hacia arriba para besar su mejilla y tras ello, dejó otro beso más en sus labios.
―Te amo, Kim Taehyung. No eres el único que ama al otro.
―No me dejes nunca, ¿sí? Estoy haciendo lo mejor que puedo, estoy tratando de ser todo lo que tú quieres que sea, así que... ¿puedes quedarte conmigo siempre?― Cabía la posibilidad de que sonara patético al pedirle aquellas cosas, seguramente se miraba como un ridículo, pero eran palabras que deseaba decirle a Jungkook. Porque no quería perderlo jamás. La sola idea de que, en algún momento, Jungkook quisiera dejarlo, le aterraba.
Taehyung, desde pequeño, experimentó la perdida de sus seres queridos, pero había logrado sobrellevarlo. Sin embargo, tratándose de Jungkook, Taehyung no creía ser capaz de soportar perderlo, de que lo dejara. Le dolía el alma de solo pensarlo.
Por fortuna, Jungkook no lo juzgó, en cambio a ello, sus caricias fueron hasta su cabello, quitando un par de mechones del rostro, esa mirada dulce, comprensiva, que podía salvar del infierno a cualquiera. Su sonrisa que curaba todo mal.
―¿Qué te hace pensar... que voy a dejarte? Tae, amor, te amo demasiado y siempre voy a estar a tu lado, junto a ti. Esa es la verdad. Entonces, deja de presionarte tanto a ti mismo por agradarme, nunca lo necesitaste.
―¿De verdad?
Jungkook asintió. ―No tienes que ser lo que yo quiero que seas, me gusta Taehyung por ser Taehyung. Me gusta todo lo que te rodea.
―Gracias por llegar a mi vida, Jeon Jungkook. Sin ti, en verdad, no sé qué sería de mí ahora mismo.
―Y tú perdóname por llegar tarde a ti...― Jungkook besó la frente de su Alfa. ―Pero de ahora en adelante, siempre voy a estar a tu lado. Nunca estarás solo, ¿de acuerdo?
Taehyung asintió a sus palabras y Jungkook le dio otro beso, pero esta vez en los labios. El Alfa le correspondió gustoso antes de recostar su cabeza en el pecho del menor, escuchando los latidos de su corazón que, poco a poco, como si de una canción para dormir se tratara, lo fue llevando al mundo de los sueños. Añadiéndole las suaves caricias que Jungkook le dejaba.
―Te quiero, Jungkookie...― Murmuró por última vez el castaño antes de caer dormido.
Jungkook sonrió. ―Dulces sueños, cariño.― Susurró con cariño y amor, dejando un último beso en la sien de su Alfa antes de caer también en los brazos de morfeo.
━━━━━━━━ • ✿ • ━━━━━━━━
Bueno, mis fairys, aquí me tienen de regreso con el segundo especial de LBA.
Al inicio tenía un poco de miedo que este especial no les gustara porque no es JS si no TK, pero esta idea la tenía desde hace un buen tiempo y quería compartirla con ustedes.
Y lamento si no es lo que esperaban, pero a mí, sinceramente, me gustó escribir este especial del TK aunque no sean mi shipp fuerte.
De todos modos, espero que les haya gustado.
Lxs quierx muchx♡.
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