-Majestad Jihyo, hay un emisario de un reino extranjero que desea verla.

Jihyo frunció el ceño y miró al guarda que aún estaba de pie frente a ella, respirando agitado mientras su pecho subía y bajaba. Jihyo le hizo señas para que se acercará y el hombre rápidamente fue hasta ella, arrodillándose en una sola rodilla.

-Disculpe por interrumpir así majestad, pero esto es importante -el hombre habló entrecortadamente, regulando su respiración.

-Adelante, habla, por favor.

El guarda asintió, y volviendo a estar de pie miró a Jihyo a los ojos.

-Afuera hay una mujer... No sé de qué reino viene ya que jamás he escuchado de este lugar... Pero creo que es pertinente que hable con ella reina mía, está esperando en la sala de su trono -este dijo, Jihyo frunció el ceño levemente- Dice tener noticias de las lady's.

Al decir esto, Jihyo rápidamente ordenó que la mujer en cuestión entrará. Velozmente la reina Park caminó hasta el encuentro de la desconocida. Los pasillos del castillo nunca antes habían parecido tan largos como ahora, los ayudantes y empleados que estaban por allí veían con ojos nerviosos el pasar de la reina, nunca antes la habían visto tan exaltada y corriendo por el castillo.
Fue solo cuestión de minutos para que una exasperada Jihyo llegará hasta el salón del trono.

Grande fue su sorpresa al ver allí a una mujer de cabello negro, piel pálida y ojos de un color bastante claro, casi como la miel.

Jihyo se acercó lentamente hasta la mujer, detallando cada parte de ella. La mujer portaba una camisa blanca larga de botones sin estampado, una falda negra que llegaba hasta unos pocos centímetros más abajo de sus rodillas y lo que parecía ser una especie de bandana roja carmesí con una especie de letras negras.

Jihyo quedó cerca de ella, pero un poco alejada, no sabía las intenciones de esa chica, por lo cual decidió mantener una distancia respetable.

-¿Hablas inglés, japones, coreano? -Jihyo preguntó viéndola fijamente, mencionando los idiomas que dominaba- ¿Algún otro idioma?

La extraña rió suavemente. -Este lugar sigue siendo tan hermoso como lo recuerdo... -esta dijo- Hablo perfectamente cualquiera de esos tres, pero teniendo en cuenta que estamos en tu reino me comunicaré con tu idioma -esta respondió en un perfecto coreano, dejando a Jihyo más que sorprendida, la extraña hizo una reverencia y sonrió- Mi nombre es Seo T/n, reina Park, y vengo de Hwaa.

-¿Hwaa? -Jihyo preguntó, estando más sorprendida que antes- ¿Pero cómo?

T/n sonrió.

-Fui enviada por mi madre, la emperatriz Seo, como una misión diplomática de buena fé, no fui enviada ni tampoco vengo con intenciones bélicas a su palacio majestad, como le dije, vengo en son de paz -esta dijo, dejando a la contraria en silencio- Hemos acogido con el mejor de los tratos a Lady Son Chaeyoung y Lady Zhou Tzuyu, ellas están bien, están en buenas condiciones, también hemos recuperado el navío que perdió en aquel incidente... Ahora mismo ha de estar en el astillero en reparaciones.

Jihyo, procesando todo cerró sus ojos, luego, los abrió y los enfocó en la azabache.

-¿Chaeyoung y Tzuyu están bien? -T/n asintió a la pregunta- ¿Y en dónde están?

-Están en la ciudad capital, recuperándosen de las heridas causadas por el náufragio y el tiempo que estuvieron en cima -esta respondió, Jihyo suspiró con tranquilidad- Seré directa con mis intenciones, Reina Park, creo que merece saberlo.

-¿Tus intenciones?

-Si, majestad -esta dijo- En Hwaa somos conscientes del estatus que nos han dado en los demás continentes por nuestra política aislacionista, hemos interceptado cientos de correos encriptados provenientes de Sendai, Hokkaido y Europa. ¿Desea saber más?

Jihyo rápidamente asintió. -Vamos a mi oficina.

-Aquí podremos hablar con tranquilidad -musitó Jihyo, ambas estaban sentadas en su pequeño jardín, alejadas de cualquier intruso que quisiera saber lo que estaba a punto de escuchar, que a decir verdad parecía bastante confidencial- Primero que nada... ¿Cómo sabes tan bien nuestro idioma?

