* a partir de este capítulo, los hechos de esta historia ocurren al mismo tiempo que los acontecimientos de la segunda película.

Capítulo 10: Nueva vida, nueva rutina.

•• <<────≪•◦⚜◦•≫────>> ••

t/n suspira cuando ve  Tuk acercarse una vez más con ojos suplicantes  y aburridos. Ya anochece, y la pequeña Sully continúa a la espera de que su familia regrese de su misión. Como todos los demás niños, se ha quedado al cuidado de t/n, en un pequeño rincón del campamento que han convertido en una especie de guardería para niños cuyos padres deben ir a luchar con la RDA.

—¿Cuánto falta?—Pregunta Tuk mirando a t/n y tirando de su cola.

—Tuk, tranquilízate ¿Si?—Dice t/n en un suspiro. Intenta mantener su paciencia y comprender a la pequeña Tuk. La mayoría del tiempo veía a sus padres y hermanos arrojarse al peligro con tal de proteger al pueblo, y eran pocas las veces que podían pasar tiempo en familia, al menos no desde el regreso de los humanos.—Volverán pronto

Lo anterior le recordaba una cruda realidad; los Sullys llevaban cerca de un año exponiéndose a luchas contra los humanos. Luchas que no eran para nada simples, y que siempre ponían a todo el pueblo a rezar a Eywa por un regreso seguro. Particularmente para t/n, quien siempre se quedaba con una gran angustia por Neteyam.

Sólo pensar en Neteyam en el campo de batalla pone a t/n con la piel erizada. Su estómago da un vuelco al pensar en él herido, o siendo perseguido por algún humano en esas monstruosas máquinas. 

—Tu también estás ansiosa—Susurra Tuk al notar la mirada perdida y angustiada de t/n.

—Siempre lo estoy, todos los nos preocupamos por los guerreros—Responde, agachándose hasta tomar la altura de Tuktirey y poder mirarla a los ojos.

Tuk sonríe con malicia.

—Si, pero tu te preocupas por mi hermano—Aclara.

—Claro, es mi mejor amigo—Debate t/n.

—O tu novio

—Tuk no empieces ¿Si?—Dice t/n rodando sus ojos.—O le diré a Neytiri que comiste golosinas de savia extra

—Tramposa—Regaña Tuk entrecerrando sus ojos.

t/n está a punto de responder, pero otro pequeño na'vi se acerca a ella con ojos llorosos.

—t/n—Solloza, mostrado la punta de su cola y el reciente rasguño en ella.—Tengo una herida

—Oh pequeño—Dice t/n, quien no tarda en ir por lo necesario para curarle. Mo'at, le dejó lo necesario para encargarse de los niños, mientras ella y Kiri se encargan de los adultos. Rápidamente, t/n se encarga de vendar la herida con hierbas curativas.—Veamos, esto te ayudará—Dice ajustando la venda.—Como nueva

El pequeño niño agradece y se reúne con el resto. Todos continúan jugando y acudiendo a t/n cuando necesita algo. Mientras tanto, t/n intenta sacar de su cabeza la angustia que la llena.

—¡Niños no corran!—Regaña t/n al ver a los niños alejarse demasiado.—Hey, ¿Cuántas veces debo decirles que no corran por aquí?—Dice alzando su voz.—Es peligroso, pueden caer y...—¡Tuk ven aquí!

Por milésima vez, Tuk está corriendo hacia otro lado de la zona de niños, abriéndose camino entre las tiendas de campaña de otras familias, sin importarle a quien empuja en el camino.

—¡Tuk!—Regaña t/n.—¡Regresa aquí!

—¡Volvieron!—Exclama Tuk con emoción.—¡Los guerreros volvieron!

—¡Tuk espera debes quedarte con los demás!—Inútilmente, t/n intenta seguirle el paso, pero ese demasiado tarde. Se ha alejado demasiado y no puede abandonar al resto de los niños.—Es imposible

—¡t/n! ¡Safik está jalando de mi cabello!—Reclama una niña a sus espaldas.

t/n suspira. Nota a los lejos como Jake Sully y Neytiri se bajan de sus Ikrans, seguidos por Neteyam y Lo'ak. Ninguno tiene buena cara, y puede ver como discuten. A t/n le arden los pies por las ganas que tiene de acercarse, pero sabe que su primera responsabilidad es atender a los niños. Más tarde podrá ver a Neteyam, y así calmar su ansioso corazón que parece no poder estar lejos de él.

