Especial : Navidad
—¡Ya es noche buena, qué emoción! — Bachira celebra.
Jinpachi se digno a darles dos semanas libres para pasar navidad en familia aunque bueno, harían todo lo contrario.
—Bueno, quedamos qué en la casa de Karasu a las 8, ¿No? — Reo decide aclarar.
Todos asienten, iban a pasar noche buena todos juntos, Akari por su parte, no podía estar más feliz.
Sería su primera navidad con amigos y bueno, su primera navidad feliz. Ella no tardó en salir junto a Rin para comprar ingredientes para cocinar y llevar algo.
— Akari.. — llamó Rin de forma sombría.
La pelirroja voltea curiosamente para encontrarse con una graciosa y, por supuesto, tierna escena.
Rin estaba dentro del carrito de supermercado esperando a ser empujado por su hermana.
—El espíritu navideño hace milagros.. — pensó entre risas.
Ella empieza a empujar el carrito mientras se dirigen hacia el pasillo correspondiente.
—Mira Rin, son bombones navideños, ¿Los compramos? — Akari se detiene para tomar dos cajas con una sonrisa.
Eran los favoritos de Sae, ambos se miran y asienten para llevarse solo dos cajas y continuar su camino, no eran los únicos egoístas comprando, Barou también estaba en el supermercado comprando algunas cosas que sus padres le encargaron y también para llevar a la cena navideña.
No le digan a nadie pero...eligió el plato favorito de Akari solo porque ella lo había mencionado que le gustaría comerlo.
—Y esto es lo ultimo... —La voz perezosa de Nagi hizo voltear a Shoei, quién no tardó en fruncir el ceño.
El vago solo estaba comprando dulces para llevarlos a la cena, no haría ningun platillo elaborado...qué malnacido.
—Nii-chan, mira, mira. Es santa! — Akari señaló con emoción al santa claus qué estaba sentado mientras unos cuantos niños esperaban para sentarse en su pierna y pedir regalos.
—Akari, ya casi vas a cumplir 17, no puedes ped...— Rin se calló al ver a su hermana hacer fila con una sonrisa.
—Siguiente, JoJoJo. — Santa llamó.
Akari pasó rapidamente y se sentó en la pierna de Santa con una gran sonrisa, mientras sus ojos turquesas brillaban de emoción y felicidad.
—Veo qué tenemos una niña muy grande aquí, ¿Cómo te llamas, linda? — preguntó dulcemente le santa.
—Soy Itoshi Akari y este año he sido una niña muuy buena. — Ella sonríe dulcemente.
—Qué lindo nombre, quién te lo puso ha de amarte mucho, ¿Eh? y bueno, ¿qué quieres para estas navidades? — Preguntó el santa mientras carcajea.
Ella ríe mientras piensa durante unos momentos, cerró sus ojos mientras suelta un suspiro, puede pedir ganar el mundial...puede pedir ser la mejor en Blue Lock pero lo único que quiere en este momento es...
—Para esta navidad, quiero ser feliz. — Pidió con una pequeña sonrisa.
Aquello toma por sorpresa al Santa, Akari se levanta y se despide para caminar rapidamente hacia Rin.
—¿Qué le pediste? — preguntó el mayor.
— Nada importante, sigamos para tener tiempo para llegar temprano a casa de Karasu. — Akari camina al lado de Rin quién ahora empuja el carrito.
Ambos se dirigen hasta el ultimo pasillo para tomar el ingrediente faltante pero para su sorpresa, también se encuentran con Otoya, quién va acompañado de Yukimiya.
Akari se sonroja al ver a Otoya, desviando su mirada rapidamente cuando ambos tienen un leve contacto visual, Otoya por su parte, sonríe un poco al notar el sonrojo de Akari, sin olvidar aquel encuentro de cuando ella despertó.
— Akari, ya podemos irnos.. — Rin frunce su ceño mientras toma rapidamente el ingrediente faltante.