-Los colonos y conquistadores que usurparon en nuestro continente hace dos mil años eran vasallos del primer rey de Báltica, si mal no recuerdo, era una mujer llamada... ¿Seo Minjeong? -Jihyo asintió, el primer rey de Báltica fue una mujer ajena a los nueve clanes, el antecesor común de todos y madre de los nueve fundadores del reino de Seúl- Bien. Está historia suele ser omitida en todo el mundo por razones desconocidas -T/n dino- Esa mujer, la primera reina de este reino era mi abuela.

-¿Tu abuela? -Jihyo preguntó atónita, T/n asintió- Espera... Si ella era tu abuela entonces tú...

T/n nuevamente asintió con los ojos cerrados. -Tengo cerca de 2100 años, reina Park -T/n confesó, dejando a Jihyo aún más confundida que antes- En Hwaa tenemos ciertas... Capacidades... Que nos permiten hacer metamorfosis en nuestro cuerpo, no te diré más para no confundirte, pero está capacidad nos da ciertos privilegios, entre ellos está la inmortalidad.

Luego, T/n hizo una breve pausa.

-Mi abuela escapó de Báltica cuando algunos reyes de antiguos reinos quisieron obtener sus poderes, ella escapó y llegó hasta Hwaa, allí fundó un nuevo reino, que con el tiempo de expandió hasta ser lo que es hoy en día -esta dijo- Décadas después, está gente regresó, atacó y asesinó a cientos de nuestros ciudadanos, desencadenando lo que hoy conoces como la Gran Guerra Mágica -Jihyo se sumergió en su asiento, sintiéndose totalmente abrumada- Yendo a lo importante, las desapariciones de navios cerca de nuestro imperio no han sido simples casualidades, Jihyo, está gente está buscando lo que hace siglos no pudieron obtener, nuestro poder.

-¿Entonces tu gente los... Asesina?

T/n negó.

-Hay muchos factores por los cuáles no han logrado sus objetivos, pero no, no los asesinamos -esta respondió- Con respecto a los correos encriptados... Hay gente que desea usurpar tu trono Jihyo, todo el mundo sabe que Báltica y su política de neutralidad ante cualquier conflicto lo hace un enemigo poderoso, y si lo que ellos quieren se da... Muy pronto la guerra vendrá a estas tierras.

-¿Por qué me dices todo esto? ¿No corres peligro?

-Tengo mis medios para defenderme y no correr peligro, estaré bien -T/n dijo- Y te digo todo esto ya que alguien que ahora es bastante especial para mí tiene a familiares y amigos aquí que corren peligro. Es mi manera de protegerla a ella.

Jihyo asintió, sintiéndose conmovida ante las palabras de la azabache.

-Estoy cien porciento segura de que Chaeyoung agradecerá tu gesto, de verdad -al decir esto, Jihyo notó como la expresión sería de la azabache lentamente se tornaba roja, y algo nerviosa- Así que... ¿Qué sigue a continuación?

-Prepararse -esta dijo- En unos pocos días mis madres vendrán a Báltica como una misión diplomática y de relaciones exteriores, también como un plan para abrir nuestras fronteras y relacionarnos nuevamente con el mundo exterior. Mi visita solo fue la de una emisario que ruega para que su majestad reciba a mis emperatrices con los brazos abiertos.

-Las estaré esperando.

Horas después...

-Lady Son, Lady Zhou, ahora, en unos pocos segundos se hará una representación teatral que narrá, de una manera más folclórica, la creación de nuestro imperio -Soojin susurró, llamando la atención de la baja y la morena- Es una canción bastante pegadiza, por favor, disfruten el show.

Estás asintieron, luego las luces se apagaron, dejando un único reflector en medio de la habitación. Pronto un pequeño grupo de personas -que usaban distintos vestuarios- se pusieron bajo la luz, más allá al fondo de la habitación en donde estaban los músicos llegó uno más, con una especie de guitarra. El hombre en el centro aclaró su garganta.

-Hace más de dos milenios, en las grandes épocas de la oscuridad, nuestro gran Imperio resurgió de las cenizas hasta convertirse en lo que es hoy en día gracias a una sola persona -este dijo, una especie de humo salió del suelo- La primogénita de la reina Seo Minjeong y Seo Arak, Seo Yeeun, había nacido con un don especial que recorría sus venas. Yeeun, la que había sido apodada como el Tifón Carmesí, fue la primera humana de Hwaa que hizo contacto con los invasores del viejo mundo.

La música de aquel bardo había comenzado, una melodía bastante pegajosa llenó el ambiente, Chaeyoung y Tzuyu rápidamente entraron en ambiente, dispuestas a disfrutar de la historia. En la pared, gracias a las luces, un juego de sombras inició una especie de película antigua.

