CAPÍTULO 1
"ORGULLOSO DE MI NIÑA"

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Hace 3 meses que escaparon de aquel barco lleno de invitados después de una pérdida batalla. Desde ese momento Uma y Minerva han recorrido los alrededores de la Isla en busca de algún agüjero posible en la barrera.

- Agh, esto es inútil.- Dijo Uma.

- Paciencia, presiento que falta poco para que esos "héroes" arruinen todo. - Dijo Minerva sentada en un piedra. - Me sigue sorprendiendo esto - Dijo con un coco en la mano.

- Es muy grande, ¿verdad? - Minerva asintio con una sonrisa. - Confío en tí y en tus predicciones, pero más vale que sea rápido.

- Todo a su tiempo querida Uma.

Ambas vieron a lo lejos a un dragón peleando contra una extraña magía, ambas se acercaron mientras que los demás estaban preocupados por Mal intentando animarla.

- Es nuestro momento - Dijo Uma, pero antes de que hiciera algo Minerva la paró colocando una mano en su hombro.

- Aún no, hay que esperar. - Uma bufó ante la respuesta. - Hades - Dijo Minerva cuando reconoció la magía de la preculiar piedra que su padre poseía.

Minerva al ver como Mal soltó su aliento para provocar una ráfaga de aire y empujar a su padre hacia dentro de la barrera, no pudo evitar soltar una risa ante aquella acción, al igual que Uma.

- Es hora de irnos. - Dijo la peliazul seguidamente Uma la siguió.

Minerva iba encima del hombro de Uma y juntas se fueron sin dejar rastro de haber estado allí.

- Debo admitir, aquello que hizo Mal fue bastante gracioso. - Dijo Uma, al mirar a Minerva ladeó la cabeza a un lado, entrecerró los ojos y la miro con una sonrisa. - Conozco esa cara.

Minerva no respondió, estaba pensativa caminando de un lado a otro con una sonrisa malvada mientras tenia una de sus manos en su metón en forma pensativa.

- ¿Que ronda por tu linda y malévola cabecita?

- Un dato, aquella piedra con la que Hades atacaba a Mal tiene varios póderes, uno de ellos es arrebatar la energía, de otra forma los poderes. - Informó a su amiga. - Si la piedra le dio a Mal eso significa que ha absorbido su poder, y por el tiempo en el que lo ha estado haciéndolo podemos decir que le ha arrebatado una gran cantidad de este.

- Me encanta cuando piensas así.

- Algo malo esta por suceder en Auradon y Mal y su pandilla de cretinos no podrán solos contra lo que se avecina. Uno de los objetos más poderosos aparte del cetro de Maléfica es la brasa de Hades y si ese mal es muy fuerte me temo por ellos que tendrán que venir. Y ahí entraremos nosotros. Ahora solo falta una cosa.

- ¿Cuál?

- Reunir a Harry y a Gil, esperemos que esos dos sean capaces de aprovechar el momento cuando les llegue la oportunidad.

- Tienes razón.

Y tal y como lo había dicho Minerva, Mal y sus amigos volvieron en busca de la brasa de Hades al enterarse que Audrey, hija de la Bella Durmiente y exnovia de Ben, poseía la corona de la Reina y el cetro de Maléfica.

•••

Mal llegó a la guarida de Hades, al intentar tomar la piedra que había encima de la mesa Hades paró su mano, la quitó la piedra y se giró para verla.

- Hola papá - Ante eso Celia quedó sorprendida. Hades se quitó las gafas y la saludo haciendo un movimiento de dedos.

- Montaste un buen espectáculo el otro día.- Dijo este.

- Lo mismo digo.- Hades rio levemente.

- Pensaba ir a verte.

- Enserio, ¿me pregunto por qué? ¿Por qué voy a ser Reina?- Ambos dieron una vuelta al sillón.

- Oh. - Soltó un risa. - Venga Mal, no seas rencorosa.

- Me abandonasteís cuando era un bebé. - Se cruzó de brazos.

- No, no, abandoné a tu madre.- La señaló. - Ella...es una persona de trato complicado y además no era buena para Minerva, la odiaría.

- ¿ Tu crees? - Dijo Mal.

- ¿Ves? Ya tenemos algo en común odiamos a tu madre.

- No, yo no odio a mi madre, tal vez sea una lunática malvada, pero siguió a mi lado. Y sé que en el fondo Minerva tampoco la odia.

- Oh, Boo Boo - Hizo un puchero falso. - Espabila y abre los ojos , ¿crees que te ha ido mal? Yo antes era un DIOS. - Grito lo último. - Tenía un mundo que llevaba mi nombre y ahora no tengo NADA - Tiró una lata. - Tenia grandes planes del futuro para Minerva. No sabes lo que es eso.

- ¿Tu crees? - Gritó igual.- Yo y Minerva durante 16 años no hemos tenido nada y ahora tengo todo un mundo y Mimerva puede tenerlo. Pero si no me hago con la brasa se acabó.

Tras una canción en la que se desahogaron y dijeron todo los que tenian que decir, Hades le otorgó la brasa.

- Recuerda eres solo medio Hades, la brasa no hará por ti lo que hace por mí.

- Me arriesgare.

- Tal vez con Minerva funcione mejor, después de todo ella es más Hades que tú. Si se moja se acabó.

- ¿Por que nos separasteís a nosotras? ¿Y de que planes para Minerva hablas?

Este se sentó en el sillón y soltó un suspiro, Mal se sentó en otro.

- Hace 16 años tu madre dio a luz dos hermosas hijas, una de ellas con más poder de Hades y otra de Maléfica, convivir con tu madre no fue muy bueno, así que decidimos irnos cada uno por su lado, pero obviamente no iba a dejar a las dos a manos de ella. Ambos decidimos quedarnos con la que más poder de cada poseía, para daros lecciones de vuestras habilidades, más tarde nos encerraron aquí.

   »Antes de aquellos yo estaba seguro de querer entrenar a Minerva para que fuera la futura Diosa del Inframundo, la quería ver triunfar como yo lo hice y creo que no lo he hecho tan mal. Ella aprendió y quiso seguir mis pasos.

Mal escuchaba atentamente todo lo que Hades decía, Minerva tenía su lado oscuro y sabía que iba a volver, quería convencerla de irse con ella y ayudarla.

- Debo admitir que su plan de destruir Auradon me fue impresionante, ella tiene un gran talento y me alegro de que no lo desaproveche, el baile de las almas. - Soltó una risa - Como no. Pensar que mi pequeña anda por ahí perdida me pone triste, estoy orgulloso de lo que hizo, intentó honrar mi nombre y por ello estoy muy orgulloso de mi niña. Esa chica es mi mundo.

Mal sonrió, su padre amaba a su hija y la gustaba ver que aunque fracasó en su plan el aún se sentía orgulloso, recuperaría a su hermana, cueste lo que cueste.

Celia y Mal salieron de la Guarida de Hades, Celia había escuchado todo y quedó muy sorprendida ante las revelaciones.

- Por eso siempre preguntaba por tí y por Minerva.- Mal paró al escucharla.

- Evie es la única que sabe que Hades es mi padre. - Dijo con la vista perdida. -En cuanto a mi hermana, nadie más lo sabe excepto tú.

Mal y su equipo salieron de la barrera felices de haber conseguido lo que venian buscando, pero eso duró poco ya que Harry y Gil pasaron la barrera antes de que esta se cerrara dejando a todos sorprendidos por tal aparición.

Tras varios empujones, Harry tiró la brasa de Hades al mar, unos tentaculos apareciron y la atraparon antes de que cayera al agua. De ahí salio Uma.

- ¿Se te ha caído algo?

- No se puede mojar, devuélvemela o se apagará.- Dijo con miedo Mal.

- Uma - Se sorprendieron Harry y Gill.

- Así me llamo. - Uma se sumerjió al agua junto con la brasa, un gran remolino de agua se elevó y cayó del golpe otra vez.

- Hola chicos. - Dijo Uma detrás de ellos. Señaló la brasa, Harru y Gill fueron a abrazarla. Tras unas cuantas palabras Harry preguntó.

- ¿Y mi amada Minerva? - Ante esas palabras Carlos se puso más serio.

- Uma dame la brasa. - Dijo Mal extendiendo la mano.

Uma hizo un puchero, luego sonrió y la lanzó alto, Mal se quejó y al girarse se sorprendieron.

- ¿Me echaban de menos? - Dijo Minrrva con la brasa en la mano.

De su cabeza salió una grande llama azul, cuando esta se apagó su cabello se había vuelto de un azul más intenso y sonrió tras sentir toda la energía.