Había pocas cosas que podían sorprender realmente a Kai Parker y una de esas fue escuchar a Faith decir que él era su padre.

Kai al principio pensó que la niña le estaba mintiendo o jugando una broma pero cuando insistió en ésto supo que estaba hablando en serio, la pregunta en su mente era ¿Cómo era posible eso?, no podía creer que se hubiera acostado con Ángel Mikaelson quien aún no nacía todavía en su línea de tiempo y que además hubiera tenido una hija con ella, incluso para alguien como Kai Parker fue demasiada información para su cabeza.

Al salir de su shock actual, Kai buscó la mirada de Faith para hacerle mil preguntas que tenía en mente pero se dió con ella dormida en sus brazos haciéndolo tragar saliva por la imagen que veía sus ojos.

Kai se negaba a creer que Faith fuera su hija verdaderamente, simplemente no lo podía imaginar.

¿Cómo alguien tan tierna y pura como ella podía ser hija de alguien como él?. Pensó Kai.

─ ¿Faith?

Al escuchar una voz femenina detrás de él, Kai se giró en su lugar aún sosteniendo a Faith en sus brazos.

─ Ángel ─ pronunció él.

No había rastro de diversión en su voz como siempre sino todo lo contrario, estaba demasiado serio algo que llamó la atención de Ángel quién supuso que su hija tal vez habló de más.

Ella había dejado sola a su hija un momento para hablar con Qetsiyah, la bruja le dijo que pronto mandaría nuevamente a Faith a su línea de tiempo real.

─ Dámela ─ Ángel se acercó a Kai tomando a su hija entre sus brazos.

Kai la miró en silencio sin poder formular nada aunque quisiera decir muchas cosas en ese momento.

Al ver que él no le dijo nada, Ángel suspiró aliviada al creer que nada había pasado, entonces le dedicó una mirada antes de irse de la cocina dejando a Kai parado ahí.

Al ver la acción de Ángel, Kai reaccionó rápidamente siguiéndola, necesitaba respuestas y sólo ella se las podía dar.

─ Necesitamos hablar ─ le dijo Kai una vez que se acercó demasiado a ella.

─ Espera un momento aquí ─ pidió Ángel al escucharlo.

Kai asintió deteniéndose fuera de la puerta de la habitación de Ángel Mikaelson.

─ ¿Y tú qué haces aquí? ─ la voz de Damon hizo que Kai desviará su atención.

Las habitaciones estaban divididas en varios sectores, en ese sector en específico se encontraban las habitaciones de Ángel, Damon, Stefan, Caroline y Elena, por eso se le hizo raro a Damon ver a Kai ahí.

─ ¡Qué te importa! ─ soltó Kai al escuchar su pregunta.

Damon formuló una sonrisa en sus labios mientras rodaba sus ojos.

─ Ojalá Klaus aparezca y te rompa la cabeza al verte aquí ─ deseó Damon entrando en su habitación la cuál quedaba al lado de Ángel.

Kai no dijo nada, solo frunció el entrecejo esperando con impaciencia al ver que Ángel se estaba tardando, al mirar por la rendija de la puerta, la vio acostando a Faith seguido de ponerle una frazada encima, eso lo hizo tragar saliva nuevamente en ese día.

Segundos después, Ángel salió de su habitación mirando a Kai quien se encontraba afuera.

─ ¿De qué querías hablar? ─ preguntó Ángel mirándolo.

─ Vamos a un lugar más privado ─ pidió Kai.

Ángel frunció el entrecejo al notar su extraña actitud, entonces de nuevo le llegó el temor de que su hija hubiera hablado de más, esperaba que no fuera así o tendría demasiado que explicarle a Kai.

─ Bueno, vamos al despacho ─ dijo Ángel al ser un lugar bastante privado donde nadie los podía escuchar debido a que había un hechizo para evitar eso.

Ambos caminaron en silencio hasta llegar al despacho, al cerrar la puerta detrás de él, Kai miró fijamente a Ángel.

─ ¿Me puedes explicar cómo es que yo soy el padre de tú hija? ─ preguntó Kai con seriedad cruzándose de brazos.

Al escuchar su pregunta, Ángel quedó inmóvil en su lugar al saber que Kai sabía la verdad de la paternidad de Faith.

─ Y-o ─ Ángel tartamudeó sin saber qué decirle al estar sorprendida de que Kai supiera la verdad.

─ Explícate ─ insistió Kai golpeando con su pie el suelo con lentitud.

Ella suspiró acercándose a un asiento que había ahí, luego levantó su mirada hacía Kai.

─ Bueno, la calentura nos ganó, tú metiste tu cosita en mi cosita ─ trató de explicar Ángel ─ meses después nació nuestra hija.

