DOLOR

¿EXISTE ALGUN TIPO DE PALABRA QUE ALCANCE A DEFINIR MI ESTADO? Porque en casi de que así fuera, no la encuentro, no sé si existe, porque ni si quiera sé como me siento, pero la sensación que exoerimento no se la deseo a nadie.

Alce la mirada observando mi cuarto. Estaba sentada en el suelo, contra la parte de en frente de mi cama, y todo mi cuarto estaba hecho un desastre. Los cuadros en el suelo con sus cristales rotos, los libros tirados, las cosas iguales, algunas rotas, mi cama desarmada, todo estaba hecho pedazos. Me había desquitado y aún así la sensación de vacío no se iba.

Podría jurar que mis ojos nunca me ardieron tanto, sentía mi rostro caliente, mis mejillas húmedas a tal nivel que ya no caían más, mis labios resecos y aún así quería seguir llorando. Respire con dificultad para soltar un sollozo ahogado, que le siguió otro y otro, parecía que nunca me cansaba de llorar.

Dos días.

Dos días en los que estuve encerrada tratando de vaciarme, pero nada servía, dos días en los que no hable con nadie, dos días desde que llegue con los chicos.

Dos días desde que los Cullen se fueron.

Alce las rodillas para ponerlas contra mi pecho y abrazarlas, escondí mi rostro en ellas y me balance sobre mi misma llorando como un cachorro asustado. Pero estaba mal, estaba herida, quebrada. Tenía una sensación de vacío en mi pecho, como si algo faltase, un grito estancado en mi garganta y un revoltijo en mi estómago.

¿Qué se suponía que pasara?

Llame a Alice pero no respondió, le mande mensajes a Edward y tampoco. Ninguno me contestó y termine por rendirme. Nunca creí ser capaz de rogar atención, no me había puesto a pensar que algún día lloraría por amor, si hace un año me hubiesen dicho que estaría con un corazón roto no les hubiese creído porque no sabía lo que era el amor.

Y ahora lo supe.

Quería desaparecer para no sentir absolutamente nada, irme lejos, correr hasta cansarme y no sentir las piernas, gritar hasta sentir mi garganta como un desierto, pero quería dejar de tener esa palabra. "Sentir" porque ya no quería hacerlo.

- ¿Leo? - Oí la voz de papá, tocando suavemente la puerta - ¿Cariño, estas bien? ¿Puedes hablarme?

Levanté la mirada, apoyando mi mentón sobre mis brazos que reposaban sobre mis rodillas, me sorbí la nariz sin poder ver demasiado, todo era borroso. Escuche la puerta abrirse pero no me gire, oí pasos hasta una presencia a mi lado pero me quedé así, quieta cual estatua.

- Sé lo que sientes Leo - Su voz sonaba tan lejana - Cuando tú madre se fue, ella se llevó no sólo a ustedes dos, sino una parte de mi con ella, se llevó mi amor, parte de mi historia, una parte de mi identidad - Me giré un poco a mi papá viendo sus ojos cristalizados

- ¿Por qué duele tanto?

Me mordi el labio con fuerza y papá me abrazó, dejándome llorar en él, siendo un refugio momentáneo.

- No lo sé Leo, pero aveces el dolor nos recuerda que la vida sigue

Me aferre a él, vaciando mis lagrimas hasta no dar más, llorando sin poder contener nada, odiaba sentirme así, no me gustaba.

Abri la puerta del cuarto de Izzie. Mis fachas no eran las mejores, estaba vestida en unos simples shorts y una remera de Charlie, pero no tenía ánimos para vestirme bien. La vi ahí, sentada en su silla frente a la ventana, vestida de peor manera que yo y sentí una punzada en mi pecho.

