━AY, EL AMOR━

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Suspire.

Ya había pasado más de una hora y los dos mocosos aún no regresaban con los suministros. Habían ido al distrito Stohess junto donde la militar corrupta estalla a flote.

Hemos tenido que irnos de la cabaña a lo profundo del bosque con la precaución necesaria para que no nos encuentre. Si es que lo quieren hacer.

Eso fue exactamente hace dos días. Casi pasaba una semana desde que salí del hospital, lo bueno de esto era que mi hombro ya no dolía, de hecho deje de sentir dolor después de que nos encontráramos con Kenny.

Mi mirada se enfocó en los árboles a los lejos, me paré cuando escuche ruido.

Tomé con fuerza el rifle apuntando a la dirección donde escuchaba unos pasos acercarse.

──¡Somos nosotros, Liberty-san! ─gritó Armin con las manos arriba al ver como lo apuntaba.

──Trajimos los suministros que pidieron. ─se apresuró a decir Jean.

Baje el rifle colocándolo en mi hombro.

──¿Por qué demonios tardaron tanto? ─pregunté mirando a la azabache tenderme un cartel. ──. ¿Hm?

──Lo sentimos. ─se disculpó Armin. ──. Es solo que la policía militar estaba dando esto. ─le entregó a Levi lo mismo que Mikasa a mi.

En el cartel se dejaba ver dos dibujos de mierda que se supone que somos Levi y claramente yo, lo cual te digo que no nos parecemos o tal vez es así como las personas nos miran. Me enfoque en lo que decía, según la Legión había cometido asesinatos contra ciudadanos y que parte de ellos huían.

En pocas palabras, ahora somos fugitivos.

──Si es así, la Legión de Reconocimiento fue desmantelada. ─comentó Armin. ──. Oí que nos cazarán en la noche. También van a resguardar las grandes carreteras así que no seremos capaces de cruzar sin un atajo. Heichō, ¿ahora qué?

──Si no nos apresuramos, Eren...

──Mikasa. ─la llamé antes de que se alterará. ──. Perder la calma solo causará conflictos. Tranquilízate. ─la miré de reojo.

──Están usando un carruaje. ─habló Levi después de leer el cartel. ──. Ellos no llegarán a la finca Reiss hasta mañana.

──Podemos usar ese tiempo para forjar un plan. ─notifiqué mirando a los mocosos sentados alrededor de Levi.

──Heichō, Buntaichūi, escuche pasos. ─informó Sasha mirando a un punto entre los árboles. ──. Vienen hacia acá.

Conecte mi mirada con la de Levi.

Es hora de movernos.

Tan solo ver a ambos de la policía apuntar a Armin, saltamos de encima del árbol colocando nuestra cuchilla en su cuello.

──Bien. ─habló Levi detrás del tipo. ──. Ahora lentamente denle sus armas a la persona frente a ustedes.

Entre quejas acataron la orden entregando sus armas.

──No hagan ningún ruido, ¿entendido? ─hablé fríamente ganándome las miradas de reojo de ellos.

──Nos quedaremos con sus uniformes y botas. ─dijo Armin mientras que Mikasa se acercaba. ──. Tranquilos, cambiaremos de botas.

Me tuve que poner enfrente de la tipa para que se quitara la ropa, Mikasa se encargaba de ayudarla. Esta será la única forma de averiguar dónde están los mocosos, interrogando a la policía.

──Buntaichūi. ─Jean me tendió las cartillas de ambos.

Las tomé leyendo sus nombres y a qué número de tropa de graduación pertenecían.

──Soldado Marlowe Freudenberg de la división de Stohess. ─leí el nombre en alto.

──Presente. ─lo miré de reojo y al parecer, él, se dio cuenta de quién era porque no dejaba de verme.

──Soldado Hitch Dreyse de la misma división. ─se las pasé a Levi para que les echara un ojo.

──Presenté. ─dijo la chica.

──Ustedes son graduados de la tropa de reclutas 104 y se limitan a Stohess. ─leyó captando la atención del chico, así como había ocurrido conmigo.

