141|La teoría de la naranja
Alex estaba en su sofá sentado con toda la tranquilidad del mundo viendo una serie concentrado.
Debía cuidar de Amely como el buen padre que era mientras su esposa trabajaba. La niña se encontraba caminando alrededor de la sala jugando con sus cubos y muñecas en silencio. Esas eran las tarde de padre e hija todos los días.
...
Cuando Mary llegó y se duchó buscó que podía cocinar pues su niña tenía mucha hambre (o eso decía ella). Aunque su papá le dió algo de comer hace no mucho. Igualmente la mujer iba a cocinar para su familia,amaba hacerlo.
"Mama." Llamó la niña parada a un lado de su mamá agarrándole del pantalón de pijama.
La castaña dejó de cocinar para mirarla desde arriba con una sonrisa. "¿Qué pasa,bebé?"
"Nananja." Dijo tirando constantemente de su pantalón.
"¿Quieres una naranja?" Preguntó Mary con ternura por su pronunciación.
"Sí,nananja." Repitió
La castaña no dudó en ir a la nevera para sacar una naranja. Al estar tan ocupada se la dió y se agachó a su altura para acariciar sus mejillas rosadas. "Ve y dile a papá que la pele por ti,¿sí?"
Amely no dudó en ir corriendo con su naranja a la sala donde su padre no dejaba de ver su serie con el ceño fruncido por el momento tan tenso que estaba sucediendo en la trama. Al llegar le extendió la naranja a su papá desde el suelo colando sus bracitos encima del sofá.
Alexis no se dió cuenta de su presencia hasta que escuchó la dulce voz de su niña. "Papa."
El pelinegro agachó la mirada rápidamente y al ver la fruta la tomó para comenzar a pelarla volviendo a mirar la televisión. No se dió cuenta de que lo estaba haciendo hasta que se la devolvió y buscó donde dejar los pedazos de la corteza de la naranja.
"Espera,¿cómo chingados—" murmuró para voltear a su niña y al verla comiendo pequeños pedazos de naranja miró a su esposa. "¿Quien vergas le dió una naranja a la niña?" Preguntó.
"Yo." Dijo Mary cocinando.
"¿Y quien la peló?"
"Tú."
"¿Cuándo? Yo no recuerdo haberlo hecho." Dijo con confusión mirando a Amely comer feliz la fruta ensuciándose la carita. "¡Tú ya comiste,chamaca miona!"
Pero la castañita salió corriendo al reconocer que su papá le iba a quitar su deliciosa fruta. Al final,no se la quitó y solo suspiró rendido para volver a su serie mientras su esposa reía viendo como Amely se escondía bajo la silla.
.
.
.
Si hay faltas de ortografía o un error,por favor déjenme saber.
.
.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro