6:00 a.m. marcaba el reloj. El sol aún no se asomaba por el horizonte. Era temprano, aún había oscuridad y quietud en el complejo, específicamente en el área de vivienda de los Vengadores

Pronto empezaría un nuevo día, así que sus alarmas estaban próximas a sonar y a comenzar a movilizar a los residentes para su rutina de entrenamiento. Antes de que sus respectivas alarmas los levantarán, los parlantes del complejo entero tronaron al punto de que hicieron las ventanas y cristales vibrar, despertando de un susto de muerte a cada uno

Natasha sacó la pistola de debajo de su almohada y apuntó, solo para ver desorientada su cuarto vacío, pero hasta el cerebro le retumbaba dentro del cráneo ante el sonido de lo que pronto descubrió, era música

Se sacó las cobijas de encima, dejó su arma y abrió la puerta de su habitación con molestia, topándose con el resto de los residentes. Todos en pijama y con una expresión nada divertida ante el ensordecedor ruido de una canción de Doja Cat

Se veían entre sí desorientados. Rhodes se veía especialmente molesto y Wanda tenía una expresión resignada antes de meterse nuevamente a su cuarto diciendo «ya que»

— ¡BUENOS DÍAS VENGADORES! — exclamó Nastya por encima del volumen de la música— ¡¿QUE MEJOR QUE DESPERTAR CON MÚSICA?!

Una vena pálpito en la frente de Natasha. Era demasiado temprano para tener dolor de cabeza

— ¡¿QUÉ ES TODO ESTO?! — Pregunto tratando de hacer su voz oírse por encima del estridente ruido

Dakari estaba bastante calmado, bebiendo su leche con tranquilidad

— ¡NADA! ¡SOLO DECIDÍ PREPARARME PARA EL ENTRENAMIENTO MAÑANERO AL QUE USTEDES ESTÁN ACOSTUMBRADOS! — explicó como si nada— ¡NADA MEJOR QUE MÚSICA PARA SENTIRME CON ENERGÍA!

Natasha notó una sonrisa traviesa y descarada en el rostro de su hija, una inconfundible, pues era la suya propia

»— ¡NOS VEMOS EN LA SALA DE ENTRENAMIENTO! — canturreo, cantando tranquilamente antes de desactivar los parlantes con la música

Los Vengadores suspiraron con alivio ante el silencio, pero Nastya había logrado que quería; espantarles a todos el sueño

— Ugh, ¿ya para que me duermo?— masculló Sam volviendo a su habitación

Steve no dijo nada, y Maddie tampoco, de cualquier manera ya estaban despiertos. Uno a uno se metieron a sus habitaciones para cambiarse e ir a desayunar

El único que no salió en absoluto de su habitación, fue Bucky, quien de cualquier forma no pudo pegar el ojo en toda la noche

— Tenias que parir a tu terquedad, ¿verdad? — reclamó Yelena

— ¿Disculpa? ¿Cuando mi terquedad ha puesto música a semejante volumen a una hora tan indecente? — pregunto ofendida

— Nunca, pero es muy típico de ti aparentar que sigues el sistema cuando solo lo usas para destruirlo por dentro, con una sonrisa de “bésame el culo”— contestó bastante segura la rubia— Suerte con la probada de tu propia terquedad hecho una personita

Natasha abrió la boca dispuesta a defenderse, pero Yelena se encerró en su habitación como los demás para cambiarse la pijama

Suspiro e hizo lo mismo antes de ir a desayunar, encontrando al joven matrimonio muy tranquilo y risueño, mientras que los demás les daban una mirada corta de reproche ante el sacudido despertar

Seguramente Nastya lo repetiría hasta que se cansara, o en su defecto, hasta que los demás se hartaran

— Bien, ayer fueron solo tus evaluaciones pero hoy empieza oficialmente tu entrenamiento— declaró Natasha segura, mirando a Nastya con seriedad— Hay mucho en ti con potencial. Además, Bruce evaluará tus poderes en el simulador

— ¿El que?

— Es un ala que simula mediante proyectores diversas situaciones de peligro para ver cómo reaccionas a ellas— explicó Natasha

— Oh, ¿como una Sala del peligro?

