CAPÍTULO 2
"CHILLIN' LIKE A VILLAIN"

...

Minerva se encontraba en uno de los tejados cerca de la barrera como solía hacer siempre, un momento se quedó mirando una mancha morada y verde moviéndose por encima del mar, cuando por fin capturó bien la vista se fijó de quien era, su apestosa hermana Mal.

Minerva no pudo evitar sonreir al ver como Mal cruzaba la barrera provocando una onda verde en ella, Harry quien había llegado recien vio a Minerva sonreir malvadamente.

- ¿Qué pasa, querida? - Dijo viendo a la peliazul.

- Me parece que tenemos visita.

- ¿De quién?

- Tú solo sígueme, es hora de visitar a Dizzy. - Harry sonrió junto a ella para luego marchar.

•••

Ambos llegaron a " Lady Tremaine's Curl Up & Dye", ambos miraron el cartel y luego la puerta.

- Entremos. - Dijo Minerva soltando un suspiro.

Ambos entraron cruzandose con Dizzy.

- Dame eso, enana - Harry extendió la mano y Dizzy no tuvo mas remedio que dárselo. - Y el resto. - Le entregó todo lo de la caja. - Umm, gracias - Dijo burlón

- ¿Sigues siendo el chico de los recados de Uma y Minerva, o puedes quedarte con lo que robas?

- Vaya, vaya, vaya. Que agradable sorpresa.

- Hola Harry.

- Ya verás cuando Uma se entere de que has vuelto, jamás te devolverá tu terrirorio.

- Oh, bueno es igual, porque se lo voy a quitar.

- Podría hacerte daño.

- No sin su permiso seguro. - Harry pasó su garfio por su pelo, Mal le agarro y colocó su chicle ahí, este se lo llevó a la boca.

- Harry no seas guarro. - Este la miró en la entrada con los brazos cruzado. - Y dale la mitad del dinero a la cría.

- Hola Minerva.

- Mal, que horrenda sorpresa verte por aquí. - La miró con una sonrisa burlona. - ¿Te has cansado de jugar a ser princesa?

- Tal vez. - Contestó indiferente. - Te creía muerta.

- Y yo a ti siendo una muñeca toda rosa o un payaso.

- ¿Para que quieres que la devuelva la mitad? - Dijo Harry algo confundido.

- Por que me tiene que hacer algo.

- ¿Teñirte el pelo? - Preguntó Mal.

Minerva la dio una sonrisa sarcastica. - Muy graciosa mal, pero no, un recorte de puntas.

Minerva se sentó en uno de los sillones y Dizzy empezó a hacer lo que la suele cortar todos los meses.

- Bye, bye Mal. - Se despidió con la mano al ver que la pelimorada se quedó mirándola, esta sin decir nada se fue. - Niñata.

Minerva no se sintió nada nerviosa, puesto que Mal para ella ya no significaba nada, nunca había tenido tanto cariño con ella, cómo con otros del grupo de la chica.

En cambio, Mal se habia puesto nerviosa, no esperaba ver a su hermana tan pronto, debía admitirlo extrañó a la peliazul, no era lo mismo sin ella, pero se negaba a admitirlo.

Minerva era malvada y con mala reputación, cierto es, pero en aquella isla en ese momento solo había una persona la cual no podía evitar ser buena y esa era Dizzy. Durante todo la vida de Dizzy, Minerva se ha fijado en el trato que le da la gente de por aquí, ambas se habían cogido un cariño especial, por esa misma razón evitaba que Harry la dejara sin nada indiscretamente.

•••

Minerva volvió a aquel tejado a disfrutar la hermosa noche que había tras la barrera, como la Luna iluminaba todos aquellos castillos y como se reflejaba en el mar.

Un brillo apareció a lo lejos, estaba más que claro, alguien iba a cruzar, tal vez fueran unos guardías que venían por vigilancia o alguna historia asi que no le tomó importancia.

••• 

Harry quien pasaba por el muelle del garaje viejo se escondio tras ver uno de los coches reales, se sorprendió al ver quienes bajaban de este y sonrío.

- A Minerva le va a encantar esto. - Decidió seguirles.

Harry observó como Ben se acercaba a un túnel. - ¿Qué hay aquí dentro?

- ¡Ben! - Le llamo Carlos mientras los tres se acercaban a él.

- Mejor que no lo sepas - Le dijo Jay.

- Eh chicos, tranquilidad, que nuestros padres no se enteren de que estamos aquí. - Dijo Carlos.

- Ellos ni Minerva, ¿cierto? - Dijo Jay burlón.

- ¡Jay! - Le regañó Evie. - No es buen momento para hacer chistes.

- ¿Quién es Minerva? - Preguntó Ben.

- Más tarde te lo explico. - Dijo Jay incómodo.

•••

Harry decidió ir hasta donde Minerva rápido a contarle todo, Minerva ya tenía una idea y sonrió.

- Por supuesto, no podían dejar a su querida amiga Mal aquí. - Dijo con un tono de burla.

- ¿Qué haremos? - Dijo Harry.

- Vamos a jugar un poco con ellos. - Sonrió. - Les haré creer por un momento que soy una chica buena que solo quiere ayudar a Mal para que no lo pase mal y que ella y el príncipe Ben vivan felices. - Se burló.

- ¿Y que hay de Carlos?

- Aún no lo sé, ya veremos según marche el plan, solo sigueme la corriente.

- Entendido My lady. - Hizo una reverencia.

•••

- Bueno, bueno, pero mirar a quien ha traído la marea. - Dijo Minerva apoyada en una de las paredes, todos se dieron la vuelta asustados.

- Minerva - Dijo Carlos sorprendido.

- ¿Te has sorprendido que esté aqui? No es que fuera a poder ir a otro sitio. ¿Qué haceis aquí?

Unos minutos de silencion inundaron el sitio hasta que Jay decidió hablar. - Venimos a por Mal, ella está en la Isla.

- Oh, no la he visto. - Hizo un puchero.

- La encontraremos.

- ¡JA! Con el principito aquí vais a destacar mucho, no durareís ni media noche.

- Conseguiremos hacerle pasar desapercivido.- Dijo Evie.

- La isla a cambiado desde que os fuisteis, Evie. Esto ya no es lo mismo. -

- Podrías ayudarnos. - Ella miró al peliblanco con una ceja alzada. - Es decir, conoces la Isla muy bien.

- Podrías enseñar a Ben, al menos.

- Esta bien. - Respondió algo que los demás se sorprendieron. - No me gusta su presencia aquí, además, quiero lo mejor para ella. Será mejor que busques a Mal, creo que ya sabes donse está - Evie asintió para luego irse - Vuestro amigo ya esta buscando problemas - Rió.

- ¡Ben para! - Lo arrastró Carlos. - Esto no es un desfile, es la Isla.

- Las manos en los bolsillos a menos que estes robando - Dijo Jay

- Camina encorbado o desafiante.- Dijo Carlos

- Y nunca jamás sonrías - Aclaró Minerva

- De acuerdo, gra- - Respondio Ben

- No, no nada de gracias y déjate de por favor, tú tranqui. - Interrumpio Minerva.

N/A: MINERVA ES EVIE

Carlos había sentido algo que hace mucho no sentía, volverla a ver, cantar y bailar con ella le ha hecho volver al pasado, la echaba de menos, es cierto, pero tenía que pensar, él ahora tenía a Jane, solo que aún no había tenido las agallas de decirle.

Estaba felíz de que ella estuviera bien, cuando se fue, la preocupación de dejarla ahí sola le asustaba, porque Minerva podía ser un ángel y no el demonio que todos ven.