──Tan solo son novatos. ─dije recargando mi cuchilla en mi hombro. ──. La policía no cambia.

──Si. ─afirmó el azabache. ──. Tal parece que aún está de moda entre los superiores dejarle todas sus responsabilidades a los novatos.

──Está todo listo. ─escuche a Mikasa decir con el uniforme de la policía.

──De momento la policía central militar debe seguir investigando la escena en Stohess. ─comentó Levi mirando a los mocosos. ──. Vayan y traigan de vuelta a cualquiera que parezca ser uno de ellos.

──Entendido.

Mi vista se enfocó en los mocosos de rodillas al suelo.

──Marlowe, Hitch. ─pude sentir a los dos ponerse tensos y sudar frío al escuchar mi voz detrás suya. ──. Es su momento de brillar.

──Tú... ─musitó la chica entre dientes. ──. ¿Siquiera sabes lo que has hecho en Stohess? Gracias a ti, cien civiles perdieron la vida.

──¿Ah? ─eche levemente mi cabeza hacía atrás mirando con frialdad a la chica.

──Oye... ─el chico intentó callarla.

──No me importa si juegan a ser los chicos buenos aquí. ─soltó mirando al frente. ──. Gracias a lo que hicieron, esas personas y familias están sufriendo un infierno, ¿entiendes?

──Claro que lo sabemos. ─ladeé mi cabeza. ──. ¿Y?

Me miró de reojo con rabia.

──Ustedes vienen de la escuela de reclutas del sur, ¿no? ─preguntó mirando a Jean. ──. Al igual que Annie Leonhart. ¿Eran amigos? ─preguntó cabizbaja. ──. No. Dudo que tuviera amigos. Como si tuviera miedo de relacionarse con otros. No sabía nada de ella, pero ese día... ella desapareció.

Pude sentir cómo tomo aire apretando sus puños para encararme amenazantemente.

──Es porque seguramente se convirtió en un regurgite de titán, ¡¿no es así?!

──Te equivocas, mocosa. ─suavice mi mirada. ──. Ella es el titán que se infiltró en las murallas y ahora fue capturada. Novatos como ustedes jamás sabrán estas cosas.

──¿Eh? ─la sorpresa en sus rostros era una hermosa imagen para mis ojos.

Fueron muy ingenuos.

──Tsk. ─soltó Levi. ──. Que desagradable. Somos como cualquier otra persona en este oscuro mundo. Por supuesto, eso no incluye a los de la central. ─los miró. ──. Los soltaremos cuando nos vayamos.

──Sean buenos chicos, ¿quieren? ─dije palmeando sus cabezas.

──¡Heichō Levi! ─gritó el mocoso de la policía. ──. Yo no creo que ustedes sean los que están mal aquí. ¿En verdad la Legión esta involucrada en el asesinato de la compañía Reeves?

──La policía central militar los mato. ─aclaró. ──. Solo podemos saber la verdad en la batalla que se avecina.

──¡Déjenme unirme a su causa! ─dijo, al parecer alguien no soporta la corrupción. ──. ¡Mientras me permitan corregir los males de este mundo, estoy dispuesto a hacer cualquier cosa!

──¿Qué ocurre contigo? ─preguntó Levi extrañado al escucharlo.

──Por favor, Heichō Levi.

──Ni hablar. ─soltó sin tacto. ──. No puedo confiar en que de repente hayan cambiado de bando. ¿Qué tal una vez allá se les olvida todo lo que me han dicho?

──Sasha. ─la llamé. ──. Átalos por ahí.

──Entendido.

──Heichō, Buntaichūi, déjeme eso a mí. ─nos pidió Jean.

Por su mirada parecía que estaba confiado en lo que haría.

──A mí no me preguntes, ¿pregúntale a Levi? ─miré a otro lado.

──Te lo encargo. ─lo escuche otorgándole aquello.

Me giré observando al enano, ni siquiera se puso a pensar si estaría bien que vaya solo.

──¿Qué? ─me miró.

No dije nada, solo vi como se los llevaba a ambos atados.