— ¿Una que? — preguntó Yelena, que estaba ahí para entrenar a su sobrina

— En la mansión hay un cuarto igual al que Natasha dice. Ahí entrenan los X-Men

— No sabía que los X-Men tenían tanta tecnología— pensó Natasha en voz alta

— Creeme, los X-Men son realmente formidables, igual que tus vengadores amados— defendió con real cariño

Natasha solo viró los ojos divertida

— En fin, queremos ver el alcance de tus poderes— retomó Natasha el tema— Casi no sabemos nada de-

— No creo que sea necesario hacer esa prueba— musito titubeante

— ¿Qué? ¿Cómo que no?

— Yo puedo decirles que habilidades tengo con precisión. Es mejor así— habló notablemente incómoda, haciendo evidente que quería evitarlo

Yelena y Natasha compartieron una mirada incierta

— ¿Puedo saber la razón?

— En primera; odio los laboratorios— admitió con desprecio— segundo; a mis poderes no les gusta ser… evaluados

— ¿No “les gusta”? ¿Porque te refieres a ellos como si tuvieran vida propia?

Nastya presionó ligeramente sus labios, dejando salir de su mano una espesa nube de humo negro con destellos púrpuras apenas notorios

— Es que si creo que tienen vida propia— aceptó dudosa— Es complicado…

— Pues hazlo sencillo— pidió Natasha alerta

No le daba muy buena espina que Nastya se refiriera a sus poderes como alguien en vez de algo

— A veces me hablan— susurro con pena, una que sabía haría enfurecer a Erick

El siempre le dijo que sus poderes no eran motivo de vergüenza o miedo, sino una fortaleza que debía presumir con orgullo, como una joya hermosa

»— Pasaba al principio, cuando no estaban suprimidos— contó con tranquilidad

Habían sido momentos aterradores, pero los había superado

»— Eran como susurros. Hank hizo muchas pruebas para averiguar de dónde venían las voces… casi destrui el laboratorio— expresó con una sonrisa entre divertida y avergonzada— Creo que no les gustó mucho la idea de que descubrieran de donde vienen

Natasha no daba crédito a lo que oía, y Yelena tenía una expresión de espanto

»— Por eso llamaron a Erick. El y Charles me ayudaron a vencer mi miedo y a estar en balance con mis poderes— habló con melancolía, ocultando esa bruma oscura que sus manos desprendían

— ¿Les tienes miedo? — preguntó Yelena con cuidado

— No, la verdad no. Son como un amigo, una extensión de mi— aclaró enseguida— Es solo que tiene cierto recelo cuando se indaga de ellos. Respeto la idea de que hay ciertas cosas en mis poderes que deben permanecer ocultas

— Natasha, tu hija necesita un exorcismo— bromeó Yelena, sacándole una risilla a Nastya, bajando notablemente la tensión en ella, algo que la azabache le agradeció

— ¿Y nunca te has preguntado qué es lo que habla en tu cabeza? ¿De donde provienen las voces? — Natasha tenía miedo de presionar, pero la idea de que su hija escuchará voces extrañas le ponía los vellos de punta

— Siempre, pero… creo que hay una razón bastante lógica detrás— Nastya se mostraba tranquila, como si hablará de algo sumamente normal

— ¿Y esa es… ? — dio Natasha pie a que continuara

— Es… como mi protectora— dijo con firmeza, sonriendo ante la mirada patidifusa de Yelena y Natasha— Mis poderes florecieron de la nada después de mi aborto clandestino, cuando yo ya no podía defenderme más…

Natasha sintió una desagradable sensación en el estómago ante la mirada perdida de su hija, y su sonrisa amarga

»— Solo pierdo el control de mis sombras cuando tengo miedo— exclamó, como si esa fuera la gran respuesta al enigma de sus poderes— De alguna forma ellas se volvieron parte de mi, y esas voces provienen de alguna parte que desconozco de mi existencia…

Natasha y Yelena seguían con la misma cara perpleja y hasta espantada

»— ¿Si me di a entender?

— Creo… — Natasha suspiro, negando con la cabeza— Supongo que lo mejor es que sólo los describas.

— Bueno, umbrakinesis es la definición de mi poder

— En español, hermosa— sonrió Yelena

Nastya decidió omitir el detalle de como la llamó la rubia

— Es básicamente el poder de manipular las sombras. Puedo manipular las sombras de las personas, lo que también podría llegar a hacerme controlar a las personas— explicó con más simplicidad— También puedo moverme a través de las sombras, como un puente. Me ayudan a teletransportarme

— Eso explica como atacabas tan rápido la noche en la que te arrestamos— pensó en voz alta la pelirroja

— Exacto. También poseo cierta influencia en la luz. Necesito la oscuridad para mi poder, así que si quiero, puedo apagar las luces. Es algo más demandante ya que yo poseo total poder sobre la oscuridad, pero tengo cierta ventaja— añadió— puedo llegar a materializar mi energía en objetos, también puedo a veces invocar seres… Solo a veces..