- Sé que duele Izzie - Caminé hasta estar frente a ella y agacharme para tomar su mano, mi voz tembló y rápidamente se quebró - Pero necesito que comas

- ¿Cómo hacerlo? - Susurró y deje el plato con comida sobre la mesa - Él se fue

- Lo sé - Corrí un mechón de su cabello - Ellos también se fueron y estoy igual que tú, pero al menos almuerzo

- Pero no desayunas, ni cenas - Murmuró volviendo su mirada a la ventana

Suspiré antes de levantarme y salir de su cuarto. No tenía ánimos para discutir, no tenía ganas de empezar una disputa en la que sólo saldrían gritos. Papá estaba al borde de la escalera viéndome con pesar.

- No quiere comer - Murmuré antes de entrar a mi habitación para evitar más charla

Arrastre mis pies hasta mi cama, donde me tire boca abajo abrazando mi almohada, un almohada que había sido manchada con cientos de lagrimas en nombre de ellos, y que nuevamente iba a hacerlo, porque no aguantaba más y mis ojos nuevamente se cristalizaron.

- No llores, no llores - Me susurre a mi misma en vano, porque las lagrimas comenzaron a salir - mierda - Maldije empezando nuevamente a llorar, aferrandome a la almohada con fuerza

La abrace con tanta fuerza que podría romperse, pero estaba dolida. Era como si ese malestar en mi pecho me recordara cada segundo de cada minuto que ellos no estaban, que ellos se habían ido y me habían dejado, era como si cada microsegundo aumentará más el deseo de volver a verlos y que esto sea tan sólo una pesadilla.

Despertar con Emmett jugando a mi lado, Rosalie besando mi rostro, Alice quejándose de que quería un abrazo, Jasper dedicándome de sus cortas pero sinceras sonrisas, Esme con un desayuno hecho con amor y Carlisle con su radiante sonrisa dedicándome los buenos días. Pero todo era una fantasía.

Porque ellos se fueron.

Me dejaron sola, aún sabiendo que nunca antes había sentido amor de verdad, nunca antes me había enamorado, nunca antes me sentí así de vulnerable romanticamente por alguien, me dejaron sabiendo todo de mi. ¡Me dejaron sabiendo que me romperían! Y... Ni si quiera fueron capaces de esperar a decírmelo en persona.

Ni si quiera con un último beso, abrazo o caricia.

Sólo con un "Lo siento" como si eso bastara.

Apreté la almohada ahogando un grito hasta que la tire llorando, golpeé a los lados de la cama, pataleé sollozando y me senté tirando de mi cabello con fuerza ¿Por qué dejarme así? Me giré a mi mesa de noche para tomar el libro de allí y tirarlo a algún lado de la habitación.

Empezando a destrozar mi habitación de nuevo.

Estaba sentada al borde de la ventana con Draco sobre mi regazo, acariciando su pelaje mientras observaba la luna brillante arriba, estaba un poco borrosa por lo que se notaba que iba a llover, y me coloqué mis auriculares con la primera canción que salió en mi celular.

I'm in my bed
And you're not here
And there's no one to blame
But the drink in my wandering hands

Ni si quiera tenía ánimos para sonreí al oír a Harry Styles, en cambio sentí mis ojos humedeserce y relamí mis labios, dejando a Draco dentro de mi cuarto para sentarme yo sola en la ventana. Mirando las estrellas.

Forget what I said
It's not what I meant
And I can't take it back
I can't unpack the baggage you left

Aborrecia sentirme tan vulnerable ¿Desde cuando la egocéntrica Leona Swan se sentía así? Siempre presumiendome ante el resto y ahora derramando lagrimas por seis vampiros que se fueron, dejándome sin decir siquiera un adiós cara a cara.

What am I now? What am I now?
What if I'm someone I don't want around?
I'm falling again, I'm falling again, I'm falling
What if I'm down?

Aún así, como desearía volver a sentir los besos de Rosalie sobre mi cuello, los besos de Alice en mi mejilla, los besos posesivos de Jasper o de Emmett, volver a la noche de graduación con Esme o estar en la oficina con Carlisle. Tan sólo estar con ellos, pero no, no estaban y eso sonaba tan irreal. Porque no importaba cuantas veces me lo repetía, no terminaba de procesado y parecía que todo el desastre de la fiesta había sido ayer.