[...]

La noche ha caído, y todos los niños han regresado con sus familias. Finalmente t/n tiene un tiempo a solas y va hasta su tienda de campaña. A diferencia del resto, ella vive sola. Si bien los Sully le han invitado innumerables veces a vivir con ellos, t/n no quiere estorbar. Intenta aceptar su realidad, como huérfana, y abrazar un poco su soledad.

Se pregunta varias veces si debe ir a ver a Neteyam y asegurarse de cómo está, pero sabe que luego de una pelea familiar, especialmente de los Sully, es mejor no entrometerse. Intenta distraerse ordenando su tienda de campaña, reorganizando sus medicinas y materiales, cuando un sonido en la entrada detiene sus pensamientos.

Neteyam se abre paso, con un rostro abatido y cansado.

—¿Puedo pasar? ¿O los niños aún te tienen ocupada?—Pregunta Neteyam con su voz ronca y una sonrisa.

t/n se gira inmediatamente, sintiendo como su corazón late a mil por hora. Se ha acostumbrado a esa sensación cada vez que él está cerca. Pero esta vez algo más acelera su corazón; el aspecto de Neteyam, su vendaje en el pecho y los rasguños en su rostro.

—¡Ma'teyam!—Suelta angustiada, acercándose rápidamente hasta él, tomándolo por los hombros e inspeccionándolo.—Por Eywa ¿Qué te pasó?

—Nada, herida de batalla—Dice Neteyam con indiferencia, tomando las manos de t/n entre las suyas.

—¿Qué tonterías dices?—Responde enojada t/n al ver como minimiza su aspecto.—¿Qué fue lo que pasó?—Pregunta, pero ve como Neteyam se muerde el labio inferior, dudando si responder. Entonces t/n entiende todo.—Lo'ak...

—Ya sabes, él metió su trasero donde no debía y...—Explica Neteyam.

—Tú fuiste al rescate—Termina de decir t/n.

—Me conoces bien—Neteyam se encoge de hombros y camina hasta la cama de t/n. La cama es un conjunto de hojas bien acomodadas, lo suficientemente grade para que el chico se recueste y t/n se siente a su lado.

—Neteyam—Suspira t/n.—Odio que te pongas en peligro

—Hey, estoy bien ¿Si?—Neteyam asegura, tomando la mano de t/n y mirándole fijo.—No puedes deshacerte de mi tan fácilmente

—Sabes a lo que me refiero—Susurra t/n—Algún día podrías simplemente no ir a esas batallas y quedarte aquí conmigo

—t/n, sabes que aprecio el tiempo contigo—Responde Neteyam.—Pero lo mío no son los niños y hacer collares de cuentas todo el día—Dice en tono de burla, y t/n no tarda en darle un golpe en el hombro.—Soy hijo de un soldado, de Toruk Makto y una feroz cazadora como mi madre—Recuerda Neteyam.—Mi lugar está allí

—Lo sé—Responde t/n. Sabe que es inútil discutir con Neteyam sobre su rol en las batallas. Él tiene muy claro su papel y responsabilidad.—Pero eres muy joven—Entonces, el tono de voz de t/n se llena de tristeza. Ya no es más una conversación sobre como su mejor amigo se pone en peligro. Es más bien, sobre como sus vidas han cambiado en cosa de un año.—Somos muy jóvenes para estar en esta guerra

Neteyam nota como los ojos de t/n se apagan. Odia eso, siente una puntada en el pecho cada vez que ve a su amiga triste. Siente la urgente necesidad de hacerla feliz, de verla sonreír siempre y asegurarse de ello por sí mismo. Por un segundo, Neteyam se pregunta si todos los amigos se sienten así. 

—Ganeremos, lo prometo—Dice Neteyam, acariciando la mejilla de t/n.—Todo será como antes

t/n intenta disimular el escalofrío que la recorre cuando Neteyam la acaricia. No importa que tan cerca esté, ni cuan confusas sean sus acciones; Neteyam no puede enterarse que ella está irrevocablemente enamorada de él.

—Eso espero—Dice t/n, separándose de su tacto.—Deberías ir a tu tienda de campaña y dormir, estás agotado

—¿Puedo dormir aquí?—Pregunta Neteyam, recostando su cabeza en el regazo de t/n.