Kai frunció el entrecejo notablemente al escuchar su respuesta.

─ ¿Cómo qué "cosita"? ─ Kai se indignó inevitablemente al oírla.

Ángel blanqueó sus ojos al ver que Kai le tomó más atención a eso.

─ Kai eso no es importante ahora ─ dijo Ángel.

─ Claro que sí, me harás entrar en depresión y eso me hará más violento ─ murmuró él.

─ Si te hace sentir mejor, me hiciste sentir demasiado bien, la tienes grande y solo bastó una vez para dejarme felizmente embarazada ─ mencionó Ángel.

Kai suspiró más calmado al escucharla, luego frunció el entrecejo al recordar el por qué de esa conversación.

─ ¿De verdad es mí hija? ─ preguntó Kai con incredulidad.

─ Sí ─ asintió Ángel ─ afortunadamente sacó mi carácter y no él tuyo.

Kai frunció nuevamente su entrecejo al escucharla decir eso. Él era consciente que no era él mejor de todos pero tampoco el peor, además, su carácter era muy divertido.

─ ¿Me llevo bien con Faith? ─ Kai preguntó mientras caminaba por el despacho.

A Kai realmente le costaba asimilar que sería padre en el futuro, no creía ser bueno, él no tuvo una relación buena con su padre, desde que su verdadera naturaleza como sifón se reveló su padre lo comenzó a tratar mal refiriéndose a él como una "abominación", que, entre otros factores, lo llevó a convertirse en un sociópata.

─ Claro que sí, te ama ─ le dijo Ángel.

Ella no estaba mintiendo, Faith amaba a Kai, se podría decir que él era su favorito entre los dos algo que al principio indignó a Ángel.

Kai tragó saliva al escucharla, no estaba seguro si ella decía la verdad o mentía, entonces recordó cuando Faith le reveló que era su hija y lo abrazó.

─ ¿Tú y yo estamos juntos? ─ preguntó Kai.

─ No, somos amigos ─ negó Ángel.

─ ¿Cómo es qué nos conocimos? ─ Kai no pretendía quedarse con las dudas, quería preguntarle todo lo que tenía en mente.

Ángel se levantó del asiento mirándolo al escucharlo, no le podía decir toda la verdad, sabía que Qetsiyah se molestaría.

─ No puedo decirte más ─ dijo Ángel.

─ ¿Por qué no? ─ Kai frunció nuevamente su entrecejo cruzándose de brazos.

─ Porque a Qetsiyah no le gustará ─ aclaró ella.

─ ¿Y eso qué? ─ Kai levantó sus cejas mirándola, a él le daba igual Qetsiyah.

─ ¡Ya! ─ Ángel lo miró con seriedad, Kai le quitaba la paciencia fácilmente cuando quería ─ deja las preguntas.

─ ¡Me acabo de enterar que seré padre! ─ recordó Kai ─ lo mínimo que merezco es saber sobre esto, ¿No lo crees? ─ preguntó.

─ Y lo sabrás, más adelante ─ aseguró Ángel.

Kai suspiró blanqueando sus ojos, él no era alguien paciente y al ver que ella no le diría nada más caminó hasta la puerta.

─ La verdad no sé cómo terminé metiéndome contigo, niña ─ dijo él molesto.

Ella frunció el entrecejo molesta al oírlo decir eso, claramente se indignó, caminó hasta la puerta abriéndola y antes de salir miró a Kai.

─ Agradece que te voltee a ver y eso porque estaba caliente y necesitaba a alguien para pasar el rato ─ soltó Ángel.

Kai abrió y cerró sus labios sorprendido al escucharla, cuando intentó decir algo, Ángel ya se había ido dejándolo en la puerta del despacho.

─ Tiene carácter la mocosa ─ susurró Kai cerrando la puerta con fuerza detrás de él al salir de sus pensamientos ─ me gusta.

Ángel por otra parte caminó con rapidez y un toque de molestia hacía la cocina alejándose del despacho.

─ Ángel.

─ ¿Qué? ─ preguntó Ángel con brusquedad girando su cuerpo hacia atrás dándose con su padre. Klaus levantó sus cejas al escuchar su tono de voz ─ ¡Papá! ─ tragó saliva al ver que se trataba de él y no de Kai.

─ ¿Y ese tono? ─ Klaus le preguntó.

─ Lo siento, creí que era alguien más ─ dijo Ángel.

─ Lo supuse, ¿quién te molestó? ─ preguntó Klaus acercándose a su hija.

─ Nadie ─ mintió Ángel ya que no le iba a decir la verdad sabiendo lo que era capaz de hacer su padre.

─ No me mientas ─ pidió Klaus.

Ángel se acercó a su padre rodeando sus brazos por su cintura abrazándolo.

