Después de casi 9 horas de viaje llegamos al aeropuerto de la ciudad donde vivía Quackity, era una mañana muy linda

—¿Quieres tomar mi mano mientras salimos de aquí?.— preguntó y sonreí un poco —No me mal entiendas, solo pensé que si eso te da tranquilidad podemos hacerlo mientras estemos en un sitio público como este.—

—Está bien.— dije tomando su mano, él también sonrió

Tomamos nuestras maletas, ahora él me iba ayudando con una así que cada quien iba arrastrando dos. Caminamos juntos, me estaba guiando a la salida, era extraño porque cuando pasábamos juntos a la gente no sentía miedo, quizás sabía que me estaban cuidando y podía estar relajada

—¿Ya prendiste tu celular?.— preguntó mientras caminábamos y negué —Seguro Rubius ya se dió cuenta de que no estás en casa y está a punto de enloquecer.—

Sabía que tenía razón pero ahora tenía ambas manos ocupadas, en una tenía mis maletas y en la otra su mano, no lo quería soltar.

—Cuando tomemos un taxi directo a tu casa lo llamaré.— avisé

Salimos del aeropuerto y nos detuvimos, lo miré intrigada

—Sobre eso.. no habrá un taxi.— dijo riendo un poco nervioso

—¿Entonces como nos iremos? ¿En autobús?.— pregunté y él negó

Una pequeña camioneta negra algo lujosa se estacionó frente a nosotros

—Quackity amigo.— lo saludó el que venía conduciendo, tenía la ventana abajo así que lo escuchábamos perfectamente —Suban, no puedo estar mucho tiempo estacionado en la entrada de un aeropuerto o me multarán.—

¿Por qué un chico? ¿No tenía amigas que manejaran?

—¡Luzuu! Fué una suerte que llegaras antes que nosotros de aquel viaje.— exclamó quackity soltandome y acercándose a la ventana abierta —Necesitamos que abras el maletero para poner nuestras cosas.—

El tal Luzu bajó del auto y abrió el maletero, Quackity empezó a meter las maletas mientras yo me quedaba un tanto pasmada, tendría que convivir con sus amigos y eso sería raro, Rubén nunca me dejó convivir con nadie por miedo a mis reacciones.

—Por cierto, un gusto, puedes decirme Luzu.— se dirigió hasta mí con una sonrisa cálida —¿Tú quien eres?.—

Un pequeño escalofrío recorrió mi cuerpo y la comezón en las manos regresó, empecé a rascarlas nuevamente mientras intentaba respirar con naturalidad

—Espera Luzu..— la voz de Quackity se escuchó, ya había acabado con las maletas y cerrado el maletero

—Puedes llamarme Kiki, es un claper conocerme.— dije rápidamente y tomé aire

—Ella quiso decir que era un placer conocerte.— corrigió Quackity rápidamente mientras tomaba mi mano de nuevo, Luzu empezó a reír

—El placer es mío, es lindo conocer a la novia de Quacks.— exclamó dando la vuelta para subir a su auto

¿A su novia? ¡Lo había malinterpretado por nuestras manos!

—Te dije que no te rascaras tan fuerte.— susurró mirando mis manos —Llegando a casa deberás ponerte crema de nuevo ¿está bien?.—

—Perdón, son nuevas emociones que no puedo controlar.— dije —Subamos al auto de Luzu, no queremos que lo multen.—

Él asintío, yo subí en la parte de atrás mientras Quackity subía en la parte del copiloto. No podría tomar su mano para sentirme segura así que debía enfocarme en otras cosas

Mientras ellos iban platicando y poniéndose al día de todo lo que habían hecho yo saqué mi celular para prenderlo.

"54 llamadas perdidas y 1028 mensajes"

Tragué saliva aguantando un poco los nervios y tristeza que me provocaba esto.

"¿¡Dónde estás Kiki!?"

"¡Responde las llamadas!"

"Llamé a mamá y no estás con
ella, iré por ti, dime dónde estás"

"Por dios, no quiero que te pase
nada, saliste a la calle sin nadie
que te cuidara y tus reacciones
pueden hacerte daño"

"No estoy molesto, vuelve por
favor"

"Irina está preocupada también,
no hemos podido dormir"

"¡Ni siquiera te comiste lo que te
dejamos! Wilson subió a la mesa
para comérselo y dejo un desastre,
ven a limpiarlo"

"Kiki en serio, llámame y dime dónde
estás o me volveré loco"

No quería leer más, me sentía mal por Rubén, estaba bastante preocupado por mí pero esto había sido por el bien de ambos ¿no? Debíamos dejar de ser dependientes.

—¿Viste la locura que está armando el Rubius en twitter?.— preguntó Luzu a Quackity sacandome de mis pensamientos

—No, no tuve tiempo para revisar mis redes, ni siquiera el celular prendí.— respondió él —¿Qué hizo?.—

Luzu seguía conduciendo pero soltó un suspiro

—Parece ser que tenía una hermana con una condición extraña que le impedía salir de su casa pero cuando volvió de la velada ayer notó que ella se había ido.— empezó a contar y abrí mis ojos con sorpresa

¡Eso era un secreto! No debía decir que tenía una hermana y menos con una condición tan rara

—Creo que se llamaba ________, no puso fotos de ella ni nada por el estilo pero hizo una campaña gigantesca en twitter para que si alguien vé a una chica desorientada en Andorra o cerca de ahí que responda a su nombre le envié mensaje.— siguió y sentí un enorme hueco en mi pecho —Es terrible, imagina su frustración.—

—¿Dijo algo más sobre ella además del nombre?.— preguntó Quackity —No sé, algo como su condición extraña, alguna seña particular.. algún sobrenombre.—

Si Rubén decía que me decían Kiki era obvio que Luzu lo sabría de inmediato y podría delatar mi paradero

—No lo recuerdo muy bien, según yo solo dijo su nombre, que su condición era el miedo a los chicos y que usaba un collar que él le había regalado.— respondió sin quitar la vista al camino

Inmediatamente escondí el collar que estaba usando

—Bastante gente y streamers se están uniendo a la búsqueda de la chica, deberías unirte también.— dijo —Ya sé que ahora tienes nuevas ocupaciones con tu novia pero es bueno ayudar a un amigo.—

Para Quackity su manera de ayudar a su amigo era intentar que me curara trayendome a buscar más especialistas y sacándome de mi casa para llevar mi fobia al límite

—Creo que si me uniré.— dijo riendo nuevamente nervioso, supongo que no quería levantar sospechas

—Genial.— sonrió Luzu —Ahora cambiando de tema quiero saber ¿cómo se conocieron par de tortolos? En la velada del año te ví solo y ahora regresas a casa con una chica.—

Sentí un tic en mi ojo izquierdo y nuevamente la comezón pero debía aguantarla, no quería rascarme

—La conocí en España durante estos días, por eso salí antes de que terminara la velada, quería ir a visitarla y convencerla de que se mudara conmigo.— dijo, eso no sonaba muy realista

—Eso es muy impulsivo, típico de quackity.— se burló Luzu, al parecer si sonaba realista para alguien como Quackity —Es bueno que se hayan animado, no puedo dejar de pensar en la pobre hermana de Rubius, si tiene esa fobia tan terrible no podría experimentar algo como lo que ustedes hicieron.—

Tenía razón, la hermana sobreprotegida de Rubén no podría experimentarlo pero yo ya no quería ser ella