Oh, no de nuevo. Piensa t/n, pues sabe que cuando Neteyam se recuesta sobre ella,no hay vuelta atrás. Él dormirá pacíficamente mientras ella lo admira, y se pregunta por qué él no puede sentir lo mismo.

—Ya has dormido aquí tres veces esta semana—Aclara t/n.—Neytiri pensará que soy mala influencia

—Porfavor—Dice Neteyam, cerrando sus ojos.—Sabes que odio oír los ronquidos de Lo'ak y los de papá

—Tu también roncas—Reclama t/n.

—Si pero estás acostumbrada

—Como digas—Dice t/n rendida.—Puedes quedarte

—Puedes...—Pregunta Neteyam en su bostezo.—¿Puedes hacer eso que haces con mi cabello?

t/n sabe a que se refiere. Más de una vez Neteyam la ha descubierto acariciando sus trenzas y decorándolas con nuevas cuentas.

—Uhm claro—Responde nerviosa.—Recuerda que hoy es noche de fogata y de historias

—No tengo ganas de ir, pero es mi deber—Responde en un gruñido. Al parecer la siesta de Neteyam será interrumpida.

—Entonces te despertaré—Asegura t/n.—Descansa

En ese momento, Neteyam empieza a caer en un lento y profundo sueño. Su amiga, su leal compañera, suspira lamentándose. Se pregunta como ha podido ser tan tonta como para enamorarse de su mejor amigo, por enamorarse del na'vi más inalcanzable de Pandora.

[...]

Luego de una batalla exitosa, los Omaticaya se reúnen alrededor del fuego a celebrar. Si bien corren tiempos de guerra, un pueblo no puede dejar atrás sus tradiciones y cada logro contra los humanos debe ser celebrado. Quizá es una pequeña fogata, con algunas canciones y comida, pero es suficiente para levantar los ánimos.

—¡Wooohooo!—Grita Rukhe, ya de quince años.—¡Vamos Neteyam! ¿Dónde está tu ánimo? ¡Esto es una fiesta!

Neteyam y t/n acaban de llevar. El joven Omaticaya a regañadientes llega a la fiesta. Hubiese preferido seguir durmiendo, pero sabe que como hijo del Oloektan debe estar allí, animando a su pueblo. Aunque al ver el aspecto de Rukhe y sus amigos, quienes parecen haber bebido hidromiel de sauce, sabe que el ánimo de emborracharse no es algo que comparta.

—No molestes ¿Quieres?—Bufa Neteyam.—No estoy de ánimo

—¡Vamos!—Kiyev golpea la espalda de Neteyam intentando animarlo.—Hoy la batalla estuvo asombrosa—Felicita Kiyev.—Bueno, hasta tu pequeño incidente

—Cierra la boca—Gruñe Neteyam. Inmediatamente los ánimos cambian. A su lado, t/n puede sentir la tensión de Neteyam frente a los chicos.

—Sólo digo que...—Kiyev se excusa levantando sus brazos en gesto de inocencia.—Quizá dirigir una batalla no es lo tuyo....—En ese momento, Kiyev gira su rostro y encuentra su mirada con la de t/n—Pero miren que tenemos aquí, t/n

—Kiyev—Saluda t/n disgustada. Desde el regreso de las personas del cielo, había estado tan ocupada cuidando los niños que había logrado deshacerse de la presencia quienes la molestaban.

—Wow, que cambiada que estás—Dice Kiyev mirándola de pies a cabeza.—Ya casi no te vemos, siempre estás ocupada siendo niñera

—Prefiero a los niños—Defiende t/n.—Cuando alcanzan tu edad se ponen idiotas como tú

—¡Vamos no seas ruda conmigo!—Dice Kiyev en una sarcástica risa.—Sé que no me comporté bien en el pasado, pero estamos en tiempos de guerra y los tiempos difíciles unen a todos ¿No es así chicos?

t/n puede notar con Neteyam presiona su mandíbula. Está realmente fastidiado de los chicos.

—Como digas—Responde t/n para terminar la conversación.—Sin rencores

—Entonces, ¿Aceptarías bailar conmigo?—Pregunta de pronto Kiyev.

—No gracias—Responde t/n.

