CAPITULO VEINTIUNO;
SERPENTINE

Con lo sucedido la noche anterior, Bellatrix, Lucius y Narcissa habían regresado a su habitación, mientras que Draco y Lesath se habían quedado a dormir lo que restaba de la noche con Nashira. A la mañana siguiente, nadie volvió a tocar el tema pero era notorio que los mayores no habían olvidado el asunto, se notaba la irá, pero era aún más notorio en Bellatrix, quien no trataba de ocultarlo, mientras que Lucius y Narcissa se controlaban frente a los tres niños.

—Ama Black—irrumpió Dobby en la habitación—Dobby trae una carta para usted.

—Gracias Dobby—recibio la carta, reconociendo la letra de inmediato. Dobby hizo una reverencia para desaparecer.

—¿De quién es hija?—pregunto Narcissa.

—Hermione Granger, mi prima—respondio, ocasionando que Bellatrix y Lucius levantarán la mirada de inmediato. Dispuesta a leer el contenido, abrió la carta para después leer lo siguiente en silencio:

Querida prima.

Tal vez te parezca extraño que te esté escribiendo, pero estaba muy emocionada que no soporte no contarle a mis padres sobre ti. Papá casi lloraba de felicidad al saber de ti, según lo que Dumbledore le había dicho, es que tú habías muerto junto a tus padres. Se que tal vez es mucho pedir por qué apenas nos conocemos el curso pasado, pero quiero que conozcas a mis padres, papá está muy emocionado por esto y quiere conocerte. Entenderé si no quieres. Respecto a lo que me pediste que investigará, el se encontrara toda la semana en Valle de Godric y Lupin lo acompañará, según me dijo Harry, está enfermó, así que no debés preocuparte.

Atte: H.G.

PD: Envíale saludos a Pansy, Daphne y Lesath de mi parte.

—¿Y?, ¿Que dice?—pregunto Bellatrix impaciente.

—¿Puedo ir está semana al mundo muggle?.

(...)

Enviándole su respuesta a Hermione, salió de su habitación dirigiendose a la biblioteca o eso pensaba hacer antes de que Narcissa gritará desde la entrada. Bajando las escaleras rápidamente se encontró a Narcissa con una mano sobre su pecho respirando rápidamente mientras Lucius trataba de calmarla, mientras que Lesath y Draco se escondían detrás de Bellatrix quien brincaba emocionada, como si de una niña chiquita se tratase.

—¿Que es lo que pasa?—pregunto Nashira confundida.

—Hay...una cosa espantosa, en esa caja—señalo una caja blanca con un moño negro, la cual estaba abierta dejando a la vista lo que está contenía.

—No es verdad, es la cosa más hermosa que eh visto en mi vida—respondio Bellatrix sonriente—Recuerdo cuando tú madre tenía una, la llevaba a todos lados, es tan hermosa.

Nashira se acercó y pudo distinguir lo que contenía que tenía tan horrorizada a Narcissa y tan emocionada a Bellatrix. Era una serpiente, media no más de 20 centímetros, color negro.

—Es para ti, hija—hablo Lucius—No dice de quién, en la nota solo venían las iniciales T.M.

Maldito idiota—penso—Dijo que me visitaria, pero no pensé que de esta manera.

—Estan bonita—dijo Bellatrix sacándola de sus pensamientos—¿Puedo quedarmela?, Linda jamás dejo que me quedara con la suya.

—Mhm, que te parece si la compartimos, yo me la quedo todo lo que resta del día, y tú te la quedas hasta que me valla—respondio con una pequeña sonrisa.

—¡Hecho!—expreso Bellatrix.

—Bien, la llevaré a mi habitación antes de que mamá Cissy se desmayé—explico Nashira, para luego agarrar la serpiente con su mano, para observar como está se enredaba en sus hombros.

Cuando entro a la habitación dejo a la serpiente en su cama para luego bloquear la puerta, cuando volteo Nashira parpadeó un par de veces para ver al hombre que tenía enfrente, tenía la mandíbula recta, ojos negros con algunos detalles rojos en ellos y cabello negro.

—¿En un reptil?, ¿Es enserio?—pregunto incrédula.

—Por si no lo recuerdas, planeo pasar desapercibido en Hogwarts, así que si, además planeo abrir la camara de los secretos, obvio yo no lo haré, planeo encontrar una víctima demasiado ingenua para ello, estaré allí en cada paso del camino... ¡Oh, la expresión del rostro del viejo come dulces no tendrá precio!.

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