El Itoshi abre paso entre Eita y Kenyu de forma brusca mientras es seguido de la menor, quién se disculpa con ambos por ello siguiendo a Rin.
—Realmente su hermano te odia..— Murmura Yukimiya.
—No es el primer hermano qué me odia, puedo con esto..— Responde Otoya.
Los hermanos salen rapidamente mientras Akari pedía un taxi para irse a casa, ella desvió su mirada por la calle para encontrarse con una increíble sorpresa, Shidou conduciendo.
— ¡Mini pestañitas! — gritó él mientras se aceleraba.
—Ni lo pienses, Akari. — Rin endurece su vista.
— Hola Ryu, ¿Cómo vas con tu platillo para la cena? — Preguntó con una sonrisa.
—¡Muy bien!, le pondré pestañas al pavo para imaginar qué estoy asesinando a pestañitas menores. — se burla.
Akari se queda en blanco mientras Rin intenta ignorar al moreno qué estaba estacionado frente suyo.
— Bueno, ryu, nosotros debemos irnos a casa para preparar lo nuestro. — Akari sonríe.
Ryusei chilló ante la sonrisa y se fue, no sin antes lanzarle un beso a Akari y sacarle el dedo corazón a Rin, los Itoshi caminan hacia el Taxi y deciden irse directamente a casa.
— ¿Crees que él venga? — preguntó rin.
— Ahh...la verdad, ¡no lo sé! y si viene, me da igual. —Respondió ella con una sonrisa.
Rin sonríe un poco, animando a su hermana menor mientras ambos bajaban con las bolsas de compras, entrando entre risas a casa.
—Rinnie, ¿eres tú? — La dulce voz de su madre lo toma por sorpresa.
— Sí, madre, he llegado junto a Akari. — Aclaró.
La sonrisa de Akari se borra cuando la pelirroja aparece en su campo de visión, ella toma las compras de Rin de forma brusca y empuja el hombro de su madre para pasar a la cocina, deja las cosas en la mesa y camina en silencio hacia su habitación.
— ¿No saludas? — Una voz conocida la hace voltear.
—No creo qué haga falta. — respondió.
Akari sube corriendo las escaleras y cierra su habitación con seguro, ella empieza a buscar ropa la cual es adecuada para ir a la casa de Karasu, ella miró la caja qué le habia mandado Pablo de regalo de navidad.
—¡Bingo! — Gritó con emoción.
Akari se dirige hacia su estante para tomar las cosas qué iba a necesitar para arreglar su pelo, observó la hora, todavía tiempo de sobra.
Su telefono vibró, su tono de llamada resuena por toda su habitación, Akari toma su telefono para ver quién es.
— Sae...¿por qué me llama? — Ella decide contestar.
— ¿A qué hora es la cena? — preguntó.
— No lo sé, mamá no me invitó. — respondió sin interés.
— No, esa no, la otra cena, a la qué irás donde tu compañero. — Aclaró, aquello la toma por sorpresa.
— Ah...a las 8. — respondió, confundida.
Sae cuelga rapidamente, aquello la hace tener más curiosidad pero decide arreglarse el pelo y irse a bañar, miro sus uñas y decide pintarlas también.
—Akari, soy yo. Ya terminé de hacer la lasaña. — Ella se apresura para abrirle la puerta a Rin.
— Nii-chan, ¿Qué prefieres tú? — Akari le muestra sin preguntar sus opciones.
Rin entra y cierra la puerta para observar la opción de conjuntos de Akari, él decide invertir las opciones para combinarse por igual.
— Y date prisa, ya son las 7:30 — Aquello hace que Akari suelte un chillido.
...
— ¡Merry Christmas! — Gritó Akari al llegar a la casa de Karasu.
— Bienvenidos, pueden pasar. — Tabito les da la bienvenida a los tres hermanos Itoshi.