Al final, logramos infiltrarnos a la base militar con ayuda de los dos mocosos. Jean nos confirmó que eran de confianza ganando un golpe de mi parte por ponerse en peligro.

Después de habernos encargado de todos los policías, claramente tuvimos que dejarlos inmóviles, por lo cual cortar los músculos de sus piernas era la mejor manera.

Lamentablemente, mis dos mocosos faltantes no se encontraba en ese lugar por lo cual tuvimos que secuestrar a un bigotón que parecía saber más de lo normal.

──Tu bigote se ve muy bien. ─comentó Levi con el interrogatorio. ──. ¿Dónde están Eren e Historia?

──Ha matado a todos mis subordinados. ─exclamó el sujeto negándose a dar información.

──Es una pena que tus subordinados no estén aquí para rescatarte. ─solté con desdén. ──. Matarlos no nos vendría bien a nosotros. Así que solo nos aseguramos de que no puedan moverse más.

──En serio que son valientes y astutos. ─murmuró. ──. Solo derrotaron a los peores soldados y ya se creen los mejores.

──Oh, ¿en serio? ─habló Levi y creo haber escuchado una patada o algo así. ──. Entonces, supongo que deberíamos de sentirnos mortificados.

Ni siquiera prestaba atención a los golpes que Levi le daba, solo estaba a su lado mirando al frente por si venía alguien.

──De lo que más culpable me siento, es de romperte la boca. ─miré de reojo la manera en como le romperá su boca. ──. Te sugiero que nos digas un poco más ahora que puedes hablar. ¿Dónde están Eren e Historia?

──Es inútil. ─habló después de que Levi quitará su pie de la boca. ──. Lo único que pueden hacer es huir dentro de las murallas cubiertos de mugre. ¡Si no se entregan ejecutarán a todos los miembros de la Legión cautivos! Empezarán por el responsable, Erwin Smith.

De reojo pude ver la mirada oscura de Levi cuando menciono lo último.

──Sin embargo, si estás dispuesto a confesar todos tus crímenes por voluntad propia. ─tocó su boca la cual le hacía falta tres dientes. ──. Tal vez, la vida de tus compañeros sea perdonada.

Solté un suspiro escuchando levantarse del suelo, no tenía necesidad de verle.

──¿Entiendes, Levi? Lo único que puedes hacer en este momento es rendirte. ─me tensé al sentir una mano tomar mi hombro acercando su cuerpo a mi. ──. Tu también deberías de pensarlo, Liberty Ackerman.

No pasó ni un segundo, cuando sentí cómo lo quitaron de mi bruscamente. Me giré al escuchar un gritó proveniente de él.

Levi le había roto el brazo.

──Eso fue por tocarla, basura. ─cuando le susurró eso, otro hueso le rompió. ──. Y eso es por no responder a la pregunta. En la Legión una vidas valen más que otras. Somos un grupo de idiotas que sabemos eso muy bien. ─lo soltó bruscamente. ──. Dime, ¿dónde están Eren e Historia?

──¡No lo sé! ─miró con miedo a Levi. ──. ¡No me lo dijeron, lo juro! Kenny Ackerman es muy cauteloso.

──¿Ackerman? ─preguntó mi pequeño hombre sorprendido aunque no lo demostrara.

Mikasa se sorprendió e inmediatamente sentí las leves miradas de ambos, yo por mi parte miré a otro lado, pues si conocía su nombre completo.

──¿Ese es el apellido de Kenny? ─regresó su mirada al sujeto.

──Sí. ─se apuró a decir.

──Pero, supongo que él no te diría algo como eso, especialmente tan importante.

Miré a otro lado, no sé por qué razón Kenny no le diría a Levi su apellido. Ni siquiera sé por qué razón se llegaron a conocer.

──Sabes, tengo un sobrino casi de tu edad y creo que ambos se llevarían bien. ─me señaló. ──. ¿Qué dices? ¿Lo quieres conocer?

Abrí ligeramente mis ojos al recordar aquel día, cuando lo conocí. Podría ser Levi su sobrino, dijo que casi era de mi edad.

