Eran de edades diferentes,

pero eso era lo de menos

Porque al momento de amarse,

Ellos se amaban como niños...

─Poetisa Loca

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Inéditamente estaba empezando a tener ese sentimiento de odio, odiaba a todos los de mi colegio e incluso a mis profesores.

─Son tan molestos ─murmuró Sally comiendo su almuerzo mirando a todos con aburrimiento.

─Ya lo sé ─dije metiendo una cucharada de arroz a mi boca, estaba de mal humor, de muy mal, mal humor empezando desde ese estúpido sueño que tuve en la madrugada. ¿Sueño húmedo? ¿Enserio? Justo cuando por primera vez dormía en la misma cama con Taehyung ─ no sé porque hacen tanto alboroto solo por...

─ ¿Estar de novia con Kim Taehyung? ─asentí haciendo un puchero─ nena, déjame decirte que las relaciones de famosos es lo que más llaman la atención, son algo así como las moscas yendo directo a la miel, tu y Taehyung son la miel, y todos esos son las moscas ─le miré estupefacta ante su "magnífica" comparación, Sally rodó los ojos─ además, todavía no te perdono por haberme ocultado tu aventurita con tu Daddy

─ ¡No digas eso! ─le di un golpe fuerte en su brazo, Sally explotó en una carcajada─ te iba contar, pero él se adelantó...

─Joder, quien lo diría, la inocente y virgen amiga mía, tenía una relación clandestina ─murmuró viendo a lo lejos, bufé y preferí dejarla divagar sola─ ¿y ya han follado? ─abrí mis ojos con exageración, tragué mi arroz y bajé la cabeza.

─No, y deja de preguntar esas cosas ─le miré mal.

─Bien, como sea ¿tus padres te han llamado?

─No lo sé, tengo el celular en modo avión ─hice una mueca─ no quiero hablar con nadie de ellos, mi padre debe estar queriendo matar a alguien y los periodistas deben estarle comiendo vivo ─arrugue mi nariz.

─Las sanguijuelas ya estaban en el pueblo ─río, de pronto aclaró su garganta─ ¿Es por esa razón que estabas dudando en ir a Estados Unidos? ─preguntó en voz baja.

Relamí mis labios asintiendo.

─Yo... No tenía una razón lógica para quedarme en Seúl, no digo que tú y Dorian no son importantes para mí, pero... Cada uno tiene su plan de vida, sé que si nuestra amistad es real y genuina estaremos feliz por cada uno, y nos mantendremos en contacto ─sonreí tristemente─ y....y mi sueño desde niña era alejarme de mi familia, ir a New York para estudiar algo, estar contigo allá mientras te veo con tu estetoscopio ─Sally tomó una mano mía sonriendo ─ pero ahora no quiero alejarme de él, Taehyung ha sido mi complemento, mi felicidad, mi...escape favorito en todo el mundo ─mi voz se quebró, no quería llorar aquí en una mesa del comedor y con tantos chismosos alrededor mío como buitres o moscas, como dijo Sally.

─No había visto ese brillo en tu rostro desde hace tiempo cuando el abuelo Mauro vino a Corea ─Oh, el abuelo, cada que lo nombraba me entraban ganas de llorar, llevo mucho tiempo sin verlo por la culpa de Zara y añoro tanto estar con él, que me mime como solía hacerlo ─ Dorian y yo nos dimos cuenta, estás más alegre, más viva ─acarició mis manos, ella ha sido como mi verdadera hermana─ sé que él te hace bien, confiaré en Kim Taehyung, confiaré tu estabilidad en él, porque yo solo quiero verte feliz, cumpliendo todos tus sueños, encontrando tu felicidad, esa que de niña tanto anhelabas, no importa si es aquí en Seúl, en Francia, Roma, Perú, México o en New York, tu podrás encontrar todo lo que mereces.

─Te amo tanto Sally ─solloce disimuladamente.

─Yo te amo más tonta ─solté una risa limpiando mis mejillas─ su relación me hace acuerdo al K-drama Goblin ─bufé riendo.

─Él no es un ser inmortal y yo no soy su caso especial ─rodé los ojos─ además, solo tiene veintiocho años, no mil y picos como el del drama.

─Caso especial solo le decía el ángel de la muerte, tonta, ¡Pero además ella se declaró su novia cuando tenía diecisiete, es igual como tu situación!

─ ¿Y qué? Tiene su punto, pero no tiene más semejanza que la edad ─Sally bufo poniéndose de pie.

─Como sea, es igual y punto ─rodé los ojos yendo tras ella, caminamos lentamente conversando sobre cosas de poca importancia hasta que llegamos a nuestro salón. Todos nos recibieron con miradas extrañas, mi vista recorrió todo el lugar y mi pecho se oprimió cuando vi el pizarrón.

¿CON QUÉ LE PAGAS A TÚ SUGAR DADDY? PERRA

─ ¡¿Pero qué mierda ...?! ─gritó Sally corriendo a borrar lo que escribieron, todo el salón estalló en carcajadas mientras me señalaban y me veían con burla.

Apreté mi mandíbula con fuerza, quería llorar y a la vez quería matarlos a todos juntos, tal vez con un cuchillo para el paZn, estaba segura de que algún daño les haría.

─ ¿Creen que su ridículo juego de escribir en el pizarrón me hará chillar frente a ustedes? ─todas las risas cesaron, estaba muy segura de que la perra de Mara fue la que escribió eso, nunca me agrado y nunca le agradé, el odio era mutuo, y sabía restregar en mi cara que era pésima para química, solté un bufido y aburrida me senté, con Sally gruñendo en el camino.

─ ¡Eres tan sinvergüenza para venir acá con tu cara de santa cuando te follas a un viejo! ─gritó Mara.

─ ¡¿Acaso te estoy diciendo que me veas?! ¡¿Debo pedirte permiso para venir?! Deja de ser tan ridícula y déjame en paz ─bufé, ni siquiera habíamos tenido ese acercamiento, yo lo quería, pero él parecía que se estaba conteniendo y eso era lo que más me enojaba, que insinuara que habíamos follado ¡cuando no era así!

Mara me miró escandalizada caminado rápidamente hacia mí, joder, nunca he peleado en mi vida.

─Te crees la gran cosa ¿no es así?

─No lo creo, sé que lo soy, que tú te sientas inferior a mí no es mi puto problema ¿qué quieres? ¿Qué me ponga de rodillas como las perras de tus amigas? Estás muy equivocada si crees que lo haré

─Ahora porque se abrió de piernas a Kim Taehyung se cree valiente ─gritó a todo el salón, mis puños se cerraron a mis costados cuando todos rieron─ ¿Acaso tu hermana no había dicho que eres poca cosa para los hombres? ¿Qué eras tan frígida y sin gracia? ¿No te has dado cuenta ya? Solo es cuestión de tiempo que se fije en una verdadera mujer y te bote como la basura que eres ─mis ojos picaron con agresividad, mis latidos aumentaron con ferocidad, las palmas de mis manos sudaban. El salón se quedó callado viéndome con lástima, Sally se puso de pie, sabía sus intenciones, no sería la primera vez que se diera de golpes con Mara, estábamos solo ha días de la graduación así que no dejaría que se meta en problemas por mi culpa.

Puse mi mano impidiendo que avance más. Carraspee rogando para que mi voz no se oiga afectada.

─ ¿Eres más valiente que yo solo por haberme gritado a la cara lo que mi hermana ya me dijo? Dime ¿ya estas satisfecha? ¿Te escudas en las debilidades de las personas para insultar y pisotear a alguien? Yo pudiera usar lo basura y rata que fue tu padre por haber robado a la empresa de mi padre, también podría deducir que eres igual a tu madre por meterse como una vil vulgar en matrimonios y rompiendo hogares ¿te gustaría?

Mara me miró rabiosa.

─ ¿Te molesta tanto que alguien se fije en mí? No entiendo porque ¿tal vez porque a ti te buscan solo para follar y luego se olvidan de tu nombre? Eso más si en algún momento de su faena supieron cómo te llamas... ─cerré mi boca cuando un ardor se impregnó en mi mejilla haciéndome girar el rostro a un lado.

─Cuidado con lo que dices ─mascullo entre dientes, tomé aire devolviendo la bofetada, mi mano ardió.

─Cada acción tiene su reacción, estúpida ─susurré, Mara me miró con tanto veneno en sus ojos, no tuvo nada más que decir y se fue a su asiento.

Sally me murmuró algo que no presté atención, las palabras que dijo Mara realmente me afectaron, me odiaba porque no debería afectarme en lo más mínimo, esas palabras eran de una chica odiosa y miserable, sin embargo, quería llorar ahora mismo, tenía miedo de que en realidad eso sucediera, que Taehyung encuentre una verdadera mujer y se olvidé de mí.

Sentía miedo, mucho miedo.

[...]

─Yo quisiera que Dorian me venga a ver a mi en tremendo auto ─me susurró Sally suspirando. Sus brazos que apresaban el mío sacudían mi cuerpo como le daba la gana, escuchaba sus quejidos de niña mientras veía a Taehyung.

Es que sí, él bajaba de un auto que no lo había visto usar, según mis escasos conocimientos, esa belleza era un Toyota Lexus color negro. Todo sucedía en cámara lenta, lo vi salir del auto vistiendo un pantalón de mezclilla color negro, una camiseta blanca con una chaqueta Jean azul y unas gafas de sol, estaba divino.

Todos lo veían, estábamos de suerte porque no había rastros de ningún periodista, gracias al cielo.

─Eres tan afortunada, mantente en contacto por favor, Jude, me angustia que no me llames o te olvides que existe las redes sociales ─me hizo mala cara, yo rodé los ojos─ hablo enserio, mándame cualquier mensaje, por lo menos para saber que estás viva.

─Si, está bien, lo haré. Nos vemos mañana ─me despedí de ella sacudiendo mi mano y corrí hacia Taehyung, me quedé parada como estatua observando su belleza, sonrió suavemente.

─ ¿Como te ha ido? ¿Todo bien? ─preguntó.

Mojé mis labios recordando el suceso en mi salón, evité sentir ese dolor en el pecho así que solo sonreí.

─Me fue bien, no dejé que se metan conmigo ─aseguré acercándome más a él. Me quedó viendo por unos segundos, como si estuviera leyendo todas mis memorias y supiera que lo que dije era una completa mentira, que tenía miedo de que algún día el sepa que no soy lo que buscaba, o que deseaba a una verdadera mujer y no a una niña que se balanceaba en la cuerda floja cada que le hacen acuerdo que es insignificante.

Mis ojos comenzaron a picar así que suspiré y amarré mis brazos en su cintura.

─Me alegra que hayas sabido defenderte ¿quieres comer? Acabo de ver un lugar nuevo en donde venden comida que de seguro te gustará ─sonreí mostrando mis dientes.

─Eso es genial, sabes cómo alegrar a mi estómago ─Taehyung soltó una carcajada, agarrando mi mano.

(...)

No saben lo bien que se sentía estar aquí con él, su pecho subía y bajaba acompasadamente, mi espalda sentía su calor tras esa camiseta blanca de algodón, sus piernas apresaban las mías mientras que una de sus manos descansaba en mi vientre y con la otra manejaba su móvil.

─ ¿Quieres o no? ─pregunté con la presa de pollo en mi mano, Tae negó con la cabeza.

─No, ya comí mucho ─mastiqué lo que tenía en la boca y alcé los hombros

─ Bueno, más para mi ─murmuré y seguí comiendo, no lo insistía, lo había hecho comer más de lo que estaba acostumbrado.

─Por supuesto, mi amor, todo es tuyo ─solté una risita tonta. Comía como si el mundo se iba a acabar, pero es que, tras esa hambre voraz, se escondía los nervios. Sentía mi piel achinarse por la tensión en que nos envolvimos apenas entramos a su apartamento ya que mi estúpido razonamiento no razono –que irónico– cuando me lancé a sus labios como una loca desenfrenada.