Sí, a los tres. Sae se coló a ultima hora y no hubo forma de decirle qué no.
Los tres Itoshi estaban combinados, los tres llevaban ropajes iguales, Akari es la primera en adelantarse para subir al cuarto donde se haría la cena junto a Karasu mientras sus hermanos venían detrás.
— Feliz Noche buena a todos. — Akari ríe.
— ¡Feliz noche buena! — Respondió Meguru con una sonrisa.
— Eras la ultima, ya podemos empezar todos.— Chigiri sonríe.
Todos empezaron a compartir entre risas mientras disfrutaban la comida y algunos chistes qué hacían a excepción de Rin, Sae y Barou quienes solo escuchaban o solo soltaban algun comentario seco.
Al terminar de cenar, las bebidas no faltaban y lamentablemente, estar borrachos tampoco.
— ¡Chicos, tengo una idea! — sugirió Otoya.
— Cuentanos..— Responde Chigiri, algo mareado.
— Juguemos al...Master! — Otoya sacó un vaso con varios palos que tenían algunos numeros.
— ¿Qué es eso? — Pregunta Aryu
— Cada uno debe elegir con los ojos cerrado un palito, si te toca la corona, puedes ordenar a cualquier número al azar a realizar un reto. — Explicó Otoya.
Todos forman un circulo para empezar a jugar, cerrando sus ojos para elegir.
— ¡Soy el maestro! — Gritó Otoya con malicia.
Todos miran sus respectivos números esperando la orden de Eita.
—El número siete debe....Posar desnudo! — Aquello deja en blanco a todos.
La depresión inunda el ambiente y la borrachera se desvanece ante las palabras de Otoya, el silencio es sepulcral mientras el rostro de Sae parece querer desfigurarse del horror.
Sae está desnudo, haciendo una pose mostrando sus musculos mientras en su interior la carcome la ira y sobre todo, la verguenza.
— N-nii-san...— Akari y Rin están palidos al ver esa escena.
Hoshi pestañea varias veces, encantada de ver aquella escena mientras sus mejillas enrojecen admirando el escultural cuerpo de Sae.
— ¡Qué gran p- — Barou no tarda en callar a Hoshi.
— Callate.
1,2...¡3!
— ¡Soy el maestro! — Hoshi grita con emoción.
Ella aclara su garganta.
— El número 5 debe dejar tocarse los pechos por el 8 y 10 — Ordeno mientras ríe.
Akari observa su palito y su cara se vuelve palida al ver qué le ha tocado ser el número cinco.
Reo y Hiori empiezan a tocar los senos de Akari con nerviosismo mientras la pelirroja lloriquea.
— ¡L-lo siento, Akari-san!, ¡Pensé que el cinco era Oliver-san! — Hoshi es un mar de lagrimas al ver el rostro de decepción de Akari.
1,2...¡3!
— Ja, soy el maestro. — Rin da una risa con malicia.
—El número 4 debe desnudarse y salir a la calle a dar una vuelta. — Ordenó cruelmente.
Isagi se levanta en silencio mientras se quita la ropa, dejando caer sus lagrimas de cocodrilo mientras observa y maldice a Rin en su mente.
Akari se queda en blanco mirando el trasero de Yoichi.
1, 2...¡3!
— ¡Soy el maestro! — Gritó Chigiri.
— Chigiri...no pidas nada malo..— Suplicó Isagi.
— El número 3 debe golpear el trasero del número 10 — Ordenó Chigiri mientras ríe.
Sae no tuvo más opción que ponerse en una buena posición para qué Reo le nalgueara.
1,2...¡3!
— ¡Mierda, sí!, ¡Soy el puto maestro! —Gritó Ryusei.
— El número 2 debe quitarse los pantalones y la ropa interior frente a todos! y no puede cubrirse..además, debe tirarla por la ventana. — Shidou ríe.