What if I'm out?
What if I'm someone you won't talk about?
I'm falling again, I'm falling again, I'm falling

Esa punzada que sentí en el pecho, el hecho de que Draco estuviera estresado, todo me había indicado que algo malo iba a pasar y no reaccione, sólo me asusté pero ¿Qué se suponía que hiciera? Era algo que estaba fuera de mi alcance, a penas me estaba acostumbrando al hecho de que eran vampiros.

Y ahora no estaban.

Coloqué la película de la era de Ultron, estaba sentada en el sofá de la sala, bastante desaliñada pero con una manta tapando mis fachas y un postre en mi mano para comer. Ni si quiera había empezado la película y ya había recordado la muerte de Pietro, dándome unas ganas salvajes de volver a llorar.

- Esto es sumamente deprimente

Oí una voz y giré mi rostro para ver a Jared que había hablado en la entrada de la sala con las hermanas McGarrett a su lado y Paul Lahote, volví a girar sin ganas mi mirada al televisor, no era la primera vez que venían, pero si la primera vez que me veían desde lo sucedido, papá siempre les decía que me dejarán sola o directamente yo no les abría la puerta.

- Ay Leo - Marina se sentó a mi lado tomando mi mano, ¿Tan sensible me encontraba que con ese mínimo gesto ya me dieron ganas de llorar? - como lo siento, pero en serio no puedes estar así

- Te extrañamos - Siguió Allison agachandose frente a mi - Por favor vuelve - La mire incrédula al igual que al resto que estaba invadiendo mi espacio de depresión

- ¿Qué esperan que haga? - Bufe relamiendo mis labios mientras rodaba los ojos evitando su mirada - Ellos eran... Mi todo, sacaron todos los lazos del resto e instalaron los suyos y me hicieron amarlos, me hicieron saber lo que era en verdad el amor

- Lo sabemos - Habló Jared metiendo las manos en sus bolsillos, él nunca fue mi abierto con sus emociones - Pero no podemos dejar que nuestra amiga se caiga a pedazos y no hacer nada cuando podemos evitarlo, no queremos que estés como... Isabella

Mi hermana menor que seguramente está en su habitación, sentada en esa silla mirando a la ventana, porque eso era lo único que hacía. Mientras ella estaba sumamente quieta rompiéndose por dentro, yo me movía constantemente rompiendo todo a mi al rededor. Diferente dolor pero misma causa y diferente forma de remediarlo.

- No quiero salir - Susurre abriendo el postre para comerlo, pero fue Paul quien lo arrebató de mis manos y lo mire de mala manera

- Escucha morocha, no nos conocemos demasiado, pero tengo las suficientes razones para no dejar que te arruines la vida por unos simples... paliduchos que se fueron - Dejó el postre sobre la mesa y se cruzó de brazos

- Si no quieres salir esta bien - Continuó Allison - Pero necesitas aprobar las materias, así al menos terminar la escuela

Me mordi el labio sin querer hablar, estaba negada a salir, no quería ver nada que me recuerde a ellos, pero aún así tenían razón. Y me molestaba admitirlo.

- Ven a rendir conmigo, no te pedimos más nada - Habló Allison

Jared caminó hasta sentarse a mi otro lado, Marina también se sentó más cerca de mi y mi mejor amigo me abrazo por los hombros, no quise moverme por orgullo pero termine cediendo y aferrandome a él. Allison y Paul se sentaron a los otros lados apretandome un poco, haciéndonos reír, al menos solté una risa un poco corta. Los mire, observando como ellos sonreian viéndome con algo de tristeza pero comprensión.

- Si vas a llorar por Pietro - Allison tomó el control para poner la película y que empezace a reproducirse - Lo vamos a hacer juntos

- ¿Juntos? - Pregunté algo bajo con un sentimiento que por unos momentos llenó el hueco que ellos me dejaron

- Juntos - Dijeron al coro

Mire la pantalla del televisor acomodandome mejor para no estar todos demasiado apretados, al menos tenía a mis amigos.