━PLAN━

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No sabía cuánto tiempo había pasado, ni siquiera me interesaba. Tampoco le daba importancia a la conversación que tenían entre ellos, me limitaba a estar sentada mirando por la ventana las nubes.

Ya estaba harta.

Sentía que si perdía algo más mi mundo se iba a colapsar por completo. Lo único que me mantenía cuerda era el bebé que se formaba en mi vientre, por él y mis otros pequeños no he tirado la toalla para darme por vencida.

Estaba tan sumergida en mi mente que me sobresalte cuando el avión desapareció dejando ver el mismo lugar que antes. Al parecer Eren estaba escuchando la conversación de los mocosos.

──¡Eren, por favor... escucha! ─gritó Armin. ──. ¡Detente! Nadie tocará a Paradis por siglos después de esto. Ya has demostrado suficiente terror y destrucción.

El silencio reino.

──¡Podemos firmar un pacto de neutralidad con esto! ─volvió a gritar. ──. ¡Nadie más tiene que morir! ¡La isla está a salvo!

Los mocosos poco a poco fueron diciendo palabras hacía el castaño en un intento por traerlo de regreso.

──Por favor, deja de ignorarnos. ─Mikasa soltaba algunas lágrimas. ──. Por favor... regresa.

──Sí, Eren. ─habló Levi, él también lo echaba de menos. ──. Solo te patearé el trasero si no detienes esto ahora mismo.

──No habrá doble porción de comida para ti. ─agregué, recordando cuánto amaba comer doble. ──. Y Kuchel te pateará si no regresas.

No se escucho nada.

──Ey, ¡di algo! ─ordenó Levi al no responderme.

Sin embargo, nada se escuchó.

"No puedo detener el retumbar.

No puedo apostar sobre el futuro de Paradis.

Seguiré avanzando"

Se escuchó su voz por todo el lugar, no se sabía en qué dirección proviene. Miré a los lados, hasta que noté una leve figura a lo lejos.

──Creo que está allá. ─señalé a lo lejos.

Los mocosos no tardaron en correr a su dirección notando que era Eren pero de diez años.

"Tome la libertad del mundo para alcanzar la mía. Pero no quiero robar la suya... ustedes son libres.

Su libertad para salvar al mundo.

Mi libertad para seguir avanzando.

Si ninguno de los dos cede, acabaremos chocando"

Poco a poco fue apareciendo otra figura a un lado de Eren, era una pequeña niña que en mi vida he visto.

"Solo existe la opción... de luchar"

──Entonces, ¿por qué nos has traído hasta aquí?

"Para decirles que no hay necesidad de hablar.

La única manera de detenerme es acabando con mi vida... son libres de hacerlo"

El ambiente cambió de golpe haciendo que nos diera de lleno la cruel realidad. Quería llorar al saber que unos de mis mocosos no vivirá al final del día.

──Creo... que estaba en lo cierto.

──Se... ¿acabo?

──Parece ser que no podemos negociar, ahora, ¿qué? ─preguntó Levi acariciando mi espalda.

──Buntaichō... Heichō... ─nos llamó Armin.

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Suspiré.

Todos estaban nerviosos preparándose para lo que íbamos hacer. Desde aquí podía ver el retumbar estar por llegar al hangar donde parecía ver personas, estábamos casi cerca y el combustible ya se estaba acabando lo que significa que haremos un aterrizaje forzoso.

──¡Sostenganse!

Sentí el avión moverse bruscamente intentando esquivar las rocas que el titán bestia lanzaba.

──Ahí está. ─a Levi le brillaron sus ojos. ──. ¡Ese maldito mono!

──Finalmente lo encontramos. ─anunció Armin. ──. Nuestro objetivo es el titán bestia. Haremos todo lo que podamos para detener el retumbar.

──Ahora... ¡Vamos!

──Estamos locos. ─susurré antes de lanzarme del avión junto a los demás.

Reiner se transformó en titán para cubrirnos de las rocas e ir a por el titán bestia. Pieck se transformó llevando las bombas en su boca, mientras que nosotros nos enganchamos en los huesos cayendo sin problema alguno.

