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CAPÍTULO 14: SECRETS (PARTE II)

—— SECRETS ——

F

allon y Bloom se dirigieron al punto en el que habían quedado con Beatrix. Las dos hadas de fuego llevaban en silencio desde que se separaron del hada de aire, pero mientras que Bloom sólo quería respuestas, Fallon sabía que había unas intenciones mayores. ¿Cuáles? Ni ella misma lo sabía, pero sí sabía algo con certeza. Beatrix no era de confianza.

—¿Estas segura de hacer esto?— Fallon miró a Bloom, la cual la miró con una expresión de pocos amigos.

—¿Por qué no debería de estar segura? Al fin tengo una pista, y debo de aprovecharla. Además, si no quieres, no vengas.— Alegó la pelirroja, haciendo que su amiga suspirase con frustración. Por supuesto, Fallon comprendía por qué Bloom necesitaba respuestas, pero también sabía que no todas las podía proporcionar Beatrix, la cual seguía sin ser de confianza para ella.

—No voy a dejarte sola, Bloom.— La recordó, justamente cuando Beatrix detenía un coche donde ambas chicas estaban. Las cuales la miraron sorprendidas al no saber como había podido conseguir el vehículo.

—¿A que estáis esperando?— Preguntó Beatrix, haciendo que las dos chicas se dirigieran hacia ella.

—¿Has robado un coche?— Preguntó Bloom mientras se subía en el asiento del copiloto y Fallon en los de atrás.

—¿Es que sabes como hacerlo?— Preguntó Fallon asombrada, aunque era cierto que era una contradicción lo que pensaba de Beatrix, sí era cierto que algunos de sus métodos la sorprendían, sobretodo aquellos relacionados con incumplir normas. Por qué, siendo sinceros, Fallon era una experta en saltarselas.

—Se hacer muchas cosas.— Se limitó a decir Beatrix con una sonrisa.

—Debes de enseñarme.— Sonrió Fallon todavía sorprendida.

Beatrix siguió la carretera, atravesando el bosque que estaba al alrededor del bosque. Aquel hecho, salir de Alfea, maravilló a las dos hadas, ya que lo único que conocían del Otro Mundo era Alfea y sus alrededores, no había visto nada. Y, siendo sinceros, a Fallon todo aquello la encantaba, ella quería y necesitaba ver todo aquel mundo, de una forma que no llegaba a comprender.

✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶

Unas horas después, las tres chicas llegaron hasta una especie de acantilado, y se dirigieron a una zona aparentemente normal, la cual parecía estar lejos del contacto humano. Para Fallon, estar tan cerca del mar la traía viejos recuerdos. En su mayoría no eran buenos, otro, en cambio, la hacían recordar aquella vida que había tenido previamente a la muerte de sus padres.

—Aster Dell era una ciudad, ¿no?— Preguntó Bloom mientras se acercaba al borde.

—¿Estas segura de que este es el sitio?— Preguntó está vez Fallon cruzándose de brazos.

—Lo estoy.— Se limitó a decir Beatrix.

—¿Cómo señalan una ciudad en un mapa estando en la ladera?— Preguntó Bloom mientras Fallon observaba que había cráneos.

—¿Ha donde nos has traído?— Preguntó Fallon dándose la vuelta y observando que Beatrix había creado una especie de rayo, el cual lanzó hacia ellas, pero no para atacarlas, sino para mostrarlas una realidad mucho más diferente.

—Vosotras no sois las únicas hadas poderosas de Alfea.— Les recordó Beatrix justamente antes de lanzar el rayo.

—¡Beatrix! ¿Qué haces? ¡Para!— La pidió Fallon justamente cuando la hada de aire lanzaba el rayo, mostrando las ruinas de una vieja ciudad.

—Bienvenidas a Aster Dell.— Dijo Beatrix acercándose a las dos hadas. —Era un lugar precioso, con gente que solo quería vivir sus vidas. Hasta que un invierno los quemados rodearon el asentamiento y la unidad militar de Alfea decidió que destruir a esas criaturas era más importante que las vidas de estas personas.— Explicó el hada.

—Esto no es real, es un efecto óptico.— Afirmó Bloom sin creerse la verdad.

