—— ALL SACRIFICES ARE MADE IN THE NAME OF LOVE ——

—Esta colección no tiene precio, ¿seguro que quieres darselo todo a los Mikaelson?— Le preguntó Sofya a Marcel mientras ambos revisaban todos los objetos oscuros que el vampiro tenía en su posesión.

—Los objetos oscuros pertenecen a la ciudad, lo único que importa es que nos ayuden a vencer al vacío.— Sentenció Marcel sabiendo que usándolos podrían acabar con todos sus enemigos, y estos se resumía al vacío y a sus fieles y devotos seguidores.

—¿Aunque eso signifique confiar en la familia que diseño una arma específica para matarte?— Inquirió la vampira sin comprender porque Marcel confiaba en la familia Original cuando el odio que se tenían era reciproco.

—Las declaraciones de guerra quedan a un lado cuando el enemigo es más fuerte y es común.— Intervino en ese momento Astrid, sabiendo que se podía llegar a una tregua, además de que lo que menos les convenía a todos era pelearse entre ellos y dejar vía libre a Inadu y sus crueles planes para con la ciudad.

—Gracias por venir, Astrid.— La agradeció Marcel al ver allí a la Original.

—Bueno, tu oferta era dejarme objetos oscuros y una de mis hijas está poseída por el vacío y la otra esta desaparecida por culpa de la otra, así que...— Comentó mientras su expresión mostraba lo muy enfadada que estaba con el vacío, y por ende podía verse lo deseosa que estaba por verla sufrir de todas las maneras posibles e imaginables. —Por cierto, Sofya, si lo que te preocupa es la vida de Marcel, te puedo garantizar que si él no hace nada en contra de mi familia ellos no le harán nada.— La tranquilizó haciendo que la vampira la mirase con una expresión de pocos amigos, ya que no llegaba a creerse lo que ella la estaba diciendo.

—¿Cómo estás segura de ello?— Inquirió Sofya mientras se cruzaba de brazos esperando una respuesta por su parte.

—Por que les se mantener a ralla, después de lo que Vincent hará no podrán estar juntos. Kol se irá con Davina, mi hermano con Yelena, Elijah por su camino y de igual forma Rebekah y Klaus, el único que le puede causar problemas a Marcel es Klaus, y puedo mantenerle a ralla. Así que como ya he dicho, si Marcel no hace nada en nuestra contra, nadie le hará nada.— La tranquilizó mostrando que todos ellos sabían comportarse, todo dependía de lo cooperativos que pudieran mostrarse y de que aquella tregua no tuviera un final, sino que tardara muchos años en deshacerse. Lo que menos les convenía era que Marcel volviera a ponerse en su contra, ya que no iban a estar todos juntos para hacerle frente como habían hecho la anterior vez.

—Me alegro de que estés de nuestra parte.— Sonrió Marcel aliviado, ya que si Astrid estaba de su lado el resto de la familia Original, en especial Klaus, también les apoyaría.

—Y lo mejor de todo es que tengo un plan, pero necesito que con tu parte actúes de prisa.— Le informó haciendo sonreír a los dos vampiros al ver que finalmente iban a poder dar por finalizado aquel gran problema que suponía el vacío, ya no solo para Nueva Orleans o para las comunidades sobrenaturales, sino también para el peligro que suponía para Hope.

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—Menuda fiesta.— Intervino Marcel entrando en la iglesia donde Hope junto con el resto de fieles estaban.

—Marcel Gerard, el rey de Nueva Orleans.— Anunció Dominic justamente cuando ambos veían que había una barrera que protegía al vacío de cualquier posible ataque. —Acompañado por su mejor consejera.— Añadió mirando a Sofya, mientras los dos observaban que Eliana estaba tumbada en el suelo, a un lado del altar. —Supongo que venis para inclinaros ante el poder del vacío.— Supuso el brujo, el cual se mantenía al lado de su señora.

—Estamos aquí para ofrecer una tregua, tal y como yo lo veo, tenemos el mismo enemigo, los Mikaelson.— Explicó el vampiro esperando que con aquella propuesta el vacío se pusiera de su parte, cayendo de pleno en la trampa que habían orquestado. —Ayudarme a sacarlos de la ciudad y al final puede que haya un mundo en el que vivamos todos felices.— Insistió mirándo a la niña, la cual a pesar de que Dominic parecía ser el de las decisiones, quienes en verdad las tomaba era Inadu y pobre de aquel que no las quisiera seguir o no las aceptará.

—Diplomacia.— Observó Dominic mientras Inadu le hacía un gesto para que hiciera bajar la barrera. —Sabía elección.— Les indico mientras los dos vampiros se acercaban a las escaleras que conducían al altar mayor.

—Quiero que el rey se arrodille ante mi.— Le ordenó el vacío, haciendo que Marcel se quedará frente a ella, para a continuando arrodillarse.

—Fijaos aquelarres de Nueva Orleans, hasta el poder de Marcel Gerard no es nada ante el poder del vacío.— Les indicó Dominic justamente cuando Marcel soplaba unos polvos en dirección a Hope, la cual se durmió, para a continuación llevarlasela junto a su hermana pequeña. Al mismo tiempo, Sofya apuñaló y mató a Dominic para después llevarse a Eliana.

—Quietos, escucharme todos, discípulos y acólitos del malvado vacío.— Intervino en ese momento Klaus mientras se quedaba delante de todos los seguidores del vacío, mostrando que de la mano llevaba una bola de nieve. —Ahora que hemos vencido a vuestra señora, se os ha rebocado el poder que os prometió. Eso os deja indefensos y trae un final brusco a este patético ataque.— Les informó mostrando cuanto disfrutaba de aquella situación, a fin de cuentas todos eran responsables de lo que les estaba pasando a sus hijas. —Y este objeto oscuro tiene la asombrosa habilidad de encerraros en esta sala.— Añadió dejando caer la bola de nieve, la cual se rompió provando que los brujos quedarán encerrados, realidad que comprobaron cuando vieron que no podían salir.

—Y esa es una mala noticia, teniendo en cuenta los materiales con los que se construyó el edificio.— Intervino en esta ocasión Astrid la cual estaba en la grada de arriba, llevando de la mano una botella dispuesta a prenderla fuego para acabar con la vida de todos ellos de la manera mas cruel que podía conocer. —Con muy poquito esfuerzo esto se convertira en un infierno.— Añadió mientras el trozo de tela que había en la boca de la botella se prendía para a continuación dejarla caer encima de todos los seguidores, los cuales al no poder huir fueron consumidos por las llamas bajo la atenta mirada de los dos híbridos.

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—¿Por qué el collar no la protegió del ataque del vacío?— Preguntó Astrid sin comprender que era lo que las había hecho a ambas.

—Algo me dice que tuvo que suceder algo más.— Admitió Freya mientras suspiraba.

—¿Algo más? ¿El que? ¿Qué quisiera intentar controlarla también?— Inquirió Astrid sin comprender ni imaginarse lo que había sucedido para que Eliana estuviera así.

—Según le han dicho a Vincent, se enfrentó al vacío. Y al ver que era una amenaza la lanzó un hechizo de sueño.— La reveló Freya sorprendiendo a Astrid con sus palabras, ya que nunca hubiera imaginado que eso hubiera podido ser posible. —Con esto debería de despertar.— Añadió mientras recitaba un par de palabras.

—Tía Freya.— Sonrió Eliana mientras abrazaba a su tía aliviada de que todo hubiera terminado.

—Hola, cariño.— Sonrió de vuelta su tía mientras la devolvía el abrazo.

—Mamá.— Dijo la niña al ver a su madre a la cual se aferro creyendo que la protegería del vacío, pero aunque eso pudiera ser posible la solución que había no era esa clase de solución donde después todos vivían felices para siempre.

—Ey, ya paso todo.— La tranquilizó al sentir el olor a miedo que ella tenía.

—Ella tiene a Hope.— Las advirtió creyendo que no lo sabían, mostrando lo preocupada que estaba por el bien de su hermana mayor.

—Hope esta en casa, hemos encontrado una forma de salvarla.— La tranquilizó Freya haciendo que la niña sonriera.

—¿Puedo ir a verla?— Las preguntó haciendo que su madre asintiera para después la niña de cinco años bajarse de su cama para correr hacia la habitación de su hermana, donde Klaus estaba a la espera de que Hope reaccionará. —¿Por qué tiene eso en las manos?— Preguntó refiriéndose a los grilletes.

—Es para evitar que haga magia.— La explicó su padre mientras la cogía en brazos para sentarla en la cama.

—Como las pulseras.— Supuso mientras mantenía la mirada en su hermana, recordando lo que había pasado.

—Así es, he oído que te enfrentaste a ella.— Comentó Klaus sonriendo orgulloso por lo valiente que la pequeña había sido a la hora se hacer frente a un espíritu mucho más mayor y poderoso, pero lo había hecho con la esperanza de poder salvar y recuperar a su hermana, una locura que cualquier otro en su lugar hubiera hecho.

—Hope cuida de mi y yo de ella, por y para siempre.— Sentenció Eliana con seguridad en sus palabras, mientras Klaus observa que Astrid le hacía un gesto, dándole a entender que quería hablar con él y es que no podía permitir que hicieran aquel ritual sin saber todas las consecuencias que eso supondría para todos.

—Eres un buen padre, Nik, y te mereces la verdad.— Empezó a decir Astrid haciendo que Klaus la mirase confundido al no comprender lo que estaba diciendo. —Hay algo que debes de saber sobre el ritual, Vincent no quería decírtelo porque cree que no estarás de acuerdo, pero yo sé que sí.— Prosiguió mientras le miraba con seriedad, sabiendo que aunque para él y para el resto sería difícil permanecer los unos lejos de los otros, y en especial Klaus lejos de sus hijas, todos harían lo correcto, aunque esto suponiera llevar acabo el reto más complicado que habían llevado acabo en aquellos mil años. —Se que harías cualquier cosa por ellas, aunque eso implique no volver a verlas.— Le reveló haciendo que la expresión de Klaus cambiará al escuchar lo que suponía ser parte del ritual, y eso equivalía a que nunca más podría estar cerca de sus hijas.

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—¿Lo que van a hacer la mantendrá lejos?— La preguntó Eliana a Freya mientras la niña se acercaba a ella.

—No volverá a haceros daño a ninguna.— La tranquilizó Freya mientras preparaba todo.

—¿Dónde está la tía Taylor?— Preguntó la pequeña con curiosidad.

—Taylor ha decidido marcharse, por una temporada.— Explicó sabiendo que todo aquello se debía a lo que había visto cuando se metió en la mente de Elijah.

—Necesito el collar, para canalizarlo.— La pidio sabiendo que iban a necesitar todo el poder necesario para llevar acabo el ritual.

—Quiero ayudarte, tía Freya.— Sentenció la niña con firmeza.

—Es muy peligroso, pequeña.— Sonrió su tía orgullosa por lo valiente que estaba siendo al querer ser parte de todo ello.

—Quiero ayudar a Hope, por favor.— Insistió mostrando que lo único que quería era proteger a su hermana.

—Esta bien, ¿pero estas segura? Duele un poco dejar que te canalicen.— La explicó esperando que entendiera a lo que se estaba exponiendo.

—Puedo hacerlo.— Sentenció con firmeza.

—Estas siendo muy valiente.— Sonrió Freya justamente cuando Astrid aparecía y se ponía en el centro del dibujo manteniendo a Hope en sus brazos.

—Kol, ponte aquí si quieres.— Le indicó el brujo quedando este detrás de madre e hija. —Rebekah, ahí, perfecto.— Dijo Vincent quedando Rebekah a la derecha de ambas.

—¿Qué narices haces aquí?— Le preguntó Rebekah a Marcel mientras se quedaba en el lugar que Vincent la había asignado. —¿Vienes a regodearte?— Inquirió creyendo que él estaba allí para ver la separación por toda la eternidad de los Mikaelson.

—No, vengo a asegurarme de que funciona.— Se limitó a decir sabiendo que a pesar de todo aquello también era difícil para él, pues entendía lo difícil que sería para los cuatro permanecer lejos.

—Elijah, necesito que te pongas ahí arriba.— Intervino Vincent indicando al noble el lazo izquierdo del dibujo. —Klaus, ponte aquí por favor.— Terminó de colocarlo, quedando el híbrido enfrente de Astrid y de Hope a las cuales miro sabiendo que estaba haciendo lo correcto, por primera vez en mucho tiempo sentía que estaba tomando la decisión correcta por el bien de quienes más quería. —Estamos listos.— Les informó. —Quería deciros que lo que hacéis será de gran ayuda para arreglar las cosas en esta ciudad. El vacío me lo arrebató todo, no hizo más que inspirar sufrimiento y tormento, arruinar familias y llevarse niños pequeños.— Explicó mientras miraba a Hope, la cual seguía dormida y recostada sobre los brazos de su madre. —Y aún así, a pesar de nuestras diferencias que son muchas..., gracias.— Se limitó a decir orgulloso de la decisión que los Mikaelson habían tomado, porque estaban colaborando en un bien mayor. —Freya.— La llamó indicándola que era el momento.

—Ven, cielo.— La dijo a Eliana la cual se aferro a su mano con fuerza, mostrando con aquel gesto que estaba asustada a pesar de intentar hacerse la valiente.

—Los salvajes Mikaelson derrotan heroicamente a un mal terrible, quizá esto nos lleve al fin a la redención.— Comentó Rebekah con algo de ironía, ya que nadie sobre la faz de la tierra llegaría a pensar que los Mikaelson llegarían a hacer algo en donde no salieran beneficiados, por qué aunque aquello ayudaría a Hope la tortura eterna sería la separación y la soledad de no poder volver a estar todos reunidos como una familia.

—¿Alguno de nosotros cree en eso?— Preguntó Klaus creyendo que ninguno tendría una redención, pero no era así, todos habían cambiado aunque aún no fueran conscientes de ello.

—Ni por un momento, pero es un buen sentimiento. — Admitió Elijah sonriendo.

—Vamos.— Les indico Vincent haciéndoles ver que iba a empezar con el hechizo. —Astrid, cuando yo te diga quiero que la quites los grilletes y agarres a Hope, no la sueltes.— La pidió haciendo que la híbrida asintiera ante sus indicaciones. —Los demás, cuando acabe el hechizo tenéis que alejaros los unos de los otros, y sobretodo de Hope.— Les recordó sabiendo que si estaban cerca todo lo que estaban haciendo no serviría para nada.

—Por y para siempre, fue bonito.— Suspiró Rebekah mostrando cuanto la estaba afectando todo aquello.

—Sí...— Murmuró Elijah, mientras Vincent agarraba de la mano a Freya y empezaba a hacer el hechizo.

—Hazlo, Astrid.— La ordenó, haciendo que esta le quitara a Hope los grilletes provocando que una potente luz azul saliera de su cuerpo, la cual fue directamente hacia Rebekah, Elijah, Kol y Klaus.

—La oigo, susurrando.— Dijo Rebekah una vez que el hechizo había acabado.

—Tenéis que iros.— Les indico haciendo que Kol y Rebekah fueran los primeros en irse, para luego ser seguidos por Elijah. —¡Vamos!— Le ordenó a Klaus mientras Eliana se soltaba del agarre de su tía y corría hacia su madre y hacia su hermana con la esperanza de que Hope despertaría.

—Necesito saber que esta bien.— Sentenció mostrando que a pesar de que el hechizo había salido bien, lo único que le importaba era saber que su hija estaría bien.

—Klaus, te prometo que estará bien si te vas.— Le garantizó Vincent justamente cuando Hope se despertaba de golpe, haciendo que su madre la abrazara aliviada.

—Tranquila cielo, estas bien.— La tranquilizó su madre, mientras Hope miraba a su padre dándose cuenta de que algo había ocurrido, sobretodo porque no sentía al vacío dentro de ella.

—¿Papá? ¿Qué está pasando?— Le preguntó esperando que no hubiera ocurrido nada malo, pero la realidad era muy diferente.

—Os quiero.— Las dijo a a las tres justamente antes de desaparecer, ya que fue el momento donde los susurros se convirtieron en una fuerte voz en su cabeza.

—¿Papá?— Le llamo Hope confundida. —¡Papá!— Gritó al no comprender porque su padre y sus tíos se habían marchado, pero lo había hecho para salvarla para que tuviera esa vida normal lejos de los problemas y de la crueldad que aquella criatura planeaba llevar acabo. Lo que los Mikaelson habían hecho, había sido un sacrificio en nombre del amor; un sacrificio que muy pocos llegarían a conocer.

★★★

Penúltimo capítulo relacionado con la temporada 4, estamos muy, pero que muy cerca, de la temporada 5 y de la recta final.

De verdad que no me creo que ya estemos en este punto de la historia, parece que fue ayer cuando empecé con el primer capítulo del fanfic, y ver que nos acercamos al final... uff, me hace tener sentimientos encontrados, como siempre. Pero aún tenemos muchos capítulos por delante.

El capítulo sin duda es uno de los más importantes, a nivel de la serie. Pero también en muchas otras cosas. Por ejemplo con Eliana, que se ofrece a ayudar para salvar a su hermana.

O Astrid, que tiene que ver como Klaus se aleja de sus hijas, o como un demonio ha atacado a lo que más quiere.

Pero eso también muestra su lado oscuro, porque Astrid sería capaz de todo por ellas, incluso de tomar el lugar de Klaus, pero todos saben que ella jamás podría alejarse de sus niñas. Porque son suyas, ha dado la vida, literalmente.

La escena de todos los Mikaelson reunidos una última vez me encanto, le da un sentido. Y muestra que su redención existe, porque toman la decisión más dura de todas, alejarse, para proteger a Hope y eso sin duda es algo que me parece precioso.

La próxima semana os haré una especie de resumen de todo lo que podéis esperar, no solo de la temporada 5 sino de los capítulos de transición entre temporadas, porque aún queda un capítulo más relacionado con la temporada 4. Lo que vendría a ser la guinda del pastel.

¿Qué os ha parecido el capítulo?

Os leo ♥️