30|Picante Mañana (+18)
La tarde había llegado y Mary todavía no despertaba de su sueño. Claro que no iba a despertar,estuvo despierta por horas en la noche anterior con todo esto del sobrepensar de la boda y solo logró dormir en la madrugada.
Alex ya había despertado hace horas. Desayunó solo y limpió la casa para que su amada no tuviera que hacerlo al estar tan cansada. Hizo todo lo que ella normalmente haría y al terminar fue a ducharse. Al salir del baño se vistió con su ropa interior,pantalones cortos y una camisa cualquiera con tal de estar cómodo.
"Mami.." murmuró subiéndose a la cama para acostarse junto a Mary. No le llamaba por ese apodo por algún tipo de fetiche o algo,solo le parecía un apodo lindo. "Ya son las dos de la tarde,debes despertar." Le dijo con dulzura acariciandole el cabello.
Pero ella seguía durmiendo pacíficamente sin si quiera moverse.
"Mary." Llamó otra vez dándole pequeños besos en la mejilla y en el cuello. Notó como una pequeña sonrisa se formó en el rostro somnoliento de la fémina. "Ya te vi,que estás despierta~" rió suavemente dándole más besos.
"Estoy cansada..Déjame dormir." Se aferraba más a su almohada sintiéndose con sueño. No quería despertar.
"Entonces..buscaré otro método para hacer que te levantes." Le susurró al oído provocando un escalofrío en el cuerpo ajeno.
Alex se acercó rodeándola con sus brazos acercándola a su cuerpo. Metió sus manos bajo la cobija y lentamente subió la camisa de tirantes de Mary. Al esta dormir sin sostén se le hizo fácil tomar uno de sus senos y acariciarlo con delicadeza. Su otra mano se metió bajo los pantalones de pijama de gatitos buscando su camino sobre su ropa interior para acariciar la tela.
"Cariño—" gruñó la chica removiéndose un poco pero realmente disfrutando de su tacto. Un gemido cálido salió de sus labios cuando sintió como la mano de su prometido se metía bajo sus bragas. Por instinto sujetó esa misma mano sin realmente separarlo y se mordió el labio sintiendo sus mejillas rosadas.
"¿Vas a despertar?" Le susurró coqueto para darle otro beso en el cuello.
"Si seguirás haciendo esto..pues no." Le dijo igualmente con un tono pícaro.
Alex sonrió de lado y lentamente agarró la ropa interior de Mary para bajarla. Luego acarició lentamente la zona íntima de la chica haciendo que soltara jadeos suaves. Sus dedos se movían en círculos lentos pero precisos,sabía lo que estaba haciendo. La castaña se mordió el labio separando sus piernas lentamente para que hiciera lo que le plazca con ella. La otra mano del chico seguía moviéndose sobre el botón rosado de su novia frotando este con frecuencia y aveces pellizcándole con suavidad,justo como a ella le gustaba. Mientras hacía todo esto con sus manos,su boca seguía besando el blanco cuello de Mary dejando leves y pequeñas marcas.
Alex frunció el ceño levemente al sentir como Mary frotaba sus nalgas contra su evidente erección buscando algo más de atención de su parte. El pelinegro no dudó antes de bajar lo suficiente sus pantalones sacando su miembro de estos para frotarse contra la humedad de su chica haciéndola gemir de golpe.
"You're a naughty girl.." le susurró al oído con un tono profundo y ronco.
Mary amaba cuando le hablaba así al oído. Le provocaba miles de sensaciones distintas pero todas buenas. "Just for you." Le respondió en corto mientras se relamía los labios.
Él no dudó dos veces antes de comenzar a introducirse en ella con lentitud. Ella jadeó fuertemente apretando sus manos en puños agarrando la cobija que la cubría. Los movimientos fueron lentos pero profundos. Nunca les gustó ser agresivos o algo parecido cuando se tratara de hacer el amor,porque para ellos era eso; hacer el amor. Una de las manos de la castaña fue a la mano de su amado en su seno para agarrarla sin quitarla de allí. Si algo amaba la chica era sentir la calidez de la piel ajena y una forma de conseguirla era sujetando a su amado y aferrarse a él.
Mary se retorció un poco y se acostó poco a poco inconscientemente boca bajo en la almohada. Al Alex ver esto optó por colocarse sobre ella sin aplastarla luego de quitar su mano de la parte baja de la fémina. Ambas de sus manos se entrelazaron sobre las delicadas manos de su amada para aferrarse a ella sin detener sus movimientos. El frecuente impacto delicado de las embestidas provocaban un ruido húmedo que les hacía sentir mareos de lo excitante que era. Amaban escuchar como el contrarío gemía y jadeaba,la forma en la que se decían apodos amorosos y la forma en la que sabían que lo disfrutaban.
