Tener la oportunidad de conocer a alguien que puede darte todo lo que creías no poder sentir es mágico.

La lluvia de la mañana comenzaba a despertar a Haseul, haciéndola removerse en sus cobijas intentando liberarse del sueño que mantenía sus ojos entre abiertos. De fondo podía escuchar la música resonar desde la sala haciéndola tararear suavemente las que conocía o le gustaba el ritmo. Ya despierta del todo se levanto con pereza y coloco sus pantuflas de osito, suspirando al recordar a su papi, tomo un respiro nuevamente para salir de la habitación encontrándose con el mayor de frente.

— Oh, Haseul — Sonrió con su típica sonrisa cuadrada —, ¿Descansaste bien?

Asintió suave — ¿Y kookie oppa?

Taehyung simplemente negó — Aun duerme bonita, pero no te preocupes; antes de almorzar iremos a tu casa. ¿Qué te parece?

— ¿Papi ya llego?

Se sintio un poco mal cuando el mayor sonrió, quitándole toda ilusión posible. Pero la dejaba con dudas, ¿Si no llegaba su papi, para que irían?, con la pregunta en mente busco la mirada del mayor, pero el miraba hacia otro lado. Al parecer, kookie habia despertado.

— Buenos días Seul, Buenos días amor — Hizo el amague de abrazar al mayor, pero se le fue impedido.

Tae primero pareció amenazar con la mirada al contrario y luego conecto miradas con la menor sonriendo dulcemente — Deje tu desayuno en la mesa adelántate, yo tengo algo que hablar con Jungkook.

Haseul asintió dulcemente, sabia por la mirada asustada de kookie que seguramente no seria nada bueno o que Tae lo regañaría por algo que hizo. Se sentó a comer un pan que era suavecito y tenia relleno de chocolate, junto a unos huevos con jamón y chocolate caliente. Realmente el Oppa Tae sabia hacer desayunos ricos aun que dijera que no sabia cocinar. Luego de unos minutos de escuchar susurros indefinidos Taehyung entro a la sala con una cara algo molesta, pero tratando de ocultarlo por ella. 

Se preguntó porque ellos dos parecían pelear muy a menudo, pero realmente decidió no tomarle mucha importancia. No se metía donde no debía como le había enseñado su mami. Termino de comer y dejó el plato sobre el mesón mientras buscaba algo donde subirse, sintiendo como Kookie sacaba un taburete pequeño y se lo dejaba frente a él lava platos.

— Puedes pararte sobre el y así lavar cómodamente — Sonrió suave —, sobre Tae no te preocupes. Ya se le pasará lo molesto, es como un cachorrito, ladra pero no muerde.

— Te escuché, Jeon Jungkook — Gruño.

Soltó una risita cuando los dos mayores empezaban a pelear infantilmente, ganándose la mirada de ambos con cariño. Dejaron las peleas de lado para apurarse a desayunar y cambiarse debido a que tenían que ir hasta la casa de Hoseok para la cita con la chica de servicio social. Aún que no pareciera, todo era nuevo hasta para ellos ver la faceta paternal del mayor. En unas semanas se había adaptado a su hija y desarrollo preocupaciones por ella, era increíble.

Para las Diez de la mañana ya estaban tomando el taxi que los llevaría a casa del mayor, jugando con HaSeul a ver los carros o simplemente a jugar con sus manos a un juego de ritmo clásico. Jungkook podía sentir como los nervios de la pequeña disminuían, pero algo demasíado rápido y ella reaccionaría de inmediato a protegerse. Llegaron cerca de las once y cuarto a la casa, con la pequeña emocionada.

— HaSeul no corras — Pidió Taehyung —, te caerás.

La niña asintió obediente y camino hasta la habitación de su padre, siendo seguida por ambos chicos. Sonrieron con pesar cuando ella abrió la puerta con tanta ilusión pero la perdió cuando sus ojitos no podían detectar a Hoseok allí, podían sentir la tristeza que ahora estaba presente en el ambiente.

— Las flores — Murmuró siendo escuchada por ambos.

— ¿Que sucede con las flores pequeña?

— Se ponen tristes y se marchitan, porqué ya no tienen quién las cuide — Susurró bajito, acercándose hasta el ventanal —, espero que papá no tarde más.. me sentiría como las flores.

El silencio fue líder en la situación y la opresión en el pecho de los mayores era cada vez mayor. La menor era tan pequeña como para terminar pensando en aquellas cosas, ¿Quién le habría hecho tanto daño a ese dulce rayo de luz? Luego de unos minutos salieron de la habitación cuando la menor lo hizo, guiando a su habitación que estaba llena de flores dibujadas y con juguetes pulcramente ordenados.

— Que linda habitación Seul, ¿La decoraste tu sola? — Le sonrió Jungkook.

— Si, papá me ayudó pero dejo que yo hiciera todo — Se silencio un segundo —, ¿El volverá hoy como dijo?

