5 𝐌𝐄𝐒𝐄𝐒 𝐃𝐄𝐒𝐏𝐔𝐄𝐒

    𝐂omo explicarlo. Todo había sido bastante difícil y raro estos últimos días.

Su " tío" Tom la había llamado para que se reunieran cuanto antes.

Sonaba demasiado nervioso y apurado. Como si fuera un secreto que nadie debía enterarse.

    Le parecía extraño. Muy pocas veces habían cruzado palabras. Él y su padre siempre se reunían, pero nunca le decía de que eran esas reuniones. Y podía jurar que había puesto un hechizo silenciador, para que nadie escuchará lo que hablaban.

Tenía tantas dudas rodando por su cabeza. Pero en una semana esas dudas desaparecerían.

    Y sobre 𝐇ermione, ¿Cómo había seguido su relación los últimos meses? Bueno más que bien.

Eran la pareja que más se entendía, podríamos decir.

Hermione era alguien a quien no le encuentras ni un solo defecto. Siempre que la necesitaba estaba ahí para ella sin importar lo que pasara.

Harry y ella se habían vuelto más unidos que antes. Ahora todos los días se juntaban en el lago negro a hablar de sus vidas, y ponerse al día.

Harry siempre le pedía ayuda con las tareas, sobre todo las de Pociones. Que era la que más le costaba.

Y con Draco, bueno, no eran 100% unidos como hace años. Se hablaban pero solo para lo necesario. Tal vez ahora que pasaba más tiempo con Harry, él no quiso interponerse, además de que jamás le cayó bien Harry, no después de que rechazara su mano en primero.

    Después su relación con los demás eran normal como siempre.

• • •

    La casi castaña dormía cómodamente en su cama de casi dos plazas.

    Hasta que una almohada golpeó su cara, haciendo que se despierte de golpe.

  —¿Qué demonios? — maldijo levantándose de la cama frustrada.

  —Llevó dos horas llamándote para que te levantes — la retó furiosa la castaña a un lado de la cama con un vaso con agua en al mano, que probablemente si no se levantaba con la almohada, esa agua estaría ahora en su cara.

  —¿Qué hora es? —preguntó cuando se levantó de la cama.

  — 8:30 —le respondió, Hermione, mientras armaba la cama de su novia.

    La cama de Hermione estaba perfectamente tendida.

    La casi castaña estaba dando vueltas por toda la habitación, buscando su camisa.

  — ¡¿Dónde está mi camisa, Hermione?!

  —¿Qué? — gritó terminando de armar la cama.

  —Mi camisa! —buscaba por todos lados, pero nada.

  —No lo sé, tú tendrías que saberlo.

  —¿Yo?, tú fuiste la que me la perdió anoche cuando me la sacaste, y quién sabe dónde la tiraste — buscaba debajo de el ropero, arriba, abajo, por todos lados pero no estaba.

  " Maldita sea mione si me perdió mi camisa favorita "

Decía en su cabeza la casi castaña. Pero no se percató que su novia leyó su mente sin querer.

  —No es mi culpa que esa camisa te quedara tan bien, que tuviera ganas de sacartela — se agachó abajo de la cama, y la encontró— aquí está, ¿Lo ves?, no era para tanto.

  —Tienes suerte Hermione Jean Granger.

  — Yo creo que sería al revés. Tú tienes suerte. Suerte de tener a una novia que te encuentre todo.

    Se acercó a Hermione.

  — Y la mejor suerte del mundo— tomó su cintura y junto sus labios en un apasionado beso.

  —Mierda, llegaremos tarde. - jadeo la castaña separandose de los labios de Lilith.

    Salieron corriendo de su habitación. Claramente no llegarían al desayuno. Así que tendrían que ir a su primera clase juntas, Herbiologia.

    Fueron las primeras en llegar por suerte. Se sentaron en los primeros asientos. Hoy tendrían un ensayo escrito en parejas, el cuál ya habían estudiado por dos semanas antes.

Los demás comenzaron a llegar , al igual que la profesora.

—Vamos, vamos , agarren un pergamino y una pluma. Se termina y se entrega hoy al finalizar la clase. Así que comienzen.

    Hicimos lo que la profesora pidió. Y rápidamente empezamos a hacerlo. Yo escribía y Hermione respondía.

    El reloj de arena se comenzó a acabar rápidamente.

  —5 minutos—Avisó la profesora.

     Las plumas de todos comenzaban a ir más rápido.

  —2 minutos.

Mierda, mierda.

    Era lo que repetían los demás alumnos.

  —1 minuto.

    Con Hermione nos levantamos de nuestros asientos, y entregamos el pergamino.

  — Terminamos —avisamos al unísono.

Agarró el pergamino y nos miró.

  —Perfecto, como siempre, señorita Granger y Mornigstan.

  —¡Se acabó el tiempo!, entegen sus pergaminos ahora.

    Todos bufaron de fastidio y entregaron sus pergaminos. Mientras salían a regañadientes.

Con Hermione salimos orgullosas de nosotras mismas por nuestro logro. Como todos los meses.

    Íbamos riéndonos hasta que Mcgonagall nos detuvo.

  —Señorita Moningstang, el director Dumbledore la espera en su oficina.

  —Ahora?—pregunté tontamente extrañada

  —Si, ¿O sino cuándo sería? Por Merlín, jóvenes de ahora.

    Me despedí de Hermione con un beso en la mejilla.porque estaba Mcgonagall, y nos llamaría la atención.

    Caminé hasta la oficina de Dumbledore pensando en que era lo que tendría para decirme.

    Llegué a la puerta de su oficina donde un águila descansaba tranquilamente.

  —Caramelos de limón— Dije la contraseña y automáticamente el águila se abrió pasó, para así dejarme pasar.