— ¿Como que “a veces”?— preguntó Natasha ligeramente alerta— ¿Y qué tipo de seres?

Nastya se alzó de hombros, jugando ligeramente con sus dedos

— Solo pasa cuando pierdo control— soltó una risilla— Ha pasado muy pocas veces

— Pues espero que no vuelva a pasar— pidió Yelena— Y si pasa, quiero estar lejos de eso

Natasha miro los ojos de su hija, entendiendo que la primera vez que eso pasó, fue cuando se protegió al momento que sus poderes florecieron para buscar defenderla de sus agresores tras el inhumano acto al que la sometieron.

Le dio una mirada de dolor, una que a Nastya no le gustó en absoluto

— Bueno, ¿vinimos aquí a charlar o vamos a entrenar? No me levante tan temprano solo para estar aquí hablando de mis poderes— sonrió como si nada, mientras que a Natasha, el dolor le quemaba por dentro

— A-ah si— Natasha de inmediato volvió en sí— Yelena y Barnes te van a entrenar

Yelena asintió con una diminuta sonrisa

— ¿Y dónde está Bucky? — pregunto Nastya con interés

Era llamativo el hecho de que Natasha siempre se refiriera al súper soldado por su apellido fríamente

— Tengo entendido que está en su sesión de terapia— Natasha apretó los labios ligeramente

Era preocupante que James estuviera en terapia tan temprano. Sus sesiones por lo general eran por la tarde, y tres días a la semana. Ese día no le tocaba terapia

»— Empezarán mañana sin falta

— Oh, es una lástima— suspiró decaída Nastya, analizando la expresión de su madre— Me emocionaba la idea de pelear con él

Natasha no mostró una sola emoción ante el evidente deseo de Nastya de coquetearle a Barnes

— Pues es una lástima— intervino Yelena rápidamente— Estaras bien sin él. Así que sube a esa lona

Nastya bufo y siguió a Yelena, mirando de reojo como Natasha las dejó para ir a tomar a Dakari de los brazos de Pietro

(•••)

— Estás inquieto, James..

— Bucky— corrigió el azabache, manteniendo la mirada perdida en algún punto en la nada

‘James’ era absolutamente personal, íntimo de alguna forma. Solo una persona podía llamarlo James, excepto que el único detalle era que no recordaba quién lo podía llamar así

— Te he llamado James antes y hasta ahora parece que te molesta— señaló la doctora Raynor— ¿Pasó algo nuevo recientemente que haya provocado esto?

Bucky se quedó callado, mirando un punto en el infinito. La doctora le veía fijamente. Se notaba que había algo perturbando su alma más de lo normal

»— ¿Tuviste pesadillas? ¿Por eso la consulta?

— Si…

— ¿Pesadilla… o recuerdo? — pregunto más específicamente

— … Ambas— dijo titubeante

— ¿Ambas? Se más claro— pidió Raynor de forma exigente

Bucky trago saliva, mirando al vacío con dolor, con rabia, impotencia y miedo

— Soñe con cabello rojo en mi almohada.. — susurro apenas, un susurro apenas perceptible de no ser por el denso silencio— Ojos verdes… un verde intenso.. Un bebé en mi pecho… su pequeña manita sosteniendo el dedo de mi brazo de metal..

Raynor quedó perpleja. Bucky, por otro lado, tenía el semblante tembloroso, invadido por la impotencia y el odio hacia su persona

»— También recuerdo el llanto de un bebé.