Miré de reojo al azabache seguir hablando con el tipo. No tenía pruebas, pero tampoco dudas.

Levi Ackerman. ─lo miré de reojo, el viento movía sus mechones lentamente, sus ojos lucían más claros con la luz de la luna. ──. Mi prometido.

──Necesitas que te ayude a refrescar tu mente. ─su voz me hizo dejar de estar embobada observándolo. ──. Aún tienes muchos huesos intactos.

──Estás loco. ─dijo llorando al ver a Levi tomar su brazo.

──Kamona.

Miré a otro lado al sentir mis mejillas arder incluso me lleve mi mano a mi mejilla, era la primera vez que me sonrojaba de esta manera. Ni siquiera sé por qué razón me sonroje si solo dijo aquello y ni siquiera me miraba.

──¡Alguien viene por ahí! ─anunció Sasha apuntando hacia mi frente.

Regrese a mi mundo tomando con fuerza mi rifle quedando de cuchillas al lado de Levi, quien no tardó en tirar al suelo al tipo estando de la misma forma que yo.

──Te lo advertí, Heichō. ─murmuró seguro de sí mismo. ──. Lo que sea que trates de hacer, no tendrás casa.

Se quedó en silencio cuando le golpeé el rostro con la culata del rifle.

──Cállate, basura. ─lo miré con frialdad.

Mi vista se enfoco en los pasos acercarse cada vez más. Apunte al frente justo al ver una silueta salir.

──¿Tus últimas palabras?

──¡E-espera, Liberty! ¡Soy yo! ─deje de ver por el rifle al escuchar aquella voz tan reconocida. ──. ¡Soy Hanji! ─levantó sus manos junto a Moblit a su lado.

──Serás tonta. ─dije bajando el arma. ──. Casi te disparo.

──Traemos buenas noticias. ─sonrió entregando una hoja. ──. Véanlo por ustedes mismos.

La tomé entregándosela a Levi. Este la abrió y no tardé en sentir a los mocosos acercarse para leer el contenido.

──¿Esto es...? ─pregunté leyendo la hoja.

──Sí. ─escuche a Hanji. ──. En otras palabras, la Legión ha sido absuelta de sus delitos y sus acciones han sido consideradas como autodefensas. La capital y su administración ahora están bajo el control del comandante en jefe Zackley.

Solté un suspiro dejando caer mi cabeza al hombro de Levi. De cierta forma me libraba de saber que ya no era una fugitiva.

──No hemos encontrado represalias por esta revolución. ─siguió hablando la castaña. ──. Nuestra libertad ha sido restaurada.

Cerré mis ojos al escuchar los gritos eufóricos de mis mocosos. Me sobresalte al sentir los brazos de todos los mocosos aferrarse a mi cuerpo.

──¿Nande...? ─parpadeé con mis brazos en el aire, ¿qué se supone que haga ahora?

──¡Somos Libres, Buntaichūi! ─Sasha era la que más me apretaba, sino fuera por Mikasa que le obligaba hacer menos presión, estaría sin aire ahora mismo.

──Si, si, si... ─palmeé las cabezas de todos mirando a cada uno. ──. Ahora, necesito respirar.

Suspiré al sentir como se alejaron. Sentí la leve mirada de alguien, cuando bajé mi cabeza me encontré con los ojos de Levi mirando con un brillo la escena.

──¿C-cómo es posible eso...? ─murmuró el sujeto que Levi ató en un árbol.

──Fue una apuesta arriesgada. ─dije mirando a la castaña sintiendo nuevamente los brazos de Sasha aferrarse ahora a mi pierna con una Mikasa intentando quitarla.

──Sí, pero no es gracias a Erwin. ─se acercó a nosotros. ──. Las decisiones de cada uno cambiaron el mundo.

──Los tres soldados que dejaste con nosotros murieron. ─habló Levi acercándose a nosotras.

──Lo sentimos. ─me disculpe por ambos.

──Pero, ustedes tuvieron éxito al derrotar a sus mejores hombres, ¿no?

Ella solo sonrío un poco mirándome de reojo, como lo hacía con ella mientras daba leves palmadas a Sasha aún abrazada a mi pierna sintiendo la mala mirada de Mikasa.