Quería que me toque, deseaba que Kim Taehyung acaricie cada parte de mí, antes de conocerlo no había tenido necesidad de esto, ni siquiera yo mismo me había tocado porque raramente no...no había ganas, pero ahora parecía que todas esas ganas dormidas despertaron cuando tuve un sueño húmedo con él días atrás.

Que frustrante.

Solté un suspiro dando un mordisco grande a mi presa de pollo, tenía una pierna encogida, la rodilla siendo soporte del brazo que sostenía mi pollo, mientras que la otra estaba estirada por completo teniendo función de mesa porque el bote de pollo estaba ahí, las piernas de Tae estaban estiradas, mi pierna derecha rozaba la suya. Miré nuestros pies descalzos, esta intimidad me encantaba.

─ ¿Sabías que en mi colegio había un estúpido juego? ─Sentí la mirada pesada de Tae en mi perfil, vi como bloqueó su celular dejando a un lado.

─ ¿Estúpido juego? ¿De qué trataba? ─sentí un cosquilleo en mi estómago cuando su otra mano se posó en mi vientre, relamí mis labios sintiendo un calor abrasador recorrer mi cuerpo.

Quería desviar la conversación indirectamente para decirle algo que tal vez a él no le importe o tal vez sí. Ya ni lo sé. Limpié mis manos con un pañito húmedo retirando el bote vacío de mi pierna.

─Hace uno o dos años se había vuelto popular lo de no ser virgen, yo casi no prestaba atención a esas cosas, porque la que llevaba a cabo eso, era una tonta que buscaba solo atención, pero desde que Sally se involucró, me vi obligada a prestar más atención a esas cosas, como sabes, ella es mi hermana de otra mamá, así que en el momento en que le desafiaron perder su virginidad con un estúpido y engreído de otro colegio tuve que retenerla.

─ ¿Y sirvió que la detuvieras? ¿Sally te lo agradeció? ─controle por no soltar un suspiro, su voz suave y ronca fue una corriente eléctrica que dio energía a todos mis sentidos libidinosos.

─Bueno, pude detenerla, fue muy testaruda, pero ayudé a que no cometa una locura, porque sabía que horas después se encerraría en un cubo de culpa y asco. ─no conteste a su segunda pregunta porque Sally me dio señales de que quería hacer eso, y en el fondo me sentí como una aguafiestas─ Estoy segura que muchas de las chicas que aceptaron esos retos ridículos están arrepintiéndose ahora, mañana, y pasado mañana, ya que la mayoría de las que fuimos criadas en el pueblo tienen ese pensamiento de que su virginidad es algo importante y se deberá entregar al hombre de sus sueños, con el que compartirán su vida por siempre, siento mucha tristeza por ellas, no pudieron tener fuerza de voluntad para negarse a la perra de Mara. ─suspiré con pesar, todo lo que planee dio una vuelta de 180°.

─ ¿Tu qué piensas de eso? ─sentí su respiración en mi coronilla.

─ ¿De qué cosa? ─estiré mi cabeza hacia atrás para poder verlo mejor, me topé con un Taehyung serio, sus ojos tenían un brillo extraño y tenía su mandíbula tensa.

─De la virginidad, por supuesto ─susurró bajito─ las personas nunca compartirán las mismas opiniones, amor mío, nunca habrá un lugar lleno de las mismas ideas y opiniones. Puesto, que puedes ser criado bajo reglas extremas, duras y no servirá de nada porque la persona bajo esas mismas reglas acabará haciendo todo, menos lo que sus padres lo inculcaron durante su infancia y adolescencia. De la misma manera con los que tuvieron padres libertinos ¿cómo crees que ellos serán? Nadie lo sabe, más que ellos mismos, pongamos de ejemplo la virginidad.

─... Tus padres te negaron a tener amigos del sexo opuesto, las fiestas son prohibidas, las bebidas alcohólicas te matarán a corto plazo, el matrimonio forma parte del ciclo de la vida al igual que entregarte y darle hijos a tu marido ¿los hijos de estos padres que harán?

Pestañeé confundida por el tremendo cambio brusco que tomó la conversación. Me puse de lado para verlo mejor.