— ¿No hay imágenes más claras? ¿Un rostro? — pregunto sería— Algo más específico

Bucky negó rígidamente, cada vez más enojado. Odiaba su mente, los fragmentos de sus recuerdos sin un orden

— Solo hay una voz suave en mi cabeza… — gruñó, deseando extender la mano y apretar ese recuerdo contra su pecho, pero este parecía huir— “Alyona… Mi hermosa e inocente Alyona”

Sorbió la nariz con fuerza. Las lágrimas ardían en sus ojos, pero no cayó ninguna, por que la rabia las absorbió

»— ¡P-Pongo todas mis fuerzas en recordarlo, y se que sigue ahí pero no lo alcanzó! — susurro/grito con impotencia— Solo hay trozos rotos de mi vida que siento que no puedo unir

— Pero está cerca, Bucky— le animó Raynor— Ahí siguen las piezas… Solo necesitas encontrar una que encaje para armar el resto

(•••)

Nastya jadeba adolorida. Yelena realmente era letal y ágil, y solo estaba jugando con ella, se notaba en la sonrisa burlona de su cara

Le había encestado unos buenos golpes, y había hecho lo mismo con Yelena, pero la rubia era una viuda, así que sin duda, en cuanto a combate cuerpo a cuerpo, estaba muy en desventaja.

Aun así la chica no se rendia, y Yelena le daba mérito solo por eso

— ¿Ya te rindes?

— ¿B-bromeas? — Nastya jadeo, limpiando el sudor de su frente— Apenas estoy… Calentando..

Yelena soltó una risa burlona, preparándose cuando Nastya contraatacó de nuevo hacia ella. Sus golpes iban cargados de fuerza, pero no de precisión, así que fue fácil esquivarla y hacerla retroceder con un fuerte golpe

Sabía compensarlo con la rapidez y flexibilidad, pero para una Viuda Asesina, eso no era nada.

Nastya se tambaleo profiriendo una ruidosa queja cuando Yelena le encestó un golpe con fuerza

— ¡AUH! ¡ME DISTE EN LA TETA! — se quejó, sosteniéndose adolorida uno de sus pechos

Yelena rio entre apenada y divertida, acercándose a ver a la menor, que se sentó en la lona, sobando su adolorido seno

— Lo siento

— Tengo suerte de que mis nenas sean reales y no de plástico, o si no me la habrías reventado— mascullo con una mueca de dolor

— ¿Estás bien, amor? — Pietro llegó enseguida ante la queja de su esposa, sudado y con la playera arremangada de las mangas

— Yelena me pego en mi pecho— se quejó adolorida— Creo que necesito hielo, de verdad duele

— Si quieres te la sobo— ofreció Yelena con una sonrisa sugerente en los labios, recargándose en las cuerdas de la lona

Pietro enseguida se mostró ceñudo ante la descarada sugerencia, mientras que Nastya, notando la intención, solo correspondió la sonrisa llena de coquetería

— Mejor el hielo— intervino Pietro, echándose a Nastya en el hombro

— De verdad me duele

— Solo diez minutos de receso Nastya— exclamó Yelena, cuya sonrisa se borro al ver a Pietro llevándose a la pequeña azabache

— A este paso me van a matar aquí— masculló Nastya, manteniendo en su adolorido seno una bolsa de hielo

Pietro rio, bebiendo agua sin quitar sus ojos de la mueca adolorida de su esposa

— ¿Cómo te sientes?

— Solo es un golpe, no es para tanto

— No me refiero al golpe— aclaró Pietro, mostrándose mucho más serio

Nastya le miró enseguida, confundida ante su tono.

— ¿Entonces?

— Habló de ayer— le recordó con preocupación

Había tratado de tocar el tema con ella, pero lo eludió dejando a Dakari dormir con ellos esa noche, y siempre que trataba de tocar el tema, ella salía con otra cosa

— Tienes que ser más específico

— Sobre el bebé, Thya

— ¿Qué bebé? No hay bebé— obvió tranquila— Y no lo habrá en un buen tiempo

El ceño se Pietro se mantuvo fruncido, todo lo contrario a Nastya, que se veía calmada y decidida

— Esa es una decisión que ambos debemos tomar

— No, es MI decisión— sentenció enseguida— Y ya la tome. Y por favor, no aquí

Nastya se levantó, se sacó la bolsa de hielo del pecho y se inclinó a dejar un beso en los labios de su marido. Pietro lo regresó apenas, pero no se rendía

— ¿Y qué hay de tu madre?

— ¿Que hay con ella?— la azabache se inclinó a atarse las agujetas de los tenis antes de sujetarse el cabello en una trenza

— Ayer parecía enfadada. Y tu muy seria

— No pasó nada— aseguró Nastya, aunque le sobrevino una sensación de temor en el estómago— ¿Verdad?

— No lo sé, hermosa. Ayer cuando salieron de la mansión, estuvieron muy calladas ambas— comentó con cierta curiosidad— ¿Pelearon?

— No, no peleamos— se dijo más para sí, ya que para ella, fue algo sin importancia

Un instante amargo que quería olvidar

»— ¿Tu crees que este enojada?