──Su líder, Eren e Historia todavía están escondidos en otro lugar. ─comentó el enano. ──. Si no los encontramos rápidamente, este golpe todavía se encontrará con retos...

──Respecto a Eren e Historia este es su paradero. ─cortó Hanji dejando ver un libro. ──. Tengo alguna pista. Incluso si no son ciertas, por ahora solo podemos apostar por ellos. ─los mocosos enfocaron su atención en la miope. ──. Estamos encargados de poner fin a esta era aquí.

Supongo que lo peor recién comienza.

Mis ojos se enfocaba en la luna resplandecer el cielo. Vagamente miraba de reojo a los mocosos montados en los caballos y a los otros frente a nosotros sentados en la carreta.

──Hanji-san, ¿qué pista encontraste? ─escuche la pregunta de Mikasa.

──Ahora les hablo de ella. ─por lo visto es mucho lo que nos dirá, siempre toma aire cuando lo hace. ──. Está es la investigación de la Legión sobre las tierras de Lord Reiss.

No tenía necesidad de verla, solo escucharla era suficiente para comprender lo que decía. Prácticamente, nos contó sobre un accidente que sucedió hace cinco años, justo cuando la muralla Maria cayó.

Fue una noche hace cinco años cuando sucedió la tragedia, la cual fue que unos bandidos quemaron la única capilla de la aldea y por azares de la vida la familia Reiss, conformada por el Sr. Reiss su esposa y lamentablemente sus cinco hijos, estaba rezando. Toda la familia, excepto Rod Reiss, fueron masacrados por unos bandidos.

Según Hanji, eso sucedió días después de que la policía interior asesinara a la madre de Historia. La castaña dijo estar imaginando el motivo por el cual van tras ella.

──¿Lazos de sangre? ─preguntó Levi trayendo mi atención a su voz, pero sin dejar de mirar la luna. ──. ¿Hay algún secreto en la sangre?

──Aún no lo sé. ─contestó. ──. Lo que me intriga es que la capilla se quemara casi por completo. Las hechas con piedra se necesita mucho tiempo y fuerza para destruirlas. Además el único que los vio fue Rob Reiss. Más tarde reconstruyó la capilla con sus fondos personales.

La pregunta que todos pensaban era el por qué lo haría. Algo esconde y para nada bueno, si me lo preguntan.

──Lo raro es que no menciono titanes en ningún aspecto. ─agregó. ──. Aunque me esté precipitando, es suficiente sospechoso para que vayamos.

Espero no morir, después de todo, la curiosidad mató al gato.

Aunque murió sabiendo.

──La Legión enviará tropas al territorio de Reiss hasta el amanecer. ─anunció. ──. Dudo que espere hasta entonces. Tenemos que darnos prisa o devorarán a Eren.

Me genera mucha curiosidad todo esto, pues si es cierto que se necesita devorar un titán con inteligencia para volver a ser humanos con los poderes de titán, ¿a quien mierda devoró el mocoso?

Solté un suspiro pesado al recordar que esto no será sencillo.

──Supongo, que habrá alguien esperando nuestra llegada. ─dije mirando al enano.

──Eso mismo pensaba. ─las miradas cayeron en él. ──. Si está Kenny el destripador, él será el mayor obstáculo. Es como si yo estuviera en el bando enemigo.

──Egocentrismo, ¿donde? ─me crucé de brazos y piernas. ──. Aunque supongo que estás en lo cierto.

──También es como si Liberty estuviera, ¿no? ─preguntó Hanji. ──. Después de todo, Liberty era considerada el mejor soldado de la humanidad antes de unirte a la Legión.

──Supongo. ─el azabache me miró de reojo. ──. Pero con esas armas es aún más peligroso.

──Entonces, no podemos vencerlo. ─escuche el murmullo de Sasha.

──¿Y si esperamos a la Legión? ─preguntó Connie.

──Ni hablar. ─Mikasa no pensó antes de hablar.