—He perforado el velo mágico que colocó la reina para esconder las atrocidades que pasaron aquí. Pensarlo bien, la líder de nuestro reino intentó borrar un crimen de guerra. Yo nací aquí, y mi familia murió aquí. Eso fue dos días antes de que tu nacieras.— Explicó Beatrix, mostrando en su rostro el dolor que aquello la provocaba.

—Entonces, ¿crees que mi familia fue asesinada aquí?— Preguntó Bloom confundida.

—No lo creo, lo sé. Por qué murieron todos, menos nosotras.— Aclaró Beatrix, mientras Fallon comenzaba a sentirse incómoda por el lugar en el que se hayaban.

—No entiendo como puedes saberlo.— Habló en este momento la morena, sin comprenderlo.

—Por que lo vi. Vi los cuerpos, las muertes. Entonces alguien me cogió y me sacó de aquí. Mientras corríamos los vi, caminando entre cadáveres como héroes conquistadores.— Explicó Beatrix intentando contener las lágrimas, mientras mostraba en sus palabras el desprecio que tenía.

—¿A quién viste?— Preguntó Bloom con duda.

—A Dowling, Silva y Harvey.— Respondió Beatrix, haciendo que las dos hadas de fuego intercambiaran una mirada de confusión.

—Pero... Eras un bebé, ¿como sabías que era real?— Preguntó Bloom completamente confundida con la situación.

—Por que la mujer que me salvo uso su magia para grabar ese recuerdo en mi cabeza. ¿Te suena de algo?— Respondió con obviedad, haciendo que las dos hadas de fuego supieran a quien se estaba refiriendo.

—Rosalind. ¿Ella te rescató?— Preguntó de nuevo Bloom.

—Nos rescató. Tuvo una crisis de conciencia, fue incapaz de asesinar a gente inocente, por muchos quemados a los que pudiera matar en el proceso. Pero Dowling, Silva y Harvey no estaban de acuerdo. Ellos se revelaron y llevaron acabo la misión.— Término de explicar Beatrix, mostrando aún más el desprecio que tenía.

—No. Se que me han mentido. Pero no son unos monstruos.— Afirmó Bloom con certeza.

—¿Y porque lo están tapando?— Preguntó Beatrix confundida, justamente cuando el hechizo regresaba, y Fallon se tambaleaba, haciendo que las dos hadas la sujetarán para evitar que se cayera.

✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶

* flashbacks *

Todo estaba en llamas, todos gritaban y todos pedían clemencia por sus vidas. Pero, aunque se creía que no iba a haber supervivientes, un hombre y una mujer, que iban encapuchados salieron corriendo, perdiéndose entre las sombras y el humo producido por el fuego.

Las dos misteriosas personas se escondieron detrás de una cueva, donde el hombre creó un portal que ambos traspasaron con facilidad.

—¿Estas seguro de esto?— La mujer se detuvo, y miró a la niña que estaba en sus brazos.

Estará segura y protegida de todos. El Otro Mundo no está listo para ella, nunca lo estará.— La tranquilizó el hombre, mientras cargaba a la niña y se dirigían a una casa. —Estarás bien, princesa.— La tranquilizó el hombre, haciendo brillar sus ojos, mientras la dejaba en una cesta en la puerta con una pequeña nota. —Será feliz y crecerá protegida y lejos del peligro.— Repitió el hombro, pero no para convencer a su esposa, sino para convencerse a si mismo.

—La protegerá y la ayudará a regresar a nosotros.— Dijo en este momento la mujer mientras ponía un collar con una estrella entre las manos de la niña.

Antes de desaparecer, la mujer depositó un beso en la frente de su hija, para después ser el hombre quien llamará justamente antes de que esta fuera abierta, los dos, seres mágicos, desaparecieron. Dejando en el Primer Mundo a la criatura que más querían, su hija.

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Hanna y Graham Blake estaban abordo del catamaran, realizando uno de sus entrenamientos rutinarios. Aunque era cierto que aquel entrenamiento era completamente normale, aquella mañana ambos sabían que había algo extraño, ninguno sabía como explicarlo, simplemente lo sabían. Y junto a ello, el terrible presentimiento de que nunca, jamás, volverían a ver a su hija.

—¡Tira de esa cuerda!— Gritó Graham, justamente cuando empezaban a observar como el oleaje se volvía más violento.

