"¿Cual es la prisa?" Reía suavemente la castaña con los ojos tapados con una venda. "¿Qué es lo que me vas a mostrar?"

"Shh,confía." Le respondió su esposo guiándola fuera de la casa. Al estar fuera de la casa Alex tomó los hombros de Mary colocándose detrás de esta. "Ya. Te puedes quitar la venda."

Marilyn llevó sus manos a sus ojos quitando las vendas ansiosa de ver que era lo que tanto ocultaba su amado. Al lograr ver la luz de nuevo, buscó que era lo que esperaba y al encontrarlo al segundo abrió los ojos sorprendida. Un hermoso Mustang blanco se encontraba a un lado del Mustang negro de Alex.

"Feliz aniversario." Le dijo con dulzura el pelinegro para darle un beso en la mejilla.

Mary no supo que decir. Lo volteó a ver buscando las palabras para hablar,le tomó un poco de tiempo. "Pero...no— Nuestro aniversario es en tres meses." Murmuró.

"De casados,sí." Le dió la razón. "Pero de novios fue hace unos días."

"¿Porqué un auto? Me habías llevado a comer y a diferentes lugares a pasar el día juntos.." seguía confundida.

"Dijiste que querías un auto y el proceso se me hizo largo." El chico tomó la mano de su amada y dejó las llaves sobre estás cerrándole la mano. "Así que te lleve a comer como siempre y ahora te regalo un auto." Le guiñó y tiró su misma mano hacia atrás para darle una suave nalgada,luego le agarró el trasero. "Porque la reina se lo merece todo." Sonrió.

Mary soltó un suave chillido de sorpresa y lo miró con los ojos abiertos por unos cortos segundos para luego sonreír con dulzura y un pequeño sonrojo. "Gracias,cielo.." murmuró la castaña para girar a él y abrazarlo. La mujer castaña había querido un auto desde hace mucho pero no quería comprar uno pues no quería que su esposo dejara de llevar a lugares.

"De nada,mami." Rió suavemente para abrazarla aferrándola fuerte.

Luego de unos pocos minutos de besos y abrazos,Alexis se separó sonriendo para mirarla tomándole los hombres.

"¿Qué esperas? Ve a conducir tu nuevo auto." Mary sonrió y con emoción brincó un poco para ir al auto.

Antes de subirse le abrió la puerta a su esposo, este subió luego de fingir ser una doncella elegante de la época victoriana. Le cerró la puerta y le dió la vuelta al auto.

...

El auto blanco y llamativo iba despacio luego de estar acelerando un buen rato. Estaban de camino a la casa mientras pensaban en que cenar. Terminar por querer pedir algo sencillo de un fast food. Todo estaba tranquilo..hasta que Alexis habló.

"Ahora que estás contenta y vamos de camino a comprar comida.." canturreó el chico. Mary ya sabía por donde iban los tiros.

"¿A dónde te vas esta vez?" Le preguntó sabiendo que esta semana estaría muy ocupada con asuntos del restaurante y no podría ir con él.

El pelinegro movió su cabeza de un lado a otro nervioso."Mm...No te gustará."

"¿Saber a dónde?" Preguntaba la chica dando la vuelta para tomar otro camino más rápido.

"Saber con quien." Terminó de hablar Alex.

Marilyn volteó a verlo cuando se detuvo en una luz roja. "¿A dónde y con quien?" Preguntó nuevamente frunciendo el ceño.

"Uhh..Digamos que habrá un Name your price.." su voz fue bajando poco a poco. "..y estará Minx." Casi ni se escuchó. Pero lo logró escuchar. Mary no dijo nada, pero su rostro cambió. Sus labios se fruncieron pero no le dijo nada.

Ahora,Marilyn Teresa Maldonado era conocida y amada por ser una dulzura de persona. Siempre servicial, siempre amable, siempre disponible a ayudar a quien sea que lo necesite con lo que sea. Era uno de sus encantos más grandes y reconocidos entre la gente que la rodeaba. Pero no era secreto entre el matrimonio que la chica aborrecía con todo su corazón a esa mujer.

¿Y cómo no? La chica constantemente vacilaba con bromas diciendo y hablando de escenarios románticos con Alexis. Muchas veces tuvo que soportar verla coquetearle. La francesa nunca dijo nada. La gota que rebasó el vaso fue cuando la mujer de cabello morado lo agarró por las piernas haciendo que el mexicano cayera y se hiriera. Alex tuvo que convencer a Mary mientras la agarraba abrazándola para que no se desconociera y a saber que haría del coraje. Todo detrás de bambalinas.

En fin. Esa mujer estaría allí.

"No te enojes,por favor,mi vida." Le pidió el chico agarrando la mano de su amada, quien lo ignoraba mientras pedía comida por el servi-carro. Alex suspiró y la dejó estar hasta que ya tuvieron la comida y estaban de camino de vuelta a la casa. "Reina." Susurraba acariciando la mano de Mary con ambas de sus manos. "No me ignores.."

"No estoy ignorándote." Dijo la chica quitando la mano para conducir con las dos manos.

"Lo estás.." suspiró el pelinegro.

"No lo estoy." Dijo otra vez. "Sabes lo que opino de ella. Si vas estará encima tuya haciéndose la muñequita linda." Hablaba con rapidez por el coraje. "Cette salope." Murmuró bajo gruñendo.

Alex la miró para hablar. "No se ni vergas de francés pero sé que eso era un insulto." Y lo era.

.
.
.
Si hay faltas de ortografía o un error,por favor déjenme saber.
.
.
.