—— WE ALL MAKE MISTAKES ——

—Aquí tenéis. Si esto no os prepara el hígado para el Mardi Gras, nada lo hará.— Les dijo Poppy a los cuatro mientras dejaba sobre la mesa cinco vasos.

—Mi hígado ya estaba muerto antes de ser vampiro, pero gracias Poppy.— Sonrió Josh haciendo reír a los demás.

—Bueno, pues debemos de hablar de los preparativos del Mardi Gras.— Empezó a decir Vincent, haciendo que Freya, Astrid, Taylor y Josh le mirasen con una expresión de pocos amigos.

—Oh, vamos, Vincent, no empieces.— Le pidió Freya. —No ha habido ningún problema en estos diez años.— Le recordó sin entender porque el brujo estaba, constantemente, en alerta.

—Eso es por que no damos por hecho que no va a salir bien. Te recuerdo que los momentos de prosperidad van seguidos por momentos de gran dolor a menos que estemos en alerta.— Les recordó haciendo que los cuatro le mirasen de mala forma, en diez años no había habido ninguna clase de problema, ¿porque ahora iba a ser diferente?

—Gracias, aguafiestas.— Murmuró Taylor mientras se llevaba el vaso de bourbon a los labios.

—Freya, ¿que haréis para el Mardi Gras?— Quiso saber Vincent, centrando toda su atención en la mayor de los Mikaelson.

—Los brujos prepararán la carroza en la ciudad de los muertos.— Se limitó a decir.

—Los lobos en el pantano.— Intervino por primera vez Astrid.

—¿Josh?— Inquirió el brujo esperando que el vampiro le dijera lo que se esperaba de la facción de los vampiros.

—Sí.— Se limitó a decir mientras apagaba su teléfono.

—Ahora es cuando dices que los vampiros evitaran a los dos.— Le recordó con obviedad.

—Sí..., en realidad he pensado que podíamos ofrecerles algún incentivo.— Empezó a decir el vampiro, captando la atención de todos.

—¿Siete años de prosperidad y de paz no bastan?— Preguntó Taylor sin comprender cuál era ese incentivo que los vampiros querían para mantener aquella paz.

—Sí, pero necesitamos más... anillos de día.— Admitió.

—¿Estas negociando Josh?— Preguntó sorprendido Vincent, mientras Josh respondía un mensaje de su telefono, haciéndoles ver que estaba hablando con Marcel. —Marcel.— Respondió con obviedad.

—Primero, no se leen los mensajes ajenos; y segundo, yo no estoy...— Empezó a decir Josh algo nervioso.

—Josh, te he dicho miles de veces que lo que pasa en esta ciudad ya no es asunto de Marcel Gerard, ¿vale?— Le recordó Vincent cansado de que Josh siempre recurriera a Marcel. —Es lo que intento deciros siempre, Marcel es Rebekah, Rebekah es Kol y Elijah, por no hablar de Klaus que al parecer ha perdido la cabeza.— Añadió con obviedad, haciendo que Taylor mirase a su hermana ya que tiempo atrás era la única que conseguía que Klaus, por un breve periodo de tiempo dejará de parecer un vampiro sin humanidad, pero eso ya no sucedía, no desde que Eliana vio a su padre matar y él no respondió. Desde entonces, Astrid había interpuesto entre ambos una barrera donde no solo quería proteger a sus hijas, sino también a si misma.

—Venga, no sabemos si los rumores son ciertos.— Intervino Freya sabiendo que los rumores sí eran ciertos.

—Lo que se, es que hay que procurar que estén lo más lejos posible de esta ciudad, y Freya seré un aguafiestas si tengo que recordaros la clase de magia que habita en los cuatro. Con que dos estén en el mismo lugar, será una bomba de relojería.— Insistió Vincent haciendo que todos pusieran una mueca de aburrimiento, pues a pesar de los diez años que habían pasado, el brujo seguía creyendo que los problemas con el vacío no habían terminado.

—Calmate.— Sentenció Taylor cansada. —Marcel esta en Nueva York, Elijah esta en...— Empezó a decir sin saber como referirse al estado en el que el noble se encontraba.

