𝘾𝙪𝙖𝙧𝙚𝙣𝙩𝙖 𝙮 𝙘𝙞𝙣𝙘𝙤
Estaba con Barca sentados en los columpios de un parque, era una noche bastante estrellada y no habían muchas personas a nuestro alrededor, era algo simplemente perfecto
—¿Qué piensas?.— preguntó —Haz estado callada durante mucho tiempo.—
—No pienso en nada, literalmente.— reí
Ambos miramos el cielo, era realmente hermoso
—¿Alguna vez quisiste regresar con tu mamá?.— preguntó y lo miré
—No, desde que vivo con ustedes soy muy feliz, jamás pensaría en irme.— respondí —¿Por qué lo preguntas?.—
—Tuviste que pasar por muchas cosas desde que vives con nosotros.— suspiró —La mala onda de Roberto, tu anemia, mi inmadurez, secretos y todo lo que pasó con rocío.—
—Pero la mayoría han sido momentos increíbles y felices.— hablé —"Si todos los días fueran soleados, la vida sería un desierto".—
Barca rió un poco y una sonrisa salió en su rostro
—¿Dónde sacaste esa frase?.— preguntó mirándome
—Lo leí en algún lado.— respondí —Pero se me olvidó dónde.—
—Me gusta mucho esa frase, tiene mucha razón.— dijo y asentí con la cabeza —¿Puedo ser sincero contigo?.—
—Ya sabes que sí.— sonreí
—Opino que sería bueno que visitaras a tu mamá.— dijo y lo miré confundida —Toda tu vida vivieron juntas y después simplemente desapareciste, pudo ser la peor madre pero creo que merece saber que estás bien.—
¿Ahora por qué estaba tan interesado en mi madre? Todos los antecedentes me hacían dudar un poco de sus intenciones
—No quiero verla, me hará regresar.— dije
—¿No crees que entienda que eres feliz?.— preguntó y negué con la cabeza —Deberías intentarlo.—
—¿Por qué lo haría?.— cuestioné
—No puedes estar todo el tiempo enojada con ella, te arrepentirás en el futuro y quizás sea tarde.— respondió
—¿Por qué sacaste este tema?.— pregunté ahora —¿Quieres que vuelva a vivir con ella? ¿Ya no me quieres en la fraternidad?.—
—No, obvio no quiero eso.— respondió riendo nerviosamente —Tenerte en la fraternidad es la mejor cosa que me pasó.—
—¿Entonces?.—
—Tú tienes la oportunidad de arreglar las cosas con tu mamá, pienso que deberías hacerlo.— exclamó —Ademas no está bueno que no puedas ir a la cuidad sin que alguna de las amigas de tu mamá te reconozca y tengas que salir huyendo.—
Puede ser que Barca tenía razón, no podía ir a la cuidad sin disfrazarme, aún así solo podía estar ahí unos minutos antes de cruzarme con alguna conocida.
—Siempre que quieres salir a comer o al supermercado tenemos que ir a otra ciudad.— recordó —Nos hacemos más de 1 hora de camino.—
—A mi no me molesta estar 1 hora en el auto contigo, los viajes son divertidos.— murmuré
—Tampoco me molesta.— aclaró —Pero pienso que los viajes largos son tediosos.—
Nos quedamos en silencio unos minutos, yo pensaba cuál era la posibilidad de hablar con mi mamá y que ella entendiera
—¿Y que esperas?.— pregunté —¿Qué le diga "Hola mamá, volví después de tanto tiempo solo para decirte que viví con 5 chicos en medio de un bosque, espero que eso te deje más tranquila"? Seguramente el sueño de toda madre es que sus hijas desaparezcan y vivan con un montón de chicos desconocidos.—
Barca pareció pensarlo unos momentos, sabía que ahora yo tenía razón
—¿Y si nosotros le explicamos todo?.— preguntó
—Eso sería peor.— reí —Dejemos las cosas como están ahora.—
—En algún momento tendrás que volver a hablar con ella.— habló y yo sabía que tenía razón
—Espero que ese momento no sea pronto.— dije
—¿Y si la invitamos a desayunar mañana?.— propuso y lo miré mal
—No quiero verla.— exclamé para que entendiera
—Entiendo, perdón.— dijo y bajó la mirada —No quiero que te enojes, solo quiero ayudarte a resolver los problemas que puedas tener en tu vida.—
—No estoy enojada.— suspiré —No quiero que me presiones a hablar con ella, no quiero que esté en mi vida de nuevo.—
—No quería que te sintieras presionada.— dijo —Perdon.—
Me levanté del columpio y él me miró
—Vamonos.— pedí
—¿Arruiné nuestra salida?.— preguntó levantándose también
—No.— respondí rápidamente —Tengo frío.— reí
Eso era cierto, habíamos estado sentados ahí un buen rato, la noche era fría y yo traía un vestido algo corto, era cierto que traía puesta la chamarra de Roberto pero aún así tenía frío
—¿Quieres ir a la fraternidad?.— preguntó mientras empezabamos a caminar juntos
—No lo sé, ¿qué más podemos hacer?.— pregunté
—Podemos ir a cenar o al cine.— propuso
—Tengo una mejor idea.— sonreí —Prestame tu celular.—
Él sacó su celular y me lo dió, yo solo busqué entre los contactos hasta encontrar el número de Juan
—¿Qué haces?.— preguntó riendo
—Nuestra salida solos se tendrá que posponer un poco más.— reí mientras mandaba un mensaje
—¿Qué planeas?.—
—Nunca he ido a un karaoke, busquemos uno y vayamos todos.— respondí dándole de nuevo su celular
—¿Sabes cantar?.— preguntó riendo y también reí
—Obvio.— mentí mientras seguía riendo
—Lo único que quiero es ver cómo canta Juan, será un espectáculo.— exclamó Barca —No lo sabes pero antes le decíamos Maluma, ahora es más como "Juanmilo".—
—¿Juanmilo?.— pregunté carcajeando
—Por Camilo, el que canta la de "Tú tú".— explicó —Hay muchas referencias que aún no sabes.—
—A mí me gusta Camilo, pero creo que seré muy fan de Juanmilo.— reí
Seguimos caminando hasta llegar al auto, subimos y mientras él iba manejando yo iba buscando en google un karaoke cercano
—¿Ya encontraste un lugar?.— preguntó —Llevo dando vueltas más de 20 minutos porque no sabemos a dónde ir.—
—Dame unos minutos más.— respondí, no encontraba nada
Diez minutos pasaron y por fin encontré un lugar que estaba abierto, empecé a indicarle por dónde ir y le mandé la ubicación a los demás.
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