Por cómo se veían las cosas, el titán bestia no era más que un cascarón haciendo enojar a Levi, pues él le juró a Erwin matarlo. Armin planeaba explotar todo esto transformándose en titán, pero quería que nos fuéramos para que la explosión no nos atrapara.

Lo que no teníamos planeado, es que una boca se lo comiera cuando nosotros nos fuimos. Y por si fuera poco, titanes comenzaban a aparecer frente a nosotros.

No tuvimos otra opción que comenzar a luchar contra ellos.

──No son titanes sin inteligencia. ─comentó Jean. ──. Están evaluando la situación y atacando simultáneamente.

──¡¿Qué debemos hacer?! ¡Nos estamos quedando sin lanzas relámpagos! ¡Además! ¡¿Armin sigue vivo?! ─gritó Connie exasperante.

──Si se lastimaba, él habría cambiado a su forma titán. ─habló Levi. ──. En otras palabras, ha sido capturado sin herirlo.

Podríamos ir a salvarlo, pero estaba hasta el trasero de Eren el cual estaba siendo rodeado por titanes.

──Mikasa, no te apresures. ─dije, mirándola de reojo.

──Espera hasta que lo distraiga. ─aclaró Levi mirando también a la azabache.

──Eso es imposible, Heichō. ─habló Pieck. ──. Sé lo que son esos enemigos. Los nueve titanes... de tiempos pasados.

La sorpresa en nuestro rostro se veía reflejada. Esto sin duda era un maldito problema.

──No sé si algunos de ellos tienen conciencia de portadores pasados. Supongo que puede revivirlos inexhaustivamente con el poder del titán fundador.

──Algo así... es imposible de derrotar. ─murmuró Connie.

──Es por eso que no puedo dejarte hacer nada imprudente. Porque... Eren no es mi amigo.

Dicho eso, Pieck se fue escalando los huesos yendo directo a la nuca de Eren con las bombas.

──Esa bastarda... ─gruñí apretando mis cuchillas.

Antes de que siquiera pudiera detonarla, el titán martillo la traspasó. Reiner iba a ir con ella, pero el titán mandíbula se abalanzó contra él.

──¡¿Gallard?!

──¡Por aquí, Reiner! ─Jean fue hacía él sin notar la presencia de otro titán mandíbula similar al anterior.

──¡Jean! ─grité queriendo ir hacía él, pero un titán se atravesó frente a mí.

Esquive su ataque y logre eso para anclar mi equipo en su nuca y cortarla. Miré hacía Jean notando que Levi lo había salvado.

──Apuraté. ¡Tenemos que traer de vuelta a Armin! ─ordenó el azabache.

El camino hacía Armin era muy pesado. Titán tras titán y no parecía tener fin, a pesar de que nosotros tres intentamos abrir paso, se nos complicaba. Todo iba de mal en peor, a Reiner y Jean le fallaron su equipo, Connie quedó inconsciente, Levi tosía sangre, pues su cuerpo no estaba sanado. Y yo, me tuve que detener cuando sentí una punzada en mi vientre.

Mikasa era la única que estaba en pie y la que nos protegía de los titanes.

──¡Connie!

Miré hacía arriba notando que lo iban a devorar. Mikasa no logró llegar a tiempo, en cambio Levi sí... siendo el titán que mordiera su pierna. Iba a ir de inmediato, pero el dolor no cesaba. Al final, Connie despertó y logró sostenerlo antes de que algo más le pasará y la azabache terminará con el titán.

──¡Yo soy fuerte! ─gritó Mikasa llamando la atención de los titanes. ──. Así que... ¡no me importa!

──¡Mikasa, estás comportandote un poco loca! ─esa voz resonó por el lugar, a los segundos sentí como alguien me tomaba de la mano para sentir algo plumoso.

Al parecer Annie junto a los mocosos llegaron al rescate en un titán que podía volar, y creo saber que era el titán de Falco.

──Ya que vuele, no tenía elección más que venir. ─dijo la rubia. ──. Pero, estoy contenta de haber venido.

Después de resumir la situación nos debatimos en qué hacer. Sí rescatar a Armin que estaba en el trasero o explotar la nuca con el detonante.

Levi ofreció hacer ambos.

──Un grupo rescatará a Armin, los demás van por Eren y atacan la nuca al mismo tiempo. ─comentó. ──. Nos separaremos en dos grupos y atacaremos simultáneamente.

