Desperté sin ganas. Mi corazón latía contra mi pecho, aunque pensara que ya no podía latir después de ella, cada día me recordaba que seguía viva.

Me levanté de mi cama y me vestí, más por decencia que por gusto propio.

Vi mi reflejo en el espejo, mis ojeras eran cada vez más grandes y notorias, sin importar lo mucho que intentara dormir, no podía dormir sin ella, sin saber que estaba cerca, o si quiera si estaba bien. Mamá había intentado de todo, incluso había intentado mandarme lejos para que pudiera salir de mi estado natural, pero no podía hacerlo, no podía alejarme, y menos podía dormir. Tal vez estaba destinada a morir con el corazón roto, así como en un cuento donde la heroina no puede soportar la presión.

Tal vez así era la vida. Tal vez era ese mi destino final.

Salí de la habitación, mamá ya estaba ahí esperándome con una charola de comida y su expresión de tristeza y empatía.

—Buenos días amor, que bueno que ya despertaste.–Asentí y mire el desayuno, unos huevos estrellados y tocino con forma de carita feliz, la mire a los ojos.

—Mamá...

—Solo quiero que te sientas bien... la mento si no es la mejor forma, pero es la única que se me ocurre.

—Está bien... gracias por el esfuerzo.–Tome el plato y empecé a comer, incluso si estaba parada. Ella de repente miró hacia el frente por encima de mi cabeza.–¿Qué sucede?

—Alguien acaba de llegar.

—¿A que te refieres? ¿Es amigo o enemigo?

—Amigo. En definitiva es alguien que conocemos.–Las esperanzas de la chica crecieron, pensando que tal vez, solo tal vez podría tratarse de ella, de aquella chica que había estado atormentado sus pensamientos y su corazón. Termino de comer con rapidez y salió de la habitación, su madre detrás de ella.

Bajo corriendo hacia la entrada del reino, deteniéndose al ver que no era ella. No era su Mel.

Su mamá la pasó de largo y se acercó a los visitantes con los brazos abiertos y una sonrisa.

—¿Esa es Glimmer?–La mencionada levantó la mano para saludar. Sentí mi corazón latir con rapidez, ¿cómo había podido ser tan tonta? Pensando que Mel había vuelto, aunque fuera un minuto.

—¡Hola!

—Hola, hace mucho tiempo que no venías de visita.–Abrazo a la menor.–Y Bow.–Lo abrazo también a pesar de la incomodidad del joven. ¿y quien es ella?–Miro a la rubia.

—Ella es mi amiga Adora, claro que a veces también es una guerrera de dos metros y medio llamada She-Ra, así que no te asustes cuando pase.

—Hola.–Habló la rubia.

—Adora, que gusto que Glimmer esté haciendo nuevos amigos...–Mamá la miró de arriba a abajo y luego me miró a mi.–Ven amor, no seas tímida con las visitas.–Cuando logre controlarme me acerqué y sonreí, mi sonrisa no era del todo genuina, era más bien una sonrisa forzada, pero era lo mejor que podía dar.

—¡Nova! Estos son mis amigos, conoces a Bow, esta es Adora, Adora ella es mi increíble prima; Nova.

—Es un gusto conocerte Adora...

—Nova, enséñale el pueblo a Adora.–Mandó mamá, ambas nos miramos con sorpresa e intentamos safarnos.–No, no quejas. Ella es una invitada y nunca ha visto el reino, te presentarás y le enseñarás todo.

—Yo...

—¿En serio discutirás?–Bufe.

—No...

—Bien.–Volvió a sonreír. Adora me miró con pena y empezamos a alejarnos de ellos y hacia el pueblo.

—La mento que tengas que hacer de niñera, no era mi intención.

—No te preocupes, yo se como es mi mamá, no es tu culpa.–Ella asintió.–¿Y que hacen aquí?

—Alianza de las princesas, queremos volver a unirla para la revolución.–La mire con duda.

—Pero tú no eres una princesa...–Se enrojeció.

—Y-Yo... no, no lo soy, pero me transformo en She-Ra.

—¿She-Ra? ¿Cómo la de los cuentos?

—Exactamente esa...–Ella miró al rededor y notó la gente haciendo magia.–¿Tu puedes hacer eso?

—Algo así... no necesito ningún artefacto para hacer magia.

—¿No?–Me miró con curiosidad.–¿Entonces que?–Le mostré mis manos, las cuales parecían estar brillosas todo el tiempo, en este momento se podía ver poco, ya que al no usar mis poderes, por lo general tardan en volver.–¿Haces magia con las manos?

—Mhm.

—Wow... yo necesito de mi espada...

—Cierto, She-Ra... ¿cómo funciona eso?

—Solo sostengo la espada, digo "por el honor de Greishold" y me transformo en una mujer de dos metros.

—Vaya... eso debe ser interesante de ver.

—Te mostrare otro día.–Me sonrió y ambas entramos a la habitación con los cristales, ella miró hacia arriba con emoción y aprecio por el brillo.–Wow...

—Los lentes lunares. Los usamos en nuestras ceremonias para renovar Mystacor y mantener todo esto protegido del mundo exterior. De hecho esta noche hay una ceremonia, la ceremonia del eclipse. De seguro mamá los ira venir. Es linda.–Adora se alejó de mi y empezó a mirar los cristales, apreciándolos, pero miró hacia atrás al notar algo.–¿Esta todo bien?

Corrió hacia otra habitación. Me debatí entre seguirla o no hacerlo. Decidí seguirla después de un tiempo.

—Este es el salón de hechicería. Aquí han entrenado generaciones de ante pasados, han guiado Mystacor por eras.–Mire las estatuas hasta llegar a la de mi tío.–Está es la estatua del padre de Glimmer, mi tío... mamá lo extraña de vez en cuando.

—¿Entonces... el papá de Glimmer era el hermano de tu mamá?

—¿Qué?–Pregunte con diversión, pero al ver su rostro supe que era una pregunta genuina.–Si, ¿no sabias lo que tío significaba?

–No, estaba esperando entenderlo por contexto en algún momento...–Admitió.

—¿Cómo es eso posible?

—Yo... es difícil de explicar.–Asentí.

—Está bien... vamos, hay que seguir, mamá debe de estar ya con Glimmer y Bow en el comedor.

—¿Qué le pasó a ella?–Adora se detuvo frente a esa estatua, estaba apagada, el rostro de la mujer era sombrío, mamá me había advertido sobre ella, me había dicho todo sobre ella realmente, o al menos la mayoría de cosas, yo tuve que investigar algo por mi cuenta, especialmente cuando mamá dormía.

—Light Spinner. Ella buscaba tener el poder absoluto sobre todos los demás sin importarle el bien o la luz. Así que fue desterrada muchos años atrás, aunque la leyenda dice que nunca se fue realmente, sino que está haciendo tiempo, esperando la hora de su venganza...

—¿Pero... es eso cierto?–Me miró con susto.

—No, no que yo sepa. Por eso es una leyenda. Es una historia de noche para asustar a los niños y que aprendan que no hacer.

—A mi no me asustaban así...

—¿Entonces como?

—Me asustaba cuando se llevaban a mi amiga Catra y la castigaban...–Murmuro, mire como sus ojos brillaron, un reflejo de algo más que una amistad. Sonreí, reconocía esa mirada.

—¿Estabas enamorada de ella?–Ella me miró sin responder, más bien sin saber que responder.–No te preocupes, yo... yo también he estado enamorada...

—¿En serio?–Asenti.–¿Y que pasó?

—Ella... ella se fue de mi vida... no creo que siquiera la vuelva a ver nunca.

—...La mento oír eso.

—Yo... mejor... hay que irnos al comedor...–Ella asintió y ambas caminamos juntas en silencio. No sabía si era incómodo, pero ambas teníamos nuestros secretos, éramos desconocidas igualmente, no teníamos porque contarnos nuestras vidas la una a la otra, al menos no en este momento.

[...]

Glimmer, Bow y Adora habían salido a la playa, así que mi mamá decidió que yo también debía salir. Me acerqué a ellos, pero al ver que solo estaban recostados me quite la camiseta larga y me metí al agua, disfrutando de las olas relajadas.

Sentí la mirada de alguno de ellos sobre mi, pero no me preocupe demasiado, probablemente era Glimmer viendo mi nuevo traje de baño, se lo prestaría después. Así éramos, más unidas que muchas familias, pero ella había dejado de venir de un tiempo acá, se la pasaba con Bow, no la culpaba, cualquiera preferiría pasar más tiempo con sus parejas que con la familia, pero igual no dejaba de doler. En especial porque probablemente ella no sabía de Mel, bueno, nada más allá de lo que todos decían de Mel. Pero no conocía mi versión de ella, la versión que estaba enamorada de mi, mi versión que estaba más que enamorada de ella.

—¡Nova! ¡Vamos a la gruta de vapor!–La voz de Glimmer me hizo salir de mi cabeza y los mire a los tres.

—Solo... espera, ya voy.–Nade hacía ellos. No me hacía mal estar con ellos, al menos no si hablaba con ellos, me ayudaba a salir de mis sentimientos en lugar de ahogarme con ellos y con el dolor que sentía por Mel.

Tal vez esto era lo que necesitaba. Tal vez.

Holis! Cómo andan? Aquí está el primer cap de esta increíble collab, estoy más que enamorada de Adora y de esta serie, así que espero que esta historia les llegue tanto como me llega a mi.

Meme del capítulo: