Quackity terminó directo y salió de la habitación donde estaba, yo seguía en la sala jugando con mi celular

—¿Estás lista?.— preguntó ofreciendome su mano, yo asentí con una sonrisa mientras la tomaba —Iremos al supermercado para comprar un poco de comida.—

—¿No dijiste que iríamos a caminar?.— cuestioné escuchando una risa por su parte

—Podemos caminar en un supermercado, creo que es obvio.— dijo quitándole importa —Como sea, vamos.—

Y sin más me jaló hasta salir de aquel lugar, mientras caminábamos hasta el ascensor no podía parar de pensar en el chico que estaba sosteniendo mi mano, ¿por qué no se quitaba su gorro?

—Oye Quack.— llamé su atención cuando subimos y me miró —¿Me prestas tu gorro?.—

Sonrió un poco pero inmediatamente negó, yo hice una mueca

—Podemos regresar por otro si quieres.— ofreció

—No, yo quiero el que tienes puesto.— dije algo avergonzada —Pero está bien.—

Llegamos al primer piso y bajamos del ascensor, salimos del edificio, aún no nos soltabamos

—Por cierto, Rubius está bien, hoy jugamos un rato y lo ví tranquilo.— avisó de repente mientras caminabamos —Hoy otros streamers le preguntaron sobre tí y se unieron a la búsqueda.—

—Yo no entiendo porque Rubén sigue con la absurda búsqueda si ya le dije que estaba en un hospital psiquiátrico.— murmuré bajando la mirada

—Algo me hace pensar que no te cree.— dijo y lo miré sin entender —Después de todo él te conoce más que los demás, quizás notó un tono de mentira en tu voz.—

Posiblemente por eso haya sido la insistencia de Irina por saber dónde estaba, ellos seguramente ya sospechaban de todo esto

—Estoy seguro que no sospecha de que estás conmigo.— exclamó para tranquilizarme

Miré a nuestro al rededor, la calle estaba llena de personas y yo me sentía un poco incomoda pero estaba bien solo por tenerlo tomando mi mano

—Luzu irá a mi casa mañana a acompañarme en un stream.— contó —Espero que no te ponga incomoda, no quiero que estés encerrada en una habitación de nuevo.—

—No te preocupes, estaré bien.— sonreí, había arruinado muchos planes de mi hermano y no quería arruinar también los de Quackity

Seguimos caminando mientras charlabamos, antes de lo esperado llegamos al supermercado, realmente quedaba muy cerca del edificio

Entramos y tuvimos que soltarnos porque él llevaba uno de esos carritos para poner las compras

—Estarás bien, solo quédate a mi lado.— pidió y asentí nerviosa —Si ves algo que quieras solo échalo al carrito.—

Era de las primeras veces que venía a un supermercado, sonará extraño pero gracias a mi fobia las compras se realizaban en línea.

—¿Podemos recorrer todos los pasillos?.— cuestioné emocionada y él rió

—¿No te sientes agobiada?.— preguntó

—No quiero pensar en toda la gente que nos rodea, prefiero pensar en lo emocionante que será mi primera visita a un lugar como este.— dije mientras daba algunos saltos como niña pequeña

Avanzabamos por los pasillos y había tomado lo que Quackity me dijo como algo literal así que el carrito empezaba a estar lleno de cosas que yo ponía, Alex reía nervioso, parecía pensar en lo afectada que estaría su economía si seguía dejando que yo hiciera lo que quisiera

—Espera.— se detuvo y rápidamente se escondió detrás de un estante

—¿Qué pasa?.— cuestioné en susurro mientras me escondía junto a él

Señaló a dos chicas que parecían estar debatiendo que tipo de cereal comprar, yo no entendía que problema había con eso

—Tienen puesta mercancía mía, si me reconocen tomarán fotos y nos meteremos en un problema.— explicó —Necesitamos también un cereal, ¿puedes ir a elegir uno y volver hasta acá?.—

Ciertamente la distancia no era muy larga y no había hombres a nuestro al rededor, podía hacerlo

—Claro, solo no te muevas de aquí.— pedí y él asintío

Me alejé para caminar hasta donde ambas chicas estaban y pude escuchar que efectivamente peleaban sobre que cereal era mejor.

—Disculpen.— llamé su atención, estaba un poco nerviosa —No quería interrumpirlas pero ¿me podrían pasar esa caja?.—

La señalé y una de ellas me la dió mientras sonreía victoriosa

—Te dije que este cereal era mejor, hasta ella lo cree.— se burló de su amiga —Tienes malos gustos.—

Estaba a punto de irme y dejarlas seguir con su discusión

—No puedes hablar de mis malos gustos mientras me ves utilizando mi gorro precioso.— peleó —No tengo malos gustos si me encanta Quackity y a ti también.—

—Pero a mí me gusta más el Rubius.— discutió la otra, esto ya se estaba volviendo tema de mi interés y me sentía chismosa por no moverme de ahí

—No puedes comparar a Quackity con el Rubius.— exclamó mientras agarraba una caja de cereal, parecía que estaban dispuestas a irse y me quedaría sin el resto de la charla —Al menos no tiene un bicho raro como hermana.—

¿Bicho raro? Eso había caído como balde de agua fría en mi cabeza. Ambas se alejaron, no le tomaron mucha importancia a mi presencia y se fueron.

Miré la caja de cereal con algo de tristeza, no debía sentirme mal pero era horrible darme cuenta que los fans de Rubén pensaban que era un bicho raro.

Desde que me había animado a salir de mi habitación solo me daba cuenta que era anormal, la gente me hacía sentir loca..

—Ey.— escuché un susurro y salí de mis pensamientos, Quackity estaba ahí —Ví que las chicas se fueron pero tú seguías aquí, ¿pasó algo? ¿te sentiste mal o nerviosa? ¿quieres irte?.—

Lo miré y dejando la caja de cereal en el carrito lo abracé, él se quedó inmóvil, creo que lo había tomado por sorpresa

—Vayamos a pagar esto y volvamos a casa.— murmuro acariciando mi cabello —Quizás fueron muchas emociones por hoy.—

Me alejé mientras asentía, no le diría lo que había escuchado porque no quería preocuparlo, prefería aguantar todo lo que estaba sintiendo en este momento y que él pensara que estaba así por el estrés.