"Hubo una vez una embarcación que se arrojó al Gran Océano. El nombre de la embarcación era el poderoso Sendai. Los vientos soplaron, su barco se hundió. Oh soplen, mis chicos matones, soplen." el bardo comenzó a cantar, varias figuras tras de él comenzaron a relatar la historia "Pronto puede venir el rey Arak, para traernos esperanzas, fé y ron. Y un día, cuando termine la corte de los dragones, nos despediremos y nos iremos."

Tras este, la figura de un barco había llegado a lo que parecía ser una playa. Chaeyoung un poco maravillada comenzó a aplaudir al ritmo de la música.

"Habían estado a una semana en la playa, cuando sobre ellos caía una criatura escarlata.
El capitán llamó a todos y juró; "Que el dominaría a tan colosal bestia" luego, la sombra de un enorme dragón cayó al suelo, acabando con todo a su paso. "Y antes de que el filo golpeara el pecho la bestia acabó con todo. Pronto puede venir el rey Arak, para traernos esperanzas, fé y ron. Y un día, cuando termine la corte de los dragones, nos despediremos y nos iremos."

La música había comenzado a acelerar su ritmo, y ya todo el mundo, incluyendo a las cuatro reinas junto a las dos emperatrices golpeaban la mesa o aplaudían al ritmo de esta, sin contar que sus melodiosas voces acompañaban al bardo. Todas cantando el estribillo; Da-da-da-da-da-da-da-da... ♪♪

"Ella no había estado tan cerca a la muerte, más cuando el capitan estuvo a punto de capturarla.
Cuando caía sobre este una criatura escarlata.
El capitán llamó a todos y juró: "Que el dominaría a tan colosal bestia" los canticos continuaron, todo el mundo cantaba la historia de su nacimiento "Pronto puede venir el rey Arak, para traernos esperanzas, fé y ron. Y un día, cuando termine la corte de los dragones, nos despediremos y nos iremos."

Soojin tenía razón; La canción era bastante pegadiza. Más allá de las mesas centrales un grupo de personas habían comenzado a danzar, eufóricos y alegres movían sus cuerpos.

"Todas las manos a un lado, arponearon y lucharon contra ella. Décadas de guerras sangrientas, que manchaban nuestras aguas de carmesí, terminaban. Más esta ya se había ido cuando la sangre se zambulló al campo." el bardo cantó, golpeando la parte trasera de su guitarra con sus palmas "Pronto puede venir el rey Arak, para traernos esperanzas, fé y ron. Y un día, cuando termine la corte de los dragones, nos despediremos y nos iremos."

Da-da-da-da-da-da-da-da... ♪♪

Ahora T/n, junto a su madre Shuhua, comenzaron a bailar en el centro, rodeando al bardo quién felizmente, por la alegría de su emperatriz, cantó con más fuerza; "Nuestra salvadora rompió al mundo en dos. Con su gran rugido nos salvó. Décadas de guerras sangrientas, que manchaban nuestras aguas de carmesí habían terminado." luego, vino el coro una vez más "Pronto puede venir el rey Arak, para traernos magia, y fé y ron. Y un día, cuando termine la corte de los dragones, nos despediremos y nos iremos."

Chaeyoung reía al compás de sus aplausos, sonriendo enormemente al ver cómo la azabache se divertía junto a su madre. "Ella no había estado tan cerca a la muerte, más cuando el capitan estuvo a punto de capturarla.
Cuando caía sobre ella una criatura escarlata.
El capitán llamó a todos y juró: "Que el dominaría a tan colosal bestia" sin más, ahora todas las personas presentes se pusieron de pie, yendo rápidamente hasta el centro de la habitación para acompañar a la princesa y a la emperatriz menor "Pronto puede venir el rey Arak, para traernos magia, y fé y ron. Y un día, cuando termine la corte de los dragones, nos despediremos y nos iremos."

La danza representativa de la Gran Guerra Mágica, que había arrasado al continente siglos atrás estaba llegando a su fin, y con este, la canción, que poco a poco y repitiendo los versos anteriores animaba a la gente a bailar con más fuerza el coro: "Pronto puede venir el rey Arak, para traernos magia, y fé y ron. Y un día, cuando termine la corte de los dragones, nos despediremos y nos iremos."

Finalmente, en medio de una gran llamarada, las sombras habían desaparecido repentinamente, dando paso a una más grande donde un hermoso dragón se posicionaba en el centro, para terminar, con la melodía desvaneciéndose en el silencio, el bardo dejó de cantar, finalizando con una frase bastante poderosa.

"Junto a la Devastación Escarlata viviremos."

La letra de la canción que narrá la historia de la Devastación Escarlata está descaradamente basada en la canción que dejé arriba, si quieres entrar en armonía leé este capítulo repitiendo constantemente la canción "Wellerman".

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