Capítulo 7: Juntos, siempre.
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t/n espera paciente a Neteyam en el lugar acordado, junto a uno de los árboles más grandes que quedan en el bosque de Pandora. Trece años luego de la Batalla con los humanos, la naturaleza y Eywa se han recuperado, y el bosque parece ser el que era antes.

La chica observa el camino, y puede ver a Neteyam caminando hacia ella, acompañado de su hermana pequeña, Tuk. Ella adora a t/n, y se ha hecho habitual que Tuk acompañe a Neteyam cuando visita a t/n.

—Neteyam, estás agotado—Dice t/n cuando lo ve llegar. Su rostro se ve más cansado de lo normal, y la manera en suspira le demuestra lo agotado que está.—Puedo ver las ojeras en tus ojos

—No te preocupes—En ese instante, la pequeña Tuk ya está distraía mirando las flores y buscando pequeñas criaturas entre las plantas. Neteyam y t/n planeaban tener una tarde juntos, charlando y paseando, pero t/n sospecha que más bien deberán dedicarse a cuidar a Tuk.—Lamento la tardanza, y lo siento, tuve que traer a Tuktirey, nadie más podía cuidarla

—No me molesta, tranquilo—Responde t/n. Su mirada se posa directo en los ojos de Neteyam, los cuales parecen luchar por mantenerse en pie o con ánimo.—No estás descansando ¿Qué hiciste anoche?

Neteyam suelta un suspiro. Su amiga lo conoce a la perfección.

—Me quedé con mi padre cazando—Explica Neteyam mientras observa a Tuk, para no perderla de vista.—Me enseñó que las mejores presas salen en la madrugada

—¿Y hoy?—Pregunta t/n, pues sabe que seguramente ha lidiando con más tareas.

—Estuve ayudando a Mamá a afilar sus flechas—Agrega Neteyam.—Luego llevé a Tuk a pasear

—¿Y..?—Vuelve a insistir t/n

—¿Cómo sabes que hay más?

—Porque te conozco, Neteyam—Aclara t/n regañándolo.—Sé que tiendes a asumir más responsabilidades de las que puedes cagar

Neteyam asiente abatido. Ella tiene razón.

—Luego Lo'ak se metió en una pelea y tuve que interferir—Explica. Mentalmente, t/n maldice a Lo'ak por ser un dolor de culo para Neteyam todo el tiempo, pero también agradece que Neteyam haya estado ahí para ayudar a su hermano.—Creo que Kiri es la única que hoy no ocupó mi tiempo. Y bueno ahora estamos aquí, Tuk quería recorrer esta parte del bosque viendo las flores

—Neteyam—Dice t/n en un tono preocupado. Ella se acerca a Neteyam, colocando sus manos sobre los hombros del chico.—Debes aprender a decir que no, a poner límites

—No puedo t/n—Neteyam niega cabizbajo.—Ellos confían en mi, mis padres, mis hermanos—Explica firme.—Debo cuidar de ellos y ayudarlos

—¿Y cuando cuidarás de ti, Neteyam?—Pregunta t/n realmente angustiada por el aspecto de su amigo.

—Bueno, para eso estás tu, ¿No?—Bromea Neteyam, ganándose un leve golpe en el hombro por parte de t/n.

—Hablo en serio, no estoy bromeando—Regaña t/n intentando reprimir su risa. En cierto sentido, Neteyam tiene razón. Ella siempre ha estado ahí para cuidarlo, sin pedirle favores a cambio. Parece ser la única que no espera nada de él más que su amistad.—Necesitas relajarte, distraerte

Neteyam está a punto de responder, pero una voz y pisadas en el camino lo interrumpen.

—¡Hey, Neteyam!—Grita alguien. Neteyam y t/n se voltean, para ver a los chicos de la tribu de su misma edad. Neteyam se pone tenso, son Rukhe y Kiyev, acompañados de otro de sus amigos Tanuk. Si bien con los años, las bromas y malos tratos hacia t/n disminuyeron, Neteyam aún no pierde el rencor hacia ellos.

—Rukhe, Kiyev—Saluda Neteyam en un tono serio.—Tanuk

—Iremos a pasear en Ikran, Tanuk consiguió el suyo ayer—Comenta Rukhe, no sin antes dedicarle una mirada a t/n. Es como si la mirara con recelo, casi con desprecio. A pesar de ello, la ignora por completo y ninguno de los otros chicos la saluda.—Queremos mostrarle algunos trucos

—Felicitaciones Tanuk—Dice Neteyam.—Lo siento, voy a quedarme con t/n...

—No—Interrumpe de golpe t/n.—Olvídalo, ve con ellos

—Pero...—Neteyam se siente confundido.

—Bueno, no queríamos molestarlos—Bufa Rukhe al ver la conversación entre Neteyam y t/n.

De inmediato, los tres jóvenes na'vi se dan la vuelta dispuestos a seguir con su camino.

—Pero habíamos acordado pasar la tarde juntos cuidando a Tuk—Dice Neteyam confundido, sin entender el repentino deseo de t/n por no pasar tiempo con él.

—Yo la cuidaré—Asegura t/n.

—Pero se lo prometí a mis padres...—Debate Neteyam, mientras mira a Tuk a unos metros, quien está demasiado ocupada en las flores como para notar que algo ocurre detrás de ella.

—Shh, yo te cubro—Dice t/n con complicidad.—Necesitas esto, una tarde de chicos, volar, relajarte

t/n toma la mano de Neteyam, buscando insistirle. Neteyam entrelaza sus dedos, recibiendo el tacto y el apoyo de su amiga. Sin embargo, t/n está segura de haber recibido una especie de ráfaga, una descarga de energía, sólo con sentir la mano de Neteyam sobre la suya.

