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98|Dirty talk (+18)



La pareja se encontraba en el sofá hablando pacíficamente de diferentes cosas. Cada uno en el lado contrarío del mueble mirándose las caras. Era un día frío y eso les daba la excusa perfecta para estar en el sofá calentitos bajo aquella cobija.

Alex tomaba los pies de su esposa acariciando estos mientras le hablaba,tenía una fascinación silenciosa por estos ya que Mary siempre pintaba sus uñas de los pies de diferentes colores,hoy era blanco y debía admitir que le gustaba mucho ese color en ella. Nunca lo decía nada de estos en voz alta pues parecería un loco por los pies y no era así,era solo que le gustaba todo de su esposa..¿Y como no? Era tan hermosa y elegante que le hacia sentirse orgulloso de si mismo cuando salían de la mano a cualquier lugar y la gente los veía.

Mary hablaba y hablaba mientras él masajeaba sus pies mirándola en silencio. Pero no mentiría,no escuchaba nada de lo que decía. De un momento a otro la castaña quitó su pie de entre las manos de su esposo para presionarlo con algo de fuerza entre las piernas de este haciendo que soltara un quejido.

"¡Ay,hija de tu puta madre!" Se quejó entre dientes retorciéndose un poco en su mismo lugar.

"¿Tienes una fascinación con mis pies o qué?" Le preguntó Mary con una sonrisa burlona en su rostro. "Ni siquiera estás escuchando lo que te digo."

"¡Sí lo estoy!" Se trataba de defender. "¡Te estoy escuchando!"

"Te he hablado de miles de cosas que no tienen sentido y te hablé de Simon." Insistió. "No has hecho ni un comentario al respecto."

"¡A lo mejor me levanté pacifico y no quiero discutir!" Seguía tratando de defenderse ahora casi desesperado pues la castaña presionaba aún más su pie sobre sus pantalones.

Mary iba a decir algo al respecto,pero una expresión de sorpresa se mostró en su rostro al notar que el cuerpo de su esposo no estaba reaccionando mal ante su presión. En pocas palabras y resumiendo,Alex estaba teniendo una erección.

"¿Te estás excitando porq esto?" Preguntó incrédula alzando una ceja.

"No controlo mi cuerpo,Mary,no te burles." Le respondió con su rostro algo rojo por ello. Un escalofrío recorrió su cuerpo al ver como la fémina le sonreía con malicia. "No,no,no,Mary,no— ¡Su puta madre,Mary!" Volvió a exclamar al sentir como el pie ajeno se movía en círculos sobre su hombría.

Ella rió sin dejar de mover su pierna. "Dime,Alex,¿alguna vez has tenido una fantasia?" Preguntó de la nada disfrutando como reaccionaba ante ella. A este punto no le importaba que no le alla prestado nada de atención anteriormente mientras hablaba sobre cosas de su trabajo y tal.

"¿A qué viene eso?" Murmuró tomando la delicada pierna de su esposa pero sin alejarla.

"Responde." Susurró suavemente sin detener sus movimientos.

Alex tomó aire profundamente para hablar mientras era,y consideraba él,deliciosamente torturando. "Huh,dime un número de mi lista y te lo diré." Respondió con una sonrisa ladina.

"¿Hasta qué número llega?" Preguntó sonriendo igual que él mientras dejaba sus movimientos.

"Mm.." se encogió un poco de hombros. "Digamos que hasta el doce..Es un número redondo." No,no lo era. Pero no iba a hablar de eso ahora.

"Dime...Tal vez,la que más desees.." dijo levantándose de donde estaba para ir hasta donde él.