"Te amo tanto.." le susurraba Alexis al oído sin detenerse cerrando sus ojos.
"Y tú me encantas." Dijo Mary entre jadeos y cortos gemidos.
El chico rogó casi suplicante para aferrarse al hueco entre el hombro y el cuello de su amada."Dilo otra vez."
"Me encantas."
"Otra vez."
"Me encantas tanto~"
"..Ah,otra vez."
"¡Me encantas,Alexis!" Chilló sintiendo como su cuerpo se estremecía del placer al sentir una corriente por todo su cuerpo.
...
No supieron cuando las cobijas cayeron al suelo ni cuanto tiempo duraron allí,pero si que la pasaron bien entre la calidez y la excitación del momento. Se amaban tanto que compartir la sensación de sus cuerpos desnudos frotándose entre si era genial aunque no fuera necesariamente sexual todo el tiempo.
La castaña estaba acostada en el borde de la cama. Su cuerpo desnudo estaba expuesto y sus piernas abiertas tratando de no moverse de lugar pero era difícil no hacerlo. Sus manos estaban contra la cama a sus costados entrelazadas con las manos ajenas. El peliengro en cambio,estaba con su cabeza entre las hermosas y delicadas piernas de su prometida. Su lengua recorría cada parte de ella sin dejar ni una sola zona sin ser cubierta con su saliva. En ocasiones movía su cabeza para recorrer más lugares de aquel lugar donde catalogaría como "el paraíso". Succionaba y lamía a su paso haciéndola gemir por tanto placer. Las manos de Mary se aferraban con algo de fuerza a las manos de Alex en un intento de controlar su cuerpo,fue inútil,por supuesto. Él sabía muy bien como hacerla sentir tan bien y lo sabía. La sensación de la lengua húmeda y experta de su prometido la volvía loca del placer. No pudo terminar,lastimosamente. El pelinegro se levantó del suelo para subir a la cama entre las piernas de su mujer acariciando la pierna de ella para frotarse lentamente entre estas. Mary lo miró mordiendo sus labios para tomarle de los brazos con delicadeza. Se besaron profundamente en el proceso a volver a unirse en un solo ser. Entrelazaron una de sus manos en el proceso,se amaban tanto y tanto que cosas tan simples como agarrarse de las manos los llenaba completamente.
"Mi vida..." le susurró él. "No sabes todo lo que me provocas,Mary."
"Mi amor—" le susurró ella en corto sintiendo como la hombría de su prometido entraba nuevamente en ella.
Los movimientos fueron nuevamente continuos y suaves. Los cantos de los gemidos se hicieron presentes y esa melodía fue hermosa para ellos. No había nada mejor para ellos que el sexo mañanero,sexo tranquilo y romántico,lo adoraban. Cuando ya habían pasado un tiempo considerable,por fin estuvieron a punto de terminar abrazados,desnudos y sudorosos. Los besos nunca faltaron y las palabras de amor tampoco.
Alex se separó de ella y se dejó caer a un lado de la cama suspirando y jadeando exhausto. Mary se encontraba igual de jadeante y exhausta. La castaña lo abrazó y lo miró para darle un último beso y hablar. "No me molestaría despertar así.." le sonrió ella con dulzura.
El pelinegro asintió con una suave risa para abrazarla contra su piel desnuda. "Y no me molestaría despertarte así. Pero te despiertas muy temprano y yo no tengo esa rutina." Marylin sonrió antes de darle un largo beso. Ahora estaba incluso más cansada que antes.
"¿Podemos dormir un poquito más?" Susurró la castaña cerrando sus ojos cansados.
"Mhm." Sonrió acariciando el hombro descubierto de la chica. "Claro. Pero debemos levantarnos en algún momento."
"No~" dijo con suavidad para abrazarse más a Alexis. "Merecemos un día de descanso."
"¿Sabes qué? Tienes razón." El pelinegro sonrió y le dió un beso en la cabeza. "Y podemos hacer otra ronda más." Dijo coqueto mirándola con cariño.
Mary rió y negó un poco en el proceso. "Bueno,pero déjame descansar un poco más,¿sí?" Murmuró buscando la cobija para cubrir su desnudo cuerpo siendo golpeado por el aire acondicionado.
"Lo que quiera mi reina." Marilyn sonrió y se aferró lo más posible a Alexis para volver a descansar.
Como se amaban..Era demasiado el amor que se sentían uno por el otro. Casarse los haría enormemente feliz y algún día les contarían a sus nietos su historia de amor. Estaban hechos para estar juntos y nada los haría cambiar de opinión.
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Si hay faltas de ortografía o un error,por favor déjenme saber.
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