—t/n...—Dice Neteyam con duda—¿Estás segura?

—Completamente—Responde t/n, separando su mano de la de él para así no desconcentrarse.

Neteyam se voltea y ve que aún puede alcanzar a los chicos.

—Prometo volver antes de que anochezca—Asegura Neteyam.

—Te estaré esperando—Dice t/n en una sonrisa, satisfecha de haber logrado que su amigo se distraiga aunque sea por una tarde.—Ve y diviértete

—¡Hey, chicos!—Grita Neteyam mientras corre hacia ellos.

t/n puede ver como los chicos lo reciben con ansias y los cuatro desaparecen poco a poco entre la profundidad del bosque. Soltando un suspiro, se acerca a la pequeña Tuk.

—Hey Tuk—Llama t/n su atención

—¿Donde fue Neteyam?—Pregunta la pequeña al notar la ausencia de su hermano mayor.

—Ese será un pequeño secreto —Dice t/n nerviosa.—¿Qué te parece una tarde de chicas!

—¡Genial!—Grita Tuk emocionada. La mayor se ríe ante lo fácil que es convencerla.—¿Me enseñas a hacer brazaletes?

—Claro, vamos—Responde t/n, dispuesta a pasar todo el día de niñera con tal de dejar que Neteyam sea feliz un rato.

[...]

Ya está anocheciendo, el cielo se ha tornado entre un naranja oscuro y un profundo púrpura. Neteyam debería haber aparecido, pero no hay rastro de él.

t/n ha llevado a Tuk cerca del hogar de los Sully y allí esperar a Neteyam. Impaciente, t/n mueve su cola de lado a lado y muerde sus uñas.

—Vamos Neteyam aparece—Susurra para sí.

—Tengo mucho sueño—Se queja la pequeña Tuk, quien ya debería estar en su hamaca lista para dormir.

—Lo sé Tuk, pero no podemos volver sin Neteyam—Consuela t/n, abrazando a la pequeña por la espalda-

—¿Tu y él son novios?—Pregunta Tuk en un bostezo, con una indiferencia que deja perpleja a t/n.—

—¿Q-qué?—Apenas responde t/n.—No ¿Por qué lo dices?

—Lo'ak siempre molesta a Neteyam con eso—Dice Tuk mientras frota sus ojos, que ya sienten los párpados pesados.—Y Neteyam nunca se lo niega

t/n no sabe que responder, simplemente está boquiabierta. Algo en ella despierta otra vez, como hace unas horas al tomar la mano de Neteyam, o esa extraña sensación que invade su estómago cuando se recuestan juntos en el césped. ¿Qué es ese extraño sentimiento? ¿Por qué se alegra tanto de la cercanía de su amigo y se siente tan vacía cuando él no está?

Sin embargo, algo, o más bien alguien, interrumpe sus pensamientos.

—¿Tuk?—La voz de Neytiri a sus espaldas deja helada a t/n.—Oh Tuk, te estábamos buscando

—¿Dónde está Neteyam, t/n?—Pregunta Jake Sully a t/n, con voz firme.

—Uhm, él estaba aquí hace un momento, ya está por llegar y...

—¡t/n, ya estoy aquí!—Grita la voz de Neteyam a lo lejos.—¡No sabes lo genial que fue! Sobrevolamos más alto de lo que alguna vez lo he hecho y...

Neteyam se detiene en seco. Se queda perplejo al ver a su madre y a su padre mirándolo con desaprobación.

—¿Volando?—Pregunta Jake entredientes.—¿Estabas volando cuando te pedimos explícitamente que cuidases a tu hermana?

—Y-yo, señor...—Apenas dice Neteyam cabizbajo. t/n se llena de nerviosismo y su corazón late con fuerza ante la incómoda situación.

—¿Estuviste perdiendo el tiempo y además dejas a t/n cuidando de tus responsabilidades?—Regaña Neytiri mientras carga a la somnolienta Tuk entre sus brazos.

—No debí hacerlo, lo siento—Susurra Neteyam.—Aceptaré cualquier castigo que piensen para mí

—¡No!—Interrumpe t/n de pronto.—Asumo toda la responsabilidad, porfavor, no fue culpa de Neteyam

—¿Qué dices t/n?—Pregunta Jake indignado.—No intentes defenderlo

—¡Yo lo convencí de que fuese!—Explica t/n desesperada.—Lo vi cansado, agotado de tantas responsabilidades que pensé que sería buena idea que fuese a volar con los chicos—Agrega t/n.—Él no quería pero yo insistí...

—Neteyam...—Suelta Neytiri.

—Sólo quería que Neteyam tuviese una tarde tranquila con los chicos, que se divirtiera y que por un rato no pensara en ser el hermano mayor que carga con todo—Susurra t/n, temerosa por la reacción de los Sully.

Hay un gran silencio, un incómodo silencio. Jake mira a Neytiri buscando su aprobación y ella asiente con la mirada.

—Bien, sólo...—Dice Jake.—Que no vuelva a suceder. Ahora, vamos a casa

Neteyam asiente y ve como sus padres dan la media vuelta caminando de regreso.

—Gracias, en serio—Susurra Neteyam a t/n.—No debiste culparte por mí

—Sólo dije la verdad—Asegura t/n.—¿Te divertiste?

—Cómo nunca antes

—Entonces eso es todo lo que importa

Y entonces t/n que entendió, que por alguna razón, ella estaría dispuesta a hacer todo lo posible por ver a Neteyam feliz.