—¡No puedo!— Gritó su esposa, justamente cuando la cuerda se soltaba de su agarre y una enorme ola se les llevaba.

Hanna y Graham intentaron luchar por mantenerse a flote, lucharon por salir a la superficie. Pero no todos los finales son felices, y esto se confirmó, cuando la pierna de Graham quedó atrapada en el catamaran, llevándole hasta el fondo marino, donde el aire que había tomado comenzaba a escasear, haciendo que finalmente la presión, previa al ahogamiento se incrementará, hasta que el instinto de supervivencia predomino, y Graham tomó aire, sabiendo que aquello era el final.

Por su parte, Hanna estaba a cientos de kilómetros de su esposo, pero también con un final parecido, a excepción de que ella vio a alguien. Tal vez, en un principio podía ser un salvador, pero no fue así, pues rápidamente vio que aquella mujer estaba controlando el oleaje, el cual se intensificó con un único objetivo, matarla. Misión que terminó cumpliendo.

* Fin del flashback *

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Fallon abrió de golpe sus ojos, mientras tomaba una fuerte bocanada de aire procesando lo que acaba de ver, ya que una parte de ella no era consciente del todo de lo que había visto o, mejor dicho, vivido.

—¿Estas bien?— Bloom miró a su amiga con preocupación.

—M-mis padres...— Consiguió decir mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.

—¿Qué pasó con ellos?— Preguntó Bloom, observando la expresión de miedo de su amiga.

—Mis padres biológicos eran de aquí, sobrevivieron. Fueron ellos quienes me dejaron en el Primer Mundo.— Afirmó Fallon haciendo que Beatrix comprendiera todo.

—La tercera superviviente. Intuía que fueras tú, ¿ahora entendéis todo?— Alegó Beatrix justamente cuando Bloom se daba cuenta de que algo más había visto su amiga.

—¿Qué más viste?— Preguntó Bloom ayudando a Fallon a ponerse de pies.

—Mis padres adoptivos no tuvieron ningún hijo, los biológicos me dejaron en su puerta con mi nombre y con el collar que siempre llevó. Y al margen de ello, vi como estos morían ahogados. Un hada de agua que vivía en el Primer Mundo les mató.— Dijo con frustración mientras su expresión pasaba del dolor, producido por la pérdida de sus padres a la ira, ante la incapacidad de poder buscar venganza, ya que, buscar un hada en un mundo de hadas, era una misión imposible. Sí era cierto que podía ser posible, pero... ¿por donde buscar a alguien que no conocías?

—Esta bien, Fallon.— La tranquilizó Bloom mientras la abrazaba.

—¿Crees que Rosalind tendrá las respuestas sobre mis padres?— Fallon miró a Beatrix con seriedad, esperando que aquella mujer que estaba tan unida a Beatrix y a Bloom, pudiera ayudarla a recuperar a las únicas personas que la quedaban. Dos criaturas mágicas que la intentaron proteger, pero ahí también radicaba su miedo. ¿Y si volvieron a Aster Dell para salvar a los suyos y terminaron muriendo? Pensar en esa posibilidad destruía, de mil formas diferentes, a Fallon. Pero también la inspiraban a luchar y a investigar. Porque aunque existía la posibilidad de que estuvieran muertos, también existía la posibilidad de que estuvieran vivos y de que pudieran ayudarla, ya no con su poder, sino a la hora de comprender por qué podía hacer cosas que el resto de sus compañeras no podían hacer.

★★★

Capítulo dedicado a ju1405

Como lo prometido era deuda, aquí tenéis uno de los capítulos más importantes de esta primera parte.

Ya no solo con respecto a la trama de Bloom, pero también para la de Fallon.

Y es que estos dos flashbacks de su pasado son muy importantes, se que dije que no quería que fuera tan intensa como Bloom, pero es inevitable no poder no centrarme en su pasado sobretodo cuando tiene tanta importancia.

Con respecto a otros aspectos, aún no qué va a suceder, pero tengo ideas y se que elija la que elija os va a gustar.

Respecto al próximo capitulo... van a ocurrir cosas muy interesantes, emocionantes y bonitas.

¿Qué os ha parecido el capítulo?

Os leo ❤


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