Akari quita su pantalón y luego sus bragas lentamente mientras baja su sueter para cubrir su parte íntima mientras tira su ropa interior por la ventana, avergonzada.
Los muchachos pestañean observando a Akari, quién lloriquea.
— Nada de cubrirse, mini-pestañitas — Shidou levanta su sueter, haciendo que Akari lo patee.
— Me voy a vengar, ¡Ya lo verás, ryu!
— No te preocupes Akari, yo tu cubro. — Se ofreció Oliver.
— ¿En serio? — pregunta Akari con una sonrisa.
— ¡No! — gritaron sae y rin.
1,2...¡3!
— ¡Por fin, soy la maestro! — Gritó Akari.
— El número 6 y 10 deben salir a comprar en ropa interior. — Akari se cruza de brazos.
Nagi y Meguru se levantan para quitarse la ropa y salir a comprar sin algun tipo de remordimiento.
— Raritos...— Les llamó Barou.
1,2....¡3!
— Soy al maestro, por fin. — Sae se levanta.
—El número 13 y el 3 deben meterse desnudos a la bañera y ducharse juntos mientras permanecen desnudos durante todo la noche.— Ordenó.
Akari empezó a quitarse su sueter, provocando el miedo en Sae y Rin mientras qué Barou también empieza a desnudarse.
Ambos están desnudos y empiezan a caminar hacia el baño.
— ¡Esperen, voy a cambiar el reto!
— No se puede..— Otoya se muerde las uñas, ocultando su enojo.
Akari cierra la puerta del baño mientras observa a Shoei avergonzada, ambos entran a la ducha mientras abren la regadera, dejando que al agua caiga, en total silencio.
— Y...¿qué te parece la celebración? — Preguntó en voz baja.
— Algo rara pero supongo qué nadie es normal en Blue Lock. — Responde, mientras mira la pared.
Barou intenta concentrarse en otra cosa qué no sea Akari para no tener un "Accidente", Akari aclaró su garganta avergonzada mientras no aparta la mirada de la entrepierna de Shoei, asombrada.
— Shoei, yo quería decirte qué...lo siento. — Akari levanta su mirada hacia los ojos rojizos de Barou.
— ¿Por qué te disculpas?
— Esa vez de la playa, no me sentía preparada para decirte lo qué de verdad quería decirte y ahora que estamos aquí quiero que sepas qué...te amo. — Akari sonríe.
Aquello toma por sorpresa a Barou quién se sonroja, sintiendo su corazón estrujarse. Sus brazos se sostienen de la pared mientras su cuerpo acorrala a Akari de forma instintiva, ambos se miran a los ojos antes de besarse.
Sus labios se unen en un beso lento pero totalmente profundo, aquello hipnotiza totalmente a ambos, cegados por el deseo mutuo qué han estado guardando y hoy, era su totalmente oportunidad, sin nadie que los interrumpa.
Las manos de Shoei acarician el cuerpo de Akari cómo si fuese una escultura delicada y unica, encantando por la pasión mientras apesar de estar mojado, el calor sigue subiendo.
— Te amo, Mi Rey. — Repitió Akari con una sonrisa.
— Yo te amo más, Mi Reina. — Respondió Shoei.
—Ya acabó el tiempo. — Anunció Reo.
Ambos se separan rapidamente para salir, secandose con una toalla y dejandola perfectamente doblada en la esquina de la ropa sucia.
Ambos salen desnudos mientras Barou se queja mentalmente de qué le hayan interrumpido el momento, al entrar, casi todos estaban vestidos de forma rara o desnudos.
Incluso reo, qué estaba vestido de conejito playboy.
— ¿Feliz...navidad? — Rin dice, en voz baja.
Akari simplemente se deja caer para quedar en medio de Hiori y Oliver.
— Sí, feliz navidad....
FELIZ NOCHE BUENA Y CON ELLO, FELIZ NAVIDAAAAD. :3
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro