Un triste San se aferraba al cuerpo del omega, los brazos estaban alrededor de este último.

—Hyung, ahora ya no quiero que se vaya. —el tritón sorbió su nariz algo rojita debido al llanto y escondió el rostro en el cuello del mayor. —L-lleveme con usted. —

—Ya hablamos sobre esto, no podemos hacer eso, Sannie. —El omega empezó a acariciar la cabeza de su menor, sus dedos se enredaban en los suaves mechones dorados.

—Lo voy a extrañar mucho, mi lobito gruñon... —salió de su escondite e hizo un mohín. —Saludé por mí a Seonghwa hyung y a Yeosang hyung. —

—Solo serán dos meses, yo también te extrañare mucho mi sirenito precioso... —Wooyoung sonrió, aunque sus ojos picaban y quería echarse a llorar, pero no se lo permitió, tenía que ser fuerte frente a San, así que solo se limitó a dejar un pequeño beso en aquellos suaves y delgados labios.

En ese momento estaban en el puerto uno de Wave, el barco ya los estaba esperando, pero antes tenían que despedirse de sus seres queridos.

—Amor, llámame cuando estén en Thanxx. —Yongguk envolvió en sus brazos a Jae.

—Está bien, te llamaré cuando estemos allá, no te preocupes tanto Ggukie, estaremos bien. —Jae suspiro en ese momento tenía su cabeza reposada en el fuerte pecho del tritón.

— ¡Wooyoung hyung! —Hongjoong había llegado a tiempo, lo primero que hizo fue abrazar a su amigo. —Cuídate mucho, Yunnie y yo estaremos esperándote, no lo traje conmigo porque podría llorar. —se alejó del pelinegro.

—Gracias Hong, dale a Yunnie un beso y un abrazo de mi parte. —a Wooyoung se le estrujo el corazón, extrañaría demasiado al pequeño y tierno Yunnie.

—Wooyoung, es hora de abordar... —Youngjae se colocó junto a su sobrino.

—Esta bien, abordemos antes de que me arrepienta. —Woo dio una última mirada detrás de él, Hong se despedía moviéndo su mano, pero al ver donde estaba San, mordió su labio intentando no llorar.

Los dos omegas subieron al barco que los llevaría a su destino y este de inmediato empezó a moverse.

San y Yongguk sólo se quedaron con sus vistas fijas en el barco, viendo a sus omegas, la tristeza invadía sus corazones.

—Se fuerte San, esto es para protegerlos de Kangin, en Thanxx junto a Bobby estarán a salvo. —Gguk colocó su mano en el hombro de su sobrino, brindándole ánimo.

—Lo sé, Hyung, solo que no me siento bien, mi pecho duele. —San no entendía el porqué aquel dolor se hizo presente, junto a una leve desesperación. Quitó de su mente todo mal presentimiento y vio que el barco había desaparecido.

"Hasta pronto, Lobito Hyung"

Gahyeon salió al patio trasero, viendo a San a lo lejos, este estaba sentado en una banca que se encontraba a la sombra de un árbol y con la vista fija en el precioso ocaso, aunque se veía decaído, así que quiso hacerle un poco de compañía, sabia muy bien por lo que estaba pasando el rubio.

—Hola, San. —se sentó junto al tritón, este solo giro el rostro regalándole una sonrisa falsa.

—Oh, hola, Gahyeon. —

— ¿E-estas bien? —

—La verdad, no, estoy un poco desanimado y triste, hyung se fue hace unas horas y ya lo extraño. —soltó un gran suspiro. —Espero que llegue bien. —

—Todo estará bien, San, por ahora solo nos toca fingir ser una pareja feliz, debemos seguir el plan de tu tío. —Gahyeon colocó una mano encima de la de San, dejando caricias. —Wooyoung oppa y tú se aman, este solo es un pequeño obstáculo que deben enfrentar, pero sé que su amor es más fuerte y llegaran a ser felices. —

—Gracias, también espero que seas feliz y que puedas gobernar tu isla. —

—Alguien muy especial me espera en Illusión, deseo ser feliz junto a ella, quiero gobernar mi isla sé que puedo hacerla crecer, mi padre me enseño mucho. —

Los dos siguieron hablando amenamente, también hacían pequeñas bromas, tratando de olvidar sus problemas, sin darse cuenta que a lo lejos se encontraba Kangin junto a la madre de Gahyeon, ambos felices porque pensaban que habían logrado su objetivo, solo les faltaba esperar la boda de sus hijos y aquéllas dos islas se unirían.
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[🐺🌙]

San término de ajustar el último botón de su camisa de pijama, eran más de las nueve de la noche, faltaba poco para ir a dormir, pero la preocupación lo invadía, según su tío le daría noticias sobre Wooyoung, ya que necesitaba saber si él y Jae habían llegado con bien a Thanxx pero Yongguk aún no aparecía.

El rubio salió de su habitación e iría a la de su tío, tal vez este se encontraba ahí, al bajar las escaleras escuchó unos gritos a lo lejos, con curiosidad siguió las voces dándose cuenta que lo guiaban al despacho de su padre.

En el instante se escucharon cosas romperse y los gritos aumentaron, San estaba un poco asustado, debido a la fuerte discusión, abriendo sus ojos al reconocer una de aquellas voces.

¿Aquella era la voz de Yongguk hyug?

¿Por qué su voz se escuchaba dolida y a la vez furiosa?

Esas preguntas pasaban por la cabeza de San, así que solo se quedo detrás de la puerta, su padre y tío siempre peleaban pero en ese momento todo era más serio.

