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Pedido: ANNIE-GRAZER (mis más sinceras disculpas por la demora)

Situación: Donde el es un criminal, pero aún así ella le ama.

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Ambos corríamos lo más rápido posible intentando perdernos por el bosque de la pequeña ciudad mientras escuchábamos las sirenas de la policía.

Maldito señor Turner.

El era la persona que vivía más cerca de aquel viejo terreno abandonado, el pudo ser el único en escuchar los disparos, los cuales eran inofensivos, pues no estábamos dañando a nadie, Jack solo me enseñaba a disparar una se sus varias armas guardadas por ahí.

No pensábamos matar a nadie, o bueno no de mi parte y tampoco el (que ilusa era).

Llegamos a lo que parecía una parte alejada, pues el ruido de las sirenas ya no se podía escuchar.

A veces creo que mamá podría tener razón y debería alejarme de él, ella suele decir que el no es bueno para mí y que terminaré dañada.

Pero lo veo

Veo sus ojos cafés, lo cuales parecen estar perdidos la mayoría de las ocasiones.

Y lo se

Se que lo amo

Que lo amo y que jamás lo voy a soltar.

No me importa lo que la gente del pueblo diga, tampoco el hecho de que sea su única amiga, ni el hecho de su extraña obsesión con las masacres y las armas.

Mi respiración agitada se comenzaba a normalizar, ahora caminábamos por el bosque con tranquilidad y aunque era de noche no tenía miedo.

Jamás tenía miedo su estaba cerca de el.

Trepamos a un árbol considerablemente alto, el primero y después me apoye de el para subir.

- Perdón pequeña, no quería esto - dijo el antes de colocarme en su regazo pero sin dañar su campo de vista por si alguien venía

- No tienes por qué disculparte - lo mire, otra vez tenía los ojos perdidos, como si pensara en algo.

En un brusco movimiento me besó aún sin verme ni cerrar lo ojos, veía a la nada.

Al separarnos me miró, y me dedico una extraña sonrisa la cuál parecía macabra o sacada de un asesino de "criminal minds" la cuál ocasionó una extraña sensación en mi columna.

Lo admito, sentí lo que se podría describir como miedo, como si estuviera a punto de sacar su arma y dispararme.

Pero no lo hizo y no lo haría porque me "amaba"

Y yo también lo amaba, aunque aún era joven y no sabía que había peores destinos que la muerte o el estar encerrado siempre.

Porque mi peor destino era estar sin el.

Todo el mundo decía que era un criminal pero no les creía

Porque creía conocerlo.

Y esa noche volví a ser suya, sin saber que el no era mío y que jamás lo sería.