CAPITULO TREINTA Y SIETE;
NO SOY SOLO UNA CARA BONITA

Nashira caminaba de un lado a otro impaciente. Llevaba al rededor de casi una hora esperando a Regulus en la casa de los gritos.

—Juro por Merlin y Morgana que si no llega en cinco minutos lo mataré mientras duerma—murmuro mientras observaba por la ventana como el cielo se oscurecia.

—¿Serías capaz de matarme?—pregunto una voz detrás de ella sobresaltandola.

—No me conoces pa... Regulus—respondio mirando aún el cielo nocturno.

—Soy tu padre Nashira, merezco ser tratado como tal—la pelinegra aparto la mirada del bosque para dirigirla hacia el mayor, quien la observaba seriamente.

—Un padre no se esconde, menos si sabe las atrocidades que su hija a sufrido, un padre no deja a su hija a la deriva esperando que cobre venganza por su madre.

—Nashira...

—Sabes, existe una palabra para esta situación se podría decir—dijo la Black ignorando a Regulus—Padre ausente. Si porque eso eres tú, un padre que estuvo ausente por casi diez año. Miranos Regulus, apenas y sientes empatía o tienes conección conmigo. ¡Ni siquiera tus amigos o familia saben que estás vivo!

—¡Nashira Black, te prohibido que me hables en ese tono! ¡Soy tu padre...

—¡Un padre! ¡Claro, eres mi puto padre!—rio con sarcasmo—¡¿Crees que soy estúpida?! ¡¿Crees que no se que sales con alguien más?! O dime ¿Piensas tú, qué crees que no se que tengo otra hermana?

—Se suponía que no debías saberlo, no aún.

—Bueno, dime tú, si mi madre era hija de muggles, porque razón crees que no estaría relacionada con ambos mundos.

—Nashira, escúchame. Con la muerte de Linda, no fue fácil para mí ¿De acuerdo? Yo la amaba...

—Claro, debiste haber sufrido mucho.—sonrió ironica y lo miró furiosa—"¡En nuevas noticias, Antoine Lodge y su nueva conquista!"—lo observó molesta—¡Que nombre tan más ridículo! Y te apuesto lo que sea a qué lo más difícil no fue dejarme ¡Si no más bien lo difícil fue dejar el último recuerdo que tenias de mi madre! Porque aunque no lo aceptes, sabes que te recuerdo a Sirius.

—¡No me levantes la voz, Nashira!—grito molesto.— ¡No conoces la verdad de la historia y estoy harto de esto! —la tomo del brazo acercándola a el— ¡Eres mi hija y yo tu padre y empezarás a respetarme como tal... ¡Maldita sea!—solto bruscamente el brazo de Nashira quien lo observó furiosa.

—No lo olvides Regulus, también se artes oscuras, no solo soy una cara bonita—dijo mirando la marca rojiza que ahora se encontraba en todo el brazo izquierdo del Black—No vuelvas a dirigirme la palabra, a menos que sea importante.

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