— ¡Se que tienes que ver con esto! —Yongguk estaba encima de Kangin, a la vez que sostenía con fuerza el cuello de este.

—No te lo negare, cumplí con mi objetivo, alejar a ese lobo pulgoso de San, fueron dos  pájaros de un solo tiro, ya que también me deshice de YoungJae. —Kangin estaba con el rostro neutro, además, el labio le sangraba y la mejilla derecha estaba en un tono violeta debido al golpe que Yongguk le había dado.

—Busque por todos lados y no hay rastro de ellos, solo el barco estaba destruido ¡¿dime que paso con Youngjae y Wooyoung?! —

—Kai se encargó de eso, solo dije que se deshiciera de ellos, lo demás no me importa. —

San estaba paralizado en su lugar, toda aquella conversación era confusa, pero sus manos y piernas temblaban en ese momento, abrió la puerta del despacho, viendo aquella escena, muchas cosas estaban rotas en el suelo, su tío y padre lo veían atónitos.

—San… —

La voz de Gguk saco del trance al rubio, el menor solo levanto su rostro y sus sospechas eran confirmadas al ver el rostro de su tío, se veía decaído, con ojos acuosos y la mejilla golpeada, debido a la pelea con su padre.

—Hyung ¿todo está bien, verdad? —

—Ven conmigo, hablaremos de esto, fuera de aquí. —

— ¿M-mi lobito llego salvo, cierto? —

— ¿Escuchaste nuestra conversación?  —el pelinegro vio como su sobrino asintió. —San, te diré la verdad, Wooyoung y Jae están desaparecidos, horas después de que se fueron, llamé a Bobby y me dijo que ellos aun no habían llegado, eso se me hizo raro, asi que investigue por mi cuenta, me transforme y nade hacía donde se había dirigido el barco, este se veía destruido, entré y no había nadie. —

—No puede ser verdad. —

—Kangin es el culpable. —Giró a ver al mayor, este ya se había levantado del suelo.

—Papá, dime que todo esto es mentira, que no tienes que ver con nada. —

—Todo lo hice por tu bien, hijo mío, lo que sentías por ese lobo no era amor, solo es un romance pasajero, con el tiempo lo olvidarás, eres el futuro gobernante de Wave, tendrás más poder, solo necesitas a Gahyeon junto a ti. —

La sangre del rubio empezó a hervir, aquel hombre frente a él ya no lo reconocía, San empezaba a entender el odio que Mingi le tenía a Kangin, porque en ese momento estaba experimentando el mayor de los  desprecios hacía su padre.

—De ahora en adelante dejaré de ser tu hijo, ya no eres mi padre ¡SOLO SERÁS UN SER DESPRECIABLE, EL CUÁL YA NO VALE NADA EN MI VIDA! —San se abalanzó hacía Kangin, tomándolo por la camisa del cuello.

—Sueltame. —

—Lograste tu objetivo, Kangin, me quitaste lo que más amaba, la persona por la cuál mi vida tenía sentido, ahora todo me da igual, me casaré, gobernare esta isla ¿eso era lo que querías? —aquellas palabras las escupió con odio, su mente estaba en blanco, hablaba sin pensar, estaba totalmente nublado por el dolor. — ¿Estás feliz? Me arrebataste a mí luna, mi bello lobito... —

—San, vamos. —

Yongguk tomó por los hombros a su sobrino, sacándolo de aquella habitación, lo arrastró hacia el inicio de las escaleras, haciendo que San se sentará en una de ellas.

—San. —

— ¿Qué? —respondió seco.

El pelinegro frunció su ceño, porque cuando San levantó la cabeza se dio cuenta de que los ojos de este habían perdido la luz, su rostro estaba neutro como si estuviera en un tipo de trance.

—Yo encontré esto. —el mayor sacó algo de su bolsillo, extendiendoselo a San, viendo por fin una expresión en el rostro de su menor.

—El collar, e-es el que le di a mi lobito hyung. —San con manos temblorosas recibió aquella cadena, viéndola fijamente mientras lagrimas empezaron a derramarse, mojando sus mejillas. —M-me prometió que regresaría, ahora no se si lo volveré a ver. —

—L-lo siento, San. —Yongguk también había empezado a llorar, abrazando fuertemente a su menor. —Intenté todo y no encontré paradero de ellos, mañana seguiré buscando, tengo la esperanza de que nuestros omegas estén bien. —

—Q-quiero a mi Woonie Hyung ¡Tío, dime que esto es mentira, que es una pesadilla! —San se aferró mas al abrazo, empapando el hombro de Gguk con sus lágrimas.

—Me duele verte así, mi pequeño San, hyung prometió protegerte pero te fallé, porque en este momento estás sufriendo. —

—Todo es culpa de Kangin, él y su ambición me están destruyendo lentamente, ahora entiendo el porqué mis hermanos se fueron de aquí, ellos debieron de haber sufrido, pero al menos ellos pudieron salvar a sus parejas. —

—Siento no haber protegido a Wooyoung, a Youngjae y a ti. —Yongguk se sentía fatal, había prometido cuidar de aquellos tres chicos y al final no pudo.

—H-has hecho mucho por mí, no te culpes, tú también estas sufriendo Gguk hyung, amabas a Youngjae. —su voz salía congestionada y dolida.

En medio de aquel pasillo, sentados en las escaleras ambos tritones se encontraban abrazados, lloraban desconsolados, solo se tenían el uno al otro, ya que estaban sintiendo el mismo dolor, pero aún tenían las esperanzas de que sus amados estuvieran con vida.

Continuará...

*Se va lentamente* 🚶🏻‍♀️

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