Taehyung asintió — En la noche, ya lo podrás ver así que no te desa.. — Fue interrumpido por el sonido de su teléfono.

Sonrió cuando vio el número en pantalla y descolgó con suavidad mientras le pasaba el teléfono a una confundida HaSeul.

— ¿Hola? — Silencio — ¿Quién es? — Miro a Tae cuando no escucho nada.

— Cariño, es papá — Casi vuela si pudiera al oír la voz de su padre.

— ¡Papi! — El grito emocionado no se hizo esperar — Te extraño mucho.

Jungkook sonrió suave a la par de Taehyung y salieron de la habitación para darle privacidad a la pequeña.

— Yo también te extraño mucho, Seul. ¿Cómo has estado?

— Uh, es divertido estar con Kookie y Tae oppa.. llevaron un amigo a casa ayer.. Jimin-ah — Hablo suave —, dijo que quería jugar conmigo y vimos televisión.

—Wow, entonces debió ser divertido. ¿Te sentiste bien estos dos días?

— No — Se sinceró —, Y-Yo te extraño mucho papi. Soñé que no estabas y mami estaba ahí, n-no podía verte — Sollozo.

Hoseok al otro lado de la línea casi siente su cuerpo temblar se impotencia, su pequeña hija sufriendo por su ausencia le partía el corazón.

— No llores pequeña.. respira, papá volverá por ti hoy ¿Si? Veremos películas en el sofá y comeremos pollo frito con Sprite  — Sonrió por el deja vu que sintió al recordar a su hermana hacer lo mismo con el.

— Si papi — Limpio sus ojitos —, voy a esperar con Kookie y Tae.

— Eso es, cariño.

Seul asintió suave y se movió hasta subir a la cama — Papi, ¿Ya acabaste el trabajo?

— No cielo, pero lo terminaré pronto. ¿Si?  — Suspiro bajito —, puede que tenga que viajar seguido estos días, pero trataré de quedarme contigo lo más que pueda. Solo es por este trabajo.

Seul sonrió con tristeza, seguramente su papi se estaba esforzando mucho y ella no debía reclamar — Yo entiendo aún que estoy chiquita, papá tiene que trabajar pero eso no significa que no vamos a estar juntos cuando vuelva.

— Así es cariño, muy bien. Tengo que despedirme ahora, pero te veré en la noche así que eso me consuela.

— ¿Consue..la?

— Ah, quiere decir que me tranquiliza Seul. Ya quiero verte — Río suave.

HaSeul eufórica hizo un ruidito conforme — Yo también, me consuela.

— Que bueno pequeña. Ahora sí, cuídate mucho, nos vemos en la noche, te quiero.

— Te quiero — Suspiro cuando el celular parecía haber finalizado la llamada.

La pequeña salió de la habitación y corrió hasta la sala para devolver el teléfono, justo a tiempo cuando el timbre sonó. Era la hora de la visita. Se acomodó su overol azul con una florecita de colores y su buzo rosa suave. Taehyung abrió la puerta con una sonrisa dejando que la chica pasará.

— Buenas tardes, mi nombre es Sohye y seré la encargada de la visita de hoy — Hizo una reverencia pequeña.

— Un gusto. Nosotros somos amigos del padre de HaSeul, el salió de imprevisto por un viaje de trabajo — Aclaro Jungkook.

— Oh claro, fui informada del cambio. Jeon Jungkook y Kim Taehyung, ¿Verdad?

Ambos asintieron.

— Tu debes ser la pequeña HaSeul — La chica se agachó a su altura ofreciendo su mano —, soy Sohye estaré contigo un rato esta tarde.

HaSeul asintió tomando su mano con desconfianza, con la otra mano sostenía la cadena del pantalón de Jungkook para sentirse un poquito más segura.

— ¿Te importaría mostrarme tu habitación?

Negó — Es.. por ahí.. — Señalo con un dedo su puerta, susurrando.

Sohye se levantó y camino en esa dirección seguida de Taehyung y Jungkook, que a su vez eran seguidos por la pequeña. La chica entro a la habitación dando un vistazo detallado, sonriendo dulce cuando notó que está cumplía con todos los requisitos. La cama era del tamaño perfecto para la edad que tenía la menor así que no le complicaría subir y bajar, los cajones de ropa también tenían una altura adecuada y los juguetes eran mayormente peluches asi que no corría riesgo alguno. Escribió un par de cosas y miro a HaSeul de nuevo.

— ¿Y como te sientes con tu habitación?

— Ah.. — Se quedó pensando unos segundos — es linda, me recuerda a cuando papa me lleva al parque porque allá es tranquilo y no hay mucho ruido — Hablo bajito, tenía mucha pena.

— Ya veo. ¿Y te sabes bañar solita?

Negó con suavidad, sus mejillas tiñéndose de un carmín suave. Tenía vergüenza — S-Solo.. algunas cosas, papi suele bañar mi cabello — explicó.

La chica sonrió, la niña era muy dulce — Ya veo, ¿Y cuál es tu baño?

Señaló la puerta que estaba dentro de la habitación, tenía una pegatina de conejito. Los cuatro entraron al baño que era decente, estaba claramente adaptado a las necesidades de la menor, tenía todo un poco más abajo y a su alcance. El lavamanos estaba a la altura de la menor, y la ducha tenía un tapete anti-deslizante para evitar accidentes. Todo estaba limpio, así que salió y se dirigió entonces a la otra habitación que queda en frente.

— Esa es la habitación de Hoseok Hyung — Hablo Taehyung.

— Ya veo, ¿Puedo entrar pequeña?

La menor asintió, después de todo solo iba a mirar. Pasaron así casi toda la tarde, ella revisaba la casa con detalle y anotaba todo mientras que Seul se aburría de estar tanto tiempo de pie para nada.

— Pues todo está en orden, la casa cumple con varios de los requisitos que se le exigieron al señor Jung — Sonrió aliviando a los mayores —, ahora pequeña, ¿Te apetece hablar un rato?

Asintió sin más, viendo cómo Kookie iba a hacer lo que suponía era cafe por el olor. Se sentó en el sofá con distancia de la mujer. El café para Sohye y la leche de de chocolate para ella, el silencio duró unos minutos largos, Taehyung y Jungkook se habían adentrado a la habitación de Hoseok para darles privacidad.

— Entonces, ¿Cuándo cumples años pequeña?

— Ah.. creo que — Se detuvo a hacer cuentas —, el.. ¿Ocho de diciembre?

— Vaya, eres un regalito de navidad — Sonrió.

Asintió con suavidad, tomando un poco más de leche.

— ¿Como es tu papi contigo pequeña?

Se quedó en silencio unos segundos y dejó la leche sobre la mesa, jugando con sus manos.

— ¿Peque-

— Papi me trata muy bien — La interrumpió, susurrando bajito —, cuando llegué aquí me baño y me hizo una comida rica. Me dejó dormir con unas cobijas suaves y no hacía frío, aquí — Tocó su pecho con inocencia. — Me gusta cuando me lleva al parque, aún que dice que las señoras son molestas y que no entienden porqué no estoy con mamá.. — murmuró.

Sohye noto el cambio leve de actitud — ¿Puedo preguntar por qué?

— Ah.. mamá.. no.. no me podía tener con ella y no me cuidaba bien. Papi dice que el me va a cuidar de ahora en adelante para que no me pase nada. ¿Sabe algo? Papi siempre me deja dormir con el cuando tengo pesadillas y me cocina cosas ricas, también siempre hace que no pare de sonreír — Suspiro —, con mami no sonreía así. Mami era muy distinta a papi, con ella sentía frío, me ponía triste y con papi me siento feliz, me gusta cuando me abraza y me dice que todo estará bien. No ha sido mucho tiempo, pero papi ha cumplido siempre lo que dice.

Sohye soltó un suspiro con tristeza, la niña era tan inocente y probablemente poco consciente de lo que sucedió con su madre, pero cuando hablaba del señor Jung.. esos ojos brillantes jamás podrían ser fingidos, esa sonrisa y la emoción en su voz, eran la evidencia de cuánto bien hacia el en su hija.

— ¿Y tu papi tiene alguna pareja?

HaSeul negó — En el parque una vez.. dijeron que no tenia mamá y por eso no podia hablar de cosas de niñas con papá —Se pregunto si podía hablar, pero recordó que Tae había dicho que ella no era mala y podía contarle la verdad —, le dije a papi cuando vinimos a casa. El me pregunto si quería una mami — Jugueteo con sus dedos —, yo sé que papi y mamá no están juntos, pero no quiero una mami.. el también dijo que no quería una pareja o una mami para mí, que estábamos bien los dos juntos.

— Así es, tu padre y tú están muy bien. Me alegra ver que el te hace feliz pequeña, ya verás que cuando menos lo pienses, tu padre tendrá tu custodia.

Asintió suave — Papi es bueno, me gusta quedarme con el.

Sohye le sonrió nuevamente y se levantó — Fue agradable hablar pequeña pero debo ir a hablar con tus cuidadores. ¿Esta bien?

— Si.. vere televisión — Se acomodó y encendió el televisor.

La visita resultó mas cómoda de lo que ella esperaba, mientras que para los mayores se venían preguntas más directas sobre Hoseok y claramente, sobre la madre de HaSeul de la cual tampoco sabían mucho. Mientras tanto, Hoseok ya estaba preparándose para volver a casa y descansar unos días. Tenía varía información que le adelantaría a Lee. Por ahora la prioridad máxima era regresar con su pequeña que le tenia inquieto desde que la escucho llorar al teléfono.