En ocasiones no entendía el porqué su molestia ante mi pequeño apegue hacia ella, pero es que, ¿cómo podría dejar de hacerlo si todo de su persona para mí era algo que me gustaba?

OhYeon me gustaba desde hace más de año y medio, y pese a que ella y yo no estábamos en el mismo salón aquello no era impedimento alguno para que yo no pudiese mirarla.

Ella era linda en todos los aspectos...

Al menos para mí.

- ¿Qué rayos le vez, mmh? Hablo en serio, es decir, ¿no crees que ella debería apreciar más lo que le dan?

En parte JeWeil tenía razón en absolutamente casi todo, pero vamos, ¿quién rayos no va a defender a la persona que le gusta en ocasiones?

- Ella aprecia lo que le dan aunque no lo creas, chica extraña.

Y no mentía, aunque... He de admitir que lo de los chocolates me dolió un poco, muy en el fondo me dolió. Y ahora que lo pienso, lo que ella hacía con ellos no tiene casi sentido, pero he aquí a un tonto detrás de la chica que le gusta a pesar de eso.

- No mientas Jeon, la vas a desgastar de tanto mirarla. -alegó casi con enfado.

Ella también me hería de laguna forma. Min JeWeil también se encargaba de pisotear mis vagos sueños y anhelos de querer estar con OhYeon.

Pero sólo estaba siendo realista.

- Da igual, la estoy mirando a ella, no a ti. -señalé en el mismo tono que Weil-. No te preocupes por eso, chica extraña. No te vas a deshacer tú.

Y a pesar de que JeWeil parecía tener un leve resentimiento hacia OhYeon sin un porqué en específico -no que yo supiera-, ella de repente me daba ánimos a su manera, una bastante agresiva y a la vez graciosa.

- Pff, como si no la hubieras mirado lo suficiente ese domingo.

En ocasiones llegaba a pensar que ella estaba celosa o algo por el estilo, pero esa idea se borró de mi mente cuando salió ese mismo día con JoongGuk.

- Oye, yo no estoy diciendo nada al respecto sobre tu salida con JoongGuk, ¿o sí? Supongo que ustedes dos son lo suficientemente cercanos como para que él te lleve cargando en su espalda, ¿cierto?

Sin palabras. Sus argumentos comenzaban a debilitarse, eran más excusas que verdades de vez en cuando, aún así, no dejaba de tener ese tan peculiar carácter y vocabulario en su sistema.

Y esa maña de jalar de mi corbata hacia su dirección para casi gritarme en la cara lo tonto que le parecía para ella el hecho de solo mirar a OhYeon.

- Sí, confié en él. Pero qué hay de ti, ¿siquiera OhYeon te pidió permiso para saludarte de esa forma, ah?

- No, no lo hizo. Pero ella me gusta, entonces, ¿por qué la detendría?

Ambas eran en su totalidad distintas.

- Agh, no eres tan estúpido después de todo.

JeWeil tenía un carácter fuerte, y su vocabulario ni se diga -aunque eso no es problema para el mundo-, con el ego algo alto, sarcástica, agresiva y cruel, ¡oh! También de estatura alta... muy alta, su cabello largo de un color entre rubio y rojizo, claro con algunos mechones teñidos de rosa y morado, labios algo gruesos y rosados.

Mencionando por último sus ojos, creo que eso es lo que más te llamará la atención si es la primera vez que la vez. ¿Y quién no? Incluso yo hice eso la primera vez que ella se acercó a mí de la nada.

Ojos de un color marrón claro.

Después estaba ella, por favor añadan un suspiro dramático y lleno de anhelo.

OhYeon tenía un carácter bastante pacífico, las malas palabras no eran algo que ella utilizara, aunque, ¿quién me asegura que no dice de vez en cuando algunas? También era buena amiga, dulce, tímida en ocasiones y segura de sí misma. Cabello negro y corto, estatura promedio, alguien amable y amigable. Ni siquiera sabía qué era exactamente lo que me gustaba de ella, porque no me di cuenta en qué momento ella se había metido en mi cabeza y en mi corazón.

Ella hacía que mi corazón se acelerara de una forma poco usual.

- Me largo. -informó malhumorada-. Tu crush viene para acá y no quiero verte actuar como un idiota, adiós.

JeWeil me dejaba primero y después me avisaba que lo había hecho.

- ¿Qué? ¡Oye, ¿por qué siempre me dejas solo en momentos como estos?!

- ¡No es ella quien me gusta a mí, Jeon!

Bufé ante su indiferencia, sintiéndome inseguro en cuanto OhYeon llegó hasta mí con una hermosa sonrisa.

Estoy nervioso de nuevo debido a su cercanía.

- Hola, Kookie.

¿Algún día podría tenerla conmigo?

- Hola.

Una rosa diaria era mi manera de decirle lo mucho que me gustaba, y a pesar de que ahora pudiera hablar con ella más de cinco oraciones, no he dejado de comprar y dejarle rosas en su casillero. Aunque, ni siquiera sé si ella tiene idea de que soy yo quien las deja allí desde temprano.

- ¿Estás solo? -preguntó mirando a su alrededor-. Creí haberte visto con alguien.

- Oh sí, pero se acaba de ir, tenía algo qué hacer.

- Entiendo, ¿entonces estás libre ahora?

- Sí, eso creo. -respondí casi tartamudeando.

- Genial, ¿podemos ir y almorzar juntos en la cafetería hoy? -propuso con una sonrisa animada, sin mostrar su dentadura.

- Por supuesto, ¿por qué no?

Se encogió de hombros tímida tomándome así de la muñeca, guiándome hacia la cafetería a su paso.

Su tacto es cálido.

- Por cierto, la salida de esa vez fue divertida. Quería agradecerte lo mucho que me hiciste reír desde ese día pero, yo no había encontrado el momento para decírtelo.

Ella en serio sabía cómo hacer que el calor en mi rostro se acomulara en mis mejillas, sabía cómo hacer que esas simples palabras significaran mucho para mí.

- Es bueno saber que la pasaste bien.

- Todo gracias a ti. -señaló de vuelta aún sin dejar de elevar sus comisuras-. Estoy casi segura de que tus amigos teniéndote a ti no se aburren en lo absoluto.

Quizás Weil tenía razón, la miro mucho, tal vez demasiado.

- ¿Gracias? -musité soltando una pequeña risa nasal.

- Eres lindo, JungKook.

Un par de palabras como esas viniendo de su parte eran como si me dijeran que había ganado la lotería.

Aunque sea una estafa, si es de ella puede que esté bien.

- Oh vamos, no seas tan tímido. ¿Qué harás el día en el que la chica que guste te diga cosas como estás?

- Ya lo está haciendo. -murmuré para mí mismo, dejando de mirarla unos segundos.

- ¿Dijiste algo? -cuestionó confundida-. Disculpa, no te escuché, ¿era algo importante?

- No, nada.

- ¿Estás seguro? -asentí formando una línea recta con mis labios-. Te voy a creer.

No sé, pero pensé en que Weil ya me hubiera golpeado, amenazado o simplemente ignorado para que hablara.

- Oh, yo lo cargo por ti. -ofrecí retirando la bandeja de sus manos.

- ¿Estarás bien? No vaya a ser que se te caiga encima o algo así.

- No te preocupes por eso.

- De todos modos, por favor ten cuidado.

- Lo tendré.

Una vez habíamos encontrado una mesa vacía, tomamos asiento uno frente al otro, cada quien con su respectiva bandeja de comida.

- JungKook, ¿tú eres amigo cercano de JeWeil, cierto?

La miré con curiosidad, pues desde el día en el que Weil casi le grita a OhYeon lo molesta que estaba esa vez que ella quiso cambiar la comida de JeWeil por algo más "saludable", OhYeon ha tratado varías veces acercarse a la chica extraña, ¿para qué? No lo sé. Observar a OhYeon de alguna forma u otra me hizo ver el lado en el que ella es quien busca a alguien más, en esté caso a JeWeil.

- No sé si llamarlo cercano, ¿sabes? Ni siquiera sé si somos amigos realmente. -confesé, dándome cuenta recién de ese detalle.

- ¿Cómo que no lo sabes? Kookie, si no lo fueran no se llevarían tan bien.

- Si hablamos de ella es difícil de saber qué es qué en ocasiones.

- Sé que va a sonar grosero pero sí, ella es muy difícil de lidiar y eso que ni siquiera soy cercana a ella.

Pensándolo bien, JeWeil es bastante directa en cuanto a lo que piensa, siente y quiere, demasiado diría yo.

- Bueno, si contamos el hecho de que ella es muy honesta y directa, ya no es tan difícil.

- ¿Puedo confesarte algo?

- O-oh, claro, por supuesto. -la animé a hablar con una sonrisa que ella correspondió.

- Envidio de alguna forma a JeWeil, es decir, si analizo lo poco que sé y conozco de ella, no tiene casi cargo de conciencia, mucho menos problemas para ser realista, honesta y directa. -mordió sus labios seguido de esto formó un leve puchero-. Incluso puedo casi asegurar que ella esconde con escasez lo que piensa y siente. Ella es... Segura de sí misma.

La escuché suspirar con pesadez, tomó los palillos entre sus dedos mirando su comida dudosa, como si estuviera pensado en si comer aquello o no. A veces me pregunto si ella realmente llena su estómago con lo que come, me preocupa que a mi parecer y ante mis ojos, OhYeon coma tan poco.

- Puede comer todo lo que ella desee, puede hacer y deshacer lo que quiera si así lo desea.

- Eso tú también puedes hacerlo, de hecho todo el mundo podría si lo quisiera.

- Lo sé. -afirmó sonriéndome apenada-. Es solo que la diferencia entre JeWeil y yo es que a ella no le importa mucho lo que digan sobre su persona.

- ¿Y a ti sí? -insinué.

- Por supuesto que no. Sé muy bien que a la mitad de estudiantes aquí me odian y a la otra mitad les agrado. -sonrió de lado, encogiéndose de hombros-. Estoy bien con eso.

- Lo que dijiste hace unos segundos dice lo contrario.

- Eso también lo sé, creo que la complicada soy yo. -bufó-. Como sea, quisiera disculparme con JeWeil por lo de ese día, ¿podrías ayudarme con eso, Kookie?

- ¿Eh? ¿Y c-cómo podía ayudarte?

- Es simple. -se incorporó caminando hacia a mí para volver a tomar asiento pero está vez a mi lado-. Sólo tienes que llevarla al salón de música al terminar las clases.

- N-no creo que pueda ayudarte con eso. -musité algo nervioso ante su cercanía.

- ¿Por qué no? -preguntó con confusión.

- Bueno, digamos que JeWeil no es alguien fácil de convencer.

- Ouh. ¿Al menos podrías intentarlo? -inquirió con una pizca de esperanza-. Sé que puedes lograrlo, Kookie. A puesto a que ella nunca te diría que no.

- ¿Qué? -reí con ironía-. Créeme, es totalmente todo lo contrario.

- ¡Vamos! Inténtalo, por favor. Tú mejor que nadie se ha dado cuenta que JeWeil no está dispuesta a dejarme hablar con ella.

- Tiene sus razones. -defendí, encogiéndome de hombros.

- Ya sé que fue culpa mía, no es necesario que me lo recalques.

- ¿Por qué trataste de cambiar su comida por la tuya?

- Oye, no era mi intención que ella se molestara, además en mi cabeza nunca apareció la posibilidad de que a JeWeil no le agradaría ni un poco lo que hice. -explicó con un semblante arrepentido.

- Cuando se trata de Weil hay posibilidad de todo, literalmente todo.

- Pero mírate. -su repentina sonrisa pícara y juguetona me confundió, y mucho-. ¿No dijiste que tú y ella no eran cercanos? Si no fuera así no sabrías todo esto acerca de JeWeil, ¿no lo crees?

- No, no lo creo. -respondí rascando un poco mi nuca.

- Apuesto a que sí, pero no voy a ponerme a discutir algo como eso.

Su mirada bajó hacia mis labios, los cuales observaba no lo sé, ¿con curiosidad, tal vez?

- Oh, tienes un lunar debajo de tu labio inferior, se ve lindo ahí.

¿Cómo se supone que debería tomar eso?