Él la recibió de brazos abiertos atrayéndola para sentarla en su regazo. "¿Segura quieres escucharlo?" con sus manos atrajo a la castaña para tomar sus glúteos con ambas manos. Ella asintió a la vez que pasaba sus brazos por los hombros de su esposo con lentitud. "Bueno.." tomó un fuerte inhalada del aroma del shampoo de ella. Lavanda,era un rico aroma. "Se podría decir que he tenido fantasias sobre...tú,sobre mí,sobre mi rostro." Lentamente coló sus manos por el pantalón de pijama de Mary para sujetar de una mejor manera sus nalgas. Todo mientras ella lo miraba acariciando su largo cabello negro. "Saboreando con mi lengua y sujetándote para que no te quites." Se acercó lentamente para sentir su cálido aliento.

Mary rió un poco para darle un corto beso en los labios. Fue corto pero firme. "¿Qué más?" Preguntó con suavidad al separarse.

"¿Alguna vez has imaginado mi rostro todo rojo por ti?" Lentamente masajeó los glúteos de ella para sujetarlos con fuerza sacándole un jadeo de sorpresa. "Y si llegara a suceder,te suplicaría porque no te levantaras. Porque la idea de que me asfixies no me molestaría en lo absoluto."

No se esperaron ni un poco más para besarse con desesperación y hambruna. Podría ser que traían ganas retenidas desde hace unos días pues con todo lo del trabajo,proyectos y los directos era casi imposible no quedar dormidos tan pronto tocaran la cama. Si uno tenía el día libre,el otro trabajaba. No había momento para estar juntos de aquella forma íntima. Bueno,hoy era el día.

...

De la pequeña mesa en la sala se cayó una figura de adorno debido al golpe repentino en esta. La castaña se agarraba de lo que podía en el sofá,su esposo,por otro lado buscaba la mejor forma para sostenerse y así continuar sus movimientos,en el proceso de hacer esto golpeó la mesa y sucedió lo ya contado.

En un movimiento brusco el chico se levantó del sofá agarrando a su mujer. Una vez ambos parados volvió a introducir su miembro en ella para tomarla de las caderas y así poder embestirla. Mary jadeaba y gemía cerrando sus ojos con fuerza. Se sentía muy expuesta al estar solo así,de pie y desnuda en mitad de su sala,pero le daba cierto encanto que solo él la pudiera ver así. Las manos de la chica se sujetaron de lo que podían,en este caso llevó sus manos hacia atrás colocándolas sujetando los brazos de su esposo,bueno las manos.

"¡Amor,despacio!" Pero aunque lo pidiera sabía que no le haría caso.

Alexis dejó de sujetar las caderas de su esposa para tomar uno de los senos de Mary,luego con la otra mano la sostuvo de la pelvis con firmeza. El escucharlo gruñir y jadear de vez en cuando era música para los oídos de la castaña,amaba aún más cuando lograba escucharlo gemir,era demasiado para ella.

"Alex..Alexis.." murmuraba la fémina mordiendo sus labios. Cada embestida la hacía sentirse más cerca de culminar.

"Cada vez que gimes mi nombre siento que voy a explotar." Le dijo él cerca de su oído. Mary sonrió orgullosa de ello.

El rato pasaba y pasaba. Ya no había luz afuera. Lo único que alumbraba a la pareja era la luz de la televisión que seguía encendida desde que estaban sentados hablando y ya. El chico se encontraba sentado en el suelo contra el sofá y sobre él en su regazo estaba ella sentada. Disfrutaba de moverse repetidamente,aunque sus piernas estaban cansadas.

"Ya no puedo más." Susurraba ella agarrándose de los hombros de él. "Mis piernas no resisten más.."

"Maldición..Sujétate." Y sujetó a su esposa atrayéndola a él para levantarla un poco y comenzar a moverse rápidamente contra ella. Mary no dudó en abrazarse a él en el proceso. Los gemidos fueron fuertes y los ruidos que hacían sus pieles aún más. Fue cuestión de segundos para que llegaran al climax y ambos tuvieran un satisfactorio orgasmo. La noche terminó así..con movimientos de caderas,besos largos,lenguas húmedas y manos traviesas.


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Si hay faltas de ortografía o un error,por favor déjenme saber.
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