Capítulo 10
Nadie dijo que soportar el dolor era signo de salud mental.
Taehyung estaba realmente preocupado por la menor pues de todo el tiempo que llevaba con ellos decir que había hablado diez veces seria exagerar. Se le hacia raro debido que Hoseok la describió como una chica alegre que hablaba siempre que podía pero con ellos se mantenía tan silenciosa que temía le pasara algo y no dijera nada. Se acerco con cuidado y coloco una mano en su hombro, suspirando al ver como esta soltó un pequeño grito del susto y se alejo.
— Tranquila pequeña, ¿Porque te asustas de esa manera? Solo soy yo — Se preocupo.
— P-Perdón, solo me sorprendí — Pareció tomar aire y suprimir una atisbo de nervios —, ¿Qué sucede oppa?
— Es hora de dormir, ¿Quieres dormir con nosotros o en el estudio? — Tuvo cuidado al formular la pregunta, algo pasaba con la menor que no era normal y prefería prevenir malos entendidos —. En todo caso, Jungkookie adapto el estudio para que puedas dormir en el.
Lo pensó un poco y negó rápidamente — Esta bien, puedo dormir sola y gracias, Tae oppa — Sonrió débilmente y sin esperar mas ordenes tomo su maleta y camino hasta el estudio cerrando la puerta tras ella.
— ¿Lo notaste también? — Jungkook toco su hombro con preocupación — Ella se mantiene con miedo aun.
Asintió débilmente — Me gustaría saber que sucede, pero no quiero presionarla. ¿Por que no llamas a tu amigo, bogum? — Dudo unos momentos —, dijiste que había estudiado psicología anteriormente y tenia un pequeño hermanito.
— Puede ser, le llamare mañana para ver si nos puede ayudar — Dejo un pequeño beso en su mejilla y tomo su mano —. ¿Vamos a dormir? Estoy agotado.
— Claro cariño — Sonrió suave y lo levanto estilo matrimonial —, descansemos porque mañana es un nuevo día.
Con inquietud ambos fueron a dormir, mas que todo el mayor de ambos, deseando poder saber que sucede con la hija de su amigo. Jungkook también estaba inquieto sobre la situación pero prefirió dormir un poco y mañana asegurarse de poder ayudar de una manera cómoda.
Mientras tanto, Haseul se sentía asfixiar lentamente mientras lloraba en un silencio agotador que parecía no tener final al igual que las largas lagrimas recorriendo su suave piel. Sus manos pequeñas se aferraban con fuerza a sus brazos dejando un tono carmín en la zona y pequeños hilos de sangre debido a sus uñas, respiraba de una manera irregular mientras se sofocaba con su propia saliva. Una conocida posición de ovillo daba lugar entre las mantas, removiéndose tratando de recuperar un estado estable aun que para su corta edad y poca exteriorización del tema, ni siquiera sabia que lo que estaba teniendo era un fuerte ataque de pánico. El recuerdo de un olor nauseabundo se hacia mas presente llegando al punto que se vio a si misma en aquella casa de nuevo, con su madre y los hombres de siempre, su estomago empezando a revolverse generando unas fuertes ganas de vomitar aumentando considerablemente la sensación de ahogo que mantenía por no poder respirar bien.
Olía a humo y sudor, la humedad de siempre, tan asfixiante.
Sintió las manos de su madre en su cuello, sabia que no era real pero realmente se sentía asfixiada como aquella vez que su madre la estampo contra la pared por salir sin permiso en mitad de la noche a hurgar en su habitación. Al igual que el movimiento de sus manos directamente a zafar la sensación fantasma de opresión en su cuello, se sintió un poco mas liberada y finalmente de unos largos minutos pudo respirar con normalidad, notando el desastre de la sabana mojada con sus lagrimas y un poco de la saliva que seguramente libero al mantener su boca abierta. Mas calmada pero sin los recuerdos lejos lloro aun mas, se sentía tan solitario y frio allí. No quería molestar a kookie oppa y TaeTae oppa en la noche, así que simplemente se limito a tomar las mantas y enrollarse en ellas; sabia que su papi confiaba en ellos, pero por alguna razón se sentía abandonada y desprotegida. Mientras Hoseok no estuviera con ella, estaría insegura en cualquier lugar aparte de sentir un fuerte miedo a los mayores aun que fuera extraño, ella no sintió ese miedo con el, pues solo con una sonrisa logro confiar su padre. Finalmente luego de los pesados minutos su cuerpo cedió al cansancio y se dejo caer en un sueño profundo.
En la mañana Taehyung cuido mucho el no hacer ruidos al entrar al estudio, suspirando al ver las mejillas irritadas de la pequeña cuando se agacho para despertarla, se notaba que habia llorado la anoche anterior y creería que fue por la ausencia de su hyung. Acerco su mano con cuidado y dejo suaves caricias en su cabello, sonriendo lastimero al sentirse incapaz de comprender lo que tenia la menor porque no sabia mas de que lo que decía Hoseok, pero aquello no coincidía con la Haseul que tenia ahora mismo. La menor se revolvió un poco hasta que finalmente abrió los ojos, se asusto un poco por el contacto al ver a Taehyung, pero sonrió igualmente cuando el sonrió para ella.
— Buenos días, ¿Dormiste bien? — Se separo un poco dándole espacio.
— Buenos días TaeTae oppa — Se sintió extrañamente adormilada, pero se levanto con suavidad.
Soltó una pequeña risa al notar que la menor compartía la misma expresión de pollito desorientado de Hoseok al estar recién despiertos — Te pareces mucho a tu padre — Halago.
— Ah — Se sonrojo suave — Kookie y Yesung oppa dicen lo mismo.
— Tengo algunas fotos que podría mostrarte de Hobi hyung, mientras esperamos que llegue el delivery con el desayuno ¿Si?.
Asintió — P-Pero oppa no sabe cocinar? — Rogaba internamente no haber dicho nada malo.
— Bueno, una vez queme agua. Eso es mucho decir — Río suave y salió del estudio.
Quizás podía sentirse un poquito mas relajada sobre Taehyung. Solo un poquito porque realmente le hacia falta su papi. Espero pacientemente mientras el mayor revisaba una estantería hasta encontrar un viejo álbum de fotos que hoseok le había regalado en uno de sus cumpleaños con recuerdos de ellos en la universidad, con algunos de sus antiguos compañeros. Sonrió con pesadez, algunos recuerdos malos llegaban usualmente a su cabeza porque precisamente no fue la parte mas feliz de la vida de su hyung.
— Bien — Se sentó al lado de la menor —, las primeras paginas es fácil de diferenciar, era mas bajo que yo y su cabello era negro, este de aquí — Puso su dedo índice sobre la pagina.
Una foto de un reluciente Hoseok en el carrusel junto con el reposaba como un recuerdo silencioso.
— Se ve lindo, mamá tenia una foto en casa así, pero papi estaba serio — Hizo un pequeño puchero.
Asintió — Hobi hyung sonreía mucho antes de estar con tu madre, dejo de hacerlo un tiempo hasta que llegaste tu. Le diste vida de nuevo, es afortunado de tenerte.
Haseul sonrió suavemente, preguntándose hasta que punto realmente era cierto que el era el afortunado por tenerla, ¿No seria al revés? Realmente sentía que era de esa manera, no podía estar mas agradecida de terminar en sus manos porque tendría miedo de cualquier otra persona. Siguió atenta a los recuerdos congelados en fotos que Taehyung le mostraba, quedando con curiosidad de uno de ellos.
— TaeTae oppa — Poso su dedo en una de las fotos —. ¿Quién es ella?
El mayor se sorprendió notoriamente, no recordaba la foto que habia tomado de los tres en uno de los concursos de danza de Dawon. Se veía reluciente allí, hoseok siempre la miraba con orgullo desbordando su ser, era difícil recordar que ya no estaba mas, como perfectamente eso habia destrozado emocionalmente a su hyung. Era casi una cascara sin vida y su rostro serio que antes irradiaba felicidad desapareció totalmente. No se percato que habia tomado una expresión lastimera.
— Oppa — Seul le llamo la atención —, ¿Estas bien?
— Si, perdón recordé algo — Suspiro —, ella era tu tía.
Seul abrió los ojos grandes — ¿Y donde esta?
— Ella murió en el accidente que te contamos kookie y yo.
Abrió su boca con sorpresa, queriendo preguntar cual era su nombre, pero siendo interrumpida por el timbre.
— Ah, llego el desayuno — Sonrió suave y se separo de la menor para dejar el álbum en su lugar y ir por el dinero para pagar.
Haseul se quedo desconcertada en el sofá, creía que su papi habia sido el medico, no el chico que ellos habían mencionado. ¿Cómo se habría sentido ella si se quedara sola también? La sensación le daba escalofríos, ella no podría vivir sola sin su papi. Se despejo rápidamente al oír a Taehyung llamarla para desayunar, vio que habia pedido sándwiches de queso y huevo.
— En la tarde vendrá un amigo mío para que juguemos, ¿Estas cómoda con eso?
Asintió con cierto miedo, recordó que debería pedir ayuda para bañarse pero lo mejor seria usar lo básico que le enseño su papi, no queria molestar a Tae. La mañana corrió rápidamente y cerca de las once cuando Tae salió para sacar a pasear a Yeontan aprovecho para bañarse como pudo para evitar pedirle ayuda, se coloco un vestido blanco y unos pants negros para sentirse mas cómoda, sentándose frente al televisor para esperar que el mayor volviese con el perrito. Luego de unos minutos finalmente el mayor volvió, dejando al perrito suelto para que pudiese jugar con Haseul.
— Oh ya estas vestida — Sonrió suave — Iré a cambiarme, puedes ver televisión.
Luego de unos minutos Taehyung salió justo a tiempo para recibir a bogum, quien traía de la mano a un pequeño niño. Nunca habia tenido contacto con un niño ya que solo se juntaba con las niñas del parque así que estaba bastante sorprendida de verlo, un poco asustada también al ver como el hombre se acercaba pero mantuvo su distancia con calma.
— Hola Haseul, Soy bogum y el es mi hermano Jimin — Ofreció su mano y la tomo con cuidado.
El pequeño niño de cachetes abultados y un sonrojo suave ofreció su mano con delicadeza — Hola Haseul — Sonrió.
— Ah... Hola jimin — Apretó su mano con cuidado, totalmente sonrojada.
Bogum sonrio suave y se levanto — ¿Quieren jugar un rato? Estoy seguro que se llevaran bien, mientras tanto nosotros hablaremos — Rápidamente se fue con Taehyung a una de las habitaciones.
Se sintió algo ansiosa de repente pero trato de calmarse mientras movia su pie derecho en pequeños círculos. Jimin se acerco con suavidad y agacho la cabeza para mirarle a los ojos.
— ¿Cuántos años tienes? Yo tengo 10 — Sonrio suave.
— Uhum... tengo 7.
— Ya veo — Volteo a ver el televisor —, podemos ver televisión si quieres. ¿O prefieres jugar?
Lo pensó un momento y negó — Televisión esta bien, Jimin oppa.
— Puedes decirme Jimin solamente — Acaricio el cabello de Haseul, le inspiraba ternura.
— Me gusta mucho ver el canal donde pasan animalitos, Jimin — Tuvo un pequeño sonrojo, pero hablo lo suficientemente alto para que la escuchara.
El mayor asintió y coloco el primer canal que se le vino en mente, sonriendo al ver el interés notorio de la menor. Su mano libre la ocupo en acariciar a Yeontan, quien estaba en la mitad de ambos infantes recibiendo caricias.
Gangnam-gu, 3:20pm.
Respiraba con facilidad, sonriendo bajo la mascarilla al ver la cara de InYeop.
— ¿Hope? — El hombre temblaba leve —, no sabia que estabas aquí.
— Las sorpresas me gustan bastante — Suspiro suave —, ¿No debería preguntarle lo mismo? Se supone que nosotros no deberíamos tener contacto con agentes de policía..
— ¿De que carajo hablas? Si hablas de Doona esta desaparecida.
Rio con delicadeza, mortal y un poco sádico, así lo podían definir — Bueno, me han llegado noticias de que ha tenido contacto con Doona y MuSeong. ¿No es asi?
— Eh, claro que no — Le tembló un poco la voz —, estas imaginando cosas y no te lo recomiendo. No tengo contacto con ninguno.
Asintió suave — Claro, aun que me pregunto por que, si se supone que Doona esta desaparecida. ¿No lo dijiste tu mismo antes?
— Eh, estas entendiendo mal — Nuevamente esa postura nerviosa —. Deja de especular cosas, seguramente Dohyun te mando, eres como su perro leal.
Gruño — No juegues con fuego, hablo por el señor lee, estoy seguro que no quiere problemas.
El hombre asintió suave y dio la vuelta, queriendo volver a entrar a su auto ignorando que lo peor que podía hacer era dar la espalda a alguien como Hoseok. Lo ultimo que sintió fue un golpe en su nuca con fuerza. El chofer de InYeop estaba aterrorizado pero acataba ordenes rápidamente, luego de una media hora llegaron a una zona desolada siendo abordados por una camioneta bien conocida, paka la habia diseñado.
— Hope — La voz chillona de Kitty no se hizo esperar, tocando la puerta —, vinimos lo mas rápido que pudimos, paka esta fuera y tuvimos que ingeniárnoslas buscando sus llaves.
— No hablen mas, aun esta inconsciente así que debemos movernos rápido — Asintió suave — Dile a tu hermano que no mate al chofer, lo quiero vivo.
El azabache asintió y con facilidad saco al chofer, quien temblaba de miedo — Tranquilo hombre, al menos no morirás, ¿Bien? — Su sonrisa daba escalofríos.
Hoseok subió al hombre a la parte trasera, atándolo en una de las sillas de tortura que adapto Paka con las ideas de Agust y Bunnie. El hombre poco a poco cobro conciencia jadeando al verse atado frente a Hope, mirándolo con una sonrisa de oreja a oreja dando a conocer su rostro solo para el pues la cabina no tenia conexión con la parte delantera.
— ¿Ya despertó el bello durmiente?
InYeop se estremeció con fuerza, estaba perdido. Con un jadeo levanto la mirada notando lo filoso de aquellos ojos miel; aparentemente tímidos y suaves, pero la fiera existente dentro de el no podía ser mas aterradora. No recordaba la ultima vez que lo vio exactamente, pero diría que entre el año 2015 o 2017 esa mirada de fiera era mas bien una de alguien arrepentido y asustado. Se habia convertido en un desalmado, no por completo, porque aun notaba aquel singular brillo de la nobleza en su alma, y una cara cansada.
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