──¿Capitán? ─Mikasa lo veía sin creerlo.

──Ya no estamos en una posición para preocuparnos por Eren. ─aclaró. ──. No, para empezar, nunca lo estuvimos.

──Pero...

──Mikasa, como Buntaichō, mi palabra es la única y la opción de Levi es la mejor. ─sus ojos se humedecieron. ──. Se que no te parece, pero, dime... ¿qué otra cosa podemos hacer si ya intentamos todo? ─se quedó en silencio. ──. Dejalo ir. Como nosotros lo hicimos.

Mikasa buscaba ayuda en los demás, pero ellos estaban de nuestra parte.

──Había tanto que quería decirle a ese idiota... maldición. ─maldijo por lo bajo el azabache.

──Si hubiera una forma de salvarlo, creeme que lo haría sin duda. ─dije, mirando a otro lado. ──. Después de todo, es mi mocoso tatakae.

Jean apretó su mandíbula.

──Mikasa... necesitamos matar a Eren.

Annie le gritó que necesitaban salvar a Armin y Gabi aprovecho eso para decir que cuando le disparó a Eren algo, tiño un ciempiés brillante, salió de su nuca y se dirigió a su cabeza.

Jean y Reiner irán a la nuca y nosotros a salvar a Armin. Mikasa, Annie y Connie saltaron de Falco yendo a por el rubio.

──¿Puedo cubrirlos con este rifle anti-titán? ─me preguntó Gabi.

──Claro, aunque no vas a matar a ningún titán con eso. ─dije acariciando sus cabellos.

Miré a Levi observar por todos lados en busca de algo, se que buscaba a Zeke para matarlo. Parecía desesperado y puedo asegurar que su ojo se humedeció.

──Tranquilo, Levi. ─acaricié su mejilla. ──. Zeke no permanecerá siempre oculto. Nunca desobedeciste una de sus órdenes, esta no será la excepción.

Él me miró de reojo.

──No me arrepiento de no haberlo elegido ese día. ─comentó llevando su mano a la cabeza. ──. Armin tenía esa misma mirada. Esa maldita mirada.

Entrecerré mis ojos, sabía lo que decía. Pude ver en Eren un poco del brillo de Hange, de cierta manera, ambos se parecían en algunas cosas. Incluso fui testigo de ver como ese brillo en ambos se fue apagando.

──Señorita Liberty. ─Gabi me jaló de mi ropa. ──. ¡Mire! ─señaló al frente.

Al mirar note que algunos titanes protegían a los mocosos. Mikasa tomó esa oportunidad para ir tras el titán que tenía a Armin, pero este escapó.

──¡Falco, acercate! ─ordene. ──. Gabi, apunta y dispara. Ciega su vista para que Mikasa lo atrape.

Ella obedeció y preparó el rifle, observó por el mirador y disparó dando en el ojo. Mikasa logró sacar a Armin del titan y gracias a algunos titanes, nadie ha salido herido.

──¡Hey! ─un grito nos alertó, en especial a Levi. ──. ¡Por aquí!

──No puede ser...

Era Zeke, quien había salido de unos de los huesos casi desnudo. Le cubrí los ojos a Gabi para que no viera nada.

──¡Querías verme, ¿no, Levi?! ─gritó, él ya estaba preparado para morir. ──. ¡No puedo decir que quería lo mismo!

──Es Zeke... ─balbuceo incredulo.

──¡Liberty-san, me alegra verla bien! ─me gritó sonriendo. ──. ¡Aunque no lo crea, es la mujer más hermosa del mundo!

Dejó de gritar solo para mirarme en silencio con una leve sonrisa, en menos de un segundo, Levi ya le había cortado la cabeza terminando de cumplir con su misión.

El retumbar se detuvo.

Jean logró detonar la nuca dejando ver como el ciempiés se dirigía nuevamente a la cabeza de Eren, pero Reiner lo detuvo. Poco a poco, los mocosos fueron llegando junto a nosotros.

──Tenemos que huir rápido.

──Armin explotara esos huesos.

Falco voló lejos de Eren y a los segundos la inmensa explosión, que generó el colosal, se presentó.

──Adiós, Eren.