— No, no lo creo— le tranquilizó rodeando su cintura— Natasha Romanoff enojada debe ser terrible. Yo diría que fue más bien tristeza lo que vi en ella

— ¿Tristeza? — repitió Nastya en un susurro

Si, recordaba cierta rabia e impotencia en los ojos de su madre, pero también había algo que le hacía sentirse intranquila, y era la tristeza en su mirada, toda dirigida hacia ella cada que descubría algo de su pasada vida

— No sé, tal vez-

— Tu descanso término, Nastya— anunció la voz de Yelena— Ya déjala niño, bonito. Le toca estar conmigo

Nastya se burló de la mueca de Pietro y dejó un último beso en sus labios

— No dudes en intervenir si me pega en la otra teta— le susurro antes de escuchar un nuevo grito de la rubia

— ¡Mueve tu bonito trasero Nastya!

— ¿Crees que mi trasero es bonito? — pregunto divertida, dibujando una de sus típicas sonrisas coquetas

Yelena se la correspondió

— Bastante diría yo

Nastya trepó a la lona, y justo cuando se preparaba para volver a luchar contra Yelena, Maddie entró a la enorme sala

— ¡Miren quién está aquí!— exclamó Sam— Nuestra chiquilla desaparecida

Maddie rió, tomando asiento en una de las bancas vacías

— Eww, todo el lugar huele a sudor— se quejó, obligando a su cuerpo a ignorar las náuseas por el hedor

— ¿Por fin vienés a entrenar? — pregunto Sam, notando como Steve se acercó en su dirección

— Ah no, me temo que estaré una temporada sin venir a los entrenamientos— habló ligeramente incómoda

Aún no había acordado con Steve cuando les dirían de su bebé, y su próximo compromiso

— ¿Por?

— Una cuestión médica— mintió a medias, sonriéndole a Steve

— ¿Y estas bien? — interrogó el moreno

— Lo está— terció Steve por Maddie— Solo es un problema… femenino

— Oh.. — Sam entendió, sonriéndole amistosamente a la rubia— Espero que pronto mejores

Maddie le dio una sonrisa tensa, mirando en la dirección en la que Yelena y Nastya intercambiaban golpes y ataques. Yelena parecía haberse tomado mucho más enserio el entrenamiento de la chiquilla, ya que no le daba tregua

— ¡Vamos preciosa, se que puedes hacer más que eso!— alentó la rubia

Maddie hizo una mueca ante la pelea, aunque parecía más bien que Yelena solo jugaba con Nastya, que si se esforzaba

— Natasha de verdad esta muy decidida a que Nastya tenga un entrenamiento disciplinado— comentó Sam con gracia ante una palabrota que Nastya profirió

— Bueno, yo creo que para su edad y tamaño es buena defendiéndose— opinó Steve— Solo juega demasiado, pero sin duda sus poderes podrían ser una gran ventaja para el equipo

— No creo que Nastya esté de acuerdo contigo— negó Madeleine— Ella dijo que no pensaba unirse a los Vengadores

— Bueno, si Natasha se lo pide, tal vez y acepte— Sam miró nuevamente en dirección Nastya y Yelena

La rubia había aprisionado a Nastya en la lona con su cuerpo, maldiciendo en ruso buscando librarse

— ¿Qué pasó Nastya? Estas muy roja— pico Yelena, completamente divertida de ver a Nastya sudando y agitada del esfuerzo

— ¡Te acusare con Natasha! — amenazó la menor

— Oh no, en esta lona yo puedo hacer lo que me venga en gana contigo— Yelena se inclinó más cerca del rostro enrojecido de Nastya— ¿A dónde fue tu sentido del humor?

Nastya clavó sus ojos verdes, en los oliva de Yelena, sonrió con travesura y alzó la pelvis, algo que envió a Yelena hacia adelante al haberse inclinado. Nastya uso eso a su favor y las giró, siendo esta vez quien quedó encima

— ¡Ja! ¡Miren quien ahora está debajo! — se burló

Yelena soltó una risa, pero no tuvo problema en volver a girarlas en la lona

— Lección número uno, pequeña sombra revoltosa— Yelena le quitó un mechón húmedo de la frente— No cantes victoria antes de tiempo

Se quitó de encima y dejó a Nastya ahí tendida, cuyo orgullo estaba herido, al igual que su cuerpo

»— Terminamos por hoy

— Gracias al cielo— suspiró— ¡Pietro!