—Amnesialandia.— Intervino su hermana.

—Sí, y Klaus esta perdido por el mundo. No hay peligro alguno.— Sentenció Josh con obviedad.

—Declan te envía esto para que aguantes hasta vuestra cita de mañana.— Le dijo Poppy a Taylor la cual sonrió mientras la camarera dejaba sobre la mesa el plato con comida.

—Joder, sino te casas con él lo haré yo.— Comentó Josh haciendo reír al resto por su comentario.

—Poquito a poco, es humano, la vida ya es bastante complicada.— Suspiró la híbrida.

—Hablando de complicaciones.— Dijo Astrid mientras mostraba la pantalla de su teléfono, donde podía verse el nombre de Alaric.

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—¿Le has dado sangre a un hombre lobo? Vaya, eso va a hacer enfurecer a mamá. Incluso diría que has batido mi récord.— Comentó Eliana mientras paseaba por su habitación aburrida.

—No es momento para hacer bromas sobre ello.— Se quejó Hope, la cual estaba en su habitación recogiendo sus cosas.

—Oh, créeme que sí. ¿Te han dicho algo más aparte de que vuelves a casa?— Quiso saber Eliana mientras se tumbaba sobre su cama.

—Qué creen que debe de saberlo nuestro padre.— Respondió Hope sorprendiendo a su hermana con aquella frase.

—No le ha importado mis doce expulsiones, ¿creen que le va a importar algo que hayas convertido en híbrido a Henry?— Quiso saber sin comprender por qué algo así haría que Klaus tuviera algo de interés sobre lo que ellas hacían o en los problemas en los que se metían.

—Ya, bueno, lo curioso es que el señor Saltzman mantenga la esperanza en él cuando se han llegado a odiar a muerte.— Comentó Hope sorprendida de que Alaric mantuviera alguna clase de esperanza sobre Klaus Mikaelson y la paternidad.

—Eso explica algunas cosas.— Murmuró su hermana pequeña recordando todos los libros que el director había escrito, en los cuales su padre era el gran lobo feroz malo.

—¿Qué tal todo por allí?— Quiso saber Hope cambiando de tema a uno menos tenso.

—Quitando que el tío Leo y la tía Yelena se han vuelto a Irlanda, nada interesante. Bueno, Taylor esta saliendo con Declan.— La informó finalmente, haciendo sonreír a su hermana de que su tía hubiera dado, finalmente, el paso.

—¿Enserio?— Sonrió Hope emocionada.

—Ya, yo también estoy sorprendida. Aunque bueno, nada sorprendió tanto como el detalle de que anulara su naturaleza de mujer lobo.— Admitió Eliana sin entender por qué su tía había tomado aquella decisión, ya que ahora se había convertido en un vampiro sin ninguna ventaja a cualquier posible ataque.

—¿Mamá sigue enfadada por ello?— Preguntó Hope esperando que aquello siguiera siendo más importante para Astrid, que lo que ella había hecho.

—Creo que ha pasado a un segundo plano.— Admitió su hermana sabiendo que en aquellos momentos su madre estaba muy enfadada.

—Genial...— Murmuró la mayor soltando un suspiró de nerviosismo.

—Hope, no te preocupes, intentaré hablar con ella. Aunque sin Leo..., va a ser complicado hacerla entrar en razón.— Admitió esperando que ella pudiera calmar un poco la furia de su madre, aunque eso era complicado.

—Luego nos vemos, hermanita.— Sonrió Hope sabiendo que lo único bueno que tenía la expulsión era que volvería a ver a Eliana, a la cual llevaba sin ver físicamente desde hacía casi dos meses. —Por cierto, Josie sigue intentando contactar contigo.— La informó sabiendo que a pesar de que su hermana pequeña había tenido problemas con Lizzie, eso no debía de haber roto la amistad que tenía con Josie, pero las cosas parecían ser diferentes.

—Adiós.— Se limitó a decir su hermana pequeña mientras salía corriendo de su habitación viendo que su madre tenía la intención de irse. —¿Vas a buscar a Hope?— Preguntó bajando las escaleras.

—Veo que te has enterado.— Comentó Astrid sabiendo que Hope y ella habían hablado.

—He hablado con ella...— Admitió confirmando la sospecha de su madre. —Mamá...— Empezó a decir mientras se acercaba a ella.

—Ni se te ocurra, se perfectamente que vas a intentar convencerme de que lo comprenda. Y no es tan fácil como cuando incendiaste medio bosque o como cuando te peleaste.— Respondió su madre, aquello lo entendía porque a fin de cuentas Eliana tenía un fuerte impulso, pero una cosa era eso y otra muy distinta crear un híbrido.

—Mi historial de expulsiones es largo, pero quiero ir contigo. No quiero entrar en la escuela, pero quiero ir.— Sentenció con firmeza sabiendo que su hermana iba a necesitar apoyo.

—Te quedarás aquí, con tus tías.— Sentenció Astrid con firmeza.

—¿Y el viaje de ambas será el castigo del silencio? Porque he vivido doce y te aseguro que es como estar en un loquero.— Alegó Eliana mientras se cruzaba se brazos haciendo que su madre suspirase.

—Venga, vamos.— Suspiró cediendo haciendo sonreír a la pequeña de las hermanas.

—¡Genial!, me moría de ganas de ver a Hope. Además de que no la ha hecho nada de gracia lo que el señor Williams la ha dicho.— Sonrió la rubia mientras se dirigía al coche, para a continuación sentarse en el asiento del copiloto.

—¿Qué es lo que la ha dicho?— Preguntó su madre confundida.

—Creen pertinente informar a nuestro padre, como si eso fuera a servir para que deje de hacer matanzas por todo Europa.— Alegó Eliana mientras ponía los ojos en blanco, recordando la imagen que tenía de su padre, aquella imagen que hizo que todos los bonitos y pocos recuerdos que tenía de él cambiaran a la imagen de Klaus haciendo una matanza como la que vio a los siete años.

—Todos los vampiros las hemos llegado a hacer.— La recordó Astrid sabiendo que ella también las había hecho, en especial cuando apago su humanidad.

—¿Enserio? ¿Le defiendes? No entiendo porque lo haces, ni porque sigues casada con él. Es el siglo veintiuno, la mujer puede hacer todo cuanto quiera. No comprendo como es que pudiste casarte con él, a ver Hope y yo no estaríamos aquí..., pero tu ya me entiendes.— Dijo la tri-híbrida sin querer entrar en detalles, ya que no entendía por qué su madre seguía manteniendo alguna clase de esperanza en que Klaus hacer entrará en razón, cuando para Eliana no creía que fuera posible, Hope tenía esperanza pero ella no, la perdió hacia demasiado tiempo.

—Primero, fui de esas mujeres que lucharon por sus derechos, de nada por que ahora tengas libertad; y segundo, a pesar de que tu padre pueda ser terco, celoso, gruñón e incluso, como tu le llamas, un monstruo, me enamore de él porque solo yo conozco su lado amable, cariñoso, tierno y detallista, solo yo conocí lo que nadie más conoce de él, ese lado que también os dejo ver a ti y a Hope cuando erais pequeñas.— Explicó Astrid sabiendo que a pesar de que Klaus tuviera muchos defectos también tenía muchas virtudes, y si ahora parecía un loco y le gustaba que le llamarán "Klaus el loco" era simplemente porque estaba lejos de todas las personas a las que quería.

—Hasta que Inadu apareció, separo a la familia y el mundo vivió feliz porque los Mikaelson terminaron separados.— Respondió Eliana sarcásticamente llevándose una mala mirada por parte de su madre al escuchar su comentario.

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—¿Tienes listas tus cosas?— La preguntó Astrid a Hope, haciendo que esta girase su cabeza para mirarla.

—Mamá...— Murmuró al ver que ya había llegado.

—El coche está afuera, vete subiendo todo lo que vayas a llevarte. Yo hablaré con el señor Saltzman.—  Sentenció la Original mientras llamaba a la puerta para después entrar en el despacho.

—Gracias por venir, Astrid.— Sonrió Alaric mientras la hacía un gesto para que tomara asiento.

—Siento lo que ha hecho.— Se disculpó la híbrida, viendo que algunas cosas no cambiaban, antes limpiaba los estropicios que Klaus provocaba y ahora lo hacía con los de sus hijas.

—Asumo que es el castigo pertinente, pero era de entender que esto terminaría pasando.— Suspiró Alaric mientras se apoyaba en la mesa.

—Lo se, hablaré con ella. Aunque creo que Eliana tendrá más éxito que yo.— Admitió sabiendo que aunque Hope era consciente de lo que había hecho, no era consciente del peligro al que había expuesto a Henry, por su suerte Eliana sí era consciente, principalmente porque ambas habían hablado de ello durante el viaje.

—¿La has traído?— Preguntó Alaric sorprendido de que la pequeña hubiera querido acercarse hasta allí.

—Insistió en venir a buscar a Hope, todavía no quiere volver y puesto que no queda mucho de curso, asumo que ya esperara al que viene.— Suspiró recordando que las cosas no habían sido tan idílicas como siempre habían querido las dos hermanas, pero la vida normal era lo que tenía, nada era idílico.

—Lo que ha hecho...— Empezó a decir el ex cazador sabiendo que eso no tardando expondrá no solo la verdadera naturaleza de las hermanas, sino también quienes eran, realmente, sus padres.

—Créeme, que lo se. Nos hemos esforzado para que nadie lo sepa y esto... nos traerá problemas. A todos.— Aseguró la Original suspirando al darse cuenta de que tendría que ayudar a Henry, y descubrir porque Hope se había ofrecido a darle de su sangre. Las cosas en Nueva Orleans se iban a poner muy tensas en cuanto se supiera que había un nuevo híbrido y está vez por culpa de Hope Mikaelson.

★★★

Empezamos el año con la primera publicación de esta última parte.

Antes de nada voy a aclarar una cosita. Astrid no volvió a ver a Klaus después del último encuentro, y apenas mantiene el contacto con él (como dato)

Bueno en este primer capítulo han pasado muchas cosas, primero no me imaginaba a Josh como líder de la facción vampirica, pero sí me esperaba verle pedir ayuda a Marcel, a fin de cuentas es su referente. Pero me encanta que Vicent sea la cabeza pensante en todo esto.

Ame escribir esa primera escena de las hermanas Mikaelson, sin duda vais a amarlas. Porque os aseguro que tras lo de Inadu y lo de Klaus, Eliana desarrolla un sentido de la protección similar al de su madre, así que os podéis imaginar que divertido va a ser todo.

Por otro parte, creo que es gracioso que sea Eliana la que hace entrar en razón a su madre. Como anteriormente Astrid hacia con Klaus, quería que vierais esos paralelismos con ella, puesto que de alguna forma es como la protagonista de esta segunda parte (después de Astrid obviamente, pero ya sabéis que As va a estar algo... desaparecida)

El enfado de Astrid le entiendo, osea las ha protegido y Hope pues bueno la ha cagado. Pero Eliana siempre, y a muerte, va a apoyar y a ayudar a Hopr, y a protegerla. Porque al final la hermandad que crean por culpa de Inadu y el ejemplo de su madre..., bueno digamos que les va a poner la cabeza como un bombo.

Por lo demás creo que no hay mucho que mencionar.

Aparte de que Eliana es la nueva oveja negra de la familia y odia a muerte a Klaus, pero todos sabemos porque. Así que os puedo garantizar que Eliana Hayley Mikaelson no se lo va a poner nada fácil a Klaus, y eso os va a encantar, porque de las dos hermanas es quien más le va a retar. De verdad os aseguro que disfrutaris de Eliana.

Se que me centro en ella, pero al final es mi personaje y al final, la protagonista del final de la historia, y os aseguro que va a estar a la altura de todo. Creerme que es digna hija de sus padres aunque ya lo vaya mostrando.

¿Qué os ha parecido el capítulo?

Os leo ♥️