- Entonces, ¿puedes ayudarme con JeWeil, por favor?

Suspiré no muy convencido pero al final asentí en respuesta.

- ¡Muchas gracias!

Tae tiene que ayudarme con esto, ella ni loca va a aceptar y menos si se lo pido yo, es decir, desde que discutimos en "teoría" siento que su indiferencia aumentó un poco más que antes, mucho más.

Es como si lo poco que habíamos avanzado lo hubiéramos retrocedido de golpe.

El receso continuó con normalidad, hablar con OhYeon de alguna forma era bastante entretenido, la conversación podía seguir fluidamente sin ningún problema.

Después de eso las clases siguieron su curso hasta llegar al final de la jornada del día de hoy. Lo curioso aquí es que JeWeil parecía ser más cercana a JoongGuk.

- ¿Por qué no se lo dices tú, ah? -interrogó con una mueca.

- Oye, ella no va hacerme caso.

- ¿Y a mí sí? -me miró de abajo hacia arriba, no muy seguro-. Si con trabajo me cuesta que ella discuta conmigo solo porque es divertido, ¿crees que será fácil convencerla?

- Tae, por favor, ¿sí? Te lo pagaré después haciendo lo que quieras.

- ¿Y qué pasa si no quiere? -preguntó sin estar convencido aún-. A quien va querer matar va ser a mí, no a ti.

- Oh vamos, no va pasar de que te jale del cabello, golpee tu nuca o que casi quiera asfixiarte con tu propia corbata. -musité bromeando.

- ¿Si sabes que eso no me tranquiliza, verdad? -dijo con un semblante serio.

- Solo dile que necesitas ayuda con algo, tal vez eso sea suficiente viniendo de ti. -carraspeé.

- Si salgo golpeado tú vas a ser el culpable y el cargo de tu conciencia va a ser muy grande. -dramatizó señalándome con su dedo índice entre cerrando sus ojos.

- De acuerdo, ya entendí.

- De igual modo en algún momento vas a tener que hablar con ella quieras o no, Jungkookie. En fin, ¿en el salón de música? -asentí con una leve sonrisa-. Bien, reza por mí.

- Lo haré.

Dio media vuelta en busca de su objetivo, mientras yo, ingresé al salón de música encontrando a OhYeon dibujando no sé qué en el pizarrón blanco con uno de los plumones.

- ¿Qué dibujas?

- Flores y muñequitos sin sentido, es lo único que sé dibujar. -sonrió avergonzada.

- No está mal. -opiné acercándome a ella-. Es bastante bueno.

- Oh, gracias. -musitó mirándome risueña-. ¿Pudiste convencerla?

- No lo sé.

- Ouh... Espero que ella venga. Por cierto, no es por ser grosera pero me gustaría hablar con ella a solas.

- Lo sé, si ella viene me iré.

- Gracias por ayudarme y entender.

- No hay de qué. -musité.

- Ow, eres muy dulce, JungKook. ¿Puedo tocar tus mejillas? No lo malinterpretes, es solo que me da un poco de ansiedad no saber qué se siente tocarlas.

Reí levemente asintiendo, eso fue raro y tierno a la vez.

- Dios, quién sea que vaya a tener la suerte de hacer esto cuando quiera es muy afortunada.

Sus tibias manos acunan mi rostro, permitiéndome poder contemplar la dulzura de sus brillantes y oscuros ojos, y observar sus delgados labios.

Es tan sutil en esto que siento una sensación extraña, de algún modo la rudeza de JeWeil viene a mi mente y me hacen sonreír inconscientemente, ella está loca.

JeWeil debo de aceptar que me acostumbré a tu carácter y ahora siento extraña la forma en la que OhYeon me está tratando.

Fotito del lunar de JK porque está bien bonito.🥺💗✨

Dato innecesario: Esté capítulo no iba a ser el 27 sino el 25 pero al final no lo publiqué hasta ahora así como muchos más en borradores
👁️👄👁️.

¿Les gustaría que al final de la historia se le hiciera una entrevista a cada uno de los personajes? c:v

No sé, sólo se me ocurrió xd.

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¡Gracias por leer!💙