Su marido rápidamente apareció al lado de ella, así que extendió los brazos, pidiendo ser alzada. Pietro solo todo los ojos antes de echarsela en el hombro con facilidad

— ¿Estás bien?

— Me duele el orgullo— aceptó en una queja— Y el cuerpo

— ¿Hasta cuando tendrás que mantener reposo? — preguntó Sam a Maddie, que no sabía que responderle

¿Cómo podía decirle que no entrenaría por 9 meses sin que se escuchará sospechoso?

— Eh…

— ¡Ahí estás! — Natasha regresó a la sala de entrenamiento, borrando poco a poco su sonrisa al ver a Steve tan cerca de Maddie otra vez

Al parecer habían arreglado las cosas. No sabía si de verdad quería saber qué pasaría con el embarazo de Maddie

»— Te estuve buscando— suspiro, bajando a Dakari cuando este se quejó señalando con su manita a sus padres

— ¿Buscándome para que? — deseo saber

— Clint vendrá

Las entrañas de Maddie se retorcieron de forma desagradable

— ¿V-vendrá?

— Si, también Melina y Aleksei— añadio Natasha, que fue traicionada por una sonrisa contenta— Vienen a conocer a Nastya, y Clint quiere aprovechar el viaje para saber cómo estás

— Oh, suena lindo— balbuceo apenas

— Lo será. Realmente quisiera que hubiera una pequeña cena o algo así. Me encantaría que mi hija y su bebé se sintieran bienvenidos y familiarizados con todos— Natasha no se lo decía a Steve o Sam. Sus palabras iban directamente a Maddie, pidiéndole su apoyo— Sería lindo ver que todos se integren

— Eso… es una buena idea— Maddie no compartía tanto su entusiasmo, no por Nastya, sino por el hecho de que ese era el evento perfecto para anunciar su embarazo y compromiso

Era demasiado rápido para ella

— Me gustaría que fuera sorpresa. ¿Podrías ayudarme con Nastya mañana?

Maddie forzó una sonrisa y afirmó, aunque cierto confort se adueñó de su pecho cuando la sonrisa de Natasha solo se hizo más cálida y feliz

— Gracias. Y ustedes dos, ni una sola palabra— les advirtió Natasha a Steve y Sam

— ¡Mamá! ¡Tu hermana casi me mata! — se escuchó la exclamación dramática de Nastya en el fondo

Natasha solo puso los ojos en blanco y se dirigió a ellos, dejando a Maddie con náuseas ante los nervios

— Steve… ¿podemos hablar? — pidió, mirando con disculpa a Sam

— Claro— Steve puso una mano en la espalda de Maddie y juntos salieron de la Sala de entrenamiento, quedando por fin a solas— ¿Qué sucede?

— Creo que mañana es el momento indicado para dar la noticia de nuestro embarazo— soltó de golpe, cubriendo sus labios un momento al creer que se vomitaria

— ¿Mañana?— las palabras de Maddie también lo pusieron ansioso— ¿No crees que es muy pronto?

— Si, un poco, pero sinceramente, ¿qué mejor oportunidad vamos a tener para reunir a todos y darles la noticia?

Steve tomó aire, entendiendo que era cierto. No tenían mejor oportunidad para anunciar su compromiso y pronta boda

— Bien, espero no morir en el intento— bromeó, sacándole una risilla que bajo el nerviosismo en Maddie

La sonrisa no le duró demasiado antes de ponerse ligeramente verde por las náuseas

»— ¿Estás bien?

— ¡Voy a vomitar!

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¡Milagro que actualizó temprano! Por lo general actualizó cada dos sábados, pero luego cuando me acuerdo se me va el día

Es difícil ser mamá/hermana mayor de una beba de casi seis meses

BUCKY ESTA RECORDANDO, LO ESTA HACIENDO
El detalle es que no es nada nítido, es más que nada voces, fragmentos, siluetas sin rostro

Ya veremos poco a poco como detonan esos recuerdos

Por otro lado, tuvimos una charlita un poco interesante de los poderes de Nastya. No es mucho, pero en una pequeña sorpresita que les quiero dar en un maratón profundizaremos un poco de ellos ;)

Ahora si, espero hayan disfrutando el cap. Recuerdo que aún estoy sentando las bases de la trama, esto sigue siendo un inicio

Gracias por leer, votar y comentar. 💖