─ Te quiero ─ le dijo Ángel.

Klaus la miró en silencio correspondiendo el abrazo de su hija, se estaba acostumbrando demasiado a ella, la espera para que nazca en ese tiempo se le hacía eterno.

─ Se lo que intentas hacer ─ susurró Klaus al saber que quería cambiar de tema.

─ ¿No me dirás que me quieres también? ─ preguntó Ángel.

Klaus sonrió de costado.

─ También te quiero ─ aseguró Klaus.

Ella formó una sonrisa en sus labios ya sabiendo ésto, al romper el abrazo entre ambos, se miraron mutuamente.

─ ¡Lo sé, soy tu persona favorita! ─ dijo Ángel.

Klaus asintió desviando un momento su mirada antes de ver a su hija nuevamente, necesitaba hablar con ella sobre el embarazo de Davina.

─ Necesitamos hablar de algo ─ mencionó Klaus.

─ ¿Qué? ─ Ángel frunció el entrecejo al escucharlo serio.

Klaus miró a ambos lados para saber sí alguien estaba cerca de ellos, al percatarse que no había nadie más allí que ellos dos, miró de nuevo a su hija.

─ Davina está embarazada de mí ─ contó Klaus.

─ ¡Oh, ya lo sabía! ─ dijo Ángel sin mostrar sorpresa en su cara.

─ ¿Qué? ─ Klaus fue quien se sorprendió al escucharla.

─ Digo, ¿En serio? ─ al notar que había cometido un error, Ángel trató de solucionar su desliz.

Klaus la miró fijamente, él no era tonto, sabía que su hija le estaba mintiendo.

─ ¿Cómo lo sabías? ─ preguntó Klaus.

─ No lo sabía ─ negó Ángel.

─ Ángel ─ pronunció Klaus con seriedad.

Ella se reprendió mentalmente por haber hablado de más cuando no debió, rápidamente pensó en una mentira creíble.

─ Qetsiyah me lo dijo ─ mintió Ángel.

Klaus asintió con su cabeza, le creyó su mentira ya que Qetsiyah sabía sobre el embarazo de Davina, por lo cuál pensó que le había dicho a Ángel.

─ ¿Y qué piensas? ─ preguntó Klaus.

─ Qué eres muy calenturiento, papá ─ dijo Ángel riéndose entre dientes.

Ahora entiendo a quién salí así. Pensó mentalmente Ángel.

Klaus se ahogó con su saliva al escuchar las palabras de su hija al no esperarse eso.

─ ¡Ángel! ─ Klaus no pudo evitar sentir un poco de vergüenza.

─ Estoy bromeando ─ ella levantó sus manos ─ aunque deberías cuidarte, menos cuando estés con mi mamá, quiero nacer en el futuro ─ le dijo.

Klaus se quedó inmóvil en su lugar sin decir nada, no le gustaba hablar de ese tema con su hija.

─ Hay condones muy buenos, si quieres te digo la marca de algunos que usa... los hombres ─ murmuró Ángel.

Klaus frunció el entrecejo demasiado, tanto así que su cara pareció muy arrugada.

─ ¿Cómo sabes eso? ─ preguntó Klaus.

Aunque fuera consciente que Ángel tenía una hija en el futuro, Klaus pensó que hasta allí había llegado, no quería pensar que su hija seguía haciendo cosas de adultos.

─ Una amiga me lo contó ─ mintió Ángel al darse cuenta que habló de más.

Klaus soltó todo el aire que había acumulado en sus pulmones al escucharla ya que había pensado otra cosa.

─ Ay, menos mal ─ dijo Klaus.

Ella sonrió aliviada de que su padre le hubiera creído semejante mentira que le dijo.

─ Bueno, iré a descansar con mi hija, buenas noches papá ─ Ángel lo besó en la mejilla despidiéndose de él.

─ Buenas noches ─ susurró Klaus mirándola.

Una vez que ella se fue, Klaus se dirigió a su habitación pensando en la conversación que tuvieron.

¡CAPÍTULO 24!

Hola, aquí les dejo un nuevo capítulo, espero que les guste.

Es un capítulo un poco corto, en el próximo vuelvo con el futuro.

Ángel le confirmó a Kai que Faith es su hija

El karma le llegó a Ángel ya que el favorito de Faith es Kai así como el de Ángel, Klaus.

Ángel y Kai tuvieron un pequeño altercado después que ella no le quisiera decir más sobre él futuro.

Los dos tienen un carácter bastante particular, Ángel es muy Klaus cuando se molesta y Kai es muy Kai.

Klaus es Pepe Argento creyendo en las mentiras de Paola.

Si no fuera inmortal, Klaus se moriría de un disgusto con los acontecimientos que verá en el futuro.

¿Qué les pareció?