──Exacto. ─soltó el chico de antes nervioso por el tono del azabache. ──. Si esperamos, podrían devorar a Eren.

──Pero, según lo que dijo él Heichō, creo que tienen debilidades. ─comentó Armin, quien iba con las riendas del carruaje.

──¿De verdad? ─preguntó Jean.

──Especialmente si no tienen práctica real.

──¿Cómo es que sabes tan poco de Kenny el destripador si vivías con él? ─escuche a Hanji.

Yo por mi parte miré a otro lado, no quería que me metieran en su rollo.

──Lo siento. ─murmuró mi hombrecillo. ──. Ni siquiera sabía su nombre. Por lo visto se llama Kenny Ackerman. Podría ser familiar suyo. ─sentí la mirada de él tanto en Mikasa como en la mía.

──Según decían mi padre, en la ciudad perseguían a la familia de mi padre. ─la escuche hablar. ──. Mi madre era oriental.

Y sabía muy bien aquello, padre nunca salía si no era de la Legión a la casa. Él sabía mucho y por ello escondió su apellido por un largo tiempo, por ello nunca dejó que lo usará, pero por una extraña razón yo amaba su apellido.

──Mi madre era oriental. La diferencia de etnia hizo que la marginarán. ─contó Mikasa, una pequeña sonrisa casi invisible surco mi rostro, para mí, mi tía era una mujer muy bella. ──. Se conocieron en las montañas cercanas a las murallas y se casaron. No se porque perseguían a los Ackerman, yo no veía ninguna diferencia de etnia en mi padre.

Eche mi cabeza hacía atrás mirando la luna, podía sentir las miradas de todos esperando a que les dijera algo.

──No pienso decir algo, ¿si eso esperan? ─solté sin verles.

──Liberty, por favor. ─escuche la voz de Hanji. ──. Esto puede ser importante.

Solté un pesado suspiro después de minutos en silencio sintiendo sus miradas.

──Mi padre era el hermano mayor, por unos segundos. ─comencé a relatar lo poco que sabía. ──. Vivía en las montañas, pero siempre se la pasaba en la ciudad sin importarle mucho si lo cazaban. De hecho, él asesinaba a cualquiera que se le ponía enfrente. ─los miré.

A diferencia del padre de Mikasa; su hermano, él no vivía escondido. Por su fuerza y habilidades entró a la Legión como el mejor y la caza hacía él era menos visible. Conoció a mi madre años después, ella solo entró para llevarle la contra a mi abuelo, supongo que estaba en su etapa de rebeldía, tanto que a los meses nací.

Mi padre aceptó la responsabilidad y se casó con mi madre. Para cuando ella se dio cuenta de su estupidez, yo ya había nacido. Fui criada a base del concepto de ser una "buena esposa", mi madre no quería que me pasara lo mismo que ella. Supongo que tampoco quería que arruinará mi vida con un hijo a temprana edad.

Desde niña mi padre se negó a darme su apellido, uno que él mismo se negaba a lucir aunque las personas que querían su vida lo sabía perfectamente.

Nunca comprendí porque mi padre no me daba su apellido, mi madre pensó que antes los ojos de él solo era una bastarda, un simple error. Recuerdo un poco de aquella pelea que tuvieron por ese mismo motivo, mi padre había hablado de más. Recuerdo cómo habíamos cambiado de casa porque unos hombres entraron con armas en manos.

Padre los mató y madre entendió la gran carga que conlleva si me pusieran su apellido.

──¿Recuerdas algo?

¡Es qué tu no lo ves, Emma! Nos tienen miedo, porque somos fuertes sin necesidad de ser titanes y no pueden manipularnos como a todos, no mientras podamos recordar.

──Jamás en mi vida había escuchado a mi padre tan enojado. ─confesé llevando mi mano a mi frente. ──. Lo poco que recuerdo era sobre que éramos fuertes y que no podían manipularnos y por eso nos temían.

──¿Manipularlos?

──No lo sé. Padre nunca me hablaba sobre él, de hecho lo poco que conocía de él fue por mi tío. ─miré a la castaña. ──. Cuando salí del subterráneo, me di cuenta que mi padre era muy distinto a la imagen que tenía de él. Había conocido sobre la vida de Elliot Ackerman.