─Obviamente harán lo contrario, creo que buscarán la manera de hacer justamente lo que le están negando ─murmure lo primero que se me vino a la mente.

─Es verdad, pero también es verdad que el 70% de los hijos criados bajo este régimen que llaman crianza se quedarán cumpliendo todo eso, siendo infelices y miserables toda su vida. ─no se a que venía todo esto, fruncí mi ceño.

─ ¿A que viene todo esto Tae?

─ ¿Estás segura de que todas las chicas que aceptaron ese juego están arrepintiéndose ahora?

─Pues claro que sí, Mara es una idiota que le gusta manipular a la gente, se cree la dios del colegio y esas pobres chicas fueron un juguete para sus perversiones ¿decirle a alguien con quien perder su virginidad? Es algo estúpido y denigrante.

─ ¿Y tú estás segura de que ellas no querían eso? ─alzó una ceja.

─Estoy segura de que no querían eso, te dije que en el pueblo a todas las mujeres les inculcaron que su virginidad se debe entregar a su marido, al hombre que amarán siempre, Mara simplemente jugo con ellas.

─ ¿No crees que estás siendo muy retrógrada mi amor? Esas chicas fueron criadas tal y como lo dije hace un momento, siendo retenidas por sus padres, siendo presionadas por mantenerse puras hasta que su "hombre ideal llegue". Ellas desearon eso, nadie les puso una pistola en su cabeza, quisieron sentirse deseadas, conocer la sensación del placer, en Mara en cambio se nota desde lejos que tuvo una infancia dura, tener atención de alguien más es lo que le hace sentirse viva, ya que sus padres de seguro fueron esos padres ausentes saciando sus deseos, así que Jude, nunca debemos echar la culpa a terceros por las decisiones de uno mismo. Hay muchos factores que nos lleven a tomar una decisión que tal vez parezca falsa y egoísta para los demás, pero nunca sabrás porque optaron por esa opción, siempre debemos buscar un tercer punto aparte del primero y el segundo, la gente busca uno extra cuando las dos primeras son todos menos lo que ellos ven mejor para la situación.

─G-gracias por la aclaración, creo que fui muy tonta al pensar de esa manera ─murmuré jugando con el filo de su camiseta.

─Siempre es bueno escuchar la opinión de otra persona, mi amor ─solté un suspiro sintiéndome estúpida, la respiración se me atascó cuando su mano se posó en mi muslo ─ ¿Entonces tu esperarás a tu hombre ideal?

¿Qué...? Oh dios de los dioses, creo que sirvió de algo esta conversación, yo nunca tuve esa importancia del sexo, hasta creí que en realidad era una frígida como mi hermana me lo dijo.

Y bueno, parece que llegué al punto que quería.

─Creo que ya lo encontré ─susurré viendo fijamente sus ojos, sus lindas y largas pestañas eran un adorno perfecto para sus iris.

─Espero que ese sea yo, no pienso esperar hasta el matrimonio ─solté un jadeo de sorpresa cuando su boca, apreso la mía en segundos, sus manos tomaron mi frágil y liviano cuerpo dejándolo a horcajadas encima de él.

¿Dije liviano? Si comía todo lo que encontraba en el camino.

─ ¿Qué...? ─hice una pregunta estúpida cuando nos separamos, pero es que mis sentidos se fueron a dar una vuelta por China.

─Que quiero hacer el amor contigo, Jude ─susurró cerca de mis labios. Y entonces pasó todo, menos lo que esperé en todas mis alucinaciones en donde el recorría mi cuerpo con sus grandes manos, en donde sus labios dejaban marcas por mi cuello reclamándome como suya.

Solo nos quedamos viendo como unos amantes que no sabían qué hacer ante lo que se presentó.

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Bueno, hola, hola, lamento haber tardado, pero aquí está este capítulo medio extenso, no sé cómo quedó jaja espero que bien. Disfrútenlo mucho, mañana sin falta publico el siguiente que ya mismo lo acabo.

Les pido una disculpa si hay errores en la ortografía o algún otro por ahí.

Bay, bay 🐞

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