—¡Vamos!—En ese instante, Kiyev se acerca a t/n, tomando su cintura.—Para sellar nuestra tregua

—No—Apenas puede tartamudear t/n por la impresión de su acción.

—¡t/n no seas aguafiest...

En ese instante, el cuerpo de Kiyev es empujado varios metros atrás. Neteyam se interpone frente a t/n, con un rostro furioso y su respiración agitada.

—Te dijo que no, imbécil—Gruñe Neteyam a los demás chicos. Todos agachan sus cabezas. Parecen haber recordado que están en presencia del futuro Oloektan.—Largo de aquí Kiyev, no busques problemas

—Lo siento, Neteyam—Susurra Kiyev.

—Es con t/n con quien debes disculparte—Escupe Neteyam listo para abalanzarse de nuevo contra Kiyev. 

t/n no tarda en tomar su brazo para detenerlo.

—Neteyam, tranquilo—Susurra, tirando de él y encaminándolo a otro lugar.

Cuando Neteyam y t/n logran alejarse un poco de la fiesta, 

—No debiste echarlo así—Regaña t/n. Nunca ha querido que Neteyam se meta en problemas y mucho menos por ella.

—Te estaba faltando el respeto—Debtate Neteyam, aún enojado.

—Está bien, sobreprotector

—Sólo te cuido—Neteyam toma una vez más la mano de t/n.—Siempre lo haré

—Lo sé—Dice t/n sonriendo. 

Las miradas de ambos conectan, de una manera única. Neteyam puede ver en los ojos de t/n la calma que necesita, y ella mira con ilusión los ojos de Neteyam. Puede jurar que la distancia entre ellos, entre sus rostros se acorta. Se pregunta si esta cercanía entre amigos es normal. Se pregunta como se sentirá besar a Neteyam.

Neteyam por su parte, no entiende por qué su cuerpo se siente como un imán con el de t/n. No puede entender por qué no puede detener su cercanía, por qué ama su cercanía.

—¡Teyam, t/n!—La voz de Tuk  interrumpe los pensamientos de ambos. Su chillona y estruendosa voz se interpone entre ambos, quienes se separan al instante.—¡Vengan, bailen conmigo!

—Tuk sabes que odio bailar—Regaña Neteyam.

—Pues eres chico perdido, porque a mí si me gusta—Debate t/n riendo y tomando su mano hasta la fogata, donde los Omaticaya se reúnen a bailar.—Dos contra uno

Fugazmente, Neteyam, Tuk y t/n bailan al ritmo de tambores y flautas típicas de los Omaticaya. 

—¡Las flechas son lo tuyo, porque eres pésimo bailarín!—Bromea t/n al ver los pasos de baile de Neteyam.

El chico ríe y se siente desafiado.

—¿Sí?—Neteyam se acerca con malicia y toma a t/n de la cintura. A diferencia de cómo se sintío con Kiyev, t/n siente como su cuerpo se acopla al de Neteyam.—Ven aquí

Ambos comienzan un baile en pareja típico del pueblo. No separan sus miradas, y sus cuerpos rozan una y otra vez. Por segunda vez en la noche, sienten esa conexión, esa sensación de estar flotando cuando sus miradas se conectan.

—¡Cambio de pareja!—Exclama uno de los músicos.

Entonces, Tsifú aparece, tomando el brazo de Neteyam y empujando a t/n a un lado.

—¡Oh Neteyam!—Exclama, sonriendo tanto que Neteyam está seguro de que puede ver todos los dientes de la chica.—Que gusto verte, supe lo que ocurrió hoy ¿Estás bien?

—Uhm si Tsifú, estoy bien—Responde Neteyam incómodo.

—¡Ven baila  y conmigo entonces!

Y en un abrir y cerrar de ojos, t/n pierde a Neteyam, y lo ve irse junto a Tsifú. Los ve a ambos bailar, y en su mente retumban las voces que le dicen la realidad. Neteyam es y será un lider, y Tsifú es la mejor entrenada para ser Tsahik. Están destinados, y por más que le duela, Neteyam terminará emparejado con Tsifú.

t/n piensa que está condenada a ser nada más que la amiga de Neteyam.

-¡hey! espero que les haya gustado este cap más largo <3 ¿qué opinan del fanfic? estoy preparando más capítulos, pronto neteyam y los sully deberán abandonar el bosque y viajar a los arrecifes ¿qué pasará con t/n?