El silencio reinaba, podía sentir las leves miradas de todos en mí.

──¿Alguna vez sintieron que su poder despertó de repente? ─ante la pregunta de Levi me acordé de cuando estaba en el subterráneo y más cuando fue mi primera expedición.

──Sí. ─contestó Mikasa.

──Cómo olvidarlo. ─miré de reojo a la castaña.

──Kenny Ackerman también lo experimentó. ─me lo suponía, él me dijo que algún día iba a proteger lo que mi sangre me dictara. ──. Sin previo aviso sientes una fuerza descomunal por todo el cuerpo. Sabes lo que debes hacer. Yo también viví ese momento.

Lo miré de reojo, ahora mis pruebas de que era una Ackerman estaban al 99%.

──Liberty. ─me habló Hanji. ──. ¿Tú conocías a Kenny el destripador?

Podía sentir la mirada de Levi clavada en mi perfil. Desde hace días quería preguntarme, pero las situaciones no eran las mejores.

──Sí, era un viejo amigo de mi padre. ─mi vista se enfocó en la luna. ──. Además de ser mi padrino.

──¿Cómo...? ─todos se encontraban sorprendidos, aunque no los viera, los sentía.

──Tsk. ─lo escuché chasquear, supongo que tampoco sabía aquello.

──Pero nunca supe de su existencia hasta que tenía once años, cuando me trajo de regreso a la superficie. ─miré a la castaña. ──. A los pocos días me abandono en una casa y para cuando me di cuenta, tomé la decisión de ir a la Legión a buscar a Erwin.

Después de aquello, Erwin me mandó a Shiganshina a vivir con mi tío, quien aún no conocía a mi tía.

Antes de conocerla, Erwin me llevó a las tropas de reclutamiento obligándome a alistarme. Y bueno, lo demás ya lo saben, entre a la Legión cuidaba la espalda de Erwin, sufrí cuidando a una mocosa azabache llorona, conocía a un enano amargado con un serio problema con la limpieza que solo me decía que me mataría.

──Supongo que lo merecías. ─miré mal a Hanji. ──. Después de todo trataste muy mal a Levi cuando se conocieron. Le decías escoria y lo pateabas, ¿qué esperabas? ¿Flores?

──Oi, miope de mierda. ─pateé su pierna sacando una sonrisa de su parte. ──. De qué lado estás, ¿de la escoria o de la mía?

──Tsk. ─lo escuché chasquear con disgusto. ──. Debí haberte matado, maldita mocosa.

──Ay, el amor. ─Hanji suspiró con sus manos unidas, podía jurar que desprendía corazones de sus ojos. ──. Su forma de demostrar amor es excesivamente extraña.

–Disfruten la bella imagen♡

Bienvenidos, mis queridisimos calvos, calvas, gente de poco pelo, pelo pobre de pelo escaso, de pelo casi inexistente, ¿qué tal están?

Ya sé, ya sé... ¿por qué no has actualizado? - Día 84 desde la última vez que la escritora actualizo. - Día 80 comentando hasta que la escritora actualice.

Lo sé, merezco me linchen, pero se que no lo harían porque aman mis historias :3

Primero que nada les voy aclarar que estuve enferma, me dolían los huesos, tenía mucha calentura, la garganta me mataba, tosía casi cinco minutos y no podía respirar por culpa de los mocos. En verdad la pase fatal tanto que llegaba a decir que si me iba a morir que fuera rápido, en serio me sentía fatal.

Pero gracias al cielo se me paso y sigo aquí -para su mala suerte mis amores-. Tengo mucho trabajo por hacer y creo que me enfocare en terminar mis historias y más al estar a nada de salir de vacaciones.

Por el momento disfruten el único capitulo que tengo por el momento de "Libertad Inesperada" que tenía guardado -mañana comienzo a escribir más- denle mucho amor como yo a ustedes.

-Los amos♡

Pd: hay portada nueva, aunque este culera.

A mimir que mañana tengo examen.