    Al entrar la figura de un anciano sentado en su escritorio comiendo su típico caramelo de limón. Me sacó de mis fuertes y ruidosos pensamientos.

  —Querida, ¿Cómo has estado?, te estábamos esperando —recibió Dumbledore con apreció a su segunda alumna preferida.

Su mirada se dirigió hacia esa persona misteriosa sentada a espaldas suya .

  —siéntate, por favor— ofreció con su voz sabia el anciano. Dirigiéndome su mano el asiento libre al lado de esa persona misteriosa.

    Se sentó como ordenó su profesor. Viendo al fin quién estaba a su lado.

Tom

    Su tío Tom Riddle. Quién le había enseñado magia oscura a la edad de sus simples 5 años.

—Tío Tom...

    Era raro que su tío, quién odiaba con toda su Alma a Dumbledore, estuviera sentado en su oficina al frente de él.

—Hay muchas cosas de las que debo contarte, sobrina.

• • •

  Un escalofrío recorrió su espalda .

  —Yo los dejaré a solas para que puedan hablar tranquilos— se levantó de su asiento con cuidado, Dumbledore — buena suerte.

    El anciano se fue sin más ni menos.

  — Cuéntame tío, llevo mucho tiempo sin verte.

  —Lo sé, pero necesitaba asegurarme de que nada le pasara a tu madre y sobre todo a ti.

  —¿Que nada me pase? —lo miré a los ojos. Sabía que algo no estaba bien— ¿A qué te refieres con eso? —el pelinegro agachó la cabeza — Tío Tom qué ha pasado, ¿mi madre está bien?

  —Si, pero no del todo.

  —Demonios, me estás preocupando, dime qué pasó .

  —Es sobre tu padre...

  —¿Qué pasó con él ? , que
Tiene que ver papá con que mamá esté mal.

  —Mucho —se acomodó en su asiento.

-Tío.....papá no sería capaz de algo para hacerle daño a mamá.

- es sobre eso mismo.....

Lo miré con curiosidad y ansiedad.

- lilith .... lucifer no .... no.. el no es ...

-Tío , por favor dime que esto es una broma anticipada de Halloween. Y que papá está bien

-Lucifer no es tu padre.- dijo sin más

Mis ojos se abrieron de golpe al escuchar eso , mi piel de gallina y mis manos a sudar.

- que... que estas diciendo?

No podía ser verdad.

-La verdad. Lucifer jamás fue tu padre .

-¿Y tienes pruebas de eso?

-Por supuesto, tu madre es una de esas de pruebas .

Las velas que iluminaban la habitación comenzaron a moverse descontroladamente.

-Déjame contarte desde el principio, por favor y verás que no soy el Villano como tú mente lo piensa y créeme que toda mi vida ha sido solo para protegerte de él ... de lucifer ... de que te hiciera daño.

-Habla antes de que me arrepienta de haberte conocido .

Tom asintió con la cabeza rápidamente.

-Tu madre tenía 20 años cuando lucifer la conoció. Se hicieron amigos ,o eso creía tu madre pero no lo era , solo ella lo veía a él como un amigo, pero él la veía como el amor de su vida.

-no era amor lo que sentía, era obsesión, y acosó. Hasta el punto en que tu madre tuvo que llamar a walburga black para que la sacara de ahí. Por dos años y medio tu madre no volvió a ver a lucifer.
Fue ahí que conoció a tu padre.... tu verdadero padre..

-Como se llamaba?

- Klaus , klaus grensted un brujo de más de 800 años.

Sus ojos se abrieron en un destello.

-Tu madre una noche se paso de tragos y.... bueno.... pum ... quedo embarazada de ti . Hayley no quería que lucifer se enterara de que estaba embarazada de una niña que no era de el . Porque sabía que aunque no fueran lo más mínimo, él te haría daño . Fue entonces que tu madre lo intentó esconder todo lo que pudo, hasta que un día. Lucifer se enteró. Estaba tan furioso que asesinó a 100 personas en una noche .

-hayley y klaus estaban caminando por el bosque tranquilos y felices de poder tener un hijo, sobretodo tu padre .el era el hombre más feliz del mundo. Pero la felicidad no duró mucho. Lucifer apareció y le hizo elegir a tu madre. Si lo elegía a él, lucifer o , lo elegía a klaus y a ti . Tu madre claramente te eligió a ti y a tu padre. Algo que no le gustó a lucifer por lo que, trató de matarte pero se dio cuenta que no eras cualquier bebé. Eras una Bruja y no cualquiera .

- así, espero hasta que nacieras y un poco más. Klaus después de que nacieras se había encariñado tanto contigo que no te dejaba ni un minuto sola . hasta dormía contigo. Hasta que una noche. Tu y tu madre estaban en la chimenea ,mientras tu mamá te cantaba. Y apreció él .borro la mente de tu madre dejando solo recuerdos de él y haciéndola creer que tu eras su hija .
Lilith moningstang. Pero tú nombre verdadero es Lyra grensted .tu padre Klaus fue quien lo escogió.

El fuego de Las velas se volvió aun más fuerte que antes y más chispeante.

- yo.. yo te lo quería decir desde años... pero no podía.

- ¡ porque nunca me lo dijiste! - grito tan fuerte que podría que los vidrios estallaran - confie en ti .

-por favor entiende, si te lo decía él se hubiera enterado y me hubiera borrado la mente a mi y a ti y nadie más sabría la verdad .

-quiero ver a mi padre , a mi verdadero padre . - dijo tratando de calmarse - mañana a primera hora me llevarás. Y si no te levantas me iré sola.

Salí por la puerta tan enojada que podría prenderme fuego en cualquier momento.

Toda mi vida le había